Pedro Echeverría V.
1. La ciudadana francesa Florence Cassez, acusada de secuestro y sentenciada a 60 años de prisión, debe quedar en inmediata y absoluta libertad, señala el proyecto de dictamen elaborado por Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Zaldívar se pronuncia sobre la inocencia de la acusada y señala que debido al montaje televisivo (de esa funesta TV mexicana) que realizó la Agencia Federal de Investigación –en aquel entonces dirigida por el actual secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna– las pruebas que la acusan carecen de fiabilidad. Las declaraciones de las víctimas y de los policías que participaron en el montaje que se exhibió en televisión un día después son producto de una deformación de la realidad provocada por la propia policía federal. No sabemos ahora lo que invente la PGR y demás organismos “de justicia” del desgobierno de Felipe Calderón.
2. Oficialmente Cassez e Israel Vallarta fueron detenidos el 9 de diciembre de 2005 en un rancho en el Distrito Federal. En el proceso de defensa los inculpados demostraron que la captura ocurrió un día antes y que ese tiempo se uso para construir todo un escenario, un montaje para inculparlos. La AFI convocó a medios de comunicación, principalmente televisivos, para que transmitieran, supuestamente en vivo, que elementos de la agencia realizaban, en un operativo real, la detención de los líderes de una banda de secuestradores a la que identificaron como Los Zodiaco. Sólo un tonto puede creerle ahora a estos tipos capaces de inventar todo. Me imagino que cuado los policías y el ejército yanqui capturen al famosísimo Chapo Guzmán tendrán todo el tiempo para cambiarlo por explotación petrolera para que el gobierno de Calderón invente un montaje donde aparezca atrapándolo, sobre todo antes de las elecciones.
3. Sin duda, tenemos en México una policía bien preparada, experta, para construir montajes para cada ocasión. ¿Será que así como México ocupa los últimos lugares en servicios de salud, educativos, seguridad, empleo, ocupe al mismo tiempo el primer lugar mundial en preparación de montajes? Pienso que la policía tiene ya una serie de parajes, ranchos, –así como los cineastas tienen ubicado o localizado sus sitios para filmar- determinados para cada caso. Por ejemplo el “secuestrado” o autodesaparecido político Fernández de Cevallos contó con lugares especiales para sus fotos en su rancho, cuando visitaba al peluquero, en el momento que llegaba a su domicilio, con barba larga, con barba recortada. ¿Hasta cuándo vamos a ser víctimas fáciles de los engaños de la policía, de los medios de información, de los locutores de radio y TV? Mientras no seamos capaces de desenmascarar o desentrañar los montajes, seremos unos pobres tontos.
4. Recuerdo cuando La Quina, el líder nacional petrolero, fue detenido en 1989 en su casa rodeado de armas que la policía llevó en ese momento acompañada de la prensa, sobre todo de la TV. Recuerdo cuando se filmó a un empleado de la empresa televisiva “robando” el bolso a su hermana que “hablaba por teléfono” y la policía lo agarró infraganti; confesó que había sido un acuerdo con la empresa de TV. No me olvido cuando un secretario del IMSS indemnizó por “pleito” a su hija y a su chofer para otorgarles una gran cantidad de dinero para luego recontratarlos en la secretaría del Trabajo. Como estos tres hay miles de casos en México en que se descubre la evidencia de la falsedad de datos y testigos que intervienen para realizar un montaje, es decir, para fabricar escenarios que la policía inventa y los medios de información actúan para “hacer real” lo que el pobre pueblo ve.
5. ¿Cómo carajos creerle a la policía, al ejército, a los diferentes órganos de “justicia” controlados por el Estado, si su histórico comportamiento es encontrar la manera más efectiva de hacerle creer al pueblo sus montajes hasta llegar a los casos más inverosímiles? ¿Y cómo creer a la TV, a la radio, a la prensa escrita, cuya misión es ponerse a las órdenes del poder con el fin de obtener ganancias? Y, entiéndase bien, no se trata de un simple “grave error” de la policía, sino de una práctica permanente que usa el Estado para destruir a sus enemigos, sean como sean. Yo estaba enterado que fue una práctica policiaca en los sesenta y setenta, sobre todo cuando yo y otros 50 compañeros fuimos detenidos en 1973 en el DF, durante la “guerra sucia”, bajo la suposición de que éramos guerrilleros. La realidad es que esto de los “montajes” es una cosa muy vieja que ha servido para calumniar presos y engañar a la opinión pública.
6. No conozco el caso Cassez ni poseo elementos jurídicos para decir si debe continuar o no en la cárcel; pero ya con lo que nos ha dicho el ministro de la SCJN, en el sentido del “montaje” del que fue víctima, México la debe enviar a Francia por simple vergüenza internacional. Claro, como algunos amigos me dirían: “entre policías y policías no se leen las cartas porque los montajes y la corrupción son mundiales e institucionalizados. La policía yanqui, mexicana, francesa o inglesa está cortada con la misma tijera, acudieron a la misma escuela a tomar cursos y conocen las mismas estrategias para someter a los “delincuentes”, a los “terroristas” o a los luchadores sociales. ¿O no recuerdas la llamada Escuela de las Américas en donde el ejército yanqui preparaba de decenas de miles de soldados y policías de todo el mundo? La táctica de crear montajes pertenece al primer curso de esas escuelas.
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