Estudiantes denuncian violencia cometida por docentes
Estudiantes de Sociología de la Universidad de Sonora, denunciaron la
falta de un protocolo de atención para atender el acoso y hostigamiento
sexual al interior del recinto universitario, luego de denunciar dos
casos de acoso y hostigamiento sexual por parte de un docente.
Integrantes de la colectiva Nosotras expresaron su preocupación,
inconformidad e indignación, ante los hechos que han vivido algunas de
sus compañeras, quienes, señalaron, fueron expuestas por algunos
académicos y carecen del respaldo de la institución educativa.
En cartelones que distribuyeron por distintos puntos de la Universidad,
las jóvenes expusieron la falta de un protocolo que atienda esta
problemática y les garantice una vida libre de violencia en los espacios
académicos, por lo que hicieron un llamado a todas las universitarias
que han sido víctimas de estos delitos para que denuncien y logren
impulsar cambios institucionales.
“Exigimos una universidad libre de violencia, sanción a los culpables y
un alto al encubrimiento e impunidad institucional que deja al
descubierto la simulación en cuanto a la supuesta promoción de un plan
para la igualdad y prevención contra la discriminación de género”,
concluyeron.
“El fenómeno ha tendido a crecer en la medida de la feminización de la matrícula en educación superior” agrega el académico.
Actualmente la Universidad de Sonora que hoy cumple 74 años, cuenta con
la Comisión de Asuntos Universitarios, pero ésta no tiene mecanismos
para atender el acoso sexual, por lo que hace falta crear una instancia
en la estructura universitaria que atienda este tipo de casos, opinó
Mora Arellano.
Para la doctora en Ciencias Sociales, Leyla Acedo Ung, ex empleada del
Instituto Nacional Electoral y quien denunció acoso sexual y laboral
cometido por su jefe, dijo que es indispensable que existan protocolos y
mecanismos para atender estos casos, pues las víctimas están
desprotegidas y no tienen a dónde acudir.
Acedo Ung agregó que también es importante la capacitación sobre este
tema a altos funcionarios y docentes, pues “de nada sirve tener
instancias si quienes toman las decisiones no están capacitados. El
acoso es una realidad por lo que se debe tener las vías o los canales
para que las estudiantes se sientan en confianza de denunciar y para
ceñirse a derecho”, señaló.
Comentó que en El Colegio de Sonora hay una Comisión de Honor y
Justicia, que recibe quejas y está facultada para resolver. Las
sanciones, explicó van desde la amonestación hasta la recisión de
contrato.
“La última palabra la tienen los órganos de decisión de la institución,
pero es importante que tenga facultades para investigar, pues si bien es
para varios temas, el acoso sexual está dentro de éstos”, dijo.
Para la estudiosa de la violencia de género en Sonora, una sanción
ejemplar para el acoso sexual en las instituciones de educación superior
debería ir más allá de la amonestación, medida meramente
administrativa, pues el acoso sexual es algo muy grave.
Fotos: Nosotras Colectiva Por: Silvia Núñez Esquer, corresponsal Cimacnoticias | Hermosillo, Son.-
No hay comentarios.:
Publicar un comentario