Pionera en México en brindar apoyo a mujeres agredidas
La
Asociación para el Desarrollo Integral de Personas Violadas A.C.
(Adivac), pionera en México en atender a víctimas de violencia sexual
con un enfoque de género y ejemplo para las instancias de gobierno,
celebró hoy en esta ciudad sus 25 años de trayectoria.
Antes de Adivac, que fundó la psicóloga Laura Martínez Rodríguez en 1990 para brindar atención psicológica especializada a víctimas de violencia sexual, nadie hablaba del tema, no era un problema que estuviera en las agendas públicas ni que los funcionarios supieran atender, dijo la académica Florinda Riker Fernández al participar en el acto conmemorativo de la organización en la sede de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal.
Cinco lustros después de la apuesta de formar Adivac –reconoció Riker Fernández a modo de homenaje a la organización–, la organización sigue siendo un referente para funcionarios y profesionales que se quieren especializar en cambiar la vida de las niñas y mujeres que fueron víctimas de violencia sexual.
En lo anterior coincidió Sergio Jaime Rochín del Rincón, presidente de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y presente en el evento, quien aseguró que esta asociación ha sido un ejemplo para las instituciones de gobierno, donde no existen los mecanismos para reparar las secuelas de la violencia sexual y tienen que retomar el trabajo de Adivac en la materia.
Por su parte, el activista Juan Martín Pérez García, director de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), señaló que uno de los aportes de la organización es trabajar desde el enfoque de derechos, especialmente en el caso de niñas y niños víctimas de esta violencia.
Expresó que el trabajo de Adivac se traduce en lograr que las víctimas de violencia sexual, para quienes se desatan una serie de consecuencias y violencias, puedan cambiar su historia y convertirse un día en sobrevivientes.
DURO CAMINO
Su fundadora, Laura Martínez, explicó a Cimacnoticias que la trayectoria de Adivac no ha sido la más fácil ni la más feliz, ya que en el camino han tenido que padecer carencias económicas y hasta amenazas como represalia por atender a las víctimas.
Sin embargo, su fundadora hoy se mostró feliz porque Adivac ha ido más lejos de lo que suponía, ya que con el tiempo consiguió brindar atención legal y médica, y porque ahora también es casa para profesionales que se quieren formar y especializar en la atención a víctimas de violencia sexual.
También celebra que día a día pueda seguir alimentando lo que para ella es el mayor de sus logros: volver a ver el brillo en los ojos de las víctimas de violencia, que poco a poco van superando el suceso y logran transformar sus vidas.
Los retos –aseguró Martínez– se multiplican para esta organización que desde 2001 –cuando Adivac ya era una instancia reconocida– atiende a la semana a por lo menos 400 personas, mientras que la demanda de víctimas se incrementa ante el auge de la violencia en la Ciudad de México, observó.
Por: Angélica Jocelyn Soto Espinosa
Cimacnoticias | México, DF.-
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