El
acceso a la justicia para las indígenas ixiles sobrevivientes de
violencia sexual e intento de exterminio, durante el conflicto armado
en Guatemala en los años 80, nuevamente tendrá que esperar luego de que
por una “argucia legal” se impidió ayer el reinicio del juicio por
genocidio y delitos de lesa humanidad contra el ex dictador Efraín Ríos
Montt.
Lo anterior luego de que por mayoría de votos, el Tribunal Primero B de Mayor Riesgo –que conocería del caso– aceptó trasladar el expediente del juicio contra el general Ríos Montt y su jefe de inteligencia militar, Mauricio Rodríguez Sánchez, al Tribunal de Apelaciones de Mayor Riesgo.
Tal decisión respondió a un recurso legal presentado por la defensa del ex mandatario de facto, con el que se argumentó que la jueza Irma Jeannette Valdés –designada para conocer el proceso– no sería imparcial en el juicio luego de que en 2004 en una tesis académica emitió una opinión sobre genocidio, delito que la defensa argumenta que no ocurrió.
Cabe recordar que el general retirado debe enfrentar un nuevo proceso a raíz de que la Corte de Constitucionalidad guatemalteca (CC) anulara la sentencia de 80 años de prisión que en mayo de 2013 la jueza Yassmín Barrios emitió al encontrarlo responsable de ordenar 17 matanzas cometidas entre 1982 y 1983 en las que perdieron la vida mil 771 indígenas ixiles, y cientos de mujeres fueron violadas sexualmente.
Pero la CC ordenó reponer el proceso hasta la etapa del desahogo de pruebas.
Como se tenía previsto desde noviembre de 2013, cuando se anunció en qué Tribunal se reabriría el proceso, ayer todo estaba listo para reanudar el juicio.
En un primer momento la jueza Irma Jeannette Valdés se negó a aceptar una excusa presentada por la defensa de Ríos Montt en la que se argumentaba que el mandatario no podría acudir al recinto por su mal estado de salud.
Entonces Valdés ordenó que el militar compareciera en el inicio del juicio en su contra, por lo que fue trasladado en una camilla e ingresó al Tribunal con el rostro cubierto por una sábana.
En ese momento se escuchó en una audiencia tanto a la defensa como a la parte acusadora, y pese a que en un principio la jueza Valdés rechazó la solicitud de separarse del proceso al considerar que se trataba de “una estrategia para obstaculizar el juicio”, el resto del Tribunal votó y se decidió que el proceso se traslade a otro Tribunal.
La elección de los nuevos jueces, así como la nueva fecha de inicio del juicio estará a cargo de una “Cámara Penal” del Organismo Judicial Guatemalteco.
Ante el nuevo aplazamiento del juicio, organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, así como las mujeres indígenas que acudieron a presenciar la reapertura del caso, acusaron que la defensa utiliza “argucias legales” para impedir al acceso a la justicia y sostuvieron que “en Guatemala sí hubo genocidio”.
Cabe recordar que el ex militar también está a la espera de que la Sala Primera de Apelaciones de lo Penal resuelva una solicitud de amnistía que hizo en 2012.
Imagen retomada del sitio paraqueseconozca.blogspot.mx
Por: Anaiz Zamora Márquez
Cimacnoticias | México, DF.-
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