6/14/2014

Magnólia Said: “Si hubiese interés en cohibir el tráfico, habría mega operaciones, semejantes a las que coartan la libre expresión en las


[ENTREVISTA]

Jubileu Sul/Brasil

Adital
Por Ana Rogéria



Como parte de los países involucrados en la ruta del tráfico de personas – crimen con dimensiones mundiales y de alta rentabilidad – Brasil es un punto de partida para este crimen internacional, que seguramente aumentará sus las posibilidades en ocasión de la Copa del mundo.


A pesar de las campañas lanzadas por el gobierno, es evidente la falta de estructura y de operatividad para combatir en serio el funcionamiento de tráfico humano. Datos del Ministerio de Justicia indican que entre 2005 y 2011, sólo 475 brasileros/as fuera de Brasil se encontraban en esta situación. El número, en realidad, es mucho más grande.

La red Jubileo Sur Brasil entrevistó a Magnolia Said, abogada, miembro de la Red y de la Articulación Nacional de los Comités Populares de la Copa (Ancop), acerca de cómo estos mega-eventos y megaproyectos afectan a las mujeres y contribuyen al agravamiento de los problemas relacionados con las cuestiones de género.

"Si en realidad hubiese interés en frenar esta práctica criminal, se habría desplegado en las ciudades, grandes operativos de protección y defensa de las mujeres, niños/as y adolescentes y de castigo de los delincuentes, así como se organizan, con mucha anticipación, grandes operaciones para frenar la libertad de expresión en las calles", dijo la abogada.
Acompañe la entrevista.

La explotación sexual de mujeres, adolescentes y niños y la trata de personas son una realidad en el país. ¿Tiende este problema a crecer con la realización de la Copa Mundial?
Magnolia Said – en general, los megaeventos traen como consecuencia el aumento de la violencia contra las mujeres, la prostitución y la seducción engañosa para la práctica de la trata de personas.
Las grandes represas en la región de Xingú y el complejo portuario de Pecém en Ceará, son buenos ejemplos. Un enorme contingente de trabajadores procedentes de diferentes lugares, con diferentes culturas, sin familia, con diversas demandas, que viven en lugares pobres, con una infraestructura deficiente, sin períodos de descanso para viajar [a sus hogares de origen] inevitablemente causa impactos en la vida de las personas de esas localidades y las primeras que sufren este impactos son mujeres, jóvenes, niños/as y adolescentes.
En el caso de Fortaleza, Natal, Recife y Manaus, ciudades ya conocidas internacionalmente como parte de la ruta del tráfico de mujeres y como lugares de mayor incidencia de explotación sexual, esto tiende a intensificarse. Se suma a lo anterior, en el caso de Fortaleza, el hecho de que el presupuesto para la lucha contra la explotación sexual disminuye cada año.
En 2013 (según datos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado), hubo tres violaciones de niñas/os y adolescente por día, sumando 1.832 ocurrencias. En general hubo un incremento de 12% respecto a 2012, a incluyendo niños y adultos.
De enero a marzo de 2014, las denuncias de abuso sexual contra niñas/os y adolescentes, creció 19.8% con respecto a 2013. El Dial 100 respondió a 524 denuncias (253 en Fortaleza). Además, todas las ciudades sede de los juegos encabezan los sucesos de violencia sexual contra niñas/os y adolescentes. En el Nordeste es donde hay más casos, principalmente como resultado del turismo sexual y la vulnerabilidad social, causada principalmente por la situación de pobreza de las familias.
En el caso del Nordeste, la situación es más favorable a la práctica de explotación sexual y a la seducción engañosa para la trata, ya que estamos atravesando la peor sequía de los últimos 50 años. Para esta población (mujeres, niños y adolescentes), aunque la ausencia de políticas públicas es una constante, la situación de calamidad en la mayoría de los municipios, agrava las condiciones de vida, empujando a muchas mujeres hacia los capitales. Mujeres que llevan en su mente, la fantasía de conseguir "un poco mas de dinero” o quién sabe, "casarse con un extranjero”, que las lleve lejos de la miseria.
Durante este periodo, la Fifa determinará el funcionamiento de las ciudades. ¿Hay alguna preocupación sobre este problema? El gobierno ha lanzado campañas contra la explotación sexual. ¿Será esto suficiente?
Magnolia Said – La Fifa viene dictando el funcionamiento de las ciudades sede, desde que Lula firmó la Ley General de la Copa. Desde entonces, nuestra legislación se ha modificado para cumplir con los intereses de las grandes empresas y negocios, que se han generado a partir de ahí. Como la mujer también es considerada como un "negocio" y de los más rentables, no se podría esperar algo diferente de lo que está sucediendo, es decir, una fantasía de que [o un hacer como si] hay una preocupación de esta corporación, del gobierno estadual y el gobierno municipal en relación con el aumento de la explotación sexual.
Si en realidad hubiese interés en frenar esta práctica criminal, se habrían desplegado en las ciudades, grandes operativos de protección y defensa de las mujeres, niños y adolescentes y de castigo de los delincuentes, así como se organizan, con mucha anticipación, grandes operaciones para frenar la libertad de expresión en las calles".
En Fortaleza, la campaña lanzada por el gobierno en colaboración con el ayuntamiento y OAB, además de tardía, se limita a un lugar casi clandestino en el aeropuerto Pinto Martins (servicio de protección a migrantes), cuyo material está escrito sólo en Portugués, donde "sólo va quien tienen algo que hacer ahí ", [y este no es el caso de los turistas con recursos], esto es patético. No tiene constancia, no tiene ninguna incidencia y, además, el presupuesto para tan importante tarea, es insignificante.
Por otro lado, ¿para qué sirven las campañas si no hay ningún sistema de protección organizado, institucionalmente articulado, equipado y suficientemente capacitado para actuar ante este crimen?
¿Es posible que mega eventos, sobretodo deportivos, fortalezcan la imagen estereotipada de la mujer como objeto, ya bastante explotada en caso de la mujer brasileña?
Magnolia Said – El extranjero que viene a Brasil, llega con el deseo de disfrutar el país del fútbol, la samba y el sexo exacerbado y libre. Eso como resultado de las informaciones ofrecidas por las agencias de viajes, los sectores empresariales, los políticos, de la propaganda de las revistas y la TV. El piensa que puede hacer todo; que puede acosar tanto a la mujer que esta en la calle, como a que le está proporcionando algún servicio, ya sea en el hotel, en el restaurante, una vez que cree que está pagando por el servicio completo.
En el caso de Fortaleza, en particular, que ya es conocida internacionalmente como el paraíso del turismo sexual, el turista también sabe que tiene un peso en el país porque va a traer divisas y el mercado del sexo mueve mucho dinero. Por lo tanto, la legislación que castiga esta práctica, en la hora clave, es flexibilizada, no tiene el rigor que debería.
Los movimientos de mujeres, las feministas han trabajado bastante para contrarrestar esa imagen. ¿Es éste también un momento del fortalecimiento de esta lucha?
Magnolia Said – Es si, de fortalecimiento de la lucha, porque con el amplio debate sobre la explotación sexual y su impacto en las vidas de las mujeres y del país, se fortalece la lucha y se crean nuevas alianzas. Además de aumentar la posibilidad de nuevos logros en términos de políticas públicas, en particular, por la vergüenza que esta situación produce al gobierno, en términos de imagen. Y cómo los gobiernos viven de imagen….
Traducción: ricazuga51@yahoo.com

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