AMLO culmina hoy una gira. En 26 días 39 asambleas en todas las capitales y varias ciudades mayores. A pesar del calor ardiente acudieron multitudes: casi 500 mil asistentes. Un esfuerzo singular, al más puro estilo obradorista, pocos recursos, sin acarreados, buena logística. No fue una gira prelectoral sino la evaluación sistemática del crecimiento del Morena en todo el país.
La mayoría de los medios no reportaron mayor cosa. Es una conspiración del silencio. En México no hay respeto al derecho a la información, la agenda es impuesta por los grupos de interés, el PRI y el PAN, el gobierno y el dinero.
Desde hace siete años hay una campaña para aniquilar a AMLO. Su fracaso es estruendoso. La gente acude para manifestarse y hacer patente su nivel de organización. Las asambleas son ejercicios de rendición de cuentas. Los ciudadanos se agrupan para protestar por los agravios, pero no se quedan ahí: se comprometen. Muestran la dignidad que les niegan los políticos corruptos. Como dice Stephane Hessel: la indignación no basta, se requiere compromisos y organización.
En cada mitin AMLO se refiere a algunos asuntos concretos, pero su discurso se orienta a una propuesta: ¡Hay que salvar a México!
¿De qué queremos salvar a México? Desde una perspectiva histórica, no hay duda que el país vive una declinación progresiva desde hace 30 años. Están empeorando las condiciones de vida, la economía, la violencia. Estamos perdiendo autodeterminación. De mantenerse esta inercia pondríamos en peligro la paz e incluso la integridad y la independencia de México.
Pero la historia no está dominada por la fatalidad –como afirma Alberto Montoya–: es el resultado de nuestras decisiones. La conciencia de la descomposición hace despertar al pueblo y éste puede realizar acciones inéditas y transformadoras.
Morena es hasta hoy el único movimiento capaz de proponer a esta generación de mexicanos un verdadero proyecto nacional incluyente. Pero el tiempo se estrecha: nos quedan menos de 400 días para madurar y triunfar en las elecciones de 2012.
joseaorpin@hotmail.com
La mayoría de los medios no reportaron mayor cosa. Es una conspiración del silencio. En México no hay respeto al derecho a la información, la agenda es impuesta por los grupos de interés, el PRI y el PAN, el gobierno y el dinero.
Desde hace siete años hay una campaña para aniquilar a AMLO. Su fracaso es estruendoso. La gente acude para manifestarse y hacer patente su nivel de organización. Las asambleas son ejercicios de rendición de cuentas. Los ciudadanos se agrupan para protestar por los agravios, pero no se quedan ahí: se comprometen. Muestran la dignidad que les niegan los políticos corruptos. Como dice Stephane Hessel: la indignación no basta, se requiere compromisos y organización.
En cada mitin AMLO se refiere a algunos asuntos concretos, pero su discurso se orienta a una propuesta: ¡Hay que salvar a México!
¿De qué queremos salvar a México? Desde una perspectiva histórica, no hay duda que el país vive una declinación progresiva desde hace 30 años. Están empeorando las condiciones de vida, la economía, la violencia. Estamos perdiendo autodeterminación. De mantenerse esta inercia pondríamos en peligro la paz e incluso la integridad y la independencia de México.
Pero la historia no está dominada por la fatalidad –como afirma Alberto Montoya–: es el resultado de nuestras decisiones. La conciencia de la descomposición hace despertar al pueblo y éste puede realizar acciones inéditas y transformadoras.
Morena es hasta hoy el único movimiento capaz de proponer a esta generación de mexicanos un verdadero proyecto nacional incluyente. Pero el tiempo se estrecha: nos quedan menos de 400 días para madurar y triunfar en las elecciones de 2012.
joseaorpin@hotmail.com
Antes de jubilarse a finales de junio como secretario del Pentágono, Bob Gates, anterior director de la CIA especializado en temas soviéticos, ha realizado una serie de trascendentales pronunciamientos estratégicos que reflejan el ajuste de la nueva política militar de EU y la dinámica del nuevo orden mundial multipolar.
Nada hay, a nadie se investiga. No, es negativo. Declaró con dobles negativos la procuradora general de la República: Nosotros no tenemos nada ahorita. Y ahorita no investigan a ex gobernador priísta alguno. Nada de consignar al pasado para eludir el futuro. Pero en Tijuana detenía el Ejército a Jorge Hank Rhon, el del hipódromo de Agua Caliente, los casinos, el gusto por los animales exóticos y el legado de la fama que lo llevó a ser alcalde de Tijuana de 2003 a 2006: Un político pobre es un pobre político, decía su padre, el profesor Carlos Hank González.
De pronto los desmemoriados panistas se acordaron de la frase del profesor. Los priístas favorecidos por el desastre de la década azul nada aprendieron de los motivos del lobo. Creyeron que al descarriársele el rebaño a Felipe de Jesús Calderón la junta de pastores resultaría en el proverbial cordero muerto. Cordero lechal, si atendían los despropósitos del joven heredero designado; a los 6 mil pesos mensuales con los que todo pueden los mexicanos hoy, felices habitantes de un país que no es pobre. Aunque al fin haya tenido que corregir el verbo el Cordero de las finanzas para aclarar que somos país de ingresos medios y tenemos un serio problema con los pobres que aquí están y se multiplican.
De pronto los desmemoriados panistas se acordaron de la frase del profesor. Los priístas favorecidos por el desastre de la década azul nada aprendieron de los motivos del lobo. Creyeron que al descarriársele el rebaño a Felipe de Jesús Calderón la junta de pastores resultaría en el proverbial cordero muerto. Cordero lechal, si atendían los despropósitos del joven heredero designado; a los 6 mil pesos mensuales con los que todo pueden los mexicanos hoy, felices habitantes de un país que no es pobre. Aunque al fin haya tenido que corregir el verbo el Cordero de las finanzas para aclarar que somos país de ingresos medios y tenemos un serio problema con los pobres que aquí están y se multiplican.
Perú a las urnas: Las elecciones en Perú es la noticia más destacada o, por lo menos, una de las más importantes, en casi todos los principales diarios latinoamericanos. A pesar de la prohibición legal de hacer campaña electoral en vísperas de los comicios, los diarios peruanos El Comercio y, sobre todo, Expreso, hacen todo lo posible por conseguir algún voto de última hora para Keiko Fujimori llegando al extremo, el segundo de ellos, de sostener simultáneamente que la campaña de Humala fue financiada por el narcotráfico y por Venezuela. El Nacional, de Venezuela, que no es chavista, informa que Ollanta Humala desmintió categóricamente el apoyo financiero de Caracas. Los diarios bolivianos, por razones de proximidad geográfica y por la importancia de las relaciones entre Bolivia y Perú, también atribuyen importancia a la elección presidencial, como La Razón o Los Tiempos. El oficialista Cambio, por ejemplo, informa sobre una encuesta privada que daría tres puntos de ventaja a Humala sobre Keiko Fujimori, mientras que los chilenos El Mercurio y La Tercera, al igual que El Comercio de Lima, dicen que Humala prometió indultar por enfermedad al ex presidente Alberto Fujimori, y Keiko Fujimori declaró que si llegase a ganar las elecciones a su gobierno no volverían la corrupción y el robo que caracterizaron el mandato de su padre, condenado precisamente por esos delitos y por múltiples asesinatos.
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Los franceses se quejan de que aún no se ha legislado en su país, como en Inglaterra y Estados Unidos, imponiendo pulseras de vigilancia y avisos explícitos a los vecinos de pedófilos o pederastas liberados bajo fianza o al final de sus condenas.
El tema regresa regularmente a la plaza pública, pero en esta ocasión lo desencadenó el caso de un violador de 27 años que abusó de niños y niñas, incluido un bebé de tres meses, provocando el 22 de mayo pasado su casi linchamiento en la ciudad de Teil, sur de Francia, justo antes de que lo llevaran a la prisión de Aviñón. Pues, habiendo sido contratado como cuidador de niños, por muchos padres y madres de familia de su entorno, se preguntan cómo fiarse de las personas a quienes confían sus hijos, incluidos los parientes –ya que el delincuente sexual empezó por abusar de sus propios sobrinos– cuando las penas que purgan suelen dejarlos libres en estado de volver a delinquir.
El tema regresa regularmente a la plaza pública, pero en esta ocasión lo desencadenó el caso de un violador de 27 años que abusó de niños y niñas, incluido un bebé de tres meses, provocando el 22 de mayo pasado su casi linchamiento en la ciudad de Teil, sur de Francia, justo antes de que lo llevaran a la prisión de Aviñón. Pues, habiendo sido contratado como cuidador de niños, por muchos padres y madres de familia de su entorno, se preguntan cómo fiarse de las personas a quienes confían sus hijos, incluidos los parientes –ya que el delincuente sexual empezó por abusar de sus propios sobrinos– cuando las penas que purgan suelen dejarlos libres en estado de volver a delinquir.
Cristina Pacheco: Mar de Historias
Los hombres comparten una banca en el área sombreada del jardín. El del extremo izquierdo lleva camiseta a rayas, pantalón holgado y un voluminoso llavero en la pretina. El que ocupa la otra orilla tiene la barba crecida, viste ropa formal y a cada momento se acomoda el cuello de la camisa ajada. Una mujer al pasar le sonríe y lo saluda por su nombre: Que tenga bonito día, Eduardo. Sin mirarla, el aludido agita la mano y vuelve a inclinarse sobre el periódico. Su vecino se recorre en la banca:
Caravana por la Paz: escuchar y atender los reclamos
La Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad, que arrancó ayer en Morelos y concluirá el próximo 10 de junio en la martirizada Ciudad Juárez –donde organizaciones de la sociedad habrán de suscribir un pacto cívico–, marca un punto de quiebre importante en el encauzamiento y la definición de los reclamos expresados en la marcha ciudadana del pasado 8 de mayo por un vasto y diverso segmento de la sociedad, y en la conversión de esa manifestación amplia y plural, pero espontánea, en un movimiento social.Continuar
El Correo Ilustrado
Acuerdo Calderón-Gordillo, traición añeja a maestros
El compromiso de Elba Esther Gordillo con Felipe Calderón para establecer una evaluación universal a los maestros, basada en el puntaje que los alumnos de éstos obtengan en la rasante y muy objetada prueba Enlace, es una vuelta de tuerca más a la política entreguista de la aún dirigente del SNTE, cuya traición a los maestros no es de hoy, sino que viene desde que Carlos Salinas la impuso en el cargo hace ya casi 20 años. Se pactó entonces la fracasada descentralización educativa, que urge se corrija, pues regatea recursos federales a los Estados sin ampliar sus facultades fiscales ni pedagógicas y favorece una mayor opacidad y corrupción, como lo denuncia, con impotencia, la Auditoría Superior de la Federación. Se implantó, en fin, una carrera magisterial excluyente que todavía no abarca ni siquiera al 50 por ciento de los docentes y que ahora se pretende modificar no para incluir en ella, como se debiera, a la mitad que falta, sino para restar beneficios a los que la cursan. Por otra parte, la evaluación a los maestros, manejada por una burocracia conservadora y servil, debe ser transferida a un sistema de consejos autónomos y ligados a las comunidades educativas, que también juzguen a las autoridades. Ese fue el espíritu de la ley de José Vasconcelos, fundador de una Secretaría de Educación mejor que la que hoy cumple 90 años.Continuar
Toda legislación antimonopolios tiene, como un principio fundamental, frenar los abusos de los negociantes en perjuicio de la población consumidora y, desde luego, permitir también que el acaparamiento no llegue al extremo de impedir a otros negociantes ofrecer sus productos o servicios, vale decir, que impida la libre competencia en la oferta de tales bienes. Nosotros tenemos un artículo constitucional, el 28, que prohíbe los monopolios y, equivocadamente, define a las empresas estatales como no monopólicas. Éstas, a final de cuentas, son monopolios permitidos por la Carta Magna. Pero ésa es otra cuestión.
La economía mexicana se ha desarrollado, desde los años ochenta, como una economía, esencialmente, monopólica y más todavía desde la época de Salinas. Hoy, no más de 300 grupos dominan esa economía y los demás productores les están subordinados. Cuando nuestra legislación antimonopolios adquiere relevancia es sólo cuando dos de esos 300 monopolios chocan entre sí, pero jamás cuando se alega un perjuicio a la población consumidora y, muy pocas veces, cuando competidores menores aducen derechos legítimos. El 28 es letra muerta y más en tratándose de las empresas públicas, hoy totalmente desmanteladas o entregadas a los privados en los vitales servicios y productos que ofrecían.
La economía mexicana se ha desarrollado, desde los años ochenta, como una economía, esencialmente, monopólica y más todavía desde la época de Salinas. Hoy, no más de 300 grupos dominan esa economía y los demás productores les están subordinados. Cuando nuestra legislación antimonopolios adquiere relevancia es sólo cuando dos de esos 300 monopolios chocan entre sí, pero jamás cuando se alega un perjuicio a la población consumidora y, muy pocas veces, cuando competidores menores aducen derechos legítimos. El 28 es letra muerta y más en tratándose de las empresas públicas, hoy totalmente desmanteladas o entregadas a los privados en los vitales servicios y productos que ofrecían.
Mario Vargas Llosa tiene fama no sólo de buen escritor, sino también de mal político. Sin embargo, es muy bueno para caracterizar contextos políticos con una frase lapidaria, como aquella de la dictadura perfecta en referencia al PRI de los años 80, o la actual situación que vive Perú, que tiene que elegir entre el cáncer de Ollanta Humala o el sida de Keiko Fujimori.
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En enero, los países de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) tenían reservas de petróleo crudo equivalentes al 5 por ciento de la demanda mundial. Era un monto holgado, que permitía que no se dispararan los precios. Pero eso no duraría mucho.Continuar
Después de los años de contrición del gobierno del presidente De la Madrid, que parecían interminables, la sociedad mexicana se descubrió llena de gente y comunidades pobres. Al espectro de la marginalidad que el presidente Lopez Portillo reconoció como falla mayor del régimen revolucionario, se unía entonces el del empobrecimiento de vastos grupos urbanos y semirrurales que encontraron eco y liderazgo en Cuauhtémoc Cárdenas y sus compañeros del FDN. A este reclamo social y republicano quiso dar cauce y respuesta el programa nacional de Solidaridad del presidente Salinas, acosado por cargos de ilegitimidad a la vez que empeñado en una profunda reforma de mercado que apurara la entrada de México en la globalidad, que se veía entonces como única y sin opciones.Continuar
Silvio Berlusconi, el hombre más rico de Italia y zar de la televisión y de los medios de comunicación, entre tantas otras cosas, está en el momento más difícil de su carrera empresarial y política que comenzó, según las acusaciones que se le hacen, como prestanombres de la mafia en el ramo de la construcción y como protegido del gran corrupto y corruptor Bettino Craxi, quien debió morir en el exilio para no acabar sus días en una cárcel italiana. En efecto, Berlusconi enfrenta procesos por corrupción, desvío de fondos, abuso de poder, promoción de la prostitución, corrupción de menores, prevaricación y negocios fraudulentos, y varios otros delitos, y si perdiese la inmunidad derivada de su cargo de primer ministro (y de leyes ad hoc votadas por sus servidores para mantenerlo fuera de los tribunales) podría ir a la cárcel o seguir el camino al exilio emprendido por su precursor y padrino Bettino Craxi.Continuar
De nuevo el fatídico 5 de junio, concretando 44 años de ocupación. Terrible y última ocupación de los tiempos modernos, condenada internacionalmente. Una ocupación basada en el uso abundante de tecnología militar por parte de un Estado, en el robo de tierra a un pueblo y en instalarse durante 44 años a como dé lugar, confiscando las tierras por la fuerza de las armas y trayendo emigrantes de las cuatro esquinas del mundo para asentarse en contra del derecho internacional, poniendo a su servicio los recursos naturales e hídricos. Una colonización que controla la vida de las personas impidiendo cualquier progreso social, así como el desarrollo de sus recursos y privándolas de todas sus libertades día a día, y ni hablar de lo que respecta a la educación y al tránsito de personas, controlado a través de 650 puestos de control militar fijos, además de los flotantes, entre todas las ciudades y aldeas, que hacen de cada una de ellas una prisión a cielo abierto. Una colonización que se manifiesta por el cerco de más de 2 millones de personas en la franja de Gaza, sujetas a una política de hambre, con el abastecimiento de electricidad controlado, así como el combustible, los medicamentos y sus propias vidas, por invasiones diarias de ciudades de Cisjordania, que aumentan los prisioneros y los muertos, por el robo de tierra para la construcción de asentamientos y las autopistas que los unen, construcciones que llevan a la tala de cientos de miles de árboles y a la demolición de decenas de miles de casas.
En otras ocasiones hemos hablado de Regina Coeli, uno de los templos más bellos de la ciudad, que fue parte de un gran convento. Se encuentra en la calle de Bolívar, antes llamada en ese tramo Estampa de Regina. Lo fundaron en 1573 diez monjas que salieron del convento de La Concepción, el más antiguo de la ciudad. A raíz de las leyes de exclaustración de los bienes religiosos, el convento se destinó a cuartel y ministerio de la defensa hasta 1886, en que la opulenta y caritativa dama de origen guanajuatense, doña Concepción Béistegui, dejó parte de su fortuna para fundar un hospital que llevó su nombre.
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Carlos Bonfil: Los amores imaginarios
La sentencia No hay mayor verdad en el mundo que el delirio amoroso, del dramaturgo francés Alfred de Musset, sirve de epígrafe a Los amores imaginarios (Les amours imaginaires, 2010), segundo largometraje de Xavier Dolan, brillante revelación del cine canadiense francófono. En su debut fílmico, Yo maté a mi madre (J’ai tué ma mère, 2009), el cineasta de apenas 20 años, antiguo actor infantil, apasionado de decoración de interiores y de vestuario, había ensayado la autoficción, esa inmersión narrativa en la gratificación narcisista que tantos adeptos ha cobrado en literatura desde los exitosos relatos de Michel Houellebecq y la proliferación de los blogs y el Facebook, esas vitrinas del ego y de la catarsis individual vuelta espectáculo.
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Sara SefchovichLujambio y la lectura
Es licenciada y maestra en Sociología y doctora en Historia por la Universidad Nacional Autónoma de México. Desde hace tres d�...Más de Sara Sefchovich05 de junio de 2011
Leer es considerado positivo y se supone que por lo tanto todo el mundo lo debe hacer. Y, si no lo hace, se debe hacer que lo haga. El que tiene poder considera adecuado usarlo para este fin.
La idea de que leer es cosa buena nació en el siglo XIX y es de cuño liberal. Parte de la premisa de que a quienes leen les irá mejor en la vida. Por eso desde siempre, los encargados de la educación pública han considerado que es su tarea estimular la lectura, si bien algunos lo han hecho con más intensidad que otros. Hoy este es el mantra de nuestro secretario del ramo.
Quien ha pasado a nuestra historia como el más célebre impulsor de la lectura es Vasconcelos. Él mandó editar millones de libros de autores clásicos y encargó dos antologías, la de varones a los mejores escritores de entonces y la de niñas a la poeta chilena Gabriela Mistral y los hizo llegar a todos los rincones del país. Lujambio también manda imprimir libros, no tantos y no tan clásicos, pero además ha ido por otro lado: en los planes escolares ha decidido, así sin más y de la noche a la mañana, obligar a los padres a leer 20 minutos al día con sus hijos.
Los dos caminos son equivocados. El segundo, porque siempre han existido padres que leen con sus hijos, pero no veo con qué gusto alguien que no quiere o que está cansado porque trabajó todo el día lo va a hacer porque el secretario decidió. No veo mejor vacuna contra la lectura que ésta.
Y sobre los materiales seleccionados, pues lo menos fuerte que se puede decir es que los criterios para hacerlo están equivocados. Por ejemplo: las novelas cortas elegidas para el bachillerato lo fueron sobre la base de que sus autores eran conocidos para el secretario. Y supongo también, que sobre la base de algunas relaciones personales. Esto lo digo porque en entrevista con el diario El País, el señor Antonio Navalón, un español que anda mucho por México y se ha amigado con varios poderosos, cuenta cómo logró venderle a los maestros un millón y medio de ejemplares de El Quijote. ¿A cuenta de qué se necesitaba un intermediario para ese libro? Y además relata que ya colocó uno de su autoría del que también le han comprado miles de ejemplares. ¿A cuenta de qué se decidió que ese es el que deben leer los maestros? Es decir, que los criterios de selección pasan por donde menos deben pasar.
De todos modos, ni a Vasconcelos le funcionó ni le ha funcionado después a la SEP conseguir que la gente lea, con todo y los tirajes de 100 mil ejemplares que se hicieron en algún sexenio pasado y que vendían en las esquinas, ni los de 500 mil que Elba Esther Gordillo le encargó a sus amigos intelectuales hace no mucho tiempo. Ni tampoco le va a funcionar ahora a Lujambio, sólo por una razón: porque leer no tiene que ver ni con la cultura mexicana tradicional ni con la actual. Es decir: leer no está entre las actividades que interesa hacer a la mayoría de los mexicanos.
El ejemplo contundente es este: en la edición pasada de la Feria del Libro de Guadalajara, la más importante del país, el libro más vendido fue El sueño del Celta y apenas bordeó los mil ejemplares (y eso que Vargas Llosa acababa de ganar el Nobel). Y los grandes best sellers nacionales, desde Luis Spota en su momento hasta Francisco Martín Moreno hoy, no pasan de unos cuantos cientos de miles de ejemplares.
Todo lo cual significa que leer es un valor sólo para unos cuantos, aunque algunos quieran convertirlo en valor nacional por decreto. Y eso no se puede. Pero claro, los poderosos creen que el mundo es y puede ser como ellos quieren.
En lugar de decirle a las personas lo que deben hacer y cómo, se podría pensar en ofrecerles algo que les pueda interesar, gustar o servir y dejarlos que se acerquen a ello si así lo desean. Eso pasó con los rincones de libros en las escuelas, idea excelente a la que no dejaron vivir. Además, hacer campañas para convencernos de que vale la pena leer, no para obligarnos. Pero ese trabajo no se consigue en un sexenio. Y otra característica de los poderosos es su falta de paciencia, pues les urge anunciar que triunfaron en sus propósitos.
sarasef@prodigy.net.mx
Escritora e investigadora en la UNAM
Sandra LorenzanoEn busca del cuento perdido
...Más de Sandra Lorenzano05 de junio de 201158 lecturas
Claudia, que se sumó apenas en marzo, escribió: “Ha cambiado mi relación con la literatura. Hasta saqué la credencial de la Biblioteca Vasconcelos sólo para tener acceso a más libros”. Vicente, un señor mayor que desde el primer programa me mandó sus colaboraciones, se ha vuelto indispensable; cada semana me llegan sus maravillosos cuentos, y se entusiasmó tanto que entró a un taller de narrativa. También hay mensajes dolorosos. Anoche recibí uno, viene de Ciudad Juárez y lo mandó Martín que, aun sin quererlo, semanalmente me va contando lo que sucede en aquella lastimada ciudad. “No puedo mandarle el cuento que pidió sobre ‘sueños’, me despertaron antes de poder soñar”, escribió sacudido, triste e indignado por el encarcelamiento de la maestra a la que le sembraron mariguana. Hay dos hermanitas adolescentes que son una presencia constante en actividades culturales de todo tipo gracias a que alguna vez, moviendo el dial llegaron al programa, y por alguna razón se quedaron. Hay chavos que apuestan con sus amigos para ganarse los libros que damos a quienes contestan la trivia. He recibido mensajes de oficinistas que no siempre pueden escuchar la media hora completa y buscan luego los podcast. Tengo un par de colaboradores en Los Ángeles que escriben sobre su experiencia de migrantes. Me mandan cuentos amas de casa, estudiantes, una mamá joven que nos escucha mientras su bebé duerme y que es impresionantemente talentosa. En fin… No creo que el rating sea demasiado alto, pero lo que sí puedo asegurar es que hemos creado una comunidad entrañable, un grupo de amigos que a pesar de no conocerse ha generado fuertes redes de complicidad y afecto. Tendrían que ver ustedes los abrazos inmensos que nos damos si por alguna circunstancia llegan a cruzarse nuestros caminos. Como si fuéramos ya viejos amigos. Porque en realidad somos ya viejos amigos.
Seguramente muchos se prguntarán de qué estoy hablando. De “En busca del cuento perdido”, el programa de radio que inventamos en charlas maravillosamente intensas y delirantes con Ana Cecilia Terrazas y su equipo del IMER. Teníamos un deseo compartido: crear un nuevo espacio para la literatura. La consigna era que no se pareciera a los que ya existen (que no son muchos en el país, hay que decirlo). No descubrimos el hilo negro, de eso estoy segura, pero sí decidimos hacer algo poco frecuente en radio: un taller literario, porque soy de las personas que creen que la lectura y la escritura van juntas. Así, en cada programa hablamos de un escritor, o de un tema específico, o de una corriente literaria, leemos fragmentos de obras, y luego le pedimos a la gente a que nos mande sus cuentos. Cada semana seleccionamos un par de esos textos, los leemos al aire y los comentamos. La invitación que hacemos no es a que todos se vuelvan “profesionales” de la escritura, sino a que se animen a contar una historia. Porque ¿quién no tiene una historia que contar? Y – lo que es mejor aun – todos podemos contarla.
Tengo que confesarles que a mí el programa me ha cambiado la vida. Cada lunes siento maripositas en el estómago antes de salir al aire. Soy feliz leyendo los cuentos que me mandan. Soy feliz viendo que la gente se suma con entusiasmo a una propuesta que lo único que busca es generar un espacio de diálogo y creatividad. Quizás de eso se trate todo: de ir encontrando espacios donde poder compartir nuestras historias, nuestros miedos, nuestras pasiones, a través del amor a las palabras y la complicidad del cariño.
Invitación: “En busca del cuento perdido” se transmite por Horizonte 107.9 FM y por varias estaciones del IMER en el resto del país. También pueden escucharlo en www.horizonte.imer.gob.mx.
El jueves 9 de junio a las 18:00 hrs. celebraremos nuestro programa de aniversario. Me encantaría que nos acompañaran. Si me mandan un mensajito a enbuscadelcuento@yahoo.com.mx les doy los detalles.
Es licenciada y maestra en Sociología y doctora en Historia por la Universidad Nacional Autónoma de México. Desde hace tres d�...Más de Sara Sefchovich05 de junio de 2011
Leer es considerado positivo y se supone que por lo tanto todo el mundo lo debe hacer. Y, si no lo hace, se debe hacer que lo haga. El que tiene poder considera adecuado usarlo para este fin.
La idea de que leer es cosa buena nació en el siglo XIX y es de cuño liberal. Parte de la premisa de que a quienes leen les irá mejor en la vida. Por eso desde siempre, los encargados de la educación pública han considerado que es su tarea estimular la lectura, si bien algunos lo han hecho con más intensidad que otros. Hoy este es el mantra de nuestro secretario del ramo.
Quien ha pasado a nuestra historia como el más célebre impulsor de la lectura es Vasconcelos. Él mandó editar millones de libros de autores clásicos y encargó dos antologías, la de varones a los mejores escritores de entonces y la de niñas a la poeta chilena Gabriela Mistral y los hizo llegar a todos los rincones del país. Lujambio también manda imprimir libros, no tantos y no tan clásicos, pero además ha ido por otro lado: en los planes escolares ha decidido, así sin más y de la noche a la mañana, obligar a los padres a leer 20 minutos al día con sus hijos.
Los dos caminos son equivocados. El segundo, porque siempre han existido padres que leen con sus hijos, pero no veo con qué gusto alguien que no quiere o que está cansado porque trabajó todo el día lo va a hacer porque el secretario decidió. No veo mejor vacuna contra la lectura que ésta.
Y sobre los materiales seleccionados, pues lo menos fuerte que se puede decir es que los criterios para hacerlo están equivocados. Por ejemplo: las novelas cortas elegidas para el bachillerato lo fueron sobre la base de que sus autores eran conocidos para el secretario. Y supongo también, que sobre la base de algunas relaciones personales. Esto lo digo porque en entrevista con el diario El País, el señor Antonio Navalón, un español que anda mucho por México y se ha amigado con varios poderosos, cuenta cómo logró venderle a los maestros un millón y medio de ejemplares de El Quijote. ¿A cuenta de qué se necesitaba un intermediario para ese libro? Y además relata que ya colocó uno de su autoría del que también le han comprado miles de ejemplares. ¿A cuenta de qué se decidió que ese es el que deben leer los maestros? Es decir, que los criterios de selección pasan por donde menos deben pasar.
De todos modos, ni a Vasconcelos le funcionó ni le ha funcionado después a la SEP conseguir que la gente lea, con todo y los tirajes de 100 mil ejemplares que se hicieron en algún sexenio pasado y que vendían en las esquinas, ni los de 500 mil que Elba Esther Gordillo le encargó a sus amigos intelectuales hace no mucho tiempo. Ni tampoco le va a funcionar ahora a Lujambio, sólo por una razón: porque leer no tiene que ver ni con la cultura mexicana tradicional ni con la actual. Es decir: leer no está entre las actividades que interesa hacer a la mayoría de los mexicanos.
El ejemplo contundente es este: en la edición pasada de la Feria del Libro de Guadalajara, la más importante del país, el libro más vendido fue El sueño del Celta y apenas bordeó los mil ejemplares (y eso que Vargas Llosa acababa de ganar el Nobel). Y los grandes best sellers nacionales, desde Luis Spota en su momento hasta Francisco Martín Moreno hoy, no pasan de unos cuantos cientos de miles de ejemplares.
Todo lo cual significa que leer es un valor sólo para unos cuantos, aunque algunos quieran convertirlo en valor nacional por decreto. Y eso no se puede. Pero claro, los poderosos creen que el mundo es y puede ser como ellos quieren.
En lugar de decirle a las personas lo que deben hacer y cómo, se podría pensar en ofrecerles algo que les pueda interesar, gustar o servir y dejarlos que se acerquen a ello si así lo desean. Eso pasó con los rincones de libros en las escuelas, idea excelente a la que no dejaron vivir. Además, hacer campañas para convencernos de que vale la pena leer, no para obligarnos. Pero ese trabajo no se consigue en un sexenio. Y otra característica de los poderosos es su falta de paciencia, pues les urge anunciar que triunfaron en sus propósitos.
sarasef@prodigy.net.mx
Escritora e investigadora en la UNAM
Sandra LorenzanoEn busca del cuento perdido
...Más de Sandra Lorenzano05 de junio de 201158 lecturas
Claudia, que se sumó apenas en marzo, escribió: “Ha cambiado mi relación con la literatura. Hasta saqué la credencial de la Biblioteca Vasconcelos sólo para tener acceso a más libros”. Vicente, un señor mayor que desde el primer programa me mandó sus colaboraciones, se ha vuelto indispensable; cada semana me llegan sus maravillosos cuentos, y se entusiasmó tanto que entró a un taller de narrativa. También hay mensajes dolorosos. Anoche recibí uno, viene de Ciudad Juárez y lo mandó Martín que, aun sin quererlo, semanalmente me va contando lo que sucede en aquella lastimada ciudad. “No puedo mandarle el cuento que pidió sobre ‘sueños’, me despertaron antes de poder soñar”, escribió sacudido, triste e indignado por el encarcelamiento de la maestra a la que le sembraron mariguana. Hay dos hermanitas adolescentes que son una presencia constante en actividades culturales de todo tipo gracias a que alguna vez, moviendo el dial llegaron al programa, y por alguna razón se quedaron. Hay chavos que apuestan con sus amigos para ganarse los libros que damos a quienes contestan la trivia. He recibido mensajes de oficinistas que no siempre pueden escuchar la media hora completa y buscan luego los podcast. Tengo un par de colaboradores en Los Ángeles que escriben sobre su experiencia de migrantes. Me mandan cuentos amas de casa, estudiantes, una mamá joven que nos escucha mientras su bebé duerme y que es impresionantemente talentosa. En fin… No creo que el rating sea demasiado alto, pero lo que sí puedo asegurar es que hemos creado una comunidad entrañable, un grupo de amigos que a pesar de no conocerse ha generado fuertes redes de complicidad y afecto. Tendrían que ver ustedes los abrazos inmensos que nos damos si por alguna circunstancia llegan a cruzarse nuestros caminos. Como si fuéramos ya viejos amigos. Porque en realidad somos ya viejos amigos.
Seguramente muchos se prguntarán de qué estoy hablando. De “En busca del cuento perdido”, el programa de radio que inventamos en charlas maravillosamente intensas y delirantes con Ana Cecilia Terrazas y su equipo del IMER. Teníamos un deseo compartido: crear un nuevo espacio para la literatura. La consigna era que no se pareciera a los que ya existen (que no son muchos en el país, hay que decirlo). No descubrimos el hilo negro, de eso estoy segura, pero sí decidimos hacer algo poco frecuente en radio: un taller literario, porque soy de las personas que creen que la lectura y la escritura van juntas. Así, en cada programa hablamos de un escritor, o de un tema específico, o de una corriente literaria, leemos fragmentos de obras, y luego le pedimos a la gente a que nos mande sus cuentos. Cada semana seleccionamos un par de esos textos, los leemos al aire y los comentamos. La invitación que hacemos no es a que todos se vuelvan “profesionales” de la escritura, sino a que se animen a contar una historia. Porque ¿quién no tiene una historia que contar? Y – lo que es mejor aun – todos podemos contarla.
Tengo que confesarles que a mí el programa me ha cambiado la vida. Cada lunes siento maripositas en el estómago antes de salir al aire. Soy feliz leyendo los cuentos que me mandan. Soy feliz viendo que la gente se suma con entusiasmo a una propuesta que lo único que busca es generar un espacio de diálogo y creatividad. Quizás de eso se trate todo: de ir encontrando espacios donde poder compartir nuestras historias, nuestros miedos, nuestras pasiones, a través del amor a las palabras y la complicidad del cariño.
Invitación: “En busca del cuento perdido” se transmite por Horizonte 107.9 FM y por varias estaciones del IMER en el resto del país. También pueden escucharlo en www.horizonte.imer.gob.mx.
El jueves 9 de junio a las 18:00 hrs. celebraremos nuestro programa de aniversario. Me encantaría que nos acompañaran. Si me mandan un mensajito a enbuscadelcuento@yahoo.com.mx les doy los detalles.
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