Cisma en Hacienda
Agradece el privilegio de servir al país
En el gobierno se han adoptado decisiones de
política pública sin sustento evidente
Se impuso en la SHCP a
funcionarios con patente conflicto de interés, afirma
Siete meses después de asumir el cargo, Carlos Urzúa
Macías renunció a la titularidad de la Secretaría de Hacienda y Crédito
Público (SHCP) por medio de una carta. Aseguró que en el gobierno del
presidente Andrés Manuel López Obrador se han tomado decisiones de
política pública sin el suficiente sustento, que le fueron impuestos
funcionarios sin conocimiento de la hacienda pública y que esto fue
instigado
por personajes influyentes con un patente conflicto de interés.
En la carta de renuncia inmediata hizo varias recriminaciones. En el resto manifestó su
profundo agradecimientoal mandatario por el
privilegio de haber podido servir a México.
Esta dimisión se dio un día después de que en el Diario Oficial de
la Federación se publicó el acuerdo por el cual Hacienda delega en la
Oficialía Mayor la facultad de promover, diseñar, elaborar, celebrar,
suscribir y administrar los contratos marco de las compras
gubernamentales.
▲
En esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento, señaló Urzúa Macías en su carta de renuncia a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. En la imagen, durante una conferencia de prensa en mayo pasado.
Discrepancias en materia económica hubo muchas. Algunas de ellas porque en esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento, señaló Urzúa en la misiva, y luego reforzó su argumentación: “Estoy convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que ésta pueda tener y libre de todo extremismo, sea éste de derecha o izquierda.
Sin embargo, durante mi gestión las convicciones anteriores no encontraron eco, reprochó el ex funcionario, y criticó a los funcionarios impuestos y los
personajes influyentes con un patente conflicto de interés, sin hacer alguna mención en particular.
Aún sin cumplirse el primer año de la administración federal ya han
renunciado siete funcionarios al gabinete de Andrés Manuel López
Obrador. Entre los más relevantes, el de Carlos Urzúa se cuenta como el
tercero. Germán Martínez inauguró las salidas de la Cuarta
Transformación al renunciar a la dirección del Instituto Mexicano del
Seguro Social (IMSS), justo con una acusación contra Hacienda.
Más allá de que la SHCP es por sí misma central al ser rectora del
destino de los dineros públicos, en la administración de López Obrador
se reforzó su centralidad con el respaldo a Petróleos Mexicanos mediante
una política que tiene como finalidad reducir su carga fiscal y el
recorte en otras dependencias para inyectar más recursos a la empresa
productiva del Estado. El plan de negocios para la petrolera es uno de
los pendientes en la dependencia.
Hasta antes de la renuncia de Urzúa, la política de austeridad
requerida por el presidente López Obrador tuvo eco. Tanto, que en el
acumulado de enero a mayo el ahorro registró un suberjercicio de 140 mil
millones de pesos.
Uno de los principales autocríticos de la austeridad del gobierno
federal ha sido el jefe de la Oficina de Presidencia, Alfonso Romo,
quien ha reiterado: “En algunas cosas se nos pasó la mano (…), así que
vamos a rectificar en decisiones mal tomadas”.
La semana pasada Romo retomó el tema al advertir que el periodo de abril a junio que acaba de concluir no se perfila
tan positivo, por el impacto de las políticas fiscal y monetaria restrictivas.
Foto Víctor Camacho
Dora Villanueva
Periódico La Jornada
No hay comentarios.:
Publicar un comentario