Morena y el partido del sol azteca

Utopía



Eduardo Ibarra Aguirre

Casi al mismo tiempo que Andrés Manuel López Obrador insistía ante los delegados que optaron por transformar a Morena en partido político en que junto a todos sus integrantes “tienen la responsabilidad” de cuidarla, “actuar con honestidad, hacer a un lado la hipocresía, dejar fuera la politiquería e impedir los vicios del sistema político”, Jesús Zambrano le expresó vía Twitter sus “mejores deseos de que Morena efectúe sus trabajos para constituirse en un partido político”.
Del espectro partidista existente, es el de la Revolución Democrática el que en julio 2015 se verá más afectado por la incursión del Movimiento Regeneración Nacional en la arena de las elecciones, pues merced a una disposición jurídica impulsada por los legisladores del PRD, ningún partido nuevo puede acudir a las urnas por primera ocasión en alianza con otro, sino que solo refrendará o no su registro.
El sonorense otrora guerrillero cumple con los modales de la urbanidad política y la rutina verbal de subrayar las coincidencias entre los dos partidos e incluso augurar que Morena y el sol azteca podrán encontrar puntos de contacto.
El proyecto del gobierno de Enrique Peña que entrará en funciones dentro de 11 días –mismos que le quedan a Felipe Calderón para concluir una administración significada por el descrédito, la violencia y la muerte–, de incrementar sustantivamente la tasa del Impuesto al Valor Agregado y la reforma para “modernizar a Petróleos Mexicanos”, abriendo más aún las puertas a la inversión privada nacional y extranjera, son temas demasiado trascendentes y por ello mismo colocarán a Morena y al PRD –también al Partido del Trabajo y al Movimiento Ciudadano–, en un ancho camino para la unidad en la acción, si el partido que preside de Zambrano Grijalva no privilegia como acostumbra la negociación en el Congreso, llamada ahora “política moderna”, en demérito de la movilización de sus afiliados y votantes en la plaza pública.
Votantes perredistas que tendrán ocasión de ratificar o de rectificar el domingo 5 de julio de 2015, el sufragio que emitieron hace menos de cinco meses, qué tanto fue por el partido y/o por su candidato presidencial. Y sólo entonces cobrará sentido la expresión que ahora hace Zambrano para reivindicar al PRD “como la expresión más fuerte de la izquierda mexicana”. Todo indica que será a Marcelo Ebrard a quien corresponderá revalidar aquella condición o de plano el desplazamiento del perredismo a otro sitio.
De lo que no pareciera caber duda es que tras la obtención de su registro como partido político, Morena entrará a una disputa electoral no sólo para refrendar su condición de instituto registrado sino también para mutarse en el referente principal de unas izquierdas, ciertamente diversas, pero nucleadas actualmente por una dirigencia del PRD que todavía no es siquiera capaz de definir una política clara, a la vez que unitaria respecto al PT y el MC, frente a la toma de posesión de Peña Nieto el primer sábado de diciembre.
El arranque de Morena en el deportivo Plan Sexenal, con sus documentos básicos, las prácticas internas a las que con razón le asigna mucha importancia el tabasqueño de Macuspana, muestran que el nuevo partido dio sus primeros pasos con el pie izquierdo.
Colocar en el centro de la naciente institucionalidad partidista que “el único atractivo de pertenecer a esa organización será el reconocimiento de otros ciudadanos”, que se militará no “por cargos” sino “por encargos”, no suena nada mal. Aún esta por verse si el obradorismo como movimiento cabe en un partido. Ya está más que claro que el cardenismo de Cuauhtémoc no cupo en el partido del 6 de julio.
Acuse de recibo
Bajo el titular de “México no resistiría una reedición salinista”, Arcano Político, radio por internet, informó del “cuarto libro en general y el primero testimonial (de este escribidor), Remembranzas con 93 relatos (…) es un repaso de los (años) 20 a la muerte del periodista hidalguense Miguel Ángel Granados Chapa, con el importante segmente de testimonios de sus mayores sobre la vida política, económica y social de México”… Dice el preparatoriano Diego Alberto Prado Méndez: “Me gustó mucho el primero (A pedacitos)” de los relatos del libro digital… Ifigenia H., de Infococuac que dirige Lilia Cisneros, refiere: “Le dimos una leída, rápida, le haremos nuestros comentarios”… “En una primera y rápida ojeada se ve interesante”, augura el Kolectivo El Rebelde, de Mérida, Yucatán… Luis E. Aguilera González concluye: “Excelente, felicitaciones, lo leeré con mucha calma. Un abrazo y los felicito de verdad por este magnifico trabajo”… José “Mauro Saldaña Quiñónez, militante de la JCM (Juventud Comunista de México) en Nuevo León y de la izquierda toda su vida, se encuentra en su casa, aquejado de cáncer”, reportó Jesús Ibarra Salazar el 3 de noviembre. Ahora, día 19, Eduardo Esquivel Revilla comunica desde Mazatlán, Sinaloa, el fallecimiento del estimado Mauro. Mi más sentido pésame para sus familiares, compañeros y amigos.
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