El
Congreso de la Unión se encuentra próximo a “discutir” y aprobar la
iniciativa de legislación secundaria de la Ley de Telecomunicaciones y
Radiodifusión. El contenido de dicha iniciativa, enviada por el
Ejecutivo federal, representa un golpe más contra las libertades
democráticas en nuestro país, al mismo tiempo que evidencia el nulo
interés por democratizar los medios de comunicación.
En voz de
diferentes expertos en la materia, la iniciativa representa un
retroceso. Abre la posibilidad a la censura en internet, pues otorga a
la Secretaría de Gobernación la facultad para vigilar, valorar y
eventualmente ordenar a las empresas bloquear las señales de
telecomunicaciones. Vale destacar que la medida no establece controles
judiciales al respecto, es decir, se puede monitorear, vigilar y
bloquear cuando el Ejecutivo federal así lo decida.
De aprobarse en su redacción original, la iniciativa daría recursos legales al Estado mexicano para la obtención de datos personales mediante localización geográfica en tiempo real. En conjunto, se atentaría de forma grave contra los derechos humanos y la libertad de expresión, al mismo tiempo que se limitaría la labor de periodistas y defensores de derechos humanos, sobre todo en contextos de protesta social.
La iniciativa de legislación secundaria de la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión significa un paso más, y quizá el más evidente, del intento de este gobierno priísta por ampliar y sofisticar sus mecanismos de control, al mismo tiempo que refuerza su alianza con el duopolio televisivo.
La propuesta del Ejecutivo federal en materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión debe entenderse en su contexto y no de forma aislada: obedece a un agresivo paquete de reformas estructurales con las se entregan los bienes de la Nación al sector privado (Reforma Energética), y se vulneran los derechos de millones de trabajadores (Reformas Laboral y Educativa). Obedece también a una reconfiguración del Estado mexicano en un Estado autoritario, el cual suprime libertades democráticas al tiempo que criminaliza la protesta social, persigue a sus críticos y propicia un clima hostil y de inseguridad contra defensores de derechos humanos, periodistas y activistas sociales que lo denuncian.
Hoy no sólo está en disputa la Nación, sino la posibilidad de informar verazmente, de ofrecer contenidos diferentes, de denunciar los excesos de poder y de contribuir a la formación de la opinión pública. Está en juego también la posibilidad de sentar las bases, para la democratización de los medios de comunicación y para ponerle fin a la concentración económica de las telecomunicaciones.
Por tal motivo, llamamos a la sociedad mexicana a mantenerse informada y al pendiente del rumbo que tomen estas discusiones. Nuestra participación es de vital importancia para impedir que continúen reduciendo nuestras libertades democráticas.
Atentamente
De aprobarse en su redacción original, la iniciativa daría recursos legales al Estado mexicano para la obtención de datos personales mediante localización geográfica en tiempo real. En conjunto, se atentaría de forma grave contra los derechos humanos y la libertad de expresión, al mismo tiempo que se limitaría la labor de periodistas y defensores de derechos humanos, sobre todo en contextos de protesta social.
La iniciativa de legislación secundaria de la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión significa un paso más, y quizá el más evidente, del intento de este gobierno priísta por ampliar y sofisticar sus mecanismos de control, al mismo tiempo que refuerza su alianza con el duopolio televisivo.
La propuesta del Ejecutivo federal en materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión debe entenderse en su contexto y no de forma aislada: obedece a un agresivo paquete de reformas estructurales con las se entregan los bienes de la Nación al sector privado (Reforma Energética), y se vulneran los derechos de millones de trabajadores (Reformas Laboral y Educativa). Obedece también a una reconfiguración del Estado mexicano en un Estado autoritario, el cual suprime libertades democráticas al tiempo que criminaliza la protesta social, persigue a sus críticos y propicia un clima hostil y de inseguridad contra defensores de derechos humanos, periodistas y activistas sociales que lo denuncian.
Hoy no sólo está en disputa la Nación, sino la posibilidad de informar verazmente, de ofrecer contenidos diferentes, de denunciar los excesos de poder y de contribuir a la formación de la opinión pública. Está en juego también la posibilidad de sentar las bases, para la democratización de los medios de comunicación y para ponerle fin a la concentración económica de las telecomunicaciones.
Por tal motivo, llamamos a la sociedad mexicana a mantenerse informada y al pendiente del rumbo que tomen estas discusiones. Nuestra participación es de vital importancia para impedir que continúen reduciendo nuestras libertades democráticas.
Atentamente
- Miguel Concha Malo
- Gilberto López y Rivas
- Martín Esparza
- (Secretario General del SME)
- Paula Santoyo Rosas
- Carlos A. Ventura Callejas
- Mario Saucedo Pérez
- José Humberto Montes de Oca (Secretario del Exterior del SME)
- Pilar Puertas
- Víctor García Zapata
- (Fundación para la Democracia)
- Manuel Canto Chac
- Sofía Angélica Silva
- Alberto Arroyo Picard
- Camilo Valenzuela
- Neftalí Granados
- Mónica Soto Elízaga
- Raúl Romero Gallardo
- Érika Paz
- Mireille Campos Arzeta
- Celso Alvarado
- Miguel Ramírez Quintana
- Ángel Peralta
- Armando Osorio Chulín
- Guadalupe Coutiño
- Javier Lara
- Jócelyn R. Hernández Fernández
- Juan Francisco García Reynoso
- Wendy de la Rosa
- Luis Gómez
- Ivonne G. Villalón
- Érika Lozano
- María Isabel Rodríguez F.
- Montserrat Castillo
- Karla Lidia Díaz
- Agencia de Comunicación Autónoma Subversiones
- Coordinadora 1º de diciembre
- Movimiento de Liberación Nacional
- #YoSoy132 Chicago
- Fundación para la Democracia
- Mario Vladimir Monroy Gómez
- Mujeres por México en Chihuahua A.C.
- Centro de Pastoral Obrera de Cd. Juárez, A.C.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de los autores mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario