2/11/2013

Albergues del DIF violentan derechos a niñas migrantes

NACIONAL
Migración
   Las privan de su libertad y les niegan opciones para su desarrollo

Por: Claudia Ocaranza Abascal
Cimacnoticias | México, DF.- 

Los Derechos Humanos (DH) de las niñas y las adolescentes migrantes en la frontera sur de México son violentados en los albergues del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), dijo Lourdes Rosas Aguilar, coordinadora de investigación del Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova.

Rosas participó en la elaboración del informe “Niñez detenida. Los Derechos Humanos de niñas, niños y adolescentes migrantes en la frontera México-Guatemala”, que se presentó ayer en la UNAM.

En declaraciones a Cimacnoticias, la investigadora consideró que las niñas y las adolescentes migrantes no deberían ser privadas de su libertad, pues los centros de detención del Instituto Nacional de Migración (INM) y los albergues del DIF no ven por sus garantías, aseguró.

En Tapachula, Chiapas, punto fronterizo con Guatemala, al momento de su detención las niñas y adolescentes migrantes son tratadas como si fueran adultas en los albergues del DIF, los cuales –apuntó– no son mejores que los centros de detención del INM.

Lourdes Rosas calificó como “preocupante” que las niñas y las adolescentes prefieran estar en centros de detención que en el albergue del DIF en Tapachula, pues en este lugar se les atiende bajo una lógica “asistencialista” y son tratadas sin ninguna garantía y programas para su desarrollo a largo plazo.

La especialista contó el caso de dos adolescentes salvadoreñas que fueron enviadas al albergue del DIF y tuvieron que esperar ocho meses para su repatriación, tiempo durante el cual fueron discriminadas y maltratadas por el personal, que las veía “como parte del lugar”.

EXPLOTACIÓN SEXUAL

En otro tema, Rosas Aguilar explicó que las niñas y las adolescentes migrantes además de exponerse a los procesos de detención y repatriación, enfrentan la explotación sexual y laboral.

Precisó que aunque la mayoría de niñas y adolescentes migrantes son guatemaltecas, hay un número creciente de hondureñas y salvadoreñas que llegan a Tapachula a trabajar para quedarse o en su tránsito hacia Estados Unidos.

Detalló que incluso existe una división del trabajo entre ellas. De acuerdo con la experta, las guatemaltecas realizan labores del hogar, mientras que las salvadoreñas y hondureñas por “su atractivo físico” se dedican a servicios de meseras en bares y cantinas, sobre todo en el corredor fronterizo con Guatemala.

Las migrantes trabajadoras del hogar, que reciben de 80 a 120 pesos por día, crean redes de apoyo entre ellas, y se avisan de casas donde sus amigas o familiares pueden trabajar.

Para Lourdes Rosas, se deben visibilizar las necesidades y condiciones específicas de niñas y adolescentes migrantes y demandó que no se les prive de su libertad.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario