El pasado martes, ya siendo virtual candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura del estado de Michoacán, y bajo una constante acusación de tener a su servicio el presupuesto federal que maneja su hermano, Luisa María Calderón Hinojosa consideró propio sentarse en la mesa principal de un acto encabezado por el dócil secretario federal de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, en el que éste rindió una especie de informe de actividades relacionadas con el estado y, de manera sugerente en la temporada electoral en curso, hizo un guiño con cargo al erario mediante el anuncio de su disponibilidad de gasto en lo inmediato: La idea es apoyar en Michoacán con todo lo que requiera para que todas las unidades médicas estén funcionando.
La sesión quiso atenuar su talante, digno de ser considerado como delito electoral, mediante la falsa etiquetación de privada, aunque los medios informativos pudieron tomar nota de lo sucedido e incluso tomar fotografías, como puede verse en La Jornada Michoacán, tanto en la nota de Celic Mendoza como en las gráficas de Iván Sánchez (http://j.mp/qAyLVV), publicadas una en la primera plana del diario, donde se puede ver a una Luisa María sonriente y a la vanguardia del grupo, y otra en interiores, donde quedó constancia de que la hermana del ocupante del gobierno federal compartió la mesa de cuatro desde la cual el secretario Córdova Villalobos rendía un faccioso informe de labores.
Dos días después de esa confirmación privada del uso del aparato federal para beneficio de la hermana en campaña (aprovechamiento que lleva años, pero ahora está en fase de completo descaro), el licenciado Calderón llegó a su tierra natal para desarrollar una gira de dos días caracterizada por la inauguración de obras y servicios. Le recibieron algunos datos desagradables: en primer lugar, que el presidente del comité nacional perredista, Jesús Zambrano, anunció que solicitará una indagatoria formal sobre la reunión reseñada y, en segundo lugar, que persiste una resistencia de panistas a los arreglos hechos con el PAN para apoyar a Cocoa sacrificando a aspirantes a presidencias municipales, en especial en la capital del estado, donde al senador con licencia Marko Cortés le callaron de manera poco elegante la boca (siendo como había sido un crítico duro de los abusos y excesos de poder de Calderón Hinojosa –es decir, de Luisa María–, a quien llegó a acusar de mentirosa por haber prometido años atrás que no ocuparía espacios públicos para no dar pie a maledicencias contra el hermano Felipe). Al citado Cortés lo hicieron candidato a la alcaldía capitalina mediante un tradicional dedazo, cancelando los procesos internos a la luz del arreglo realizado con el Panal de Elba Esther, la nuevamente aliada, pero sólo regionalmente, por este año y por supremas razones familiares de la parte contratante.
Tan escandaloso es el apoyo abierto del gobierno federal a la Primera Hermana (PH) que el arrinconado presunto gobernador de Michoacán, Leonel Godoy, pidió que no hubiera guerra sucia, ante lo cual el carnal Felipe juró que no meterá las manos en las elecciones estatales y que no regresará a la entidad sino hasta después del día de las votaciones. No avalan los hechos a las palabras supuestamente tranquilizadoras del hermano en contienda, sino todo lo contrario. Hasta ahora ha habido una marcada y sostenida estrategia de impulso a Luisa María, colocando a la mayoría de los delegados federales a las órdenes de los operadores y los planes de la ahora candidata, llegando a extremos de sincero valemadrismo político como el acontecido el martes con el secretario federal de salud que, además, él mismo es un funcionario en constante campaña de apoyo a sí mismo para ser candidato panista al gobierno de Guanajuato. Otros secretarios del distraído gabinete felipista también reparten sus luces y recursos entre la función gubernamental que les han asignado y los escarceos futuristas, como lo demuestran diariamente Alonso Lujambio y Ernesto Cordero. Total, si el jefe es el primero en volcarse en aventuras electorales, no sólo las familiares sino en general la de la sucesión en Los Pinos, ¿por qué habrían sus subordinados inmediatos de guardar las formas y abstenerse del uso de tiempo y recursos oficiales para navegar abiertamente en la grilla?
