noviembre 4, 2012
Madres
Contra la Guerra es una Ong fundada el 1º de mayo de 2003, a dos meses
de la invasión a Irak, por la psicóloga y catedrática universitaria
puertorriqueña Sonia Santiago Hernández, quien tenía un hijo soldado en
Irak en esos primeros meses de ocupación. La misión de MCG ha estado
orientada hasta el día de hoy a la lucha contra la política
guerrerista de EE.UU. y a su forma de reclutamiento militar dirigido a
los jóvenes puertorriqueños.
Teresa Sosa
La ONG Madres Contra la Guerra, Puerto Rico, desde sus inicios en 2003, ha venido denunciando la violación de los derechos humanos de los soldados al servicio de EE.UU. a quienes Washngton les viola continuamente sus derechos a la vida, a una salud integral, a servicios médicos y psicológicos. Miles de casos de militares estadounidenses asmáticos, artríticos, con disfunciones emocionales por exposición a las guerras en Irak y Afganistán, son enviados dos, tres y hasta cuatro veces a los escenarios de guerra.
Asimismo, la organización MCG ha hecho pública la denuncia de que “La Enmienda Solomon” que exige a los reclutadores militares que la juventud de Puerto Rico tenga acceso a las universidades a cambio de fondos económicos, es discriminatoria, porque coloca al militarismo guerrerista como parte de la educación universitaria.
Se ha hecho costumbre, por ejemplo, que al inicio del curso escolar en septiembre, que la organización MCG se concentre en las escuelas superiores de Puerto Rico, para conversar con estudiantes y padres sobre los riesgos del servicio militar y exhortarlos a que llenen un formulario para que dejen claro que no quieren que sus datos lleguen a los militares estadounidenses reclutadores.
Santiago recordó que a partir de la Ley “Que ningún niño se quede rezagado”, que George Bush aprobó en el 2001, las escuelas superiores comenzaron a suministrarles las lista de todos los estudiantes con sus nombres, direcciones, números de teléfono y correo electrónico, a los reclutadores militares.
La ley mencionada condiciona los fondos destinados a educación a que se les permita a los reclutadores tener estos datos personales de los estudiantes. “Nos parece que es un chantaje, ya que la educación es un derecho y no debe estar atada a la milicia”, enfatizó la activista Santiago.
Para evitar que la información académica y números de teléfono sean dados a los reclutadores militares es necesario notificar al director de la escuela por escrito que el joven o la joven no quiere que se los entregue.
El procedimiento es el siguiente. Se puede escribir una carta y llevarla a la oficina del director escolar o llenar la hoja que ofrece MCG Se supone que el Departamento de Educación notifique esta información por escrito y le dé esta opción al joven cuando se matricula.
El Censo del 2010 reveló la elevada cifra de veteranos abandonados en esa isla y miles en Estados Unidos, muchos de los cuales padecen de condiciones de salud mental, como ansiedad, depresión, adicciones y trastornos emocionales y el síndrome de estrés postraumático.
Los puertorriqueños, dijo Santiago, pagan también una alta cuota al enlistarse en las fuerzas armadas de la nación norteña, donde son sometidos a discriminación y vejaciones desde que son reclutados. “Lamentamos que muchos de los militares boricuas enfermos después tengan que trasladarse a Estados Unidos para recibir tratamiento médico pues no existe una sala de trauma ni el equipo especializado en el Hospital de Veteranos en Puerto Rico, ni en Buchanan, denunció la activista.
En su opinión, después de tantos sacrificios para los militares y sus familias, el planeta no es hoy más seguro que cuando comenzó la guerra de ocupación de Afganistán. A juicio de Santiago, Estados Unidos está sumido en una debacle financiera, causada en gran medida por los gastos de las guerras.
MCG, agregó Santiago, une su voz a las mujeres iraquíes, afganas y estadounidenses para honrar la memoria de sus familiares, oponiéndose a la guerra y exhortando a los jóvenes de Puerto Rico a no dejarse seducir por los contratos que les ofrecen los militares estadounidenses para reclutarlos.
Se trata de alrededor de 1 500 millones de dólares más de lo previsto para el 2012, declaró Santiago, indicando que 554 mil millones de esos fondos van dirigidos al Pentágono y al Departamento de Energía, que es responsable del estado de las armas nucleares de Estados Unidos.
“Aún con esta obscena y denigrante cantidad de dinero destinado a las guerras y a la cultura de la muerte, el Congreso de Estados Unidos asignó 88 mil millones de dólares adicionales para continuar la agenda de genocidio y destrucción en Irak y Afganistán”, insistió Santiago, al recordar que en el país árabe siguen funcionando las bases militares con contratistas privados.
SI DESEA CONOCER OTROS DATOS:
Documentales Madres Contra la Guerra:
http://www.youtube.com/watch?NR=1&v=0QU4q6qkfXE&feature=endscreen
http://www.youtube.com/watch?v=zaeqpPl_YdE
Documental TeleSur Madres contra La Guerra:
http://http://madrescontralaguerra.blogspot.com/2012/10/documental-de-telesur-de-madres-contra.html
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Teresa Sosa
La ONG Madres Contra la Guerra, Puerto Rico, desde sus inicios en 2003, ha venido denunciando la violación de los derechos humanos de los soldados al servicio de EE.UU. a quienes Washngton les viola continuamente sus derechos a la vida, a una salud integral, a servicios médicos y psicológicos. Miles de casos de militares estadounidenses asmáticos, artríticos, con disfunciones emocionales por exposición a las guerras en Irak y Afganistán, son enviados dos, tres y hasta cuatro veces a los escenarios de guerra.
