Rosa Icela Rodríguez ante el congreso
Defiende estrategia pacificadora
No habrá impunidad
▲ La secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, compareció ayer ante el Congreso de la Ciudad de México.
Las agresiones y los actos de vandalismo cometidos en las
recientes movilizaciones públicas no quedarán impunes, afirmó en el
Congreso de la Ciudad de México la secretaria de Gobierno capitalina,
Rosa Icela Rodríguez Velázquez, donde defendió el cinturón de paz que se
estableció en la marcha por el 51 aniversario del movimiento
estudiantil de 1968 como estrategia para contener dichas conductas.
Al comparecer ante el pleno como parte de la glosa del Informe de
gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, la funcionaria aseguró que en estos
primeros 10 meses de gobierno se sentaron las bases estructurales para
emprender un cambio de fondo en la ciudad, el cual, dijo, no es proyecto
de una persona o partido político, sino la exigencia de millones de sus
habitantes que así lo expresaron en las urnas.
Sostuvo que
la principal es cero corrupcióny repitió el llamado a la ciudadanía que hizo la titular del Ejecutivo local el 17 de septiembre en este mismo recinto para que denuncie a los servidores públicos que actúen de otra manera.
Aseveró que ese cambio en sus oficinas del Zócalo está en que
no nos metemos con los bolsillos ni con el tiempo de los trabajadores; no se hacen acuerdos en lo oscurito y mucho menos se pide o se recibe dinero de ambulantes o de reclusorios por quebrantar la ley. Lo que sí hacemos en la Secretaría de Gobierno es trabajar en un contexto de pluralidad, respeto, inclusión y de derechos, convencida de que la política es el principal instrumento de transformación social de la ciudad.
En la sesión, que se extendió tres horas y a la que asistieron la
procuradora general de Justicia y diputada local con licencia, Ernestina
Godoy Ramos, y el titular de la Secretaría de la Contraloría General,
Juan José Serrano Mendoza, así como funcionarios de estructura de la
Secretaría de Gobierno, agradeció a los legisladores de Morena y PT, así
como a los servidores públicos y ciudadanos que participaron el
miércoles en el cinturón de paz, el cual, dijo, logró contener la
violencia, agresiones y provocaciones de un reducido grupo.
Defendió la estrategia al señalar que en muchos países del mundo existen cuerpos de paz, y agregó que
quien ejerce el servicio público con convicción, honestidad y amor a la ciudad se pone la camiseta.
Destacó que la mayoría de las personas que acudieron a la
movilización lo hizo en forma pacífica, y contra la actuación de dicho
grupo minoritario; “se venció al autoritarismo y la represión y se
demostró que hay otra forma de gobernar.
A los ciudadanos que optan por la movilización y la protesta como forma de expresión y exigencia de sus demandas, decirles que el gobierno siempre tiene abiertas las puertas de la concertación, que las reglas son claras y que nuestras armas son el diálogo, la razón y la atención a la demanda ciudadana, pero quiero enfatizar que quienes buscan transgredir el marco legal y la convivencia pacífica deben ser responsables de sus actos ante la sociedad y ante la justicia, porque tampoco habrá impunidad, apuntó.
Si bien reconoció que la Ciudad de México, como centro político
nacional, es el principal espacio para la expresión de las ideas,
cuestionó la
indolenciaen algunas entidades para atender los reclamos a problemas de su población.
Al empezar su mensaje, Rodríguez Velázquez resaltó que por primera
vez la ciudad es gobernada por una mujer electa por el voto popular y
tiene un gabinete paritario que refleja la capacidad de las mujeres en
los asuntos públicos. Agregó que también por
primera vez la gobernabilidad se sostiene mediante el diálogo, la razón y la ley. La conducción de la política interior se ha basado en la construcción de acuerdos y consensos.
Reiteró que se ha desterrado la corrupción que permeaba en algunas
áreas de la administración y se están erradicando vicios para construir
una mejor ciudad para todos,
habitable, segura y sustentable.
No obstante, observó que en una época de transformación, para pasar a
otros estadios de fortalecimiento de la convivencia y la civilidad,
se requiere la participación de todos, porque para que todo cambie, todos tenemos que cambiar.
Foto Marco Peláez
Ángel Bolaños Sánchez
Periódico La Jornada
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