Utopía
Eduardo Ibarra Aguirre
Con relativa facilidad se hace de los rezagos no sólo un lugar común con frases que colocan al país en "los primeros lugares del mundo", sino que las contradictorias estadísticas existentes son llevadas al extremo de disminuirlas, como que apenas leemos un libro al año como promedio nacional.
El 23 de abril fue conmemorado el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, y el cruzamiento de datos resultó ilustrativo, aunque las conclusiones derivadas de los dígitos son menos contradictorias.
En promedio, 2.8 libros se leen en territorio azteca de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, citada por Emir Olivares Alonso. A tono con la misma fuente, la Unesco, en los archivos de Utopía localicé que para el 17 de septiembre de 2010, en México se leían al año 2.9 libros, frente a 8.9 en España y 14 en Alemania. Es decir, retrocedimos en cuatro años, lo que nos coloca, dice el reportero de La Jornada, en el penúltimo lugar de un listado de 108 naciones en los índices de lectura.
Por el contrario, para Paco Ignacio Taibo II "es información falsa", y su origen lo explica en que los datos los obtienen de las ventas en librerías y tiendas de autoservicio (también en puestos de periódicos), y no consideran las ventas en ferias del libro que por fortuna crecen, ni en encuentros similares, como tampoco que un mismo ejemplar puede leerlo varias personas.
Razonable la explicación del escritor e integrante de la Brigada para Leer en Libertad que, además, informó que en el Distrito Federal se alcanzan 6.5 libros de lectura en promedio anual.
Lo irrebatible es que la lectura aún no es un hábito nacional, 42 de cada 100 mexicanos prefieren ver la televisión con los subproductos de Televisa (excepción hecha de buena parte de la programación de Forotv) y Televisión Azteca, mismas que llaman a leer ¡20 minutos diarios! a la vez que destrozan con sus contenidos telebasura la esforzada labor de los maestros que tanto critican hasta lincharlos y sin permitir el más que elemental derecho de réplica.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Lectura 2012, publicada por la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, 35 por ciento de los mexicanos no acabaron un libro en toda su vida y sólo 12 por ciento dedican su tiempo libre a leer. Más aún: tres de cada 10 jóvenes de entre 12 y 17 años respondieron que no les gusta leer, 61 por ciento respondió que no lo hace por falta de tiempo y 48 de cada 100 no asistió a una biblioteca. En México existe una biblioteca pública por cada 15 mil habitantes.
Para la investigadora Margarita Bosque Lastra, de la Universidad Nacional, las bibliotecas son un instrumento relevante para erradicar los bajos índices de lectura, por lo que propone proporcionar los recursos económicos necesarios para cumplir sus tareas con excelencia y reforzar así los ya logrados en las aulas.
Sin duda que todas las campañas para promover el hábito de la lectura, incluida la del duopolio televisivo son útiles, mas como sugieren voces especializadas es necesario tomar en cuenta aspectos socioeconómicos como que el poder adquisitivo de los salarios e ingresos de la mayoría de los mexicanos reduce sus posibilidades de acceso a los libros. Además de ponderar cuestiones de salud pública porque 43 de cada 100 mexicanos necesitan servicio optométrico y la vista de más de 6 millones de niños desde que nacen hasta los 14 años requiere atención médica. Sin omitir el serio problema que es la desnutrición, porque todo ello dificulta leer y no se diga el convertirlo en un hábito como el futbol, las telenovelas…
Acuse de recibo
"Excelente artículo. ¿Ya leíste Vacíos de poder en México, de Edgardo Buscaglia, en donde el experto pone en primerísimo lugar para salir del desastre en que estamos metidos, la seguridad humana? Luego te envío un comentario. Esta Utopía la difundo entre todos mis contactos", refiere María Cervantes sobre Ahora sin armas, pero con alimentos (23-IV-14)... El doctor Jorge Rogelio Castro agrega: "(…) un reportaje verídico, profesional, crudo, realista con cifras y descripción de nuestra dependencia deliberada a la importación, desde gasolina hasta los alimentos y pornografía cultural de cableras y de televisión abierta, para destruir con la miseria alimentaria al 20 por ciento de nuestra población con enfermedades por desnutrición y hambrunas, o sin alimentos pues. (…) la verdad pura, sin complicidades, que todos escribiéramos así. Esto cambiaría pronto, la pluma y la palabra con la ley es el antídoto contra los ladronzuelos del Estado, vividores y saqueadores no sólo de dólares sino del Presupuesto de la Federación en negocios mafiosos y presupuestos gansteriles desde lo que fue Conasupo (…)" Para Reporteros sin Fronteras "La libertad de información (está) amenazada por una nueve Ley de Telecomunicaciones"… Juan Manuel Valero Gómez cumplió, el 4 de marzo, una década de fallecido, fue un esforzado y leal colaborador de Forum.
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