En junio de 2006, Enrique Krauze escribió un texto conocido como “el
Mesías Tropical”, donde caricaturizaba a los seguidores de AMLO como un
conjunto de fanáticos inconscientes, y a López Obrador como un líder
autocrático que podría estar tentado a “disolver de un golpe o poco a
poco las instituciones democráticas, incluyendo la no reelección” (https://bit.ly/2D7HLln).
Intelectuales y periodistas siguen escribiendo desde entonces una larga
serie de absurdos sobre AMLO dignas de un fascículo de colección.
Recientemente, Ricardo Alemán escribe que la verdadera intención de
AMLO al promover la base militar de Santa Lucía como aeropuerto de
pasajeros es minar el poder castrense, y así tener el camino libre para
convertir a México en una dictadura al estilo cubano o venezolano (https://goo.gl/XzNxaB).
A propósito del aeropuerto, Juan Ignacio Zavala señala que López
Obrador rechaza su construcción porque, al igual que Donald Trump, a
quien tanto se parece según Zavala, “le tiene miedo al extranjero” y
busca instalar un “alambre de púas en nuestras fronteras” (https://bit.ly/2GkguAX).
Carlos Alazraki nos deleita con la más elevada de las prosas en una
de sus “cartas a López Obrador”. “Esas mamadas del tigre o lo que el
pueblo decida”, escribe, “si están muy pesadas. (…) son señales de que
no respetarás la institución presidencial”, dice en su misiva (https://bit.ly/2FYAQeS).
Para Pablo Hiriart, AMLO y los suyos tienen “vinculación ideológica y
simpatía política” con el régimen norcoreano: “Están con Kim Jong-un. No
lo ocultan ... Son sus ‘amigos’ y serán los nuevos amigos de México en
caso de que él gane las elecciones presidenciales”, sentencia sin más (https://bit.ly/2pTVbvf).
Entre las más excéntricas comparaciones entre AMLO y otros líderes
mundiales del pasado y el presente aventaja la imaginación del novelista
Francisco Martín Moreno, quien hace un símil entre AMLO y Mussolini,
por proclamarse “indestructible” e intentar proyectar la imagen de un
“superhombre” (http://eluni.mx/2kBJrgQ).
En otro texto nos dice que AMLO es “el hombre escogido por Putin (¡sí,
por Putin!) para llevarlo de la mano a Los Pinos”. Por eso los rusos
atacarán cibernéticamente a México a fin de “confundir al electorado
mexicano e imponerle al presidente que a ellos más les conviene”.
Esa excentricidad sólo ha sido superada por Raymundo Rivapalacio,
quien en 2006 escribió que AMLO era “la síntesis macuspana de
Robespierre y Dantón”. Al primero se parecía por su “radicalismo” y
“elocuencia oratoria”, al segundo por haber instaurado “el reino del
terror” y haberse convertido en un “insurreccional” y un “rupturista”
frente a las instituciones (http://eluni.mx/2GWcaVz).
Cuando se trata de comparar, nuestra comentocracia siempre es capaz de
sorprender. Especialmente creativos han sido Jorge G. Castañeda, a quien
la admiración de AMLO por Ortiz Mena lo acerca nada más y nada menos
que a Augusto Pinochet (https://bit.ly/2pN8o98) o Rubén Cortés, quien lo comparo en un texto con León Trosky (https://bit.ly/2G3Qbec).
Entre intelectuales públicos sobran las acusaciones ligeras: uno que
escribió en Reforma que Andrés Manuel pertenecía a una izquierda que
defiende “todas las formas de lucha” (insinuando que también estaría a
favor de la violencia), o como Denise Dresser, cuando apuntó que AMLO
daba “licencia para matar” y “permiso para agredir”.
De todas estas plumas me quedo con dos: Francisco Martín Moreno y Ana
Paula Ordorica. A diferencia de los demás, ellos no ocultan su
pejefobia —ese clasiracismo del que he hablado en mis anteriores
columnas (https://goo.gl/Ke6FHN)—:
lo asumen con orgullo. Así lo hace él cuando afirma que AMLO es un
“temerario populista” que “predica ideas falsas entre personas que sabe
idiotas” (http://eluni.mx/2g3aocu) y ella, para quien los seguidores de AMLO no son otra cosa que una “cadena de iletrados” (http://eluni.mx/2nuTVjt). Por sus palabras los conoceréis.
Profesor-Investigador del Instituto
Mora. @HernanGomezB
Profesor-Investigador del Instituto Mora; analista político, internacionalista y especialista en América Latina.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario