Foto: @Inmujeres
Ciudad de México. Durante las emergencia sanitaria
por el COVID-19, el gobierno federal garantizará atención para mujeres
víctimas de violencia; recursos económicos para trabajadoras del sector
informal; fijación del salario mínimo para trabajadoras del hogar ; y
servicios médicos para la Interrupción Legal del Embarazo.
Cimacnoticias platicó en entrevista con la titular del Instituto
Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman Zylbermann, al
respecto de las acciones federales que se requieren para evitar que la
contingencia sanitaria provocada por el COVID-19 impacte de manera
desigual en la población femenina.
El Inmujeres no participa directamente en el Consejo General de
Salubridad (que define el plan de acción para el COVID-19); sin embargo,
de acuerdo con Gasman, desde febrero pasado las diferentes dependencias
descentralizadas que integran la Secretaría de Gobernación (Segob)
conformaron un grupo interinstitucional en el que también participa el
sector salud para integrar la perspectiva de género en la atención de la
pandemia.
Producto de estas reuniones se definió trabajar en coordinación con
los gobiernos estatales y municipales para dar una respuesta integral,
“que por un lado de cuentas del impacto que va a tener la pandemia en la
vida de las mujeres y de los hombres, y por otro lado también está
pensando ya en cómo mitigar estas diferencias y los impactos
diferenciados que va a tener en la fase de recuperación”, dijo Gasman.
Estas acciones consisten, de acuerdo con la funcionaria, en reconocer
que las mujeres representan un porcentaje muy alto de quienes
proporcionan cuidados (es el caso, dijo, de las enfermeras, las
trabajadoras del hogar y las maestras). De acuerdo con Inmujeres, las
mujeres dedican tres veces más tiempo que los hombres al trabajo de
cuidado del hogar y cuidado de las personas.
Por otro lado, de acuerdo con Gasman, el gobierno federal ha estado
trabajando en la prevención y atención a la violencia contra las
mujeres. “Es histórico que se ha reconocido como una de las actividades
esenciales la atención a las mujeres víctimas de violencia, a sus hijos y
sus hijas, y así a todo el equipamiento que le da atención tanto en los
centros de atención externa, como los refugios”, expresó.
Cuestionada al respecto de que la Red Nacional de Refugios (RNR)
denunció públicamente que no se han liberado los recursos asignados este
2020 para el funcionamiento de los refugios, la presidenta del
Inmujeres aseguró que está al tanto de ello y aseguró (sin precisar
fecha) que en cuestión de días se liberarán.
Cimacnoticias preguntó a Nadine Gasman sobre si el gobierno federal
considera otras acciones, además de la violencia, para favorecer
económicamente a las mujeres que se emplean en el sector informal y a
las trabajadoras del hogar, ocupaciones realizadas principalmente por
mujeres, jefas de familias, quienes han visto disminuidos sus ingresos y
sus oportunidades laborales tras esta pandemia.
Al respecto, la funcionaria señaló que “cuando el Presidente habla de
las medidas que se van a hacer durante y después de esta etapa, por
ejemplo cuando se habla de un millón de créditos y microcréditos que se
van a dar (al sector informal), se está pensando en la población más
vulnerable, se está pensando en la población que tiene los empleos
informales que vive día a día y que necesitan digamos de esos apoyos
durante y después de la contingencia, entonces estamos hablando de las
mujeres que están en el sector informal”.
La titular del Inmujeres confió en que el impacto económico que el
COVID-19 traerá a las mujeres se revertirá con el llamado a la
solidaridad que ha hecho “enfático” el gobierno federal: “Preocuparse
por nuestros vecinos, por nuestros adultos mayores, por los niños y las
niñas, estar preocupados por la gente de alrededor incluyendo comprar en
los comercios de nuestras colonias, apoyar no a las grandes cadenas
sino realmente a los pequeños negocios de tal manera que seamos parte de
la solución”.
Y precisó que las autoridades siguen pensando opciones al respecto,
entre cuyas iniciativas está crear instrumentos para apoyar a través de
pagos en adelantado a las personas que hacen servicios y que en la
mayoría de los casos son mujeres.
Otro grupo conformado principalmente por mujeres que se ha visto
especialmente afectado con la epidemia del COVID-19 son las trabajadoras
del hogar, quienes enfrentan el confinamiento sin empleo ni recursos
económicos, pues la gran mayoría reciben históricamente salarios bajos y
sin ninguna protección a sus Derechos Humanos laborales.
Al respecto, la funcionaria dijo que desde el gobierno federal se ha
hecho un llamado muy importante a mantener los salarios del sector
formal y sector de las trabajadoras en el hogar, y “mantener los
salarios lo más posible para apoyar a las mujeres que generalmente nos
cuidan pero que en este momento tienen que cuidar sus casas, cuidar sus
hijos a sus hijas, etcétera”, observó.
Cimacnoticias publicó el pasado 30 de marzo un reportaje
que da a conocer que la Conasami no fijó el salario mínimo de las
trabajadoras del hogar en 2019 por omisión y prejuicios entre el grupo
que representa a las y los trabajadoras.
Al respecto, Nadine Gasman señaló que el Inmujeres ha seguido el tema
en coordinación con la Conasami y prometió que así lo hará respecto a
lo que ha pasado en las últimas semanas. La funcionaria agregó: “Sí
hacemos un llamado muy importante para que todas las trabajadoras del
hogar se afilien. Es un buen momento para aumentar, para afiliar a las
trabajadoras del hogar que son más de 2 millones de mujeres y eso sí es
un llamado que hacemos y que el seguro social está abierto y esperando
estas afiliaciones”.
En materia de acceso a la salud, Cimacnoticias preguntó al Inmujeres
cómo se garantizará durante esta emergencia sanitaria servicios médicos
gratuitos para las mujeres que no están incorporadas a la seguridad
social. Con base en datos del Consejo Nacional de Evaluación de la
Política de Desarrollo Social (Coneval), en 2016, por cada 100 hombres
ocupados beneficiados con la seguridad social por su trabajo, 62 mujeres
ocupadas tenían este derecho. De acuerdo con Coneval, el acceso
principal de las mujeres a los servicios de salud es a través de otros
familiares que les transfieren el beneficio, no como titulares.
Al respecto, Nadine Gasman reveló que hasta ahora el Inmujeres no ha
hablado con el Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS) al
respecto. No obstante, aseguró que la Secretaría de Salud a nivel
nacional y de la Ciudad de México continuarán con los servicios médicos,
incluyendo el acceso a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) y la
NOM- 046, sobre atención médica para víctimas de violencia sexual y
doméstica.
La funcionaria detalló que a fin de garantizar la coordinación
interinstitucional en estas tareas, el Inmujeres mantiene un diálogo
permanente con los Institutos y Secretarías estatales de las mujeres,
además, dijo que a través de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), se mantiene un acercamiento grande y continuo con gobernadores y gobernadoras.
“Esta emergencia ha fortalecido los lazos de coordinación (…) Estamos
haciendo un gran esfuerzo de promover la prevención; que los hombres
reflexionen sobre sus masculinidades, que reflexionen su papel en las
familias, de la importancia de la corresponsabilidad en el cuidado y en
prevenir la violencia. También decirle a las mujeres de manera muy clara
y enfática que el confinamiento y la epidemia no son razones para
aguantar la violencia y que no están solas, que estamos ahí con ellas,
estamos ahí para ellas, que los servicios están funcionando, que pueden
llamar al 911 y que además hay organizaciones de la sociedad civil que
están haciendo campañas y dando servicios también muy importantes”,
concluyó la funcionaria.
Las acciones con perspectiva de género que hasta ahora se han dado a
conocer de manera formal y públicas entre las medidas de acción por el
COVID-19 está la consideración de albergues, centros de atención a las
mujeres víctimas de violencia, guarderías y estancias infantiles como
servicios básicos que deben mantenerse en funcionamiento. Éstas fueron
dadas a conocer el pasado 31 de marzo de 2020, dos semanas después de
que se declarara la Fase 2 de la contingencia sanitaria.
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