2. En
la historia de México nunca ha surgido un candidato presidencial de los
trabajadores, o que se declare abiertamente por ellos, a pesar de que
son el 90 por ciento de la población. Todos los candidatos
–especialmente del PRI y del PAN- han sido impulsados por la clase
empresarial millonaria, que no representan ni el uno por ciento de los
mexicanos, pero que es la que paga las campañas. Por ello todos los
candidatos, desde hace un siglo, sólo hablan de elecciones, de votos, de
democracia, justicia, libertad, en abstracto para que nadie entienda.
Por ello cuando asumen la Presidencia son a los empresarios a quienes
obedecen y sirven.
3. Por ello los trabajadores conscientes,
los que piensan y saben diferenciar, no participan votando en
elecciones, aunque por ignorancia u oportunismo algunos venden su voto
al PRI o al PAN, según la cantidad de dinero que reciban. Dicen: si
todos los políticos son iguales, si plantean y hacen lo mismo, pues hay
que estar con quien más dinero y regalos da por nuestro voto. Nunca un
partido o un candidato nos ha explicado el origen de nuestra miseria,
las causas de la explotación, nos han organizado para protestar y hacer
movimientos; mucho menos nos ha acompañado. Lo único que todos han hecho
es campaña pidiéndonos con mentiras su voto.
4. ¿Por qué vota
la población por el PRI y el PAN teniendo ante sus ojos que son los
partidos que los han robado, esquilmado, reprimido y asesinado? Porque
son los partidos del poder, los que más propaganda tienen, los que
entregan más regalos y promesas, los que gozan con amplitud los tiempos y
espacios en la TV, radio y prensa. ¿Qué hacen los otros partidos?, lo
mismo pero más barato y deficiente. ¿Cuándo algún candidato le ha
hablado a los trabajadores en concreto de la explotación que sufren, de
la miseria que viven por ser explotados por los capitalistas dueños de
sus empresas, del sistema capitalista concreto y del saqueo imperial?
5. En un tiempo AMLO uso como consigna: “Primero los pobres” y era
indudablemente correcta porque los pobres en México siguen siendo el 80
por ciento de la población y sólo el 18 por ciento de clase media y el
dos por ciento de ricos. Pero por presiones de estos últimos dejó de
hacerlo AMLO para alinearse al discurso de todos los partidos
registrados por el Instituto electoral (INE) ¿No es acaso el INE el
instrumento de la clase capitalista y del gobierno que sirve con sus
reglamentos para sancionar a partidos, políticos y elecciones? Se dice:
“El INE y la Constitución son como prostitutas que son violadas por
todos, pero sólo los amantes son perdonados”.
6. Los
trabajadores mexicanos y de todo el mundo son pacíficos, pero al mismo
tiempo son enemigos de las guerras, de las intervenciones y los saqueos.
Desean que todos los asuntos políticos se resuelvan con diálogo, con
acuerdos, con elecciones, pero al mismo tiempo observa que todo son
engaños, robos, imposiciones. López Obrador dice que sólo valen “las
elecciones y el pacifismo” como si la violencia de los ricos que
defienden su riqueza y poder no existiera. ¿No son acaso las fuerzas
armadas: ejército, marina, policía, los que bloquean las calles para
evitar las protestas pacíficas del pueblo? ¡La violencia siempre ha sido
del poder!
7. Yo nunca he votado porque las elecciones han
sido siempre una farsa inventada por la clase dominante para legalizar
lo que ella impone de antemano. El registro de partidos y políticos es
el control absoluto que realiza la burguesía para tenerlos sujetos. Si
López Obrador y Morena logran algunos márgenes de independencia en serio
y de manera consecuente, deben ser apoyados; pero si resulta más de lo
mismo (todo en función de los votos) seguiremos en búsqueda de otros
caminos observando y apoyando las luchas defensivas de nuestro pueblo.
No sé si deban pasar otros 50 o 100 años, pero poseo la convicción de
que el capitalismo será enterrado.
Blog del autor: http://pedroecheverriav.
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