(Primera Parte)
Escrito por Jenaro Villamil
Primera parte del reportaje publicado en Proceso, No. 1857
Una auténtica conmoción al interior del
equipo de Enrique Peña Nieto y entre los directivos de Grupo Televisa
provocó la publicación, el jueves 7 de junio, de un extenso reportaje del periódico británico The Guardian
que confirmó “a partir de docenas de archivos informáticos” el
ambicioso proyecto de asesoría y venta de cobertura favorable en la
pantalla de la empresa de Emilio Azcárraga Jean, tal como casi siete
años antes había documentado Proceso.
Jo Tuckman, corresponsal de The Guardian, aclaró
que a través de “extensas comprobaciones cruzadas” pudo confirmar que
lo planteado en esos documentos en hojas Excel y en Power Point, que
incluyen el presupuesto 2005-2006 a favor de Peña Nieto, se cumplió a
través de la venta de 200 noticias, informes y entrevistas, entre otras
cosas.
El reportaje incluyó información nueva,
hasta ahora desconocida, sobre un proyecto de 60 millones de pesos
pagados por el gobierno de Vicente Fox, en abril de 2005, para “golpear
al aspirante de la izquierda a la presidencia de México”, Andrés Manuel
López Obrador, a través de programas de entretenimiento como Big Brother y El Privilegio de Mandar.
Big Brother era producido por
Pedro Torres, quien ahora es pieza fundamental en la campaña de Enrique
Peña Nieto, como responsable de la grabación de spots y de la estrategia mercadológica del aspirante presidencial priista.
La información de The Guardian amplió y confirmó lo que Proceso ha
venido documentado desde su edición No. 1512, del 23 de octubre de
2005, cuyo título fue: “Manipulación informativa, negocio publicitario”.
El texto reveló que “Televisa negoció con el gobernador del Estado de
México, Enrique Peña Nieto un ambiciosa estrategia para proyectar a este
joven mandatario como candidato presidencial de 2011”.
La clave de esa multimillonaria estrategia fueron dos empresas “pantalla” o brokers, creadas
por Alejandro Quintero Iñiguez, vicepresidente corporativo de
Comercialización de Televisa. Se trataba de TV Promo y de Radar
Servicios Especializados en Mercadotecnia.
A través de ambas, el gobierno de
Enrique Peña Nieto presupuestó un ambicioso plan de 742 millones de
pesos, de los cuales 691 millones serían para spots y para la
“compra” de espacios en sus noticiarios, programas de espectáculos y
mesas de análisis informativo. Los otros recursos, 50 millones 381 mil
pesos, eran para una “Estrategia Integral de Comunicación” en la cual
participaron distintas consultorías y agencias publicitarias como TV
Promo (10.7 millones), Cepol (13.7 millones), Zimat (1.6 millones),
Olabuenaga (7.2 millones), y Filmmates, empresa de Pedro Torres, (10
millones de pesos).
La operación de este proyecto no se
limitó a la venta de espacios publicitarios e informativos en la
pantalla de Televisa. Incluyó el entrenamiento trimestral a voceros y
secretarios de estado y una “asesoría permanente” a “la oficina del
gobernador, así como de cada una de las secretarías de estado”.
El plan de promoción mercadológica del gobernador priista propuso “enlaces en vivo” y cápsulas en el programa Hoy, de Canal 2, en VidaTV entregando
“pensiones a personas de la tercera edad en el que adicionalmente se le
invite a un concurso de baile”, así como “acciones noticiosas” que
incluyó una entrevista con Joaquín López Dóriga, en El Noticiero, después de cumplirse los primeros 100 días de gobierno.
También planeaba “insertar en tiempos
comerciales cápsulas informativas describiendo el trabajo de
los
primeros 100 días”, en los cortes de los noticiarios Primero Noticias, Las Noticias por Adela, Noticiero con Joaquín López Dóriga.
Ninguna de estas “acciones noticiosas”
fue gratuita. Los documentos del presupuesto original incluyeron la
compra de 180 notas informativas en noticiarios por un total de 305
millones 688 mil pesos, tres entrevistas en la serie Los Reporteros por 5 millones 780 mil pesos, seis entrevistas en “varios noticieros” por 42 millones 858 mil pesos y 3 programas de Zona Abierta, conducido por Héctor Aguilar Camín.
Las “acciones noticiosas” no incluían la
presencia de Peña Nieto en el estudio sino comentarios favorables a la
gestión del entonces novato gobernador del Estado de México.