Astillas
Un pajarito versado en lenguas (como ha de comprenderse al final del presente párrafo) develó a esta columna aeróbica y chifladora la clave de ornitología política en que famosos amoríos hacen descansar sus expectativas de triunfo electoral. Abundantemente sabida es la ganancia en imagen que al gobernador del estado de México ha reportado su televisivo matrimonio con la actriz Angélica Rivera, conocida como La Gaviota. Pues bien, a ese productivo volar de ave de tres colores ahora podrá añadirse, o confrontarse, según fuera el caso, La Pajarita, que tal es el significado en árabe del segundo apellido de Rosalinda Bueso Asfura, la nueva novia del jefe del gobierno capitalino, Marcelo Ebrard. Rivera, en Toluca, y Asfura en la ciudad de México: Gaviota contra Pajarita... Telenovela legislativa y ejecutiva: el poeta suspende (parcialmente) su diálogo con los hacendados del poder que le han engañado y han faltado a la palabra empeñada. Pero he ahí que mensajeros de buena voluntad tratan de explicar al enojado versificador que sus arrebatos fueron producidos por una equívoca lectura de las circunstancias, y que los patrones sí son buenos y que prometen cambiar, o cuando menos no ser tan díscolos, escuchando con paciencia y buena voluntad a quienes saben hablar con el corazón en la mano. Por lo pronto, el diálogo cancelado con el Congreso estaría en ruta de reapertura y las sesiones de trabajo con Gobernación se frenaron salvo en una. ¿Qué pasará? No deje de ver el siguiente capitulado... Y, mientras la PGR nombra a los sustitutos (gulp) de los 21 delegados estatales que relevó en días pasados sin aún fincarles responsabilidades por los hechos que hubieran llevado a botarlos, ¡feliz fin de semana!
Fax: 5605-2099 - juliohdz@jornada.com.mx
La sesión quiso atenuar su talante, digno de ser considerado como delito electoral, mediante la falsa etiquetación de privada, aunque los medios informativos pudieron tomar nota de lo sucedido e incluso tomar fotografías, como puede verse en La Jornada Michoacán, tanto en la nota de Celic Mendoza como en las gráficas de Iván Sánchez (http://j.mp/qAyLVV), publicadas una en la primera plana del diario, donde se puede ver a una Luisa María sonriente y a la vanguardia del grupo, y otra en interiores, donde quedó constancia de que la hermana del ocupante del gobierno federal compartió la mesa de cuatro desde la cual el secretario Córdova Villalobos rendía un faccioso informe de labores.
Dos días después de esa confirmación privada del uso del aparato federal para beneficio de la hermana en campaña (aprovechamiento que lleva años, pero ahora está en fase de completo descaro), el licenciado Calderón llegó a su tierra natal para desarrollar una gira de dos días caracterizada por la inauguración de obras y servicios. Le recibieron algunos datos desagradables: en primer lugar, que el presidente del comité nacional perredista, Jesús Zambrano, anunció que solicitará una indagatoria formal sobre la reunión reseñada y, en segundo lugar, que persiste una resistencia de panistas a los arreglos hechos con el PAN para apoyar a Cocoa sacrificando a aspirantes a presidencias municipales, en especial en la capital del estado, donde al senador con licencia Marko Cortés le callaron de manera poco elegante la boca (siendo como había sido un crítico duro de los abusos y excesos de poder de Calderón Hinojosa –es decir, de Luisa María–, a quien llegó a acusar de mentirosa por haber prometido años atrás que no ocuparía espacios públicos para no dar pie a maledicencias contra el hermano Felipe). Al citado Cortés lo hicieron candidato a la alcaldía capitalina mediante un tradicional dedazo, cancelando los procesos internos a la luz del arreglo realizado con el Panal de Elba Esther, la nuevamente aliada, pero sólo regionalmente, por este año y por supremas razones familiares de la parte contratante.
Tan escandaloso es el apoyo abierto del gobierno federal a la Primera Hermana (PH) que el arrinconado presunto gobernador de Michoacán, Leonel Godoy, pidió que no hubiera guerra sucia, ante lo cual el carnal Felipe juró que no meterá las manos en las elecciones estatales y que no regresará a la entidad sino hasta después del día de las votaciones. No avalan los hechos a las palabras supuestamente tranquilizadoras del hermano en contienda, sino todo lo contrario. Hasta ahora ha habido una marcada y sostenida estrategia de impulso a Luisa María, colocando a la mayoría de los delegados federales a las órdenes de los operadores y los planes de la ahora candidata, llegando a extremos de sincero valemadrismo político como el acontecido el martes con el secretario federal de salud que, además, él mismo es un funcionario en constante campaña de apoyo a sí mismo para ser candidato panista al gobierno de Guanajuato. Otros secretarios del distraído gabinete felipista también reparten sus luces y recursos entre la función gubernamental que les han asignado y los escarceos futuristas, como lo demuestran diariamente Alonso Lujambio y Ernesto Cordero. Total, si el jefe es el primero en volcarse en aventuras electorales, no sólo las familiares sino en general la de la sucesión en Los Pinos, ¿por qué habrían sus subordinados inmediatos de guardar las formas y abstenerse del uso de tiempo y recursos oficiales para navegar abiertamente en la grilla?
Astillas
Un pajarito versado en lenguas (como ha de comprenderse al final del presente párrafo) develó a esta columna aeróbica y chifladora la clave de ornitología política en que famosos amoríos hacen descansar sus expectativas de triunfo electoral. Abundantemente sabida es la ganancia en imagen que al gobernador del estado de México ha reportado su televisivo matrimonio con la actriz Angélica Rivera, conocida como La Gaviota. Pues bien, a ese productivo volar de ave de tres colores ahora podrá añadirse, o confrontarse, según fuera el caso, La Pajarita, que tal es el significado en árabe del segundo apellido de Rosalinda Bueso Asfura, la nueva novia del jefe del gobierno capitalino, Marcelo Ebrard. Rivera, en Toluca, y Asfura en la ciudad de México: Gaviota contra Pajarita... Telenovela legislativa y ejecutiva: el poeta suspende (parcialmente) su diálogo con los hacendados del poder que le han engañado y han faltado a la palabra empeñada. Pero he ahí que mensajeros de buena voluntad tratan de explicar al enojado versificador que sus arrebatos fueron producidos por una equívoca lectura de las circunstancias, y que los patrones sí son buenos y que prometen cambiar, o cuando menos no ser tan díscolos, escuchando con paciencia y buena voluntad a quienes saben hablar con el corazón en la mano. Por lo pronto, el diálogo cancelado con el Congreso estaría en ruta de reapertura y las sesiones de trabajo con Gobernación se frenaron salvo en una. ¿Qué pasará? No deje de ver el siguiente capitulado... Y, mientras la PGR nombra a los sustitutos (gulp) de los 21 delegados estatales que relevó en días pasados sin aún fincarles responsabilidades por los hechos que hubieran llevado a botarlos, ¡feliz fin de semana!
Fax: 5605-2099 - juliohdz@jornada.com.mx
El final de la jornada de ayer parecía que los capitales no habían hallado un lugar seguro. Cayeron los precios del oro, la plata, el petróleo y los rendimientos de los bonos del Tesoro. Se hicieron humo miles de millones de dólares al bajar de valor las acciones de las corporaciones en las bolsas de valores, en lo que podría llamarse un jueves negro. Fue una reacción al temor de que Italia caiga en moratoria de su abultada deuda pública –ya no tanto España– y a otro periodo de recesión económica, de doble dígito, en Estados Unidos. Y también a la percepción de los inversionistas de que no hay nada que pueda hacer ningún gobierno del mundo para detener lo que viene.
Cambio de giro
La fábrica de pobres le funcionó maravillosamente a los gobiernos priístas de Miguel de la Madrid, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, y a los panistas de Fox, pero comenzó a fallar con Calderón. En los lustros recientes Estados Unidos absorbió a millones de familias que huyeron de México empujadas por la pobreza, la falta de educación y la corrupción. La masa de dólares que enviaban al país –más de 20 mil millones de dólares– llegó a competir en cuantía con la exportación de petróleo y dejó atrás al turismo. Infortunadamente, la gran fábrica de pobres ha enfrentado serios problemas para exportar su abundante producción. Entró en recesión la economía estadunidense, bajó el consumo de braceros y, por otro lado, algunos gobiernos, como el de Arizona, desataron una persecución feroz. El banco BBVA Bancomer da a conocer cifras despolitizadas, frías: 1) entre 2006 y 2010 disminuyó 27 por ciento el número de hogares que recibe remesas; 2) consecuentemente, el número de hogares receptores de remesas disminuyó de 1.86 millones a 1.36 millones; 4) la mayor reducción se presentó en hogares rurales ubicados en localidades con alto y muy alto grado de marginación, y 5) con la recuperación que se está presentando en las remesas, el número de hogares receptores aumentará ligeramente en 2011. Hasta ahí los números del grupo bancario. Esperanzadamente habla de una recuperación, pero es incierta, hay nubes negras en el cielo. Y ese medio millón de hogares que ahora ya no recibe dólares, ¿qué está haciendo? Lo que se percibe es que la fábrica de pobres ha venido diversificándose. Ya no sólo produce el modelo tradicional, el bracero, también al delincuente, tanto el desorganizado –el que roba automóviles o asalta en las esquinas– como el organizado en bandas de traficantes de drogas, de secuestradores, de redes de prostitución y de pornografía.
Cambio de giro
La fábrica de pobres le funcionó maravillosamente a los gobiernos priístas de Miguel de la Madrid, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, y a los panistas de Fox, pero comenzó a fallar con Calderón. En los lustros recientes Estados Unidos absorbió a millones de familias que huyeron de México empujadas por la pobreza, la falta de educación y la corrupción. La masa de dólares que enviaban al país –más de 20 mil millones de dólares– llegó a competir en cuantía con la exportación de petróleo y dejó atrás al turismo. Infortunadamente, la gran fábrica de pobres ha enfrentado serios problemas para exportar su abundante producción. Entró en recesión la economía estadunidense, bajó el consumo de braceros y, por otro lado, algunos gobiernos, como el de Arizona, desataron una persecución feroz. El banco BBVA Bancomer da a conocer cifras despolitizadas, frías: 1) entre 2006 y 2010 disminuyó 27 por ciento el número de hogares que recibe remesas; 2) consecuentemente, el número de hogares receptores de remesas disminuyó de 1.86 millones a 1.36 millones; 4) la mayor reducción se presentó en hogares rurales ubicados en localidades con alto y muy alto grado de marginación, y 5) con la recuperación que se está presentando en las remesas, el número de hogares receptores aumentará ligeramente en 2011. Hasta ahí los números del grupo bancario. Esperanzadamente habla de una recuperación, pero es incierta, hay nubes negras en el cielo. Y ese medio millón de hogares que ahora ya no recibe dólares, ¿qué está haciendo? Lo que se percibe es que la fábrica de pobres ha venido diversificándose. Ya no sólo produce el modelo tradicional, el bracero, también al delincuente, tanto el desorganizado –el que roba automóviles o asalta en las esquinas– como el organizado en bandas de traficantes de drogas, de secuestradores, de redes de prostitución y de pornografía.
Según el anexo estadístico de medición de pobreza multidimensional 2008-2010 del Coneval (disponible en www.coneval.gob.mx), que contrasta agudamente con la visión de la evolución nacional de la pobreza en el mismo periodo, según el Evalúa DF (disponible en www.evalúa.df-gob.mx), descrita en la entrega anterior:
La pobreza multidimensional en el país creció sólo 1.7 puntos porcentuales (a pesar de la gran crisis), pasando de 44.5 a 46.2 por ciento de la población nacional, y de 48.84 a 51.99 millones de personas (incremento de 3.16 millones). La pobreza extrema multidimensional bajó de 10.6 a 10.4 por ciento, pero aumentó levemente el número de personas en esa condición: de 11.67 a 11.71 millones. Los dos niveles de pobreza multidimensional (total y extrema) crecieron tanto en el medio rural (de 62.4 a 64.9 por ciento y de 15.9 a 17.0 millones) como en el urbano (de 39.1 a 40.5 por ciento, y de 32.9 a 35.0 millones).
La pobreza multidimensional en el país creció sólo 1.7 puntos porcentuales (a pesar de la gran crisis), pasando de 44.5 a 46.2 por ciento de la población nacional, y de 48.84 a 51.99 millones de personas (incremento de 3.16 millones). La pobreza extrema multidimensional bajó de 10.6 a 10.4 por ciento, pero aumentó levemente el número de personas en esa condición: de 11.67 a 11.71 millones. Los dos niveles de pobreza multidimensional (total y extrema) crecieron tanto en el medio rural (de 62.4 a 64.9 por ciento y de 15.9 a 17.0 millones) como en el urbano (de 39.1 a 40.5 por ciento, y de 32.9 a 35.0 millones).
Con la misma ligereza e igual diagnóstico que durante la sacudida original (aquellos no lejanos tiempos del catarrito, con Agustín Carstens en la Secretaría de Hacienda) se muestra el inquilino de Los Pinos en el segundo tiempo de la misma crisis. La única diferencia, por llamarle así, es que, para enfrentar las eventualidades económico-financieras, el siempre atinado Felipe Calderón removió a un personaje gris (retribuido con el puesto más alto en el Banco de México) para designar a otro aún peor (con ganas de premiarlo con la candidatura blanquiazul).
La economía internacional se zarandea, el motor del mundo ni de lejos ronronea, la mexicana va para atrás (aún más), la europea a un tris del infarto múltiple, los mercados financieros y bursátiles se retuercen, y mucho más, pero al inquilino de Los Pinos no se le ocurre mejor idea que recurrir a su filósofo de cabecera, Miguel Ángel Cornejo, para asegurar que México llegará a ser un país ganador en la medida en que verdaderamente todos nos decidamos a superar los desafíos que tenemos, mientras su carismático secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, no atina más que a gritar fuaaa.
Si fuera por volumen de discursos y frases de ocasión (cómo olvidar aquellas que garantizan la solidez económica del país, que presumen el navío de gran calado y destacan el año de la recuperación, sin olvidar los famosísimos 6 mil pesos y el bienestar ya llega a los bolsillos de los mexicanos, por ejemplo), México sería el primer mundo del primer mundo, pero estamos como estamos porque lamentablemente los resultados reales se derivan de las acciones de nuestros gobernantes, de la mano de la pasividad social.
El modelito económico internacional echa chispas por doquier, y ningún gobierno está dispuesto a tomar cartas en el asunto, de tal suerte que resulta imposible resolver el problema de fondo si no se atacan las causas. Y en este sentido, a pesar de las promesas (desde Obama a los líderes de la Unión Europea, pasando por los organismos financieros internacionales) nada se ha hecho: los líderes del mundo una vez más pasaron a cuchillo a sus ciudadanos y se limitaron a decir que lo peor ya pasó, frase que sus comparsas tercermundistas repitieron como pericos, mientras los causantes de la más reciente sacudida, los barones financieros y bursátiles permanecen intocados, siguen tan campantes y cometiendo todo tipo de tropelías, en el entendido de que los gobiernos están a su servicio y los dineros públicos a su disposición. No son pocos los que advierten sobre la inminencia de una nueva recesión (la misma, en realidad, pero más profunda), dado el claro declive de la economía estadunidense, la fragilidad de muchas economía europeas y la crisis de la deuda, una bomba de tiempo con mecha muy corta que no sólo explota en las colonias.
Pero en México, triste satélite del motor del mundo, las cosas son distintas, de acuerdo con el discurso oficial, según el cual la economía mexicana está preparada para hacer frente a las turbulencias e inestabilidad internacionales, pues es cada vez menos vulnerable a posibles impactos negativos provenientes del exterior (Cordero dixit; quién más). ¿En serio? Palabras más o menos, eso dijeron a coro Felipe Calderón y Agustín Carstens en 2008, para quienes la crisis que todos vieron venir, menos en Los Pinos, no pasaba de una gripa, según el primero, o de un catarrito, según el segundo, toda vez que las cosas ya no eran como antes (cuando a Estados Unidos le da pulmonía, a México, apenas un catarrito, dijo el actual gobernador del Banco de México).
Eso en el discurso, pero los resultados reales todos los conocen y padecen: en 2009, la economía mexicana ocupó el escalón número 143 de 201 posibles, entre las naciones más afectadas por la crisis y con peor comportamiento, de acuerdo con la evaluación del Banco Mundial. Por si fuera poco, pobreza creciente, desempleo al alza y desplome del nivel de bienestar de los mexicanos, magro de por sí. ¿Repetirán el numerito? Desde luego que sí, de tal suerte que agarraos, mexicanos silenciosos.
Mientras el huracán económico-financiero sube de categoría y en Los Pinos diagnostican otro catarrito, el Banco de México incrementa sus adquisiciones de oro, dada la creciente debilidad del dólar estadunidense (moneda que constituye la columna vertebral de las tan cacareadas reservas internacionales del país). Compras de oro por aquí, compras de oro por allá, hasta ocupar la primera posición internacional en lo que adquisición de este metal se refiere: 98 toneladas a un precio de 5 mil 300 millones de dólares, de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Qué bueno, pero es tradicional que el gobierno mexicano siempre llegue tarde a la fiesta, lo haga muy temprano, o una combinación letal, como en el caso de la descrita compra de oro. ¿Por qué? Bueno, porque llegó tarde a la adquisición del metal áureo, es decir, cuando los precios alcanzan niveles históricos; lo adquiere justo cuando las tesorerías de otras naciones están hinchadas de ese producto. Y temprano, porque dos décadas atrás a la supuesta autoridad se le ocurrió la brillante idea de privatizar (concesionar, le llamó) las minas propiedad de la nación, comenzando por las de oro, y que por esa gracia hoy explotan enormes consorcios privados, especialmente canadienses. Entonces, el gobierno mexicano, con dinero de los mexicanos, acapara oro mexicano, extraído de minas mexicanas por trabajadores mexicanos, y lo compra a… empresas privadas, mayoritariamente extranjeras, y a precios históricos. Negocio redondo.
Así, mientras el Banco de México presume sus 98 toneladas de oro, adquiridas a precios históricos, para robustecer las reservas internacionales del país, tan sólo los consorcios canadienses se han quedado con aproximadamente 400 toneladas del metal áureo durante la estadía panista en Los Pinos (Fox y Calderón), producción que mayoritariamente exportan a su país de origen, Estados Unidos y Suiza.
¿Alguna duda sobre lo bien que los gobiernos neoliberales conducen (al precipicio) a la nación?
Las rebanadas del pastel
La crisis también pega a ciertos organismos internacionales, pero no necesariamente por causas económicas. Tal es el caso del inestable FMI: a Dominique Strauss-Kahn lo echaron por libidinoso y calenturiento, y a Cristina Lagarde, flamante directora gerente de esa institución, la pueden correr por malversación de fondos y abuso de autoridad durante su paso por el Ministerio francés de Finanzas. El Tribunal de Justicia de la república gala anunció que va tras ella.
cfvmexico_sa@hotmail.com • mexicosa@infinitum.com.mx • http://twitter.com/cafevega
La economía internacional se zarandea, el motor del mundo ni de lejos ronronea, la mexicana va para atrás (aún más), la europea a un tris del infarto múltiple, los mercados financieros y bursátiles se retuercen, y mucho más, pero al inquilino de Los Pinos no se le ocurre mejor idea que recurrir a su filósofo de cabecera, Miguel Ángel Cornejo, para asegurar que México llegará a ser un país ganador en la medida en que verdaderamente todos nos decidamos a superar los desafíos que tenemos, mientras su carismático secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, no atina más que a gritar fuaaa.
Si fuera por volumen de discursos y frases de ocasión (cómo olvidar aquellas que garantizan la solidez económica del país, que presumen el navío de gran calado y destacan el año de la recuperación, sin olvidar los famosísimos 6 mil pesos y el bienestar ya llega a los bolsillos de los mexicanos, por ejemplo), México sería el primer mundo del primer mundo, pero estamos como estamos porque lamentablemente los resultados reales se derivan de las acciones de nuestros gobernantes, de la mano de la pasividad social.
El modelito económico internacional echa chispas por doquier, y ningún gobierno está dispuesto a tomar cartas en el asunto, de tal suerte que resulta imposible resolver el problema de fondo si no se atacan las causas. Y en este sentido, a pesar de las promesas (desde Obama a los líderes de la Unión Europea, pasando por los organismos financieros internacionales) nada se ha hecho: los líderes del mundo una vez más pasaron a cuchillo a sus ciudadanos y se limitaron a decir que lo peor ya pasó, frase que sus comparsas tercermundistas repitieron como pericos, mientras los causantes de la más reciente sacudida, los barones financieros y bursátiles permanecen intocados, siguen tan campantes y cometiendo todo tipo de tropelías, en el entendido de que los gobiernos están a su servicio y los dineros públicos a su disposición. No son pocos los que advierten sobre la inminencia de una nueva recesión (la misma, en realidad, pero más profunda), dado el claro declive de la economía estadunidense, la fragilidad de muchas economía europeas y la crisis de la deuda, una bomba de tiempo con mecha muy corta que no sólo explota en las colonias.
Pero en México, triste satélite del motor del mundo, las cosas son distintas, de acuerdo con el discurso oficial, según el cual la economía mexicana está preparada para hacer frente a las turbulencias e inestabilidad internacionales, pues es cada vez menos vulnerable a posibles impactos negativos provenientes del exterior (Cordero dixit; quién más). ¿En serio? Palabras más o menos, eso dijeron a coro Felipe Calderón y Agustín Carstens en 2008, para quienes la crisis que todos vieron venir, menos en Los Pinos, no pasaba de una gripa, según el primero, o de un catarrito, según el segundo, toda vez que las cosas ya no eran como antes (cuando a Estados Unidos le da pulmonía, a México, apenas un catarrito, dijo el actual gobernador del Banco de México).
Eso en el discurso, pero los resultados reales todos los conocen y padecen: en 2009, la economía mexicana ocupó el escalón número 143 de 201 posibles, entre las naciones más afectadas por la crisis y con peor comportamiento, de acuerdo con la evaluación del Banco Mundial. Por si fuera poco, pobreza creciente, desempleo al alza y desplome del nivel de bienestar de los mexicanos, magro de por sí. ¿Repetirán el numerito? Desde luego que sí, de tal suerte que agarraos, mexicanos silenciosos.
Mientras el huracán económico-financiero sube de categoría y en Los Pinos diagnostican otro catarrito, el Banco de México incrementa sus adquisiciones de oro, dada la creciente debilidad del dólar estadunidense (moneda que constituye la columna vertebral de las tan cacareadas reservas internacionales del país). Compras de oro por aquí, compras de oro por allá, hasta ocupar la primera posición internacional en lo que adquisición de este metal se refiere: 98 toneladas a un precio de 5 mil 300 millones de dólares, de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Qué bueno, pero es tradicional que el gobierno mexicano siempre llegue tarde a la fiesta, lo haga muy temprano, o una combinación letal, como en el caso de la descrita compra de oro. ¿Por qué? Bueno, porque llegó tarde a la adquisición del metal áureo, es decir, cuando los precios alcanzan niveles históricos; lo adquiere justo cuando las tesorerías de otras naciones están hinchadas de ese producto. Y temprano, porque dos décadas atrás a la supuesta autoridad se le ocurrió la brillante idea de privatizar (concesionar, le llamó) las minas propiedad de la nación, comenzando por las de oro, y que por esa gracia hoy explotan enormes consorcios privados, especialmente canadienses. Entonces, el gobierno mexicano, con dinero de los mexicanos, acapara oro mexicano, extraído de minas mexicanas por trabajadores mexicanos, y lo compra a… empresas privadas, mayoritariamente extranjeras, y a precios históricos. Negocio redondo.
Así, mientras el Banco de México presume sus 98 toneladas de oro, adquiridas a precios históricos, para robustecer las reservas internacionales del país, tan sólo los consorcios canadienses se han quedado con aproximadamente 400 toneladas del metal áureo durante la estadía panista en Los Pinos (Fox y Calderón), producción que mayoritariamente exportan a su país de origen, Estados Unidos y Suiza.
¿Alguna duda sobre lo bien que los gobiernos neoliberales conducen (al precipicio) a la nación?
Las rebanadas del pastel
La crisis también pega a ciertos organismos internacionales, pero no necesariamente por causas económicas. Tal es el caso del inestable FMI: a Dominique Strauss-Kahn lo echaron por libidinoso y calenturiento, y a Cristina Lagarde, flamante directora gerente de esa institución, la pueden correr por malversación de fondos y abuso de autoridad durante su paso por el Ministerio francés de Finanzas. El Tribunal de Justicia de la república gala anunció que va tras ella.
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Con extrema ligereza, varios comentaristas de radio y televisión de Estados Unidos dijeron pocas horas después de que asesinaron en Dallas al presidente John F. Kennedy, que todo apuntaba a que el crimen había sido ordenado por el gobierno cubano. La especie fue alentada al presentar en la televisión al presunto asesino, Lee Harvey Oswald, repartiendo propaganda comunista. Fresca estaba la crisis de los misiles protagonizada por nuestro vecino país del norte y la Unión Soviética. Antes de que terminara ese fatídico 23 de noviembre de 1963, los servicios de inteligencia estadunidenses descartaron la hipótesis cubana. Sabían ya que el crimen había sido fraguado en oscuros sótanos del poder.
Con la masacre reciente en Oslo y la isla de Utoya se repitió la misma fórmula. Tanto en la televisión y la radio de México como en la de muchos otros países, varios analistas culparon de la masacre a organizaciones islamistas. Cuando se supo que el asesino era un convencido defensor de la pureza blanca, los principales medios europeos recogieron la opinión de los más calificados integrantes de los partidos de la extrema derecha, quienes culparon de lo ocurrido a la migración árabe a Europa. Hasta salieron en defensa de los principios cristianos.
Con la masacre reciente en Oslo y la isla de Utoya se repitió la misma fórmula. Tanto en la televisión y la radio de México como en la de muchos otros países, varios analistas culparon de la masacre a organizaciones islamistas. Cuando se supo que el asesino era un convencido defensor de la pureza blanca, los principales medios europeos recogieron la opinión de los más calificados integrantes de los partidos de la extrema derecha, quienes culparon de lo ocurrido a la migración árabe a Europa. Hasta salieron en defensa de los principios cristianos.
Patricia Peñaloza: Ruta Sonora
Como parte de la estirpe de productores provenientes de un universo pachecósmico de corte electrónico, como Mr Oizo, Burial, Four Tet, MF Doom, Prefuse 73 y demás seres hermanados con el beat manipulable y las capas sonoras supra-creativas, Flying Lotus, nacido Steven Ellison en Los Ángeles (1983), visita por segunda vez la ciudad de México este fin de semana (en 2008 estuvo en el festival MUTEK, y en mayo pasado actuó en Guadalajara).
Sobrino de la cantante y multinstrumentista Alice McLeod, ex mujer del legendario John Coltrane, Ellison trae en las venas el jazz, el groove, la síncopa y la rítmica atravesadas, rasgos que ha demostrado en 1983 (2006), Los Angeles (2008) y, sobre todo, en el deslumbrante Cosmogramma (incluido en los mejores álbumes de electrónica de 2010 de Ruta Sonora).
El Correo Ilustrado
Retrasa el Issste corrección de faltas en pensión
Durante más de 29 años presté mis servicios en la SEP. El 10 de diciembre de 2009 causé baja y solicité mi jubilación, conforme al artículo 100 transitorio de la Ley del Issste. El 28 de abril de 2010 acudí a las oficinas de Pensionissste para gestionar el cobro correspondiente al SAR-Issste.Continuar
La riqueza y la pobreza coexisten: se causan y se alimentan mutuamente en la sierra Tarahumara. El enriquecimiento de pocos induce la miseria de muchos. Minería a cielo abierto, cultivo de enervantes y hambruna de las comunidades por la sequía son los ejes de la emergencia humanitaria y ambiental en las montañas chihuahuenses.Continuar
En momentos en que los dictadores árabes necesitaban con desesperación beber de las aguas seguras y tibias del verano, llegaron los egipcios a envenenar el pozo. Allá en lo profundo, los dictadores podían ver un rostro frágil y titubeante, unos dedos que jugueteaban con la nariz y la boca, el brazo levantado de un hombre en camilla para evitar que la luz lo alumbrara de cerca, pero –apenas por unos instantes– con la mirada arrogante de otros tiempos. Luego el pesado micrófono negro apareció en la mano izquierda. “Estoy aquí, su señoría –dijo una voz de fuerza estremecedora–. No he cometido ninguno de esos crímenes.”
Sí, los egipcios en verdad sometieron a juicio el miércoles a su abatido y anciano dictador, junto con sus huraños y refinados hijos, vestidos de blanco, como si fueran a otra partida de tenis, ilusión sólo rota por el Corán verde bajo el brazo de Alaa Mubarak. ¿Para animar a su octogenario padre, Hosni? ¿O para insultar a los muertos?
Sí, los egipcios en verdad sometieron a juicio el miércoles a su abatido y anciano dictador, junto con sus huraños y refinados hijos, vestidos de blanco, como si fueran a otra partida de tenis, ilusión sólo rota por el Corán verde bajo el brazo de Alaa Mubarak. ¿Para animar a su octogenario padre, Hosni? ¿O para insultar a los muertos?
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