Israel Rodríguez
Periódico La Jornada
Domingo 20 de julio de 2014, p. 20
La
Asociación de Distribuidores de Gas Licuado de Petróleo (ADG), que
agrupa a más de 50 por ciento de las empresas de este sector, aseguró
que la apertura abrupta en el mercado pondrá a competir a estas
empresas en desigualdad de condiciones con las compañías extranjeras.
Demandaron mayor espacio para capitalizar las empresas nacionales y
alertaron que la liberalización en el precio del energético ocasionará
una burbuja inflacionaria, cuyo principal afectado será el consumidor.
El Senado aprobó la liberación del precio del gas LP, utilizado por
20 millones de hogares y 80 por ciento de la población, a partir del
primero de enero de 2017, o antes si el gobierno federal diseña el
programa de subsidios focalizados para la población con menos recursos
en las zonas urbanas y rurales.
En entrevista, Luis Landeros Martínez, presidente de la ADG, afirmó
que las empresas distribuidoras de gas actualmente están
imposibilitadas para competir debido a que llevan 14 años con el margen
de ganancia congelado y las autoridades quieren que compitamos con
empresas extranjeras del tamaño de Petróleos Mexicanos (Pemex) o Repsol.
“Tenemos ya decrementos de 15 por ciento en las ventas de gas LP en
los últimos 10 años. Las empresas ya no pueden llegar a zonas lejanas y
por otro lado las condiciones económicas hacen que la gente deje de
comprar gas LP y que utilicen leña y carbón, con el consecuente daño
ambiental. Adicionalmente, advirtió que esta medida ocasionará una
burbuja inflacionaria, cuyo principal afectado será el consumidor final.
Mario Córdova Rosas, director general de la ADG, pidió a las
autoridades ayuda para cuidar esa parte social y apoyo para prepararse
de alguna manera, para afrontar la competencia de los capitales
extranjeros que vienen.
No estamos buscando un beneficio adicional, lo que queremos es que nos ajusten y reconozcan el rezago tan importante que se trae en el margen de comercialización.
Trabajadores colocan tubería de gas en las calles de Mitla y Torres Adalid, en la colonia Del Valle, en la ciudad de MéxicoFoto Cristina Rodríguez
Los
representantes de la ADG detallaron que el margen actual es de 2.04
pesos por kilo y lo que solicitamos es un ajuste para llegar a 2.85
pesos, precisaron.
Luis Landeros explicó que si sólo se considerara la inflación de los
últimos 14 años, medida a través del Índice Nacional de Precios al
Consumidor y no la inflación del sector, deberíamos tener un margen de
3.40 pesos, pero ni siquiera estamos solicitando eso.
Landeros Martínez afirmó:
Con un margen de 2.85 pesos podríamos reponer infraestructura y tiempo, porque aunque nos otorgaran el aumento al margen de comercialización no podríamos compensar el rezago en sueldos y salarios. Hay empresas que llevan cinco años sin poder aumentar sueldos a sus trabajadores.
Por su parte, Córdova Rosas informó que hay acercamientos con la
Secretaría de Energía (Sener) y con legisladores para plantear esta
problemática. Descartaron interponer cualquier juicio de amparo porque
no prosperaría.
Hay que recordar que hubo reformas a la Ley de Amparo recientemente. En este sentido un amparo contra este tipo de modificaciones que son constitucionales no prosperan y menos en el sector que representamos porque son recursos del Estado y nosotros somos solamente permisionarios de distribución y un amparo no va a prosperar, apuntó.
Apelaron a la sensibilidad de la autoridad porque si no atiende a
estas inquietudes la industria va a dejar de atender al público
consumidor y los usuarios van a migrar a la leña con todas las
repercusiones en la salud pública y en el medio ambiente. Destacaron
que las cuatro grandes asociaciones del país, que representan 90 por
ciento de la distribución de gas LP están unidas.
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