Las
asignaciones entregadas al PVEM muestran un incremento constante entre
2012 y 2014, al pasar de 67.84 millones el primer año, a 77.6 millones
en el segundo y rebasar los 80.3 millones en el tercero. Foto: Especial
En lo que va de la 62 Legislatura, el Partido Verde en el Senado se ha
embolsado más de 253.58 millones de pesos por concepto de asignaciones
a grupos parlamentarios.
La partida, cuyo ejercicio no ha tenido que comprobar, no incluye el pago de dietas a sus siete legisladores ni los recursos entregados a las comisiones en las que ocupan cuatro presidencias y cuatro secretarías.
La falta de regulación para el ejercicio y rendición de cuentas sobre el uso de las subvenciones de las bancadas ha permitido a los senadores del PVEM, entre otras cosas, destinar más de 50 millones de pesos a la compra de spots para una campaña en la que las autoridades electorales detectaron desvío de recursos.
Las asignaciones entregadas al PVEM muestran un incremento constante entre 2012 y 2014, al pasar de 67.84 millones el primer año, a 77.6 millones en el segundo y rebasar los 80.3 millones en el tercero.
En 2015, los senadores de ese partido han cobrado 27.82 millones de pesos.
En promedio, cada senador habría tenido acceso a 36.22 millones que, de acuerdo con la reglamentación de la Cámara alta, debió destinarse a pago de consultorías, estudios, investigaciones, asesorías y personal de la bancada.
El Senado y sus áreas administrativas no están legalmente facultados para pedir cuentas al PVEM sobre el ejercicio del dinero, ya que la Tesorería de la Cámara sólo requiere de un recibo simple para entregar las asignaciones.
Los legisladores tampoco están obligados a hacer la comprobación de los gastos.
La ASF ha presentado observaciones al Senado año con año, pues los legisladores se han negado a entregar documentación para comprobar el destino de más de mil 200 millones de pesos anuales destinados para las asignaciones.
El Presupuesto de Egresos aprobado para 2015 establece que el Senado podrá gastar mil 228.22 millones de pesos.
La Cámara alta está a la espera de que el Trife deje firme el procedimiento sancionatorio aprobado por el INE, en el que se aseguró que las bancadas del PVEM en el Congreso desviaron recursos públicos para pagar campañas promocionales en medios de comunicación, por un monto superior a los 100 millones de pesos.
La partida, cuyo ejercicio no ha tenido que comprobar, no incluye el pago de dietas a sus siete legisladores ni los recursos entregados a las comisiones en las que ocupan cuatro presidencias y cuatro secretarías.
La falta de regulación para el ejercicio y rendición de cuentas sobre el uso de las subvenciones de las bancadas ha permitido a los senadores del PVEM, entre otras cosas, destinar más de 50 millones de pesos a la compra de spots para una campaña en la que las autoridades electorales detectaron desvío de recursos.
Las asignaciones entregadas al PVEM muestran un incremento constante entre 2012 y 2014, al pasar de 67.84 millones el primer año, a 77.6 millones en el segundo y rebasar los 80.3 millones en el tercero.
En 2015, los senadores de ese partido han cobrado 27.82 millones de pesos.
En promedio, cada senador habría tenido acceso a 36.22 millones que, de acuerdo con la reglamentación de la Cámara alta, debió destinarse a pago de consultorías, estudios, investigaciones, asesorías y personal de la bancada.
El Senado y sus áreas administrativas no están legalmente facultados para pedir cuentas al PVEM sobre el ejercicio del dinero, ya que la Tesorería de la Cámara sólo requiere de un recibo simple para entregar las asignaciones.
Los legisladores tampoco están obligados a hacer la comprobación de los gastos.
La ASF ha presentado observaciones al Senado año con año, pues los legisladores se han negado a entregar documentación para comprobar el destino de más de mil 200 millones de pesos anuales destinados para las asignaciones.
El Presupuesto de Egresos aprobado para 2015 establece que el Senado podrá gastar mil 228.22 millones de pesos.
La Cámara alta está a la espera de que el Trife deje firme el procedimiento sancionatorio aprobado por el INE, en el que se aseguró que las bancadas del PVEM en el Congreso desviaron recursos públicos para pagar campañas promocionales en medios de comunicación, por un monto superior a los 100 millones de pesos.
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