Reseña de "La Revolución imposible. La difusión anarquista de la Revolución mexicana en el periódico francés Les Temps Nouveaux (1906-1914)"
Hay logros en la
impresión facsimilar de periódicos y revistas del PLM, el Partido
Comunista Mexicano, la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios y
otras organizaciones; asimismo, se han hecho ediciones cibernéticas de El Machete (órgano central del PCM), El Libertador (órgano
de la Liga Antiimperialista de las Américas), libros, tesis, folletos,
revistas y periódicos del movimiento guerrillero en México. De otras
publicaciones, como Solidaridad (de los electricistas democráticos), Oposición (órgano central del PCM), se han realizado compilaciones muy amplias, algunas bastante exitosas.
Sin
embargo, las traducciones y ediciones de artículos, ensayos y notas de
periódicos y revistas extranjeros son, por ahora, limitados, aunque se
han obtenido avances en traducciones de publicaciones gringas sobre las
relaciones México-Estados Unidos entre 1821-1853, de la invasión yanqui
de Veracruz en 1914 y de la Expedición punitiva de 1916-1917. En este
estado del arte, la edición en 2013 por la Facultad de Filosofía y
Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México de La Revolución imposible. La difusión anarquista de la Revolución mexicana en el periódico francés Les Temps Nouveaux (1906-1914), representa un importante aporte para el estudio del anarquismo en nuestro país.
Introducción-ensayo
Como
responsable de la selección de artículos, introducción y notas de la
obra reseñada, Javier Torres Parés lleva a un nuevo nivel la tarea de
compilar textos fundamentales del movimiento revolucionario mexicano de
las primeras décadas de la centuria pasada. La introducción del
compilador es un ensayo novedoso, apoyado en Diego Abad de Santillán, Ricardo Flores Magón. El apóstol de la Revolución social mexicana; Jorge Basurto, El proletariado industrial en México (1850-1930); Barry Carr, El movimiento obrero y la política en México (1910-1929); Juan Gómez Quiñones y Luis Leobardo Arroyo, Orígenes del movimiento obrero chicano; Salvador Hernández Padilla, El magonismo: historia de una pasión libertaria. 1900-1922; Harvey A. Levenstein, Las organizaciones obreras de Estados Unidos y México. Historia de sus relaciones; Saúl Luna Morales, La fuerza de trabajo en la minería de Chihuahua, 1880-1910; Benjamín Maldonado Alvarado, La utopía de Ricardo Flores Magón. Revolución, anarquía y comunalidad india; Emilio Zamora, El movimiento obrero mexicano en el sur de Texas. 1900-1920,
y otros autores nacionales y extranjeros. Entre los autores de historia
del movimiento obrero francés y biografías de sus líderes, en que se
apoya el académico de la UNAM, cabe mencionar a Jean Bron, Jean Grave,
Daniel Guérin, Georges Haupt, Jean Maitron, Robert Paris, Madeleine
Rebérioux y Jean-Pierre Rioux.
El compilador plantea la
necesidad de relacionar la historia social con el internacionalismo
obrero, que en el caso de nuestro país significa, en gran parte,
estudiar las relaciones entre las organizaciones de trabajadores
mexicanos con el movimiento obrero estadunidense. Es analizada la
modernización de México, que implicó la industrialización del
porfiriato en Veracruz, el centro y el norte del país. Entre los grupos
del proletariado destacaban por su número e importancia los mineros (60
mil), ferrocarrileros (40 mil) y textiles (32 mil). Dada la relación
económica en ambos lados de la frontera norte de México y el suroeste
de Estados Unidos, se establecieron lazos entre los trabajadores de los
dos países.
En 1900 había 500 mil inmigrantes de origen mexicano
en la Unión Americana, distribuidos principalmente en Texas, Nuevo
México, Arizona y California.
Sostiene Torres Parés: “La
actividad de los trabajadores mexicanos hizo en Estados Unidos un
valioso aporte a la democratización de sus organizaciones y de la vida
política de la región, al establecimiento de la jornada de ocho horas,
a conseguir el respeto legal de la libertad de expresión y del derecho
de organización; contribuyó a la formación de un nutrido grupo que
migraba constantemente de un trabajo a otro en ambos lados de la
frontera para laborar en la agricultura, la minería, la industria o los
ferrocarriles. Los migrantes formaron numerosos vínculos entre los
trabajadores de México y Estados Unidos, los cuales ayudaron a
descubrir su condición y sus intereses comunes por encima de la
frontera nacional o racial que los separaba”. p. 14
Ricardo
Flores Magón, Librado Rivera, Práxedis G. Guerrero, Juan Sarabia,
Antonio I. Villarreal y Lázaro Gutiérrez de Lara, que dirigían el PLM,
mantuvieron relaciones con el Partido Socialista de Eugene V. Debs, los
grupos anarquistas de Luigi Galleani y Emma Goldman, los Industrial Workers of the World (Trabajadores Industriales del Mundo), y, pese a su inveterado conservadurismo, con la American Federation of Labor (Federación Americana del Trabajo).
El doctor en historia explica la importancia de Les Temps Nouveaux
en los medios libertarios de Francia y proporciona datos acerca de la
biografía ideológica y política de Jean Grave. El semanario formaba
parte de la prensa anarquista, que estaba acompañado por Le Pére Peinard, de Émile Pouget, Le Libertaire y La Sociale, a los que se uniría en 1905 L’Anarchie.
El periódico de Grave facilitó la mejor comprensión del importante
papel de los sindicatos en la organización y lucha de los obreros
franceses. Al final, no obstante el rol del anarquismo y el
anarcosindicalismo, en la Confederación General del Trabajo francesa se
impuso el sindicalismo revolucionario.
Líneas después, el especialista trata acerca del abordaje de Les Temps Nouveaux
de los acontecimientos revolucionarios de México. Según él: “…la
irrupción de un proceso insurreccional en un país lejano, que adquirió
el perfil de una violenta rebelión campesina, encontró grandes
dificultades de recepción. La apropiación de la experiencia mexicana
produjo una amplia polémica que marcó un momento en la historia de su
proceso de difusión internacional”. p. 23
En 1911, Les Temps Nouveaux denunció la política intervencionista de Estados Unidos en México y Nicaragua.
Torres
Parés no menciona las traducciones y ediciones de la polémica entre
Ricardo Flores Magón y sus camaradas con los anarquistas críticos del
extranjero, que han publicado y difundido Chantal López y Omar Cortés a
través de Ediciones Antorcha. Considerando esta omisión, es útil
mencionar que la editorial citada lanzó al público la antología de
Ricardo Flores Magón, Artículos políticos 1912 (edición
cibernética de 2008), que incluye las cartas de A. Cavalazzi, de R.
Froment y de P. Kropotkin a J. Grave. Además, en la obra de Omar
Cortés, La leyenda. Un intento de acercamiento al periódico Regeneración (6ª ed. cibernética, 2003), se hace referencia a dicha polémica.
Entre los artículos incluidos de Les Temps Nouveaux
, están los de Vindex, “La situación política y social de México”;
Aristide Pratelle, “La situación política y social de México”, “Los
secretos de la dictadura porfirista”, “Una infamia”, “Los mártires
mexicanos”, “Fin de una raza”, “La rebelión de los mayas”, “Causas y
orígenes de la Revolución mexicana” (dos partes); Manuel Sarabia, “Un
gran aniversario”; Jean Humblot, “La revolución”; Michel Petit, “En
México”; E. Rist, “La situación en México”; A. Cavalazzi,
“Incongruencias teóricas del PLM y el movimiento” (carta); Fernando
Tarrida del Mármol, “La Revolución mexicana”; R. Froment, “Las
contradicciones del Partido Liberal Mexicano” (carta); Jean Grave,
“Sobre México” y “Rectificación” (carta de Kropotkin); R. Louzon, “El
carácter comunista de la Revolución mexicana”, y John Kenneth Turner,
“La revolución en México”.
El
hebdomadario incluyó artículos que denunciaban la dictadura de Porfirio
Díaz, la represión contra la clase obrera, la explotación de los yaquis
esclavizados en Yucatán y Valle Nacional (Oaxaca), la alianza de Díaz y
el gobierno de Estados Unidos, la persecución y encarcelamiento de
Ricardo Flores Magón y sus compañeros, el carácter de grandes
propietarios agrarios en México de Harrison Gray Otis y William
Randolph Hearst, los levantamientos campesinos, el asesinato en masa de
yaquis y mayas, la venta de indios combatientes hechos prisioneros, la
rebelión de los mayas, la militarización de la frontera sur de EU por
el gobierno de William Howard Taft, la diplomacia del dólar y otros
aspectos importantes de la situación económica, política y social de
México.
Les Temps Nouveaux abordó la actividad
revolucionaria de los magonistas, en diversas fechas. Así, Aristide
Pratelle informaba el 12 de septiembre de 1908: “Arrestados en su
domicilio por policías estadunidenses que no tenían ni orden de
aprehensión ni insignias, y arbitrariamente detenidos desde el 23 de
agosto del año pasado con base en testimonios ridículos, tres
militantes mexicanos, Ricardo Flores Magón, Librado Rivera y Antonio I.
Villarreal fueron acusados de ‘crimen’ por el gobierno porfirista…
“El
28 de mayo de 1908 los tres prisioneros mandaron una carta al
presidente Roosevelt, carta en la cual le recordaban que las diversas
acusaciones que habían hecho recaer sobre ellos se descartaban una tras
otra, y que la verdadera meta de los acusadores era entregarlos a
México, donde los asesinarían…” p. 81
El 24 de abril de 1909,
Tornelio Aramburo, J. Vidal, Yves Salazar y C. García apuntaban: “En
Estados Unidos, en la frontera con México, los obreros mexicanos se
movilizan para ayudar a sus hermanos en lucha. Varias reuniones
públicas tuvieron lugar. Y, en El Paso (Texas), los revolucionarios
mexicanos organizaron un mitin al cual asistieron más de dos mil
personas y en el cual fueron proclamados la revolución, el comunismo,
la recuperación de la tierra y su uso para todos”. pp. 93-94
El 30 de junio de 1909, Pratelle comunicaba: “…Encadenados uno con
otro, custodiados por cuatro de los mejores pistoleros del oeste
americano, Ricardo Flores Magón, Antonio I. Villarreal y Librado Rivera
fueron encerrados en una nueva galera; han esperado para ser
enjuiciados por una presunta violación de las leyes de neutralidad que
existen entre las dos repúblicas vecinas y cómplices”. p. 96
Acerca del trato dado a la tribu yaqui, Aristide Pratelle anotaba:
“…Con frecuencia, ocurre que los soldados mexicanos rodean un pueblo o
una ranchería yaqui y, después de matar a casi todos los habitantes, la
destruyen incendiándola. Los sobrevivientes son encadenados y mandados
a Yucatán o a Valle Nacional, en las regiones calientes, donde los
venden como esclavos”. p. 98
Pasaba a continuación a
denunciar que entre los participantes en la venta de yaquis estaban
Ramón Corral, Luis E. Torres y Porfirio Díaz, pero no aclaraba el
proceder criminal y genocida del general Torres en las campañas contra
la tribu sonorense.
Pratelle describía la situación en
Yucatán en los siguientes términos: “…Las haciendas son tan grandes que
cada una posee una pequeña ciudad, que tiene entre 500 y 2,500
esclavos. Los esclavos de Yucatán son un grupo compuesto por 8,000
indios yaquis importados del estado de Sonora, 3,000 chinos y entre
100,000 y 125,000 mayas, indios vecinos de Yucatán, a quienes
pertenecían antes las tierras de los reyes del henequén. El principal
rey del henequén en Yucatán es Olegario Molina, que además es
gobernador del estado de Yucatán y secretario de Fomento. Se dice que
las propiedades de Molina en Yucatán y Quintana Roo abarcan 15,000,000
de acres de tierra. Los cincuenta ‘reyes’ poseen la mayoría de las
tierras y esclavos, y viven en Mérida, en suntuosos palacios. La
península entera se encuentra bajo su dependencia. Tienen en sus manos
toda la máquina política y la usan, por supuesto, para su provecho
personal”. p. 101
La antología comentada es explicable, pues
Javier Torres Parés forma parte de los historiadores, sociólogos,
economistas, politólogos y otros intelectuales, de diversas militancias
políticas y orientaciones teóricas, que han escrito acerca de nuestra
historia, poniendo al desnudo los mitos e ideologizaciones de la
historia oficial. En este grupo de estudiosos, es justo mencionar a
Alonso Aguilar Monteverde, Dialéctica de la economía mexicana ; Enrique Semo, Historia del capitalismo en México, 1521-1763 ; Arnaldo Córdova, La ideología de la Revolución mexicana ; Lorenzo Meyer, México y los Estados Unidos en el conflicto petrolero 1917-1942 ; Luis Javier Garrido, El partido de la Revolución institucionalizada. La formación del nuevo Estado (1928-1945) ; Alicia Olivera Sedano, Aspectos del conflicto religioso de 1926-1929, sus antecedentes y consecuencias ; Ángela Moyano Pahissa, México y Estados Unidos: orígenes de una relación. 1819-1861 ; Gastón García Cantú, El socialismo en México Siglo XIX , y Jaime Tamayo, En el interinato de Adolfo de la Huerta y el gobierno de Álvaro Obregón (1920-1924) .
Asimismo, Torres Parés es autor de La
Revolución sin frontera. El Partido Liberal Mexicano y las relaciones
del movimiento obrero de México y el de Estados Unidos, 1900-1923 , coordinador (junto con Gloria Villegas Moreno) del Diccionario de la Revolución Mexicana y editor de El Libertador , órgano de la Liga Antiimperialista de las Américas.
La polémica en los medios anarquistas
La situación de apoyo a las fuerzas del PLM tendió a ser rota. A. Cavalazzi, con fecha 18 de noviembre de 1911 publicó en Les Temps Nouveaux, una carta en la que afirmaba: “La Cronaca [Sovversiva]
no niega, ni jamás negó, como mucha gente ha querido creer, que en
México hay, ahora, movimientos insurreccionales; simplemente niega el
carácter de revolución social que se le ha querido dar, ingenuamente, a
esos movimientos, y niega que tengan como objeto el comunismo. Creer
que en México se esté hoy en vísperas de la realización de una sociedad
comunista y que ese movimiento emancipador pueda extenderse poco a poco
y en breve plazo a Estados Unidos es dar prueba de una simplicidad
verdaderamente lamentable entre los revolucionarios”. p. 144
Y agregaba el corresponsal: “Pero aquí se escucha la objeción: ¿y el
Partido Liberal no es una prueba de que las ideas libertarias han hecho
su camino en México? Para nada, camarada. Hay ahí todavía una leyenda
que hay que destruir: el Partido Liberal Mexicano nunca ha sido un
partido libertario; su Programa, expedido en San Luis, [Misuri], el 1
de julio de 1906, y enviado por la Junta del Partido Liberal con sus
Instrucciones Generales para los Revolucionarios, dice suficiente sobre
el punto…” p. 145
A continuación, extractaba partes del
Programa del PLM, que, como es natural, exponía las ideas magonistas de
1906 y no las de 1911.
Líneas después, afirmaba
agresivamente: “Eso es exactamente lo que hacen en América los
periódicos que ven las cosas de manera distinta que Cronaca Sovversiva. Es bueno saber cómo se hacen todos esos recuentos: Regeneración
(órgano del Partido Liberal) publica todas las semanas, en español y en
italiano, artículos e informaciones redactadas especialmente por
Ricardo Flores Magón; y estos mismos artículos, y esa misma
información, circulan en la prensa anarquista de ambos mundos. Desde
hace varios meses que tuve la ocasión de leer un número bastante grande
de periódicos, y no he podido leer una noticia que no haya sido
publicada primero por Regeneración . Es entonces de una sola y
única fuente de donde abreva nuestra prensa. Fuera de eso, no hay más
que artículos más o menos ditirámbicos, que a menudo revelan en el
autor a un camarada entusiasta, es cierto, pero que no conoce una sola
palabra de México.
“Lo que molesta más es la manera ligera con
que se da cuenta de las noticias alarmistas de la prensa burguesa. Es
suficiente que un periódico capitalista relate un incidente cualquiera
inflándolo para que tal incidente sea tomado con seriedad y
reproducido. Si se procede de esta suerte, con sólo leer los periódicos
americanos somos conducidos a creer que Europa está en fuego al menos
dos veces por año. ¿Es serio eso? Yo, de plano, no lo creo”. p. 147
Estas
críticas, por cierto, se hacían poco después de que las fuerzas del
PLM, entre enero y junio de 1911, ocuparon la parte norte de Baja
California y aumentaron considerablemente sus filas.
Una
posición contraria asumió Fernando Tarrida del Mármol, quien indicaba
con sapiencia que para mantener a raya a las fuerzas de la autoridad
durante meses era menester que el movimiento fuera popular y poderoso.
No obstante sus imprecisiones e inexactitudes geográficas y étnicas,
este famoso ácrata escribía: “Es verdad que los rebeldes, luego de
haber proclamado la comuna en Mexicali y convertirse en dueños de casi
todo Baja California, fueron repelidos por las tropas federales, y que,
de igual modo, fueron vencidos en las provincias del norte después de
la muerte de [Práxedis G.] Guerrero; pero el movimiento renació más
poderoso algunos días más tarde, en los estados del centro y del sur,
especialmente en Morelos, Yucatán y Puebla, en donde es tan formidable
que el gobierno acaba de proclamar el estado de sitio. Zapata continúa
sin mengua su marcha victoriosa a la cabeza de sus bandas rebeldes,
compuestas en gran parte de indios yaquis --a los cuales el régimen
porfirista casi redujo a la esclavitud--, que están furiosos contra
Madero, a cuyo triunfo contribuyeron, pero que ahora les niega las
tierras que antes prometió…” pp. 149-150
Y concluía Tarrida del
Mármol: “Magón cometió el error de atacar con la violencia más extrema
a antiguos compañeros de lucha entre los que se encuentran algunos
excelentes revolucionarios que conocieron la barricada, la prisión o el
exilio, pero que se negaron a seguirlo en su evolución anarquista y en
la campaña contra Madero, en un momento en que este último impulsaba el
asalto contra la dictadura aún todopoderosa.
“Dicho esto,
conviene proclamar muy alto que Ricardo Magón es uno de los luchadores
más sinceros, viriles y honestos de nuestra época. Su hermano, Jesús
Magón, que aceptó los ofrecimientos de Madero, es un ministro del
gabinete de México. Si Ricardo hubiera querido hacer otro tanto --y
tengo las pruebas de las gestiones hechas con este objeto por Madero--
sería ahora primer ministro o vicepresidente de la República. Él
prefirió permanecer fiel a sus principios libertarios y continuar la
lucha en medio de privaciones sin nombre y de dificultades
incalculables. La buena fe del corresponsal de Les Temps Nouveaux
en Estados Unidos tiene que haber sido sorprendida para que creyera
necesario atacar, como lo hizo, al indomable luchador mexicano”. . . p.
151
Entre los más agudos críticos del PLM, Ricardo Flores
Magón y sus camaradas, sobresalió R. Froment, que difundió partes de
una carta que había recibido: “A propósito de la cuestión de México hay
todavía mucho que decir, pero considero que es mejor esperar. La Cronaca [Sovversiva] cuenta con varios ejemplares de Regeneración,
distribuidos por Ricardo Flores Magón; le envío un ejemplar con el fin
de que usted vea cómo los autonombrados libertarios del PLM engañan a
quienes son lo bastante estúpidos para considerarlos revolucionarios
sinceros. El folleto fue distribuido en México después de la aparición
de muchos artículos donde Magón repudió el Programa del Partido
Liberal.
“Pero hay más. Magón desde hace seis meses elogia al
‘camarada Zapata’: y muchos anarquistas creyeron que el ‘general
Zapata’ es realmente un anarquista ¡Pues bien! Zapata, en una
proclamación publicada hace unos quince días, dice abiertamente que él
y sus hombres combaten por la realización en México del Programa del
Partido Liberal, el cual está por la ‘Libertad, por la Justicia y por
la Ley’, y que espera, con la ayuda del bien, el triunfo de la
revolución”. pp. 153-154
Jean Grave intervino en la
controversia, inclinándose por los críticos del PLM: “En la prensa
revolucionaria, finalmente, lo que hay es otra cosa. Se trata de
levantamientos populares por la recuperación de la tierra, por la
revolución social, sólo que todos estos relatos tienen una fuente
única: Regeneración .
“Ahora bien, sin querer poner en duda a los hombres de Regeneración
, a quienes no conocemos y sobre los cuales no podemos hacer algún
juicio, se nos permitirá asombrarnos de que sólo ellos estén al
corriente de esta famosa Revolución mexicana, y nos preguntamos si no
han tomado sus sueños por realidades. Sobre todo cuando aquellos que
conocen un poco México nos dicen que, en la hora actual, una revolución
social es enteramente improbable”. p. 161
Concluía con una
reflexión: “En tiempos de revolución, la pluma puede ser una gran ayuda
del fusil, eso es innegable; pero siempre he creído que, en tiempos de
revolución, el lugar de aquellos que la pregonan, y sobre todo el de
los promotores de un movimiento, está con los que combaten.
“Si
verdaderamente México está en plena lucha revolucionaria, ¿cómo es que
los señores Magón permanecen a yo no sé cuántas centenas de kilómetros
del teatro de la lucha?” ibíd.
Entonces participó el
principal teórico del anarquismo comunista, Piotr Kropotkin, quien, de
acuerdo con su comprensión de la iniciativa revolucionaria de las
masas, planteó en una carta: “Hay en el norte de México un movimiento
revolucionario bastante serio entre los campesinos, y el gobierno
republicano no es capaz de dominarlo.
“Se han producido expropiaciones a señores por los colonos indios. Se libran de tiempo en tiempo batallas, y no es sólo Regeneración quien habla de esas batallas…
“‘Escaramuzas’
sería un término más correcto para estos enfrentamientos… Pero sería
una idea absolutamente falsa… no ver en el movimiento del México
septentrional el carácter que todos los levantamientos campesinos
siempre han tenido”.
“Como tantos otros amigos italianos,
rusos, etcétera, probablemente han soñado con campañas garibaldianas y
no han encontrado nada semejante. Planicies, campos apacibles, que
desconfían (y con razón) de los extranjeros, y, de un momento a otro,
aquí, luego de veinte leguas al este, al sur o al norte de este punto,
a siete, ocho días de distancia, otro poblado expulsa a los
explotadores y se apropia de las tierras. Luego, veinte, treinta días
después, llega un destacamento de soldados ‘del orden’; ejecuta a los
rebeldes, quema el poblado y, en el momento en que regresa
‘victorioso’, cae en una emboscada, de la que no escapa sin dejar la
mitad del destacamento muerto o herido.
“Esto es un movimiento
campesino. Y es evidente que los jóvenes que sueñan una campaña
garibaldiana, al llegar, plenos de entusiasmo militar, no encuentran
más que decepción. Pronto se percataron de su inutilidad”. pp. 163-14
La misiva kropotkiniana orilló a Jean Grave a hacer una rectificación.
A lo largo del texto, el académico de la UNAM corrige algunos nombres
propios y toponimias. De esta manera, escribe Valladolid que los
anarquistas franceses reprodujeron como Valadolid; el apellido Serdán
por Cerdan; Chihuahua por Chihuala; Tijuana por Tía Juana; Ensenada por
Ensedana; Sonora por Senora, y en la misma forma enmienda otras grafías
erróneas.
El libro compilado por Javier Torres Parés
representa un paso positivo en el abordaje de la Revolución mexicana,
por lo que su lectura es recomendable.
*** La Revolución imposible. La difusión anarquista de la Revolución mexicana en el periódico francés Les Temps Nouveaux (1906-1914),
selección de artículos, introducción y notas de Javier Torres Parés,
trad. de Sylvie Didou Aupetit, Javier Torres Parés y Agustín Gutiérrez
Tenorio, México, FFL UNAM, 2013. 215 pp.
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