11/07/2012

Cárteles ejercen tortura sexual contra centroamericanas

LA OTRA RUTA MIGRATORIA
La Otra Ruta Migratoria
   Son acosadas también por sus compañeros de viaje

CIMACFoto | César Martínez López
Por: Elizabeth Muñoz Vásquez, corresponsal
Cimacnoticias | Tlaxcala.-

En total indefensión y sin la intervención de las autoridades, las migrantes centroamericanas que atraviesan en tren nuestro país en su intento por llegar a Estados Unidos son acosadas y hostigadas sexualmente de manera sistemática durante todo el trayecto, según la investigación “Mujeres Transmigrantes”.

“Este acecho es una de las condiciones y premisas del secuestro masivo (de migrantes). Todos los testimonios revelan la complicidad de las autoridades con las bandas de secuestradores… desde la planeación, realización y durante el cautiverio de las víctimas”, indica el estudio realizado por el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, de la Universidad Iberoamericana campus Puebla, y el Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos.

De acuerdo con la investigación, ante la amenaza de la banda delictiva de Los Zetas en el oriente del país, las migrantes han buscado otras alternativas de medios de transporte, sin embargo pocas de ellas tienen los recursos para viajar en camión y para pagarle a un “pollero” (traficante de personas).

En el análisis se advierte que el “pollero” también puede entregar a las mujeres migrantes a los grupos de secuestradores, por lo que de todas maneras las centroamericanas quedan en indefensión.

El estudio menciona que las mujeres se saben “acechadas por negociantes de todo tipo que buscan la manera de atraerlas y engrosar sus negocios, seduciéndolas, engañándolas, o bien comprando la complicidad de sus acompañantes para que les faciliten el acceso a ellas, es decir, se las entreguen o se las vendan”.

En la investigación, coordinada desde 2010 por Oscar Castro Soto, director del Instituto Ignacio Ellacuría, se afirma que las mujeres migrantes son “codiciadas y acosadas” por todos los hombres con quienes se encuentren: “compañeros de viaje, polleros, policías, funcionarios, autoridades, secuestradores, asaltantes y extorsionadores para servirles de amantes”.

No sólo con la voluntad de utilizarlas para su propio placer, se subraya, sino con el propósito de ejercer sobre ellas la forma de control más extrema, que es “el uso arbitrario del cuerpo de la mujer a través de modalidades que pueden llegar a la tortura sexual”.

El estudio especifica que la mayoría de las mujeres de Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua, que transitan por Chiapas en su camino hacia EU, viene de situaciones discriminatorias y violentas, ya sea por las condiciones socio-económicas o por vivir en un medio agresivo con la pareja, la familia, la comunidad y la sociedad en general.

“Tienen un proyecto de vida centrado en la búsqueda de mejorar las condiciones de precariedad propias y de su familia más cercana, generalmente hijas e hijos”, se explica. “Su proyecto migratorio es condición para la realización de su proyecto de vida, por lo que salen ‘dispuestas a todo’ con tal de cumplirlo”.

Ellas perciben como “muy aceptables” las condiciones inhumanas del viaje en los trenes de carga en comparación con los horrores que les pueden pasar como “la violación tumultuaria, la nueva pesadilla de los secuestros masivos, la delincuencia organizada y Los Zetas, o la eventualidad de ser privadas de la libertad y ser vendidas”.
 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario