9/04/2008

Encuentro Internacional Ciudades Seguras para las Mujeres


Ante violencia comunitaria, Programa Ciudades Seguras en el DF

Por Guadalupe Cruz Jaimes

México DF, 4 sep 08 (CIMAC).- El Instituto de las Mujeres del Distrito Federal (Inmujeres-DF) reconoció que en la Ciudad de México la violencia comunitaria en contra de las mujeres va en ascenso, por ello es necesario que se lleve a cabo el programa Ciudades Seguras y Libres de Violencia contra las Mujeres, auspiciado por el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM).

En el DF, “estamos iniciando por el transporte público, sin embargo la violencia comunitaria se ha incrementado muchísimo, tenemos los primeros lugares. Necesitamos detenerla, castigar a los agresores y crear patrones de conducta distintos para que las mujeres y hombres podamos convivir armónicamente en el espacio público”.

Así lo informó a Cimacnoticias Martha Lucía Micher, directora de Inmujeres-DF, durante el Encuentro Internacional Ciudades Seguras para las Mujeres, el cual a partir de ayer y hasta el próximo 5 de septiembre se realiza en el Gran Hotel de la Ciudad de México.

El Encuentro reúne a representantes de América Latina e Iberoamérica, especialistas en temas género y seguridad con el objetivo de impulsar políticas públicas que aseguren el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia en la ciudad.

La titular del Inmujeres-DF señaló que la importancia del Encuentro radica en que a través de las experiencias de éxito de otras naciones latinoamericanas, “tenemos que aprender de la capacitación a policías, de las medidas de seguridad, servicios y el disfrute de los espacios públicos, para trabajar desde el Inmujeres-DF con el GDF”.

Para que Ciudades Seguras y Libres de Violencia contra las Mujeres se lleve a cabo de manera eficaz, es necesario que exista voluntad política desde una perspectiva de género, presupuesto y que se dé seguimiento a las políticas para evaluar los resultados, indicó a Cimacnoticias la maestra Teresa Pérez Vázquez del Centro de Investigación para la Equidad, Política Pública y Desarrollo.

Por ello, consideró necesario “crear estrategias adecuadas e inteligentes, para darle seguimiento y monitoreo a las acciones”.

Pérez Vázquez señaló que no existe una cultura de monitoreo y evaluación de las políticas públicas, la cual funciona para aprender de las “buenas prácticas y descartar lo que no está funcionando y eso te lleva a la ejecución de los recursos”.

Refirió que aún cuando se tiene el presupuesto “hay una infinidad de estrategias para no operarlo y dejarlo como estaba”.

La especialista en el análisis de políticas públicas aseveró que la problemática de seguridad “es grave, porque el acceso de las mujeres a la justicia está bloqueado en términos de la política pública, y centralmente está en la procuración y la administración de justicia”.

Teresa Pérez manifestó que otro aspecto que obstaculiza la aplicación y formulación de políticas públicas es la disputa entre partidos políticos, Gobiernos federal y local.

Ana Falú, directora Regional del UNIFEM región Cono Sur, señaló que los recursos son centrales en la aplicación del programa, “podemos tener instituto de las mujeres y propuestas de políticas, pero es muy importante que puedan colocar recursos para que estas áreas dedicadas a las políticas de igualdad puedan avanzar, de lo contrario nos quedamos en la misma retórica”.

Falú recalcó durante el Encuentro que el origen de la violencia contra las mujeres no es la pobreza sino la desigualdad y la discriminación entre mujeres y hombres, “es el ejercicio del poder de un sexo sobre otro”.

Por ello aseguró que para erradicar la violencia contra las mujeres en México se requieren “acciones que permitan cambiar la subordinación y desvalorización de las mujeres”.

La representante de UNIFEM afirmó que sin ciudades seguras para las mujeres no hay democracia, por lo que es tarea de los gobiernos emprender acciones en materia de políticas públicas para erradicar la violencia en contra de las mujeres.

La feminista Ana Falú señaló que el miedo, producto de la inseguridad y las violencias, representa un obstáculo para el desarrollo de la vida pública de las mujeres, ya que no sólo temen por su seguridad sino por la de sus hijas e hijos.

La inseguridad afecta los derechos civiles de mujeres y hombres de todas las edades, como “la libertad de movernos en las ciudades”, las cuales, dijo, son diferentes para mujeres y hombres, implican distintas formas de convivencia.

Falú informó que la mayoría de la población es urbana, vive en grandes aglomerados como la Ciudad de México donde, dijo citando a la Martha Lucía Micher, la violencia contra de las mujeres aún no está “bien tipificada ni sancionada correctamente”.

En América Latina el 80 por ciento de la población vive en las ciudades, mismas que se encuentran inmersas en “el bullicio y el alto consumo” de las mismas marcas que aparecen en distintas partes del mundo. Para la representante de UNIFEM “la productividad urbana destruye los tejidos sociales locales”.

08/GCJ/GG

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