Además, la estrategia de spoteo en televisión a lo largo de cuatro trimestres se presupuestó en 327 millones 407 mil 625 pesos.
En las revistas de Grupo Editorial Televisa se presupuestaron 37 publirreportajes a lo largo de un año en Eres, Furia Musical, Teleguía, TV y Novelas, Caras, Cosmopolitan, Muy Interesante, Conozca Más y Vanidades, con un costo de 10 millones 781 mil pesos.
La “Fuente” y Los Desmentidos
Los documentos que le fueron entregados a Proceso, por una fuente interna de Televisa, venían acompañados de una carta dirigida a este reportero que explicaba lo siguiente:
“Una vez que usted revise el contenido,
estoy seguro que sabrá comprender por qué uso el anonimato para proteger
mi vida y la de mi familia. Sin embargo, he tomado la decisión de
compartir esta información con usted porque es de los pocos periodistas
valientes, libres e independientes, que nunca han tenido miedo de
denunciar públicamente a los políticos que abusan de su cargo para su
beneficio personal.
“TV Promo, brazo político y financiero
de Televisa, es un instrumento a través del cual esta empresa vende sus
espacios publicitarios, sus contenidos noticiosos e incluso su línea
editorial a políticos a cambio de favores y de retribuciones futuras.
También se sabe que es a través de TV Promo que esta televisora logra
maquillar cifras y montos relacionados con los gastos de campaña de sus
clientes a fin de evitar que sean sancionados por las autoridades
electorales.
“En esta lógica política que Televisa
utiliza para construir alianzas que, desde la perspectiva de ese
consorcio, cuentan con un capital político futuro. Enrique Peña Nieto y
su equipo lograron concretar una negociación que pretende dejar
altísimos rendimientos para las partes: por un lado, el joven gobernador
se hace de un plan estratégico para convertirse en candidato del PRI a
la presidencia para el año 2011 y, por el otro, Televisa, a través de TV
Promo y de Radar Servicios Especializados, obtiene enormes ganancias.
“Dos de los principales operadores de TV
Promo para concretar este plan son: Alejandro Quintero, vicepresidente
Corporativo de Comercialización de la televisora, y Yessica de Lamadrid.
El primero de ellos opera al más alto nivel. Su tarea, definir alianzas
y cerrar negociaciones, como fue en el caso de Santiago Creel, a quien
dio abruptamente la espalda después de fungir como uno de sus
principales asesores mediáticos. Yessica, a su vez, es la responsable de
manejar los asuntos confidenciales de TV Promo, que previamente define
Quintero y, además es la encargada de coordinar el trabajo de los
estrategas, los creativos, los publicitas, etc.
“Por parte del gobernador Peña Nieto,
David López, director de Comunicación Social del gobierno del Estado de
México, es el encargado de operar la estrategia de TVPromo,
paradójicamente, a través de un organigrama y una estructura que
precisamente TV Promo diseñó especialmente para tal efecto, tal y como
consta en el documento de estrategia que se anexa en disco compacto.
“A este servicio, sólo durante el primer
año Peña Nieto destinará del erario público la insultante cantidad de
742 millones de pesos; de los cuales, 691 son para spots y
espacios informativos, y el resto para los otros medios del que dispone
la empresa televisiva, tal como se refleja en el presupuesto y la
estrategia de los cuales anexo copia”.
Proceso consultó a Grupo
Televisa antes de la publicación de este reportaje. Un comunicado
enviado por Manuel Compeán, entonces director corporativo de
Comunicación del consorcio, la empresa aclaró que “no vende ni
compromete su línea editorial bajo ningún concepto”.
También afirmó que TV Promo “no
representa a Televisa en sus tratos comerciales con partidos políticos
ni con ninguna otra instancia pública o gubernamental”. No dijo nada
acerca de Radar Servicios Especializados.
Compeán ya no trabaja en Grupo Televisa. Fue removido del cargo. El reciente desmentido a The Guardian fue firmado por Alejandro Olmos y Regina Moctezuma.
Televisa advierte que “los documentos a
los que alude el reportaje no fueron mostrados” a la empresa, “por lo
que no pudimos dar una opinión de algo que desconocemos”. Acusó a la
reportera del diario británico de “falta de rigor periodístico” y
lamentó que Jo Tuckman “haya sido sorprendida con un material apócrifo,
que ha sido reiteradamente publicado y desmentido”.
Continúa mañana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario