8/18/2018

Un hombre puede –y debe– ser feminista


Masculinidad & Feminismo
http://tomasee.blogspot.com

Repensando desde donde ubicarse y relacionarse los hombres con el feminismo.


 Sí. Un hombre puede –y debe– ser feminista. Por supuesto, debemos serlo en el marco que entiende al feminismo como una lucha por la igualdad para mujeres y hombres, erradicando la opresión, la explotación y el sexismo que ellas llevan sufriendo histórica, social y culturalmente a lo largo de los siglos. Pero debemos hacerlo desde la posición que nos corresponde: un papel secundario en una lucha que jamás debemos liderar ni pretender comprender del todo –porque no hemos vivido en nuestras carnes lo que significa ser mujer–, en la que debemos trabajar de forma activa no para ser vistos ni aplaudidos por nuestra descubierta sensibilidad, sino para reconstruirnos a nosotros mismos desde el feminismo, entendiendo que es un proceso que jamás estará completo, porque estaremos constantemente aprendiendo.

De ahí que el hecho de ser feministas no nos convierte ni de cerca en líderes de opinión ni en cabecillas del feminismo. Sería lo mismo que una persona heterosexual pretendiese liderar las reivindicaciones del colectivo LGTBIQ… ¡Imposible! Primero, porque a pesar de su magnífica sensibilidad y empatía, jamás sabrá lo que es sentir miedo de decir “te quiero” o “me gusta esa persona”, o de ir de la mano por la calle con la persona que quiere sin preocuparse por el sitio, la hora o si hay más gente o no; segundo, porque jamás ha sentido ni vivido dentro de su cuerpo las sensaciones, pensamientos o emociones de una persona del colectivo, que no es que sean distintas, pero muchas se viven de forma diferente; tercero, porque no ha sentido la presión de ocultarse o de esconder sus sentimientos… Y podría seguir, pero creo que queda claro el concepto: podemos ser feministas, pero como aliados de la causa; con la idea certera y convencida de que somos apoyo en una lucha que, si bien nos interesa y nos beneficia como personas y como sociedad, no es nuestra y nunca lo será. Al menos no en exclusiva.

Los hombres tenemos algunas ventajas adquiridas simplemente por el hecho de ser leídos socialmente como hombres, por mucho trabajo de equidad que se esté haciendo desde distintos ámbitos de la sociedad. Todavía recuerdo el impacto que me provocó el testimonio de un hombre trans que, desde que comenzó a hormonarse con testosterona, ya no sentía miedo al ir por la calle de noche, porque el temor a una violación se desvanecía simplemente por el hecho de ser hombre. Eso nos demuestra la inmensa labor que tenemos por delante.

Esos privilegios de los que hablábamos podemos constatarlos en muchas experiencias: más libertades para chicos que para chicas, que ellas deben cuidarse más y ser más delicadas, no porque necesariamente lo sean, sino porque es lo que se supone que deben ser; más peligros para ellas en un sistema que permite sin pudor la cosificación de las mujeres, su explotación sexual, donde la prostitución está instaurada como una institución y que, además, es incapaz de erradicar la mutilación, la violencia, el asesinato sistemático, el acoso sexual, entre otras. Pero también se ve en el entorno laboral, en el universitario, en las salidas profesionales, en las carreras escogidas, en el cine, la televisión, los museos, la literatura… Y también lo palpamos en la sociedad y en esos arraigados estereotipos que persisten pese a todos los esfuerzos.

Sobre todo quedan en evidencia en la negación del machismo vigente, en la simulada ignorancia de quien dice no comprender la importancia del lenguaje, de los comportamientos sociales, de la publicidad y de los medios de comunicación en todo esto. Y más visibles son esos privilegios cuando hay personas que hablan de feminazismo como una corriente real, o de la imposición de la ideología –o últimamente también llamada dictadura– de género, una idea aberrante que no hay cómo cogerla, difundida con la única intención de minar, despreciar y desdibujar el motivo por el que estamos aquí: el fin de la opresión machista y del heteropatriarcado.

¿Suena apocalíptico? Seguro que más de alguien ha sentido correr un sudor frío por la espalda. Pero, si quitamos el populismo barato y la visión terrorífica de este motivo que nos ocupa, nos quedamos con algo que realmente no debería tener ningún tipo de contestación: la igualdad y el respeto a los demás sin importar su origen, su expresión, su ser. Es decir, una sociedad en la que los seres humanos tengamos las mismas oportunidades y derechos. Es así de sencillo.

El primer paso para ser un hombre feminista, entonces, es aprender que la lucha no es nuestra y apoyarla. Después, vendría el largo y eterno proceso de desaprender los estereotipos, deshacerse de los privilegios y de enfrentarse a todo lo que se supone y se espera de nosotros por el simple hecho de ser hombres. Y el camino para conseguirlo está precisamente al lado de las mujeres, aprendiendo de ellas y, a través del cuestionamiento interno y compartido, replantearnos todo el sistema vigente para construir uno más equilibrado e igualitario.






¡Mi cuerpo, mis Derechos!


Teresa C. Ulloa Ziáurriz

Al sureste de América Latina, el goce de uno de los derechos reproductivos de las mujeres, estaba en juego. La decisión sobre si el aborto sería ley o no en Argentina se discutió en el Senado de la Argentina, el pasado 8 de agosto. En la Argentina el aborto sólo es legal en casos de violación o cuando la vida de la madre corre peligro. Después de más de 12 horas de discusión, el Senado no aprobó la legislación que ya contaba con media sanción de la Cámara Baja con 38 votos en contra y 31 a favor al derecho de las mujeres Argentinas a decidir sobre su propio cuerpo.
En México, antes de que se diera la votación del Senado en la Argentina, las mujeres salieron a las calles en solidaridad con las mujeres argentinas y para hacer visible que en México también las mujeres mueren por abortos clandestinos.
Ciudad de México más verde que nunca
La movilización feminista unió a mujeres diversas, con ropa o pañuelos verdes –La Marea Verde, como se le nombro a este movimiento a favor del aborto legal–, con pancartas, mantas, mujeres de distintas edades, solteras, con hijos e incluso con nietos, entonaban sin parar: “¡Hay que abortar, hay que abortar, a este sistema patriarcal! ¡Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo!”.
La movilización surgió de distintivos puntos de la CDMX: Ciudad Universitaria, el Consulado de Argentina, el Ángel de la Independencia y el Monumento a la Madre. La meta: el Hemiciclo a Juárez.
Las organizadoras de este evento se dieron cita poco antes de las cuatro de la tarde en el Monumento a la Madre. Una integrante de cada grupo emitió los motivos del por qué el aborto debe ser ley en todo México —solo en la CDMX es legal desde 2008— al igual que en Argentina y toda América Latina:

“Ante un gobierno que no nos representa y no atiende nuestras demandas, es indispensable sumar esfuerzos mediante una independencia política. Que la maternidad sea libre y voluntaria”, señaló la Organización Las Rosas Rojas.
Feministas Mexicanas contra Vientres de Alquiler denunció que “el aborto es una de los temas claves en los contratos de alquiler de vientres, es un derecho condicionado. No es casual que para satisfacer al cliente se garantice por contrato un bebé perfecto, genéticamente hablando, seleccionando sólo a los embriones que cumplan determinadas características, a los que estén mejor desarrollados y se deseche al resto. ¿Tiene derecho al aborto una mujer que gesta un hijo para otros?”.

Por su parte, la Coalición Regional Contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe “Hoy, 8 de agosto Rosas Rojas, FEMVA, CATWLAC y Feministas Independientes agrupadas en el Frente Feministas de a Pie, estamos aquí presentes en solidaridad con nuestras compañeras Argentinas, con su lucha por el aborto, legal seguro y gratuito; …este acto hace un llamado a todas las mujeres mexicanas para que comencemos a organizarnos y movilizarnos para conquistar el aborto legal, seguro y gratuito en todo México. No queremos más mujeres presas, ni más mujeres muertas por abortar clandestinamente. Estamos aquí para exigir una maternidad libre y voluntaria. El aborto será ley, en un país donde asesinan a siete mujeres cada día… Sabemos que esa batalla se va definir y ganar en las calles, producto de la movilización de millones de mujeres.”
Y concluyó diciendo: “¡El único miedo que tenemos es a no luchar! ¡Educación sexual para decidir! ¡Anticonceptivos gratuitos para no Abortar! ¡Aborto Legal para no Morir! ¡Por el aborto libre, seguro y gratuito en todo México y América Latina! ¡Ni presas ni muertas por abortar! ¡Por la aprobación del proyecto de ley del aborto legal en Argentina sin ninguna modificación! ¡Por una maternidad libre y voluntaria!”
“Se trata de hacer visible que las mujeres abortamos desde el comienzo de la historia y lo seguiremos haciendo”, comentaron las integrantes de la Colectiva Feminista UAM Xochimilco. “Por ello es preciso que el Estado reconozca y garantice nuestro derecho a la vida, nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestras maternidades. El fomento y la calidad de una educación sexual y no sexista para decidir consciente y libremente, sin prejuicio. Este momento visibiliza una práctica que por mucho tiempo se ha mantenido en la clandestinidad y que pone en riesgo la vida y la salud de miles de mujeres”.
Las mujeres abortan con o sin aprobación del Estado
Muchas mujeres, tras ver la negativa de las instituciones de dar acceso a la salud, han estudiado el cómo y de qué manera pueden dar acompañamiento a quien no desea ser madre, llevando a cabo el goce de sus derechos sin transgredir la vida o estabilidad de la mujer que accede a este servicio. Estos acompañamientos se dan de manera gratuita y frente a una red feminista que está en toda la República Mexicana.
Las muertes de mujeres en abortos clandestinos, por el estereotipo y rol de género del deber ser madre, es responsabilidad del Estado, pues éste no brinda medidas de prevención ni acceso a la salud pública, otro derecho, que por ende les corresponde a las mujeres. La Ley General de Acceso a las Mujeres a una Libre de Violencia en México, señala en su Artículo 21, Capítulo V, que la violencia feminicida es “la forma extrema de violencia de género contra las mujeres, producto de la violación de sus derechos humanos, en los ámbitos público y privado, conformada por el conjunto de conductas misóginas que pueden conllevar impunidad social y del Estado y puede culminar en homicidio y otras formas de muerte violenta de mujeres”.
“En México hay 98 mujeres encarceladas por abortar y muchos de esos abortos fueron espontáneos. Es necesario que la ley nos respalde y sancione a quienes pongan trabas porque decidir cuándo y sí queremos ser madres es parte de nuestros derechos reproductivos”. Además de que no todas tienen acceso a un aborto médico. “Tiene que regularizarse su práctica para que ninguna mujer muera por abortos mal practicados ni se les señale o estigmatice. Algunas de las mujeres detenidas por abortar enfrentan juicios por homicidio de primer grado, con el agravante de parentesco, mientras que los feminicidas que matan y violan a sus hijas están libres, o los que golpean a las esposas para provocarles abortos también están libres.
El único temor es a no luchar
Antes de iniciar la marcha hacia el Hemiciclo a Juárez, entre 10 a 15 sujetos identificados como integrantes del grupo Pro-vida o la Ola Celeste se hicieron presentes en el Monumento a la Madre con un paliacate azul y con un lenguaje corporal intimidatorio y violento.
“Son ellos quienes nunca levantan la voz sobre los feminicidios, desapariciones, niños y niñas en situación de calle. Lo único que les importa es decidir sobre nuestros cuerpos (…) pero el único temor que tenemos es a no luchar”, dijo aludiéndolos una integrante de la Organización Las Rosas Rojas.
Si bien esta provocación a quienes salieron a exigir un derecho no pasó a mayores, en las redes sociales es muy diferente. Los comentarios de júbilo por parte de personas Pro-vida o profeto, como también les llama, en contra de las mujeres que están en constante lucha por los derechos de las mujeres rebosan de violencia: “ganamos”, “malditas asesinas, las hubieran abortado”, “importan las dos vidas”, “putas”, “dejen de abrir las piernas”.
Sin embargo, la victoria real es de las mujeres argentinas que lanzaron la histórica Marea Verde y contagiaron a otras de Ecuador, Brasil, Perú, Uruguay, El Salvador, España, Chile y México para luchar por un derecho fundamental: decidir sobre nuestro propio cuerpo y la maternidad libre.

Rompiendo esquemas en Afganistán: Roya Mahboob y la tecnología


Una de las 100 personas más influyentes del mundo: Revista Time


Roya Mahboob es una mujer extraordinaria. Originaria de Afganistán, país en el cual hasta 2001, ni una niña estaba inscrita en una escuela porque el gobierno islamista radical del Talibán lo prohibía. Ella logró ser la primera directora general de una empresa de tecnología en su país.

Mahboob creció en Pakistán e Irán, países donde su familia buscó refugio después de la llegada al poder del Talibán. Cuando en su etapa de adolescente descubrió las infinitas posibilidades del internet, su vida cambió. Se graduó en Ciencias de Computación de la Universidad de Herat, en Afganistán, y también cursó estudios en universidades internacionales. Fundó su propia empresa: “Afghan Citadel Software”, consultora en tecnologías de la información.

Como el avance de las niñas, adolescentes y mujeres es muy importante para ella, creó la fundación “Digital Citizen Fund”, la cual imparte cursos de educación digital para niñas y adolescentes entre 12 y 18 años. Además, fundó una plataforma digital donde las mujeres de su país pueden expresarse a través de videos, blogs o fotografías. En 2013, la “Revista Time” la nombró una de las 100 personas más influyentes del mundo.

A pesar de que Mahboob ahora vive en Nueva York, afirma que su país ha cambiado muchísimo desde el año 2001. En ese entonces, después de los ataques islamistas del 9 de septiembre, el presidente de Estados Unidos George W. Bush ordenó la invasión en Afganistán en contra de los talibanes, quienes fueron sacados del poder pero luego recobraron fuerza, y el conflicto armado se prolongó.

En 2014, el Ejército estadounidense y sus aliados se retiraron, pero el país sigue en situación de inestabilidad. La violencia obliga a miles de personas cada año a buscar refugio en otros países. Pero hay otro lado de la moneda mucho más positivo, afirma Roya Mahboob, quien fue invitada por la Universidad Panamericana en la Ciudad de México para impartir la conferencia “Digital Entrepreneurship for Global Women. The successful case of Afganhistan”,  y concedió esta entrevista a Cimacnoticias.

- Sonia Gerth (SG): Cuando una niña nace en el Afganistán de hoy, digamos en Herat (ciudad natal de Mahboob) ¿cuál es su perspectiva de la vida?

- Roya Mahboob (RM): Creo que para las generaciones nuevas las cosas han cambiado completamente. Las niñas de hoy pueden ir a la escuela, pueden ir a buscar trabajo, no tienen que casarse a temprana edad. Sí puedo afirmar que muchas cosas han cambiado, en las grandes ciudades.

- SG: ¿Y en el campo?

- RM: En el campo falta mucho trabajo que hacer pero las cosas están mejorando, comparado con el año 2001 (año de la caída del gobierno Talibán). No podemos ignorar este mejoramiento, pero vamos a necesitar un largo tiempo para lograr un cambio.

- SG: Cuando tú creciste nadie pensaba que fueras una de las primeras directoras generales de una empresa en Afganistán. Eras refugiada en Pakistán e Irán. ¿Cómo fue que tomaste este camino tan inusual para una mujer afgana, una carrera en la tecnología?

- RM: De hecho, no fui refugiada en Pakistán, sólo en Irán. En 2003, cuando conocí el mundo de las computadoras, todo cambió. Decidí meterme en ciencias de computación. En ese tiempo empezamos a programar software y dimos la licencia libre a organizaciones sociales. Pero luego tuvimos la oportunidad de conocer a gente de Silicon Valley (región en California sede de las empresas de tecnología de información más importantes del mundo), y del Programa de Desarrollo de Naciones Unidas. Y ellos dijeron: “¿Por qué no piensan en comercializar su producto?” Fue entonces cuando decidimos crear la compañía. Había varios objetivos: emplear a mujeres que se graduaran en computación, crear oportunidades de trabajo y construir un ambiente laboral seguro para ellas. Las mujeres se sienten más a gusto para programar, no tienen problemas con la familia o con la cultura cuando trabajan rodeadas de mujeres.

- SG: Seguramente encontraron muchas dificultades en el camino. ¿Puedes mencionar algunas?

- RM: Claro que sí. Digamos que ser una directora general de una compañía técnica es difícil, no importa en qué parte del mundo estés. Pero en Afganistán, se supone que las mujeres no deben trabajar fuera de casa. Hubo ataques contra nosotras, personales y profesionales. Muchos hombres no querían trabajar con nosotras. Y cuando ganamos clientes, luego no nos pagaban. Nos espiaban, nos amenazaban. Y la corrupción fue otro problema, en aquellos tiempos había mucha corrupción en el gobierno y sector público. Entonces hubo muchas dificultades, el acceso a financiación es un reto grande para una mujer, las barreras culturales en la vida cotidiana de ellas fue otro…

- SG: Y cuando ves el camino que tomaste ¿cuáles fueron las lecciones aprendidas que te llevaron a querer promover a niñas y mujeres en tecnologías de información?

- RM: Creo que en mi recorrido por la tecnología y el negocio descubrí que el internet y los medios sociales le ofrecen alternativas a las mujeres. Nos conecta con otras partes del mundo. No hay una frontera física que pueda limitar a una mujer que tiene acceso a tecnología y comunicación. Ellas pueden hacer lo que quieran. En mi caso, no había otra opción. Decidí buscar clientes fuera de Afganistán, mientras que yo me quedaba ahí. Tenía un pasaporte digital con el cual podía viajar a cualquier parte del mundo. Encontré mi inversor en Nueva York. De hecho, él me encontró, pero no importa, la compañía creció y pudimos emplear mucho más mujeres. Creo que para un país conservador, la tecnología y la educación son las herramientas claves para mejorar y para que las mujeres se conviertan en ciudadanas globales.

- SG: En el resto del mundo tenemos una muy mala imagen de Afganistán. Inseguro, corrupción, los Talibanes… pero vi en uno de tus tuits la cita: “Afganistán no es el país que fue hace 17 años.” ¿Puedes ampliarnos un poco?

- RM: Pues no sé, en la mayoría de los casos, ustedes los medios siempre muestran la parte mala. Pero hay 34 millones de personas viviendo en Afganistán. Celebramos fiestas, bodas, somos felices, nos ayudamos, vamos a la escuela, al trabajo, hacemos deporte… ¡tenemos todas estas cosas! Por supuesto, parte del país es inseguro. Hay ataques de bombas, y creemos que nuestras vidas están en las manos de Dios. La situación no es tan buena en las ciudades grandes como Kabul, pero en general, todo está bien. Si comparas con el año 2001, cuando ninguna niña iba a la escuela, hoy 35 por ciento de la población estudiantil son niñas. Hay nueve millones de niñas y niños estudiando. También en las universidades, las mujeres forman 35 por ciento de las y los estudiantes. Tenemos 30 por ciento de diputadas en el parlamento, ahora hay cuatro ministras, apuntadas por el Presidente Ashraf Ghani. Entonces cuando vemos los sectores de política, educación, negocio, hay muchos avances. Pero siempre tenemos que trabajar más duro. Por supuesto que hay problemas, y no los ignoramos. Pero hay avances también.

- SG: Pero tú también recibiste amenazas por estar haciendo el trabajo que haces ¿Cómo se expresaron?

- RM: Hay muchas cosas cuando trabajas en un ambiente conservador. No solamente está el Talibán que te envía amenazas. Pero la mafia de la industria TI está detrás de ti porque conseguiste un contrato. O la gente cuando ve que trabajas con estadounidenses, o trabajas afuera, piensan que no estas siguiendo las tradiciones, o no te adhieres a la cultura, y te odian.

Por ejemplo, instalaron un espía en mi compañía. Tuvimos que superar todo eso, pero cuando comparo con los tiempos hace ocho años, tal vez todo esto pasó porque fuimos la primera compañía con una directora general femenina. Hoy en día las cosas han cambiado. El gobierno intenta proteger a las mujeres. El anterior no dio mucho respaldo en eso, pero éste sí. Tenemos que trabajar para que estas cosas se normalicen. Cuando eres la primera en hacer lo que sea, la gente te critica, no les gusta, hacen drama, pero cuando aseguras que no sigues siendo la única en hacerlo, las cosas se normalizan. Y eso es lo que estamos haciendo. Hoy tenemos miles de estudiantes que participan en nuestros programas de tecnología, 13 mil ya se graduaron. Tenemos cien mujeres que pusieron sus empresas incipientes. Empezamos un programa donde las mujeres construyen robots. Todas esas son cosas que producen cambio. Y la gente cambia su manera de pensar sobre mujeres en la tecnología.

CIMACFoto: Sonia Gerth
Por: Sonia Gerth
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

Cómo 'Respect' se convirtió en un himno feminista gracias a Aretha Franklin


Pasarán los años y las décadas pero, inevitablemente, al recordar a Aretha Franklin siempre nos vendrá a la cabeza una canción tan pluscuamperfecta como Respect. En 1967, el mismo año en el que decidió abandonar Columbia Records por el sello Atlantic, la estadounidense gracias a ese himno consagró su carrera y pasó a convertirse en una estrella internacional. No se trataba de una mera canción de éxito, no, ya que la diva del soul reformuló el tema que Otis Redding grabó dos años antes, en 1965, dándole un significado radicalmente opuesto al de la versión original. Sin duda, ahí está la gracia del asunto y uno de los motivos por los que la intérprete de I Say a Little Prayer fue, es y será considerada una grande.

El Respect de Redding a día de hoy levantaría muchas ampollas porque destila un machismo descarado. Aquella primigenia versión del tema venía a contar la historia de un hombre que exige a su enamorada que le respete y le cuide porque él es quien, entre otras cosas, contribuye económicamente en casa. Para entenderlo de una forma aún más gráfica: la mujer de Redding tenía que tener preparada la cena de su pareja cada noche porque esa era una muestra de amor incondicional. Pero eso sí, lo que no se imaginaba el artista es que apenas dos años más tarde Franklin aprovecharía esos versos (haciendo variaciones, obviamente) para propulsar un mensaje radicalmente distinto.

El día de los enamorados de 1967 Franklin entró a un estudio de grabación en Nueva York y salió de ahí convertida en una de las primeras musas del feminismo. Su Respect nada tenía que ver con el conocido anteriormente. La artista empleaba un punto de vista totalmente distinto, ya que en su versión el foco de atención pasaba a centrarse en la mujer y es ella la que le exige a su media naranja que le respete y le trate como se merece. Esos coros de fondo que añadió, en los que se oyen “sock it to me” (lo cual podría traducirse como “dámelo”), fueron toda una declaración de intenciones no solamente para el movimiento por la igualada de género estadounidense, sino también para el movimiento por los derechos civiles.

El tema de inmediato se convirtió en un hit internacional en un momento en el que Estados Unidos estaba sangrantemente dividida. Sin ir más lejos, un año más tarde, en 1968, Martin Luther King y Robert F. Kennedy fueron asesinados, la policía norteamericana se cebó en Chicago con los manifestantes en contra de la absurda Guerra del Vietnam y miles de mujeres salieron a las calles para protestar en contra de Miss América. Resulta lógico que ante ese panorama muchos aplaudieran a Franklin por popularizar una canción y un mensaje tan necesarios entonces como en nuestros días. El poder de la música es esto.

¿Qué opinó Redding de todo ello? Su relación era cordial, por supuesto, pero al intérprete de Try a Little Tenderness no le hizo en realidad ninguna gracia que uno de sus buques insignia mutara en algo tan distinto en boca de una Franklin que, más que cantar, con su poderío vocal señalaba con el dedo a todos los machistas y conservadores de su país. “Esta próxima canción es una canción que una chica me quitó”, llegó a decir él antes de interpretar la pieza en el Monterey Pop Festival de 1967.

Aretha Franklin arreglándose el maquillaje en el backstage de un concierto en 1969 en Nueva York.


Vuelta al mundo por los NO derechos de la mujer

Situacion actual: derechos de la mujer en el mundo
www.publico.es

Nos hicieron creer que todo estaba conseguido cuando los derechos de la mujer (que son derechos humanos) son tan débiles que pasas a otra frontera y desaparecen. Tan solo basta con teclear en Internet sobre derechos de la mujer en el mundo, en teoría y práctica.
América Latina,

En El Salvador la legislación antiaborto es de las más estrictas del mundo. Recuerden el caso de Evelyn Hernández, estudiante de 18 años condenada a 30 años de cárcel por abortar de forma espontánea tras ver violada por un pandillero. Nicaragua, Honduras, Surinam, Haití y República Dominicana prohíben completamente el aborto, independientemente de la circunstancia. Solo en Cuba, Uruguay y México Distrito Federal las mujeres pueden abortar de forma gratuita y libre. 

En cambio, encontramos situaciones escandalosas donde se vulneró la libertad sexual y reproductiva de las mujeres, sobre todo indígenas, en Perú, cuando fueron sometidas a esterilizaciones forzosas entre 1990 y el 2000 bajo el Gobierno de Fujimori. Estas mujeres siguen reclamando justicia y, en esta ocasión, los provida nunca se manifestaron en contra del Gobierno. En otro orden, los países Latinoamericanos son una fuente de captación de víctimas de trata destinadas a la prostitución, fuera y dentro de sus propias comunidades. >Puebla-Tlaxcala, en México, es el núcleo más representativo de la explotación y de la prostitución. 

A ellos, añadan la captación de indígenas para grabar vídeos pornográficos. También la explotación de mujeres de Bolivia o Panamá. El derecho a la educación, aunque está contemplado, está muy limitado en las comunidades indígenas, sobre todo en las niñas, que son retiradas de las escuelas para quedarse en el hogar trabajando y cuidando. Haití, Guatemala, Honduras y Brasil representan las mayores tasas de abandono. 

Asia y Oriente Medio,

No pueden abortar las mujeres de Filipinas, Palaos y Laos; y en otros países el derecho queda entre comillas. Por ello, leemos noticias como que “Da a luz una niña de 10 años violada por su tío a la que se le negó el aborto en India”. En Filipinas, que acabamos de nombrar, las mujeres siguen luchando para que se les apruebe el derecho al divorcio. Especial eco también han tenido los matrimonios forzosos con menores en Yemen, el sometimiento de las mujeres en Arabia Saudí y vulneración de sus derechos, o las pruebas de virginidad que de forma sigilosa se hacen en diversos países. 

En Afganistán las mujeres sometidas al mandato de los talibanes tienen una anulación de sus derechos, en teoría o práctica, donde los casos de violencia machista apenas llegan a los tribunales, sin escolarización de las menores, donde el derecho al divorcio está supeditado por la gran dependencia de la mujer y sus hijos a los varones, y donde la violación es considerada un crimen moral con culpa hacia la mujer, como fue el caso de Gulnaz, violada por su primo y condenada a 12 años de prisión. Solo tras el eco de su caso fue liberada. Recuerden también los casos de lapidación en el país, como Rokhshana, joven condenada a morir a predradas bajo la acusación de adulterio. 

En Nepal y en la India las mujeres de algunas comunidades son enviadas a chozas menstruales cuando tienen la regla porque las consideran “impuras”. En ocasiones, ni siquiera les llevan comida y mueren. En cambio, administran hormonas a niñas en burdeles para que parezcan mayores y ser así sometidas a explotación sexual. Otro caso es el de Kirguistán donde la mayoría de las mujeres están casadas con los hombres que las secuestraron. 

El rapto de novias está considerado un crimen por el código penal de Kirguistán, pero la ley no se aplica. Lo mismo que en Latinoamerica respecto a la educación ocurre con las mujeres de la comunidad Baltí en Pakistán, derecho al que apenas acceden para dedicarse a la familia y al cuidado en condiciones extremas. Sin olvidar, a las niñas y niños sirios sin escolarización huyendo de la guerra. Así como a las mujeres refugiadas que son también obligadas a la explotación sexual en grabaciones pornográficas. 

África,

Egipto, Gabón, Guinea-Bisáu, Madagascar, Mauritania, República Democrática del Congo (RDC) y Senegal prohíben el aborto. La creencia en ritos y fórmulas mágicas en algunas comunidades para conseguirlo lleva a morir a muchas mujeres en abortos clandestinos. El derecho a la educación tiene un agravante de género brutal en el continente. Según datos de la UNESCO, Sudán del Sur es el peor país, seguido por Níger (con solo un 17% de mujeres escolarizadas), Afganistán, Chad o Congo. Países donde la guerra y las escuelas destruidas dificultan el acceso a este derecho, en especial a las mujeres, relegadas al ámbito doméstico. De África, proceden también una gran parte de las mujeres de trata para ser prostituidas, en especial de Nigeria. 

Las hacen contraer la deuda y en la frontera con Marruecos las violan para que se vayan preparando al horror que van a vivir en los prostíbulos de España o Europa. En zonas como Níger, Chad, la República Centroafricana, Mali y Somalía, se caracterizan por altos números de esposas niñas en matrimonios forzosos. Sin olvidar la brutalidad de la ablación genital femenina o el planchazo de pechos (Camerún, sobre todo), unido a pedir permiso para casarse o cómo los bienes matrimoniales, la propiedad de la tierra o las sucesiones quedan en manos de varones. 

En Estados Unidos, 

que ha exportado su imagen como cuna de las libertades, tenemos a Iowa que adoptó la ley más restrictiva del país. Prohíbe el aborto desde el momento en que se detectan los latidos del corazón, es decir, a partir de la sexta semana del embarazo. Capítulo aparte merecen otras fórmulas bajo las que opera el neomachismo en las mujeres. País, por cierto, donde hay más de 13.000 matrimonios forzosos al año, donde casarse con menores y violarlas es legal. 

En Europa, 

donde nos creemos tan avanzados, encontramos que el aborto es ilegal en la provincia de Irlanda del Norte (Ulster), incluso en caso de violación, incesto o malformación grave del feto. De lo contrario la mujer puede ser condenada a cadena perpetua. También vemos que en países avanzados, donde está aprobado el matrimonio homosexual, como Malta, no existe el derecho al aborto para las mujeres. País, por cierto, donde el año pasado ya hubo una fuerte polémica por la legalización de la pastilla poscoital. 

En Andorra las mujeres tampoco pueden abortar. Y países tan admirados como Suiza tienen una mentalidad muy machista, con un retraso en el aprobación del derecho al voto en comparación con el resto de Europa o con una ignorancia brutal hacia el maltrato de género, donde ni siquiera hay estadísticas que recojan los asesinatos de mujeres. Y sin estadísticas, ya sabemos, no hay problema. Por eso en Europa, aunque tengamos derechos reconocidos en teoría, la práctica y el espacio público (calle) y privado (hogar) sigue siendo un riesgo. Por eso nos siguen siguen asesinando, violando o acosando. 

En España, 

ya sabemos lo que tenemos, incluidas las advertencias de Pablo Casado de volver a la ley del aborto de 1985 porque, para él, el aborto no es un derecho. Pero, al margen de lo que denunciamos de forma constante, quiero hacer una mención expresa a la lucha laboral de las mujeres, a las Kellys, a las espartanas de Coca-Cola, a las mariscadoras de Cedeira, a las amas de casa, a las limpiadoras, a las cuidadoras… porque de ellas parte la voz para reflejar cómo la desigualdad laboral se sigue manifestando con pasmosa evidencia. La palma de todo se lo lleva, cómo no, Vaticano. Ya no sólo, como es fácil de suponer, sin derechos como el aborto o el divorcio, sino donde las mujeres ni siquiera pueden votar. 

Este artículo es injusto porque es incompleto. Es solo un rápido repaso a lo que más conocemos o nos llega y que podéis seguir completando. Una conclusión: junto a esta opresión, las mujeres de población indígenas y las mujeres más pobres siempre, siempre, siempre tendrán menos oportunidades y derechos. Queda mucha lucha feminista porque lo que el feminismo ha conseguido es solo la punta del iceberg.

Discriminación nacional feminizada


Monedero

Por: Carmen R. Ponce Meléndez*

Se han dado a conocer los principales resultados de la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2017 (Enadis). Regularmente las mujeres obtienen los primeros lugares en discriminación o bien sus efectos son más graves en ellas. El primero a destacar es el referido a la división sexual del trabajo, aquí se observa que sigue siendo muy alto el porcentaje de la población que considera a las mujeres como las personas en la que deben recaer todos los quehaceres del hogar, sin participación masculina.
En pleno Siglo XXI prevalecen los estereotipos: el hombre proveedor y la mujer a la casa, pese a que en los hechos las mujeres han compartido el “rol” de proveedoras y es indispensable construir nuevas masculinidades.
En estados como Campeche, Michoacán, Tabasco  y Chiapas, más del 30 por ciento de la población considera que el papel principal de la mujer es dedicarse a los quehaceres domésticos. ¿Dónde quedó la liberación femenina?  
En Chiapas alcanza 42.8 por ciento, ahí la mujer  realiza trabajos en el campo y también en la casa; lo mismo la que cuenta con un empleo asalariado  en la ciudad; en ambos casos sin contar con la colaboración masculina, ya sea la pareja o los hijos. Así es prácticamente todo el panorama nacional; en la Ciudad de México el índice baja a 11.6 por ciento.
Indica que todavía hay mucho trabajo a realizar para lograr una verdadera participación de todos los miembros del la familia en los quehaceres domésticos, que incluyen: limpieza del hogar; alimentación; compras de víveres; limpieza de ropa y calzado; cuidados de niñez, enfermos, discapacitados y ancianos.
Aquí es fundamental el apoyo que se debe proporcionar en los medios masivos de comunicación y en las escuelas. Mientras se sigan difundiendo esos estereotipos de “mujer-ama de casa” será más difícil avanzar. En tanto los efectos económicos son varios e importantes.
Limitan el acceso de las mujeres a un empleo asalariado; en caso de contar con un empleo tienen que aceptar jornadas cortas y de salarios más bajos; realizar trabajos en casa como el “free lance”, éste conlleva bajo salarios y cero derechos laborales; interrumpir su vida laboral y con ello afectar su jubilación. Y sobre todo, cargar con extensas jornadas de trabajo: en el hogar y en sus empleos, ya sea en la ciudad o en el campo.
También dificultan el ascenso de las mujeres a puestos de mayor responsabilidad o de dirección, por la carga de género tan fuerte que tienen. Esto no sólo sucede en el ambiente laboral sino también en el político o sindical.
Desde luego no es la única forma de discriminación de que son objetos las mujeres, pero esta es muy importante, trasciende a otros ámbitos por los efectos socioeconómicos que  provoca. Y como dicen “para muestra un botón.”
Los objetivos de la Enadis son reconocer la prevalencia de la discriminación y sus manifestaciones; captar actitudes, prejuicios y opiniones hacia distintos grupos de la población discriminados por motivos étnicos, etarios, de orientación sexual, entre otros.
Identificar las experiencias de discriminación en los distintos ámbitos de la vida social; conocer la discriminación y desigualdad que enfrenta la población indígena, con discapacidad, por su religión, las niñas y niños, personas mayores, adolescentes y jóvenes, y mujeres y por último, identificar el reconocimiento que tienen sobre el respeto a sus derechos y sus principales problemáticas percibidas, son otros de sus objetivos.
* Economista especializada en temas de género
Twitter: @ramonaponce

CIMACFoto: Gabriela Mendoza Vázquez
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

Ya tenemos el delito de sexting en Sonora ¿y recursos tenemos?


Mujer Sonora


Dentro de una sesión convulsionada del congreso de Sonora fue tipificado un nuevo delito en el Código penal del estado de Sonora.
Reformas constitucionales que causaron la inconformidad de la ciudadanía que vio en éstas la contraposición a su voluntad de las pasadas elecciones en donde en un giro inesperado la gente votó por el partido Morena en su gran mayoría y no por el PRI o PAN, como es costumbre en esta entidad.
Ante las manifestaciones de inconformidad, el edificio del congreso fue blindado con decenas de policías de diversas corporaciones, se rodeó de vallas para impedir el paso a los manifestantes, y desde luego, no se les permitió la entrada al recinto.
Como corolario de la sesión legislativa, las y los diputados salieron por la puerta de atrás, como si acabaran de cometer una falta muy grave.
A través de la Ley 288 acababan de dotar a la titular del Poder Ejecutivo de la posibilidad para hacer observaciones y devolver al poder legislativo las reformas y leyes que éste apruebe.
Particularmente la atribución del Ejecutivo de observar lo que atañe a la Constitución no existía en Sonora, por lo que la aprobación de lo que en la práctica es un poder de veto, causó condena en la ciudadanía inconforme.
En ese contexto convulso se aprobó el delito de sexting en el Código penal local. Es por ello que prácticamente su aprobación pasó desapercibida.
Sin haber sido modificada la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia del estado de Sonora, para introducir la violencia cibernética de género, en Sonora ya tenemos el sexting tipificado como delito en el Código penal.
Los integrantes de la Comisión de Justicia y Derechos Humanos de la 61 legislatura, quedaron contentos con un punto más en su récord de iniciativas presentadas y leyes aprobadas, aunque no esté armonizado con las leyes correspondientes de las que debería emanar la conceptualización.
El decreto aprobado el 8 de agosto de 2018, reforma el artículo 29 BIS, y adiciona el artículo 167 BIS al Código penal del Estado de Sonora.  Es el artículo 167 BIS el que define el delito como parte del Capítulo I referente a exposición pública de pornografía, exhibiciones obscenas y sexting.
“A quien reciba u obtenga de una persona, imágenes, textos o grabaciones de voz o audiovisuales de contenido erótico, sexual o pornográfico y las revele o difunda sin su consentimiento o en perjuicio de su intimidad, a través de mensajes  por teléfono, publicaciones en redes sociales, correo electrónico o cualquier otro medio, se le impondrá de uno a cinco años de prisión y de ciento cincuenta a trescientas unidades de medida y actualización”, dice el decreto.
Además “las penas se aumentarán en una mitad cuando el delito se cometa en contra de una persona menor de edad o que no tenga la capacidad de comprender el significado del hecho o que por cualquier causa no pueda resistirlo, aún y cuando mediare su consentimiento”.
Sin ser un delito grave, el sexting pondrá a prueba al sistema de justicia pues requerirá de peritos expertos en el tema para poder acreditar la conducta delictiva.
Si bien es cierto que es un fenómeno actual innegable, dado el incremento en los dispositivos portátiles con posibilidad de conexión a internet, también es importante señalar que ésta es una de las reformas candidata a quedarse en calidad de meramente enunciativa.
Esto es porque las y los diputados no incluyeron reforma alguna para garantizar más recursos económicos ni humanos para quienes están encargados de investigar y resolver sobre los delitos.
Esta deficiencia no es menor, pues en su edición 2018, en el “Índice estatal de desempeño de las Procuradurías y Fiscalías 2018”, Sonora figura en el último lugar nacional con déficit de Ministerios Públicos por cada 100 mil habitantes.
Sólo 2.3 por cada 100 mil habitantes mantienen a Sonora con el menor número de Ministerios Públicos per cápita.
Esto no es novedad, pues constituye la mayor carencia de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora, pues se ha advertido desde administraciones anteriores.
Plagado de generalidades, el dictamen aprobado para introducir el delito de sexting en el Código penal, no especifica el diagnóstico local realizado para concluir la necesidad de incluirlo.
Es por ello que parecería que se trata más de una acción publicitaria, para acumular puntos en la trayectoria legislativa, con un tema que no se armonizó en las leyes relacionadas, pero que ya es delito.
Valdría la pena observar que el sexting es una práctica que no siempre ocurre sin el consentimiento, pero que en el Código penal de Sonora, si bien se especifica “sin consentimiento”, el delito se llama sexting.
Por ahora la violencia de género cibernética continúa sin aparecer en nuestra Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, cuando hoy en día el internet uno de los ámbitos de emergencia para cometer agresiones y amenazas contra las mujeres.
Sin embargo, primero se tipificó el sexting como delito en Sonora. Ahora vale preguntarse: ¿Destinarán recursos para una verdadera aplicación del Código penal para castigarlo?
**Periodista integrante de la Red Nacional de Periodistas y directora del blog Mujer Sonora http://mujersonora.blogspot.mx/
Twitter: @mujersonora

CIMACFoto: César Martínez López
Por: Silvia Núñez Esquer*
Cimacnoticias | Hermosillo, Son.- 

25 años de lucha feminista para llegar a la paridad

Cuotas, sentencias y paridad

Escalaron entre resistencias de un sistema de cuotas, hasta ver materializada su presencia igualitaria con sus pares varones en el Congreso de la Unión. Así, en la LXIV Legislatura que toma posesión en septiembre, habrá 241diputadas y 63 senadoras, se quedaron a un solo un punto de asegurar la paridad.
Por vez primera el Congreso mexicano tendrá más representación femenina. Cimacnoticias realizó un recorrido por los 25 años que ha costado al movimiento de mujeres alcanzar la paridad, apoyadas en artículos y libros de las expertas en participación política de las mujeres como Clara Scherer, Adriana Ortiz Ortega, Blanca Olivia Peña y Cecilia Lavalle. 

DEL LLAMADO A LOS NÚMEROS

El sufragio femenino de 1953 permitió a algunas mujeres ocupar paulatinamente escaños en el Legislativo Federal. Estas pioneras abrieron camino a otras legisladoras, pero fue hasta 1990 que las feministas pugnaron por las cuotas de género inspiradas en el movimiento de Argentina que logró en ese tiempo la Ley de Cupos (30-70).
En 1993, las mexicanas obtuvieron la primera conquista. Se reformó el artículo 175 del Código Federal de Instituciones y Procedimiento Electorales (Cofipe) para que los partidos políticos promovieran “una mayor participaron de mujeres en la vida política del país, a través de su postulación a cargos de elección popular”.  
Para sorpresa de ellas el llamado fue atendido en la LVI Legislatura. La presencia de las mujeres como diputadas aumentó 5 por ciento y en el Senado 8; aunque en las elecciones de 1994 incrementaron los escaños de senadurías (pasaron de 64 a 128), conocidos como primera minoría.
Las legisladoras no se conformaron con un exhorto. Apoyadas en los acuerdos de la Conferencia Mundial de Beijing (1995), argumentaron, discutieron dentro de sus partidos y convencieron. El 22 de noviembre de 1996 comenzó el sistema de cuotas de género, se precisó en la fracción XXII del artículo 5º  del Cofipe, que las candidaturas a diputaciones federales y senadurías no debían exceder 70 por ciento de un mismo género.
El año siguiente, los partidos políticos postularon a más mujeres, pero en las suplencias.

COMIENZAN SANCIONES

Esta fue también una constante en las elecciones del 2000, los partidos no tenían la intención de cambiar la asimetría del ejercicio del poder, las colocaban en las suplencias o al final de las listas de candidaturas. 
Las resistencias llevaron nuevamente a las legisladoras a organizarse y avanzaron. El 24 de junio de 2002 se reformó la ley electoral; en principio, el entonces Instituto Federal Electoral (IFE) volvió a reiterar que los partidos y –agregó- coaliciones políticas, en ningún caso podían incluir más de 70 por ciento de candidaturas propietarias del mismo género, y sumó: “las listas de representación proporcional se integrarán por segmentos de tres candidaturas. En cada uno de los tres primeros segmentos de cada lista habrá una candidatura de género distinto”. Las modificaciones las presentó la diputada del PRD, Hortensia Aragón, con aliadas multipartidistas del PAN y PRI.
A quien contraviniera la ley, el Consejo del IFE le requería modificar el registro de candidaturas hasta cumplir con la cuota 70-30, o de lo contrario, ameritaban sanciones que iban desde una amonestación pública, a la negativa del registro de las candidaturas.
Los resultados fueron visibles, la cámara baja pasó del 16 a 23 por ciento de ocupación de mujeres.

CUOTA 40-60

Las presiones de las legisladoras se volvieron a mostrar en 2007, cuando aún con un sistema de cuotas eran despojadas de sus cargos para dejar en su lugar a los suplentes varones. Las diputadas Martha Tagle, Elsa del Conde y Marisela Contreras, reclamaron por la presentación 50-50 pero sólo consiguieron la cuota 40-60.
El 14 de enero de 2008 se publicaron las nuevas modificaciones al Cofipe: se llamó a los partidos a procurar alcanzar la paridad de género; se ajustó la cuota de 70 a 60 por ciento de candidaturas de un mismo género; la integración de las listas de representación proporcional se modificó por segmentos de cinco candidaturas en las que se colocara alternamente un mujer seguida de un hombre o viceversa; asimismo se añadió el deber de los partidos de destinar dos por ciento de sus recursos para la capacitación de liderazgos femeninos.
Sin embargo, en las elecciones de 2009 los partidos se burlaron de la ley y a escasos días de tomar posesión, 8 diputadas “desistieron” de sus cargos para que los ocuparan los hombres.

SENTENCIA 12624

Ante este panorama las legisladoras y el movimiento de mujeres se organizaron como observadoras del proceso electoral 2012. Crearon la Red “Mujeres en Plural”, impulsada por Patricia Mercado, Clara Scherer y Alejandra Latapí, entre otras.
Pero el Acuerdo del Consejo General del IFE afectaba su derecho para ser registradas como candidatas a diputaciones federales y senadurías por el principio de mayoría relativa, por lo que 10 legisladoras encabezadas por la feminista María Elena Chapa Hernández presentaron una demanda para impugnarlo.
El 30 de noviembre de 2011, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación emitió la histórica sentencia 12624 donde estipula que la cuota 60-40 no es una