POR Jenaro Villamil
En el último día para publicar encuestas sobre las tendencias
electorales de los comicios del 1 de julio, se confirmó el crecimiento
de la candidatura de Andrés Manuel López Obrador, de la coalición Juntos
Haremos Historia, quien rebasó el 50 por ciento de las preferencias en
los ejercicios demoscópicos del periódico Reforma (51 por ciento), del diario El Financiero (54 por ciento), mientras que en Excélsior-BGC registró
49 por ciento y en la de Consulta Mitofsky registró 46.7 por ciento,
con 30 puntos de ventaja frente a sus otros dos competidores.
Las encuestas difundidas este miércoles 27 de junio también
mantuvieron la incógnita sobre el segundo lugar en la candidatura
presidencial, ya que en tres encuestas, se “cerró” la distancia entre
Ricardo Anaya, de Por México al Frente, ante José Antonio Meade, de la
coalición PRI-Verde-Panal.
La encuesta de Reforma registró un 27 por ciento de
preferencia electoral por Ricardo Anaya, mientras que Meade está en un
lejano tercer lugar con 19 por ciento, 8 puntos de diferencia, pero en
las encuestas de Excélsior el priista se acerca 21 por ciento frente al 26 por ciento del panista, en El Financiero
prácticamente hay un empato de 22 por ciento para Meade frente al 21
por ciento de Anaya, y Consulta Mitofsky los coloca a ambos con 15.9 por
ciento de intención de voto.
Consulta Mitofsky registra un 19.1 por ciento de encuestados que “no
declaró”, un porcentaje superior al de los propios candidatos
presidenciales, mientras que Reforma dio un porcentaje de 17 por ciento de indecisos y 2 por ciento de quienes no piensan ir a votar.
Fuerzas en el Congreso
Las encuestas también reflejan una clara y nueva mayoría en la Cámara
de Diputados y en el Senado formada por los partidos que integraron la
coalición Juntos Haremos Historia, integrada por Morena-PES-PT.
Según el estudio demoscópico realizado por Consulta Mitofsky, en la
estimación de la integración de la Cámara de Diputados, esta coalición
tendría un mínimo de 236 legisladores y un máximo de 298 diputados. En
este escenario, la coalición que lleva a López Obrador como candidato
presidencial, tendría mayoría simple (50 por ciento más uno) en
San Lázaro.
La coalición Por México al Frente integrada por PAN-PRD-MC, tendría
un mínimo de 120 y un máximo de 176 curules, muy por arriba de la
coalición del PRI-Verde-Panal, que registraría sólo 65 como mínimo y un
máximo de 105 diputados federales.
Por partidos, Morena tendría un mínimo de 136 y un máximo de 152
diputados federales, lo que la convierte en la bancada más grande,
seguida por el PAN con 80 y 95, como máximo y mínimo, y el PRI podría
ser desplazado por el Partido Encuentro Social como tercera
fuerza legislativa.
En esta proyección, el PES tendría un mínimo de 61 legisladores y un
máximo de 73, mientras que el PRI sólo alcanzaría 50 diputados federales
como mínimo y un máximo de 62 curules.
El PES también estaría por encima del PRD que se hundiría hasta la
quinta fuerza política con sólo 25 diputados como mínimo y 36 como
máximo, mientras que el PT tendría más: 61 como mínimo y 73 como máximo.
El “defecto Meade” también hundiría al Partido Verde y al Panal como
partidos con bancadas muy raquíticas: 10-22 par el Verde y 5-11 para el
Panal, partido que se desfondó tras el apoyo de varios grupos
magisteriales a López Obrador.
El Movimiento Ciudadano tendría una bancada de 23 diputados federales, mínimo, y un máximo de 34.
En el caso del Senado, la coalición Morena-PT-PES podría tener un
mínimo de 51 curules y un máximo de 73, mientras que la coalición
PAN-PRD-MC registra un mínimo de 28 senadores y un máximo de 50.
El caso más grave es para la coalición oficialista PRI-Verde-Panal que tendría un mínimo de 18 y un máximo de 40 senadores.
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