Asimismo, la organización MCG ha hecho pública la denuncia de que “La Enmienda Solomon” que exige a los reclutadores militares que la juventud de Puerto Rico tenga acceso a las universidades a cambio de fondos económicos, es discriminatoria, porque coloca al militarismo guerrerista como parte de la educación universitaria.
Campaña contra el reclutamiento
Hasta octubre de 2012 son miles los estudiantes puertorriqueños que han aprendido que tienen la opción de establecer que no desean que su información personal sea suministrada a reclutadores del ejército de EE.UU. gracias al activismo de las/los activistas de MCG.Se ha hecho costumbre, por ejemplo, que al inicio del curso escolar en septiembre, que la organización MCG se concentre en las escuelas superiores de Puerto Rico, para conversar con estudiantes y padres sobre los riesgos del servicio militar y exhortarlos a que llenen un formulario para que dejen claro que no quieren que sus datos lleguen a los militares estadounidenses reclutadores.
Santiago recordó que a partir de la Ley “Que ningún niño se quede rezagado”, que George Bush aprobó en el 2001, las escuelas superiores comenzaron a suministrarles las lista de todos los estudiantes con sus nombres, direcciones, números de teléfono y correo electrónico, a los reclutadores militares.
La ley mencionada condiciona los fondos destinados a educación a que se les permita a los reclutadores tener estos datos personales de los estudiantes. “Nos parece que es un chantaje, ya que la educación es un derecho y no debe estar atada a la milicia”, enfatizó la activista Santiago.
Para evitar que la información académica y números de teléfono sean dados a los reclutadores militares es necesario notificar al director de la escuela por escrito que el joven o la joven no quiere que se los entregue.
El procedimiento es el siguiente. Se puede escribir una carta y llevarla a la oficina del director escolar o llenar la hoja que ofrece MCG Se supone que el Departamento de Educación notifique esta información por escrito y le dé esta opción al joven cuando se matricula.
Veteranos en abandono
La organización MCG denunció en septiembre pasado, que unos dos mil veteranos puertorriqueños de las campañas bélicas de Estados Unidos deambulan sin hogar por las calles de Puerto Rico.El Censo del 2010 reveló la elevada cifra de veteranos abandonados en esa isla y miles en Estados Unidos, muchos de los cuales padecen de condiciones de salud mental, como ansiedad, depresión, adicciones y trastornos emocionales y el síndrome de estrés postraumático.
Los puertorriqueños, dijo Santiago, pagan también una alta cuota al enlistarse en las fuerzas armadas de la nación norteña, donde son sometidos a discriminación y vejaciones desde que son reclutados. “Lamentamos que muchos de los militares boricuas enfermos después tengan que trasladarse a Estados Unidos para recibir tratamiento médico pues no existe una sala de trauma ni el equipo especializado en el Hospital de Veteranos en Puerto Rico, ni en Buchanan, denunció la activista.
Genocidio bélico
Estados Unidos, destacó Santiago, ha perdido a miles de sus soldados, hombres y mujeres, como parte de su denominada “guerra contra el terrorismo”, que lo ha llevado a involucrarse en acciones bélicas en el Medio Oriente y en Asia, donde ha generado millones de fallecidos en algunos países..En su opinión, después de tantos sacrificios para los militares y sus familias, el planeta no es hoy más seguro que cuando comenzó la guerra de ocupación de Afganistán. A juicio de Santiago, Estados Unidos está sumido en una debacle financiera, causada en gran medida por los gastos de las guerras.
MCG, agregó Santiago, une su voz a las mujeres iraquíes, afganas y estadounidenses para honrar la memoria de sus familiares, oponiéndose a la guerra y exhortando a los jóvenes de Puerto Rico a no dejarse seducir por los contratos que les ofrecen los militares estadounidenses para reclutarlos.
Obama en lo mismo
La administración del presidente Barack Obama sigue asignando el presupuesto militar más grande desde la segunda guerra mundial, dijo Santiago. Detalló que el proyecto aprobado por el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes para el año fiscal 2013, prevé unos gastos en defensa de más de 642 mil millones de dólares.Se trata de alrededor de 1 500 millones de dólares más de lo previsto para el 2012, declaró Santiago, indicando que 554 mil millones de esos fondos van dirigidos al Pentágono y al Departamento de Energía, que es responsable del estado de las armas nucleares de Estados Unidos.
“Aún con esta obscena y denigrante cantidad de dinero destinado a las guerras y a la cultura de la muerte, el Congreso de Estados Unidos asignó 88 mil millones de dólares adicionales para continuar la agenda de genocidio y destrucción en Irak y Afganistán”, insistió Santiago, al recordar que en el país árabe siguen funcionando las bases militares con contratistas privados.
SI DESEA CONOCER OTROS DATOS:
Documentales Madres Contra la Guerra:
http://www.youtube.com/watch?NR=1&v=0QU4q6qkfXE&feature=endscreen
http://www.youtube.com/watch?v=zaeqpPl_YdE
Documental TeleSur Madres contra La Guerra:
http://http://madrescontralaguerra.blogspot.com/2012/10/documental-de-telesur-de-madres-contra.html
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