OPINIÓN
Por Leticia Burgos Ochoa*
México, DF, 1 nov 11 (CIMAC).- Un logro sin precedente del movimiento feminista y progresista de 2008 a la fecha, ha sido la creación de los observatorios ciudadanos de género para el monitoreo, seguimiento y evaluación de los presupuestos dirigidos a la transversalidad y la igualdad de género, que hoy enfrentan nuevos desafíos.
El pasado 25 de octubre en Sonora se llevó a cabo el primer foro para la transparencia y la rendición de cuentas de seis programas con reglas de operación y cinco acciones sin reglas de operación, organizado por Consultores Especializados y Soluciones Integrales SC, quienes fueron invitados por la Secretaría de la Función Pública para monitorear Sonora y en el que presentaron avances de la aplicación del gasto federal para el adelanto de las mujeres en el estado.
La ausencia de autoridades federales y estatales de primer nivel fue notoria en el foro; se podrá decir que no es una novedad, lo que resulta grave es que siendo el espacio que se crea para la rendición de cuentas y la transparencia de la aplicación del presupuesto no estén para explicar el retraso de la entrega de los recursos a las y los beneficiarios, el subejercicio y el gasto en las acciones que se desarrollan en coordinación con las autoridades estatales y municipales.
El caso más alarmante es el de seguridad pública, cuando es a todas luces una emergencia nacional atender la inseguridad y la violencia feminicida.
Según los datos preliminares del monitoreo, sólo el 8.5 por ciento del presupuesto se ha ejercido al segundo trimestre del año en la acción para “El fomento de la cultura de la participación ciudadana para la prevención del delito en el marco de la Equidad y Género”.
Otro resultado que asombra del monitoreo, son las acciones para “Promover y atender la violencia contra las mujeres”, a cargo de la Secretaría de Gobernación, en el que “no se destinaron recursos para Sonora”.
En 2008 ocurrió una situación similar, con la diferencia de que en ese año se etiquetaron recursos para la creación de refugios y no se ejercieron.
Pero, por si eso fuera poco, el observatorio da cuenta de la omisión de otras acciones y programas que van dirigidos al mismo propósito de “prevenir y atender la violencia contra las mujeres”.
Se ha omitido la rendición de cuentas sobre las acciones y recursos federales que se etiquetan con el mismo fin, y que se ejercen a través de convenios de coinversión entre la Federación y el gobierno de Sonora y que están a cargo de los institutos de las mujeres de ambos niveles de gobierno.
La falta de información sobre las acciones dirigidas al adelanto de las mujeres, no permite valorar el impacto de los recursos por lo que se pone en riesgo o en duda –en el menor de los casos– la aplicación del presupuesto etiquetado para las sonorenses y la eficacia de la metodología de los observatorios ciudadanos de género.
* Ex legisladora federal e integrante de la Red Feminista Sonorense.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario