2/13/2016

Teodora está condenada en El Salvador a treinta años de cárcel por haber alumbrado a un bebé muerto


El Salvador es uno de los seis únicos países del mundo que prohíben el aborto en cualquier circunstancia


Madrid, 09 febrero. 16. AmecoPress. En 2008 Teodora del Carmen Vásquez fue condenada en El Salvador a cumplir treinta años de prisión por homicidio agravado, tras el fallecimiento de su bebé al nacer. En El Salvador el aborto es considerado un delito, y las mujeres que sufren un aborto natural o mortinato son tachadas de sospechosas por las autoridades.
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Tal y como relata Teodora, tras sentir fuertes dolores abdominales llamó a los servicios de emergencia, pero al romper aguas quedó inconsciente. Al despertar, sangraba en abundancia y el bebé ya había nacido muerto. Sin recibir atención médica inmediata fue esposada por la policía y acusada de asesinato. Teodora niega haberle quitado la vida a su hijo, y alega que por falta de recursos económicos, a lo que se suma una jornada laboral de quince horas, le fue imposible asistir a los controles médicos.
Según fuentes de Amnistía Internacional, el juicio de la acusada estuvo plagado de irregularidades, no respetándose en ningún momento la presunción de inocencia. A su vez, la falta de recursos de la familia impidió recurrir a una buena defensa, quedando a expensas y en clara vulnerabilidad frente al dictamen de la justicia.
Más allá de la privación de libertad que implica la cárcel y las pésimas condiciones que viven las mujeres presas en países como El Salvador, Teodora sufre por los daños colaterales de la sentencia, viendo el dolor de su hijo, que ahora tiene doce años, al crecer sin una madre. La única esperanza que la queda es hacer un llamamiento internacional que permita revisar su caso para ser puesta en libertad.
La situación de El Salvador
El Salvadores uno de los seis únicos países del mundo que prohíben el aborto en cualquier circunstancia, considerándolo un delito incluso en los casos más extremos como la violación, el incesto, la malformación del feto o el riesgo para la vida de la embarazada. Esta realidad legal resulta paradójica al ser comparada con la situación de pobreza y abusos sexuales que existe en el país. A pesar de la falta de datos precisos emitidos por el Gobierno, se ha detectado que la mayoría de los abortos producidos en El Salvador corresponden a menores de dieciocho años. . Las últimas cifras oficiales destacan que el 57 por ciento de las mujeres, o desgraciadamente en muchos casos niñas, embarazadas de entre diez y diecinueve años fueron por causa de violación. En 2013 se interpusieron un total de 1.346 denuncias por violación, cifra que esconde a todas aquellas mujeres que no denunciaron por miedo, falta de recursos y desinformación.
Foto: Archivo AmecoPress tomada de la web www.amnesty.org
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Mujeres del mundo–Pobreza y género–Aborto ; 09 febrero. 16. AmecoPress

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