Libera el seguro social Metotrexato para el Hospital Federico Gómez
Importar el medicamento clave, única salida contra el desabasto, dice el director del 20 de Noviembre
▲ Los doctores Mónica Villa Guillén, directora médica, y Luis Juárez
Villegas, jefe de departamento de hematooncología, ayer en el Hospital
Infantil Federico Gómez.
Desde abril dejó de fabricarse en México el medicamento Metotrexato y antes otro quimioterapéutico, Vincristina. Ambos
son insustituibles en los tratamientos de niños con cáncer; se usan en
85 por ciento de las terapias de inicio, por lo que la única opción para
terminar con el desabasto es traerlo del extranjero, afirmó José
Alfredo Merino, director del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del
Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del
Estado (Issste).
En este nosocomio y en el Hospital Infantil de México Federico Gómez
(HIMFG) la carencia de Metotrexato hizo crisis el lunes, cuando papás de
los pacientes protestaron en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad
de México. Exigían solución y aceptaron liberar la principal vía de
acceso a la terminal aérea por el compromiso asumido por la Secretaría
de Salud para resolver el problema.
Ayer por la mañana, directivos del Infantil de México aseguraron que
el Hospital de Pediatría del Centro Nacional Siglo XXI del IMSS ya había
liberado 400 frascos del fármaco para facilitarlos a los pacientes del
HIMFG, aunque servirán únicamente para cubrir la necesidad de una
semana.
Mónica Villa, directora médica del HIMFG, comentó que el proveedor,
Laboratorios Pisa, informó en junio que su inventario de Metotrexato fue
asegurado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos
Sanitarios (Cofepris) y hasta ayer no lo había liberado. Recordó que el
organismo regulador tiene un atraso en más de 20 mil trámites, entre los
que podría estar este producto.
No obstante, en espera de que se solucionara el problema y como en
otras ocasiones con diversos fármacos, los médicos pudieron cubrir las
carencias con el apoyo de organizaciones civiles o mediante compras
emergentes. La semana pasada el problema se agudizó. No hubo forma de
conseguir la medicina, por lo que alrededor de 17 niños no pudieron
recibir la dosis que les correspondía, admitió Luis Juárez, jefe del
Departamento de Hematooncología del HIMFG.
Explicó que en algunos casos se hicieron ajustes al esquema
terapéutico, lo cual es posible, pues se administran con base en una
programación y eso permite que los niños no resulten afectados en su
tratamiento.
El HIMFG es el responsable de la compra de estos insumos y lo ha
hecho a través de Laboratorios Pisa, que vende la medicina, la entrega a
un distribuidor y centro de mezclas, Productos Hospitalarios SA, que
elabora unidosis específicas para cada paciente.
El director de administración, Carlos Plascencia, explicó que
mediante este mecanismo que funciona desde 2013, se obtienen ahorros y
se evita el desperdicio de la sustancia.
Debido a la contingencia con Pisa, el hospital buscó opciones con
cuatro fabricantes nacionales pero ninguno elabora Metotrexato. Mónica
Villa mencionó que Pedro Flores, titular de la Unidad de Administración y
Finanzas de la Ssa, ofreció su ayuda para buscar el medicamento en
otros países y comprarlo donde sea, para que no vuelva a faltar en
ningún hospital.
Además del HIMFG, tampoco cuentan con la sustancia los institutos nacionales de Pediatría y Cancerología, dijo la funcionaria.
Mientras, el director del CMN 20 de Noviembre, explicó en entrevista
que tanto Metotrexato como Vincristina eran adquiridos por las oficinas
centrales del Issste y los distribuían a través de la empresa Servicio
Integral de Logística y Distribución (Silodisa); pero ante el desabasto,
el nosocomio buscó otro proveedor en el extranjero.
El pasado lunes arribaron los primeros lotes y en adelante se harán
las compras cada semana, a fin de que no vuelva a faltar, explicó
Merino. A diario, en ese hospital se aplican 45 dosis de quimioterapia a
niños con leucemia linfoblástica aguda, indicó.
Por la noche, la Cofepris informó que hay seis registros sanitarios
vigentes en propiedad de laboratorios nacionales para producir
Metotrexato. Tienen permiso de importación de la sustancia hasta 2020,
lo cual equivale a más de 35 millones de cajas de tabletas o ampolletas
inyectables.
Respecto del laboratorio Pisa, indicó que sus instalaciones en Ciudad de México fueron cerradas por
inconsistencias en sus procesos de producción. Pero los productos terminados no fueron asegurados, por lo que se pueden distribuir y vender los lotes que se hayan elaborado hasta antes de la medida de seguridad o se encuentren en sus almacenes de distribución ubicados en otros estados de la República.
Foto Pablo Ramos
Ángeles Cruz Martínez
Periódico La Jornada
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