Serpientes y Escaleras | Salvador García Soto
En un proceso inédito en el que por primera vez hay un enfrentamiento abierto y público entre los contendientes, el Partido Acción Nacional define, en la elección de su candidato presidencial, el futuro del grupo gobernante. Los calderonistas, con el control casi total del panismo, buscan refrendar su dominio y la incógnita es si los militantes blanquiazules aceptan o rechazan la apuesta por la continuidad en el poder del grupo de Felipe Calderón. Cada vez es más claro que esa apuesta recae en la persona de Ernesto Cordero y que al único precandidato que salió del gabinete lo harán crecer de cualquier manera porque representa ese proyecto de continuidad.
Esta semana encuestadoras afines a Los Pinos revelaron un crecimiento de Cordero que pasó —en una semana según esas empresas— de los 8 a los 16 puntos porcentuales, y aunque aún está lejos de Josefina Vázquez Mota y de Santiago Creel, que se mantienen entre los 25 y los 30%, es, afirman, el despunte del proyecto calderonista.
Poco a poco empezará a sentirse la fuerza del aparato que rodea a Ernesto Cordero y que se hizo evidente en la forma en que fueron “bajándose” los otros precandidatos. Alonso Lujambio, por ejemplo, se resistió hasta el último momento, incluso hubo, según cercanos, un amago de rebelión del titular de la SEP, que en una reunión en su casa, con su grupo más cercano, había decidido no acatar la instrucción de declinar y lanzarse por la libre desafiando a la cúpula.
Pero algo ocurrió —tal vez una llamada misteriosa como la que cambió votos en la Corte—, el caso es que Lujambio, igual que antes lo hicieran Javier Lozano, Heriberto Félix y después Emilio González, le cedió el paso al precandidato que hoy representa al grupo gobernante. ¿Cuál es entonces el papel de Josefina Vázquez Mota? A diferencia de Santiago Creel que jugará como candidato rebelde, la diputada con licencia está siendo utilizada por el presidente Calderón para crear una contienda interna real y desconocida hasta ahora para los panistas. Josefina seguirá hasta el final y le ha declarado ya la guerra a Cordero, con la celada de Guanajuato, y aunque puede ser un remoto plan B para Calderón, ella no es para nada la apuesta del grupo dominante
Así que asistimos al inicio de la marcha de Cordero, el precandidato que recibirá todo el apoyo del grupo político que gobierna, y poco a poco se verán señales inequívocas del respaldo que trae el ex secretario de Hacienda y de lo que se juega en su proyecto. La pregunta sigue siendo cómo responderán los panistas en una votación interna a la propuesta de continuidad del calderonismo.
EL PACTO DE LAS IZQUIERDAS
Como en el cuadro de “Las dos Fridas” que se miran ausentes y distantes pero al fin conectadas, los proyectos de Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard van por caminos distintos y no está claro si tendrán un punto de encuentro. Hasta ahora el acuerdo hecho por los dos políticos que disputan la candidatura de las llamadas “izquierdas” avanza según los tiempos pactados y se preparan para levantar, la primer semana de noviembre, las dos encuestas nacionales de las que, se dice, surgirá el candidato mejor posicionado ante la opinión pública.
En este momento los equipos de los precandidatos trabajan en redactar las preguntas consensuadas para las encuestas, y cada grupo elegirá a una empresa encuestadora de su confianza para levantar los sondeos. El público objetivo de la muestra, según lo acordado, será la población abierta sin importar si son o no militantes o simpatizantes de PRD, PT o Convergencia. Hasta ahí todo va según lo pactado.
Cada uno busca ganar con una ventaja mayor al margen de error de las encuestas para evitar dudas; sin embargo, la que persiste es si las partes acatarán el resultado si no les favorece. ¿Hay incentivos para que el perdedor acepte su desventaja en las encuestas? Sondeos internos del PRD, hechos recientemente, arrojan que más de un 70% de los encuestados dijeron esperar que cualquiera que pierda reconozca el resultado y apoye al ganador, y un porcentaje similar, casi del 80%, dijeron que no apoyarían a quien desconozca las encuestas. Es decir, desconocer una desventaja en las encuestas de la izquierda tendría un alto costo para el precandidato que no aceptara que perdió. ¿Será eso suficiente para alejar la tentación de la ruptura? ¿no era también altamente costoso tomar Paseo de la Reforma? Es pregunta.
NOTAS INDISCRETAS… Humberto Moreira niega estar sometido a presiones de los grupos priístas que busquen su salida. En la reunión del domingo 11 de septiembre, “todos los gobernadores le dieron su apoyo al dirigente” y que incluso varios de ellos propusieron firmar un desplegado de apoyo, dicen allegados al líder del PRI y añaden que el propio Enrique Peña Nieto fue quien pidió el respaldo y hasta una foto de todos los asistentes al encuentro con Moreira… Anoche, en un restaurante de Polanco, Alejandra Barrales brindaba y celebraba que ya lo logró; pero no la candidatura que busca al GDF sino el título de Maestra en Administración Pública por el INAP, de donde recién se graduó con la tesis La profesionalización de los órganos legislativos, el caso de la ALDF. Para lo otro seguirá esperando el brindis, a ver si llega... Un año prometió el gobernador César Duarte para tranquilizar Ciudad Juárez y Chihuahua en general, y el plazo se cumple hoy cuando rinda su primer informe de Gobierno. A ver qué reporta el gobernador, pero por lo pronto, en lo político el informe promete, pues hasta ayer había 22 gobernadores confirmados, además de las “estrellas” priístas Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones. También asisten Humberto Moreira y Emilio Gamboa. ¿Habrá algo más que cartel político?... Dados en la mesa. Doble escalera.
En un proceso inédito en el que por primera vez hay un enfrentamiento abierto y público entre los contendientes, el Partido Acción Nacional define, en la elección de su candidato presidencial, el futuro del grupo gobernante. Los calderonistas, con el control casi total del panismo, buscan refrendar su dominio y la incógnita es si los militantes blanquiazules aceptan o rechazan la apuesta por la continuidad en el poder del grupo de Felipe Calderón. Cada vez es más claro que esa apuesta recae en la persona de Ernesto Cordero y que al único precandidato que salió del gabinete lo harán crecer de cualquier manera porque representa ese proyecto de continuidad.
Esta semana encuestadoras afines a Los Pinos revelaron un crecimiento de Cordero que pasó —en una semana según esas empresas— de los 8 a los 16 puntos porcentuales, y aunque aún está lejos de Josefina Vázquez Mota y de Santiago Creel, que se mantienen entre los 25 y los 30%, es, afirman, el despunte del proyecto calderonista.
Poco a poco empezará a sentirse la fuerza del aparato que rodea a Ernesto Cordero y que se hizo evidente en la forma en que fueron “bajándose” los otros precandidatos. Alonso Lujambio, por ejemplo, se resistió hasta el último momento, incluso hubo, según cercanos, un amago de rebelión del titular de la SEP, que en una reunión en su casa, con su grupo más cercano, había decidido no acatar la instrucción de declinar y lanzarse por la libre desafiando a la cúpula.
Pero algo ocurrió —tal vez una llamada misteriosa como la que cambió votos en la Corte—, el caso es que Lujambio, igual que antes lo hicieran Javier Lozano, Heriberto Félix y después Emilio González, le cedió el paso al precandidato que hoy representa al grupo gobernante. ¿Cuál es entonces el papel de Josefina Vázquez Mota? A diferencia de Santiago Creel que jugará como candidato rebelde, la diputada con licencia está siendo utilizada por el presidente Calderón para crear una contienda interna real y desconocida hasta ahora para los panistas. Josefina seguirá hasta el final y le ha declarado ya la guerra a Cordero, con la celada de Guanajuato, y aunque puede ser un remoto plan B para Calderón, ella no es para nada la apuesta del grupo dominante
Así que asistimos al inicio de la marcha de Cordero, el precandidato que recibirá todo el apoyo del grupo político que gobierna, y poco a poco se verán señales inequívocas del respaldo que trae el ex secretario de Hacienda y de lo que se juega en su proyecto. La pregunta sigue siendo cómo responderán los panistas en una votación interna a la propuesta de continuidad del calderonismo.
EL PACTO DE LAS IZQUIERDAS
Como en el cuadro de “Las dos Fridas” que se miran ausentes y distantes pero al fin conectadas, los proyectos de Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard van por caminos distintos y no está claro si tendrán un punto de encuentro. Hasta ahora el acuerdo hecho por los dos políticos que disputan la candidatura de las llamadas “izquierdas” avanza según los tiempos pactados y se preparan para levantar, la primer semana de noviembre, las dos encuestas nacionales de las que, se dice, surgirá el candidato mejor posicionado ante la opinión pública.
En este momento los equipos de los precandidatos trabajan en redactar las preguntas consensuadas para las encuestas, y cada grupo elegirá a una empresa encuestadora de su confianza para levantar los sondeos. El público objetivo de la muestra, según lo acordado, será la población abierta sin importar si son o no militantes o simpatizantes de PRD, PT o Convergencia. Hasta ahí todo va según lo pactado.
Cada uno busca ganar con una ventaja mayor al margen de error de las encuestas para evitar dudas; sin embargo, la que persiste es si las partes acatarán el resultado si no les favorece. ¿Hay incentivos para que el perdedor acepte su desventaja en las encuestas? Sondeos internos del PRD, hechos recientemente, arrojan que más de un 70% de los encuestados dijeron esperar que cualquiera que pierda reconozca el resultado y apoye al ganador, y un porcentaje similar, casi del 80%, dijeron que no apoyarían a quien desconozca las encuestas. Es decir, desconocer una desventaja en las encuestas de la izquierda tendría un alto costo para el precandidato que no aceptara que perdió. ¿Será eso suficiente para alejar la tentación de la ruptura? ¿no era también altamente costoso tomar Paseo de la Reforma? Es pregunta.
NOTAS INDISCRETAS… Humberto Moreira niega estar sometido a presiones de los grupos priístas que busquen su salida. En la reunión del domingo 11 de septiembre, “todos los gobernadores le dieron su apoyo al dirigente” y que incluso varios de ellos propusieron firmar un desplegado de apoyo, dicen allegados al líder del PRI y añaden que el propio Enrique Peña Nieto fue quien pidió el respaldo y hasta una foto de todos los asistentes al encuentro con Moreira… Anoche, en un restaurante de Polanco, Alejandra Barrales brindaba y celebraba que ya lo logró; pero no la candidatura que busca al GDF sino el título de Maestra en Administración Pública por el INAP, de donde recién se graduó con la tesis La profesionalización de los órganos legislativos, el caso de la ALDF. Para lo otro seguirá esperando el brindis, a ver si llega... Un año prometió el gobernador César Duarte para tranquilizar Ciudad Juárez y Chihuahua en general, y el plazo se cumple hoy cuando rinda su primer informe de Gobierno. A ver qué reporta el gobernador, pero por lo pronto, en lo político el informe promete, pues hasta ayer había 22 gobernadores confirmados, además de las “estrellas” priístas Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones. También asisten Humberto Moreira y Emilio Gamboa. ¿Habrá algo más que cartel político?... Dados en la mesa. Doble escalera.
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