Aunque juez ordenó libertad de Gisela Peraza, ella sigue recluida
A
punto de recibir su carta de liberación, Gisela Peraza Villa, ex
empleada del hogar del mandatario del estado de Sonora, Guillermo
Padrés Elías, acusada de robar en la Casa de Gobierno, fue recluida en
una celda de castigo, aislada y señalada por presuntamente poseer
varias dosis de la droga conocida como “cristal”.
Peraza Villa fue procesada desde hace cuatro años por el delito de
robo, acusada por la esposa del gobernador de haber sustraído cinco
millones de pesos en efectivo y joyas, de la Casa de Gobierno donde la
trabajadora radicaba con la familia Padrés.
Ayer, al cumplirse la sentencia de cuatro años de prisión, Gisela
saldría libre al mediodía, lo cual no pudo ser posible pues cuando los
familiares acudieron para realizar la gestión y recoger a la mujer, les
informaron que en la madrugada se había realizado un cateo en el penal
y que le habían encontrado droga en su celda.
Delma Peraza, hermana de Gisela, denunció a Guillermo Padrés de actuar
detrás de la nueva acusación, pues fue quien se ensañó hace cuatro años
contra la trabajadora del hogar deteniéndola en forma ilegal,
manteniéndola en arraigo, y posteriormente encarcelándola sin haberse
comprobado el robo.
Incluso fue llevada a varios penales del estado a fin de dificultar la
visita de sus familiares. Ha sido torturada y golpeada brutalmente, lo
cual fue documentado por visitadores de la Comisión Nacional de
Derechos Humanos (CNDH), quienes acudieron al Centro de Readaptación
Social de Huatabampo cuando ella había sido trasladada a esta prisión.
Como resultado de esa investigación se emitió la Recomendación 54/2013,
con fecha 31 de octubre de 2013, al gobernador Guillermo Padrés, como
lo documentó Cimacnoticias (26 septiembre 2014).
En el documento, la CNDH precisó que a la acusada le fueron violados
sus Derechos Humanos durante el proceso, y que fue torturada por
agentes de la Policía Estatal Investigadora al ser detenida e
interrogada.
Delma Peraza denunció que la semana pasada su hermana recibió visitas
en el penal donde está recluida, en las que personas que dijeron ir de
parte del gobernador le pidieron aceptar su traslado a la ciudad de
Mexicali, en Baja California, donde gobierna también el Partido Acción
Nacional (PAN). Le aseguraron que ahí le brindarían seguridad, trabajo
y dinero a cambio de que no se quedara a radicar en Hermosillo, capital
de Sonora.
No obstante, Gisela Peraza, quien nunca ha admitido que cometió el
delito del que se le acusa, se negó a aceptar la cifra de un millón de
pesos que le ofrecieron.
Su hermana Delma advirtió que hace responsable al gobernador Guillermo
Padrés de cualquier cosa que le suceda a Gisela o a su familia.
Por su parte, Eloísa Villa, madre de Gisela, consideró que la única
razón por la que no permiten que su hija obtenga la libertad tal como
ya lo ordenó un juez, podría ser porque posee información sobre la
familia Padrés Dagnino y lo que sucedía en la Casa de Gobierno. “Tal
vez ella sepa algo que no quieren que revele, y por eso la quieren
mantener encerrada”, expresó angustiada.
Abundó que teme por la integridad de su hija, pues ya en ocasiones
anteriores que la han encerrado en la celda de castigo ha sido víctima
de ataques por parte de otras internas.
Mientras, el abogado de la familia Peraza Villa, Juan Antonio Ortega
García, explicó que interpondrá un amparo para que se retire el castigo
impuesto a Gisela, al supuestamente encontrarle cinco “globitos” de
“cristal”.
Las y los familiares de Gisela Peraza se mantienen en las afueras del
Centro de Readaptación Femenil, y advirtieron que no se retirarán hasta
que ella salga libre.
Foto: Silvia Núñez Esquer, corresponsal
Por: Silvia Núñez Esquer, corresponsal
Cimacnoticias | Hermosillo, Son.-
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