Presentación de un informe sobre agresiones (2012 -2014) en Madrid
La amenaza de la violencia sexual, el hostigamiento y la criminalización, obstáculos frecuentes
Gloria López
Madrid, 08 octubre. 15, AmecoPress.
“La actividad de las defensoras de los derechos humanos es un
cuestionamiento del sistema patriarcal. Por eso tienen que enfrentar
todo tipo de obstáculos y violencia para desarrollar su labor”. De este
modo sintetizaba Alda Facio la situación que recoge minuciosamente el
informe 2012-2014 sobre agresiones contra defensoras de derechos humanos
en El Salvador, Guatemala, Honduras, México y Nicaragua que fue
presentado ayer en Madrid. Una trabajo desarrollado por la Iniciativa
Mesoamericana de Defensoras de Derechos Humanos. “Las defensoras de los
derechos humanos en la región mesoamericana se juegan la vida”, enfatizó
en una entrevista previa con Amecopress, “aunque sabemos que la
violencia contra las mujeres es un fenómeno mundializado”.
El informe,
tras analizar el contexto de discriminación contra las mujeres,
violencia y violaciones sistemáticas a los derechos humanos en la región
mesoamericana, ilustra con datos estadísticos la situación de riesgo en
la que las defensoras de derechos humanos realizan en su trabajo, así
como la impunidad que mantienen dichas agresiones.
Entre los
principales datos recogidos en el documento destaca que, entre 2012 y
2014, la IM-Defensoras registró un total de 1688 agresiones a mujeres
defensoras de derechos humanos en El Salvador, Guatemala, Honduras y
México y documentó diversas situaciones de violencia contra defensoras
en Nicaragua. Durante el mismo período se han registrado 32 asesinatos
de defensoras de derechos humanos y 39 intentos de asesinato.
Al menos en
37% de las agresiones registradas se pudieron identificar componentes de
género, es decir, agresiones que presentan alguna de las formas de
discriminación y violencia contra las mujeres motivadas por ser mujeres.
“Existe una violencia estructural contra las mujeres que se agudiza en
el caso de las defensoras: no reciben el mismo apoyo que los defensores,
incluso desde sus propias familias y la comunidad. Muchas veces el
mensaje que reciben es ¡váyase a su casa!” explica Alda, reconocida
abogada y teórica feminista costarricense.
Según datos
del Registro, las principales formas en las que se agrede a las
defensoras de derechos humanos en la región son: intimidación y
hostigamiento psicológico; amenazas, advertencias y ultimátum; y
calumnias, señalamientos y campañas de desprestigio. Además, el análisis
también registra un preocupante aumento en el uso de la criminalización
y judicialización para castigar e inhibir la labor de las defensoras.
Las
defensoras más agredidas son las que trabajan en el ámbito local y
rural, representando 54% y 46% de los casos respectivamente. En toda la
región los principales agresores son agentes del Estado (autoridades
locales y nacionales, policía, ejército, entre otros).
Impunidad
Este informe
contribuye a la comprensión de la situación de las defensoras en
Mesoamérica y la identificación de sus principales necesidades de
protección. Ello resulta particularmente relevante ante la ausencia de
datos e informes oficiales en la materia y la falta de mecanismos de
protección con perspectiva de género en los países de la región.
El documento
también destaca la impunidad existente en torno a este tipo de delitos.
“En un ambiente de desvalorización de la vida de las mujeres, los que
tienen que hacer cumplir las leyes tienen sus prejuicios y también, se
enfrentan a las presiones del mundo del crimen organizado”.
Como afirmó
la Experta Independiente Alda Facio en el texto de presentación del
Informe: “Desde una perspectiva de género se puede ver que cuando
hablamos de que las defensoras tenemos necesidades específicas de
protección, no es porque sufrimos más número de ataques (aunque esto sí
es cierto en cuanto al número de ataques de naturaleza sexual), sino
porque sufrimos de distinta manera los mismos ataques o porque sufrimos
ataques de muy distinta naturaleza o en distintas esferas de las que
reciben los hombres”.
El informe
será también presentado hoy en Barcelona. Por un lado se pretende dar a
conocer la situación de agresiones en contra de defensoras de derechos
humanos en México, Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua, así
como las medidas que se han diseñado para enfrentar y abordar dicho
contexto. Y también, al generar estos espacios se busca favorecer la
solidaridad y protección de defensoras de derechos humanos en
Mesoamérica y las redes de apoyo desde el Estado español.
Una de las
defensoras que ha intervenido en la presentación, Daysi Flores,
integrante de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos de
Honduras, advertía en entrevista con Amecopress, la necesidad de aunar
esfuerzos entre las feministas de todo del mundo. “El trasfondo cultural
machista es muy fuerte y lo vemos incluso en los movimientos
progresistas”, aseguró.
Foto: Amecopress
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