Derogarán artículo de Ley de Cultura Cívica
La diputada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la
Asamblea Legislativa, Jany Robles Ortiz, presentó una iniciativa para
crear una ley que regule el “trabajo sexual” y reconocer los “derechos
de las y los trabajadores sexuales”.
En la sesión de ayer martes, la asambleísta presentó la iniciativa para
crear la “Ley que Regula el Trabajo Sexual en el Distrito Federal” a fin
de garantizar los “derechos de las y los trabajadores sexuales” e
instrumentar políticas, medidas, acciones y programas de gobierno para
su desarrollo integral.
La propuesta también es derogar la fracción VII del artículo 24 de la
Ley de Cultura Cívica de Distrito Federal que dice que una infracción
contra la tranquilidad de las personas es “invitar a la prostitución o
ejercerla, así como solicitar dicho servicio. En todo caso sólo
procederá la presentación del probable infractor cuando exista queja
vecinal”.
La iniciativa de ley se presenta días después de que diversos
asambleístas condenaran en foros públicos y en tribuna, los asesinatos
de dos personas transexuales en condición de prostitución, hechos que
ocurrieron en la capital del país y que llamaron la atención sobre la
pertinencia de regular el “trabajo sexual”.
En su exposición de motivos, la priista subrayó que es fundamental
concebir a las personas que realizan “trabajos sexuales”, con la
dignidad y capacidad de decidir sobre su persona y asegurar que no se
violen sus derechos, y para ello propuso crear una ley de 38 artículos
con obligaciones y derechos.
Las reformas proponen condiciones mínimas para “ejercer esta actividad”:
ser mayor de 18 años de edad; tener capacidad de comprender el
significado de la actividad que se está realizando; que se haga de
manera voluntaria y sin ninguna coacción, y en zonas establecidas por la
autoridad.
Además la iniciativa de ley también impone penas a “las y los
trabajadores sexuales” que realicen o practiquen actos sexuales en la
vía pública, se les impondrá arresto inconmutable hasta por 36 horas y
una multa de 20 a 50 días de unidad de cuenta (lo que antes era salario
mínimo).
Por otra parte quien ofrezca sus servicios fuera de los perímetros
fijados o reconocidos por las delegaciones será retirado de la vía
pública y presentado ante el Juez Cívico, y a los usuarios que contraten
los servicios de un menor de edad se le impondrán las penas señalas por
el Código Penal del Distrito Federal.
La ley establece requisitos para los establecimientos que dispongan de
“escenarios y privados”, que “ofrezcan espectáculos eróticos”; también
señala medidas de control sanitario; prohíbe publicidad con contenido
sexual: mientras que el gobierno capitalino tendrá obligaciones como
“procurar la pacífica convivencia de las y los trabajadores sexuales”.
Robles Ortiz dijo que a nivel mundial se estima que el número de
“sexoservidoras” asciende a 40 millones, y que “el trabajo sexual” se
observa de distintas maneras.
A decir de organizaciones integradas en la Coalición para la Abolición
del Sistema Prostituyente –quienes están en contra de reconocer como
trabajo la prostitución– señalan que la mayoría de las mujeres que están
en contextos de prostitución están allí por coacción, lo que explica
que sólo 147 personas hayan solicitado al gobierno local una tarjeta de
“trabajadora sexual.
Sin embargo, la legisladora señala ejemplos de otros países como
Holanda, donde la prostitución no es delito y las “trabajadoras del
sexo” tienen seguridad social y subsidio por desempleo; en Dinamarca las
“meretrices” están obligadas a pagar impuestos, pero no reciben
prestaciones; mientras que en España, Italia y Francia, la prostitución
no está ni autorizada ni prohibida.
La legisladora dijo que según cifras de instituciones y organismos de la
sociedad civil, en la Ciudad de México aproximadamente 40 mil personas
se dedican al “trabajo sexual” y por ello es necesario reconocer la
dignidad de las personas que realizan esta actividad y establecer
condiciones para ejercerla.
En la sesión, el diputado del Partido Verde, Fernando Zárate Salgado,
presentó otra propuesta en el mismo sentido para reformar la Ley de
Cultura Cívica, al asegurar que el “trabajo sexual” es como cualquier
otro y por lo tanto debe mantener “todos los privilegios que cualquier
otro”.
Por: Anayeli García Martínez
Cimacnoticias | Ciudad de México.-
No hay comentarios.:
Publicar un comentario