La corrupción es uno de los factores más importantes para
explicar la falta de resultados contra la trata de personas en
diferentes naciones, entre ellas México, reporta un documento de la
Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por
sus siglas en inglés).
El quinto visitador general de la Comisión Nacional de los Derechos
Humanos (CNDH), Édgar Corzo Sosa, indicó que este documento asienta que
el comportamiento corrupto de los agentes encargados de hacer cumplir la
ley puede facilitar a los tratantes a abusar de sus víctimas.
Los países que hacen el menor esfuerzo para luchar contra la trata de personas también suelen ser aquellos con altos niveles de corrupción oficial. Estas frases podrían ser aplicadas a lo que sucede en nuestro país, afirmó durante la presentación de los documentos temáticos
El papel de la corrupción en la trata de personasy
El concepto de explotación en el protocolo contra la trata de personas, que tradujo al español la CNDH.
De acuerdo con el reporte 2019 sobre este delito elaborado por la
CNDH, en el país se han detectado entre 2012 y 2017 al menos 5 mil 245
víctimas de trata de personas. Las más afectadas son mujeres y niñas (3
mil 308 y mil 86), además de 492 hombres y 289 niños.
En el periodo de análisis, de ese total de víctimas sólo se
reportaron 790 casos derivados de sentencias condenatorias firmes de
esos delitos.
Esta es la dimensión que hemos acreditado respecto a una terrible problemática que arrebata infancias y adolescencias, libertades, dignidad y destruye familias y futuros en el país, subrayó Corzo. Enfatizó la necesidad de crear instrumentos para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas.
Durante el acto, el titular en México de UNODC, Antonino de Leo, aseguró que
la corrupción facilita y fomenta la trata de personasen el país. Las cifras en México ponen de manifiesto que para que exista ese delito se requiere una corrupción que se puede definir de sistémica.
De Leo apuntó que
la corrupción no sólo incluye el abuso o el soborno, sino el ignorar o tolerar conductas delictivas. Añadió que a pesar de constatar que este problema es uno de los factores principales para la comisión del delito, los esfuerzos en el combate a la trata de personas
rara vez se enfocan en arrojar luz sobre la corrupción.
Durante el acto se hicieron recomendaciones para combatir el delito:
mapear a los actores claves, tales como el personal que trabaja en
lugares migratorios, fuerzas armadas, consulados, embajadas y personas
con influencias en departamentos gubernamentales; establecer alianzas
con entidades y personas relevantes como sector privado, medios de
comunicación y organizaciones de la sociedad civil; mejorar la
recopilación de datos; capacitar y concienciar sobre el problema a
funcionarios relevantes, entre otras.
Emir Olivares Alonso
Periódico La Jornada
Martes 1º de octubre de 2019, p. 13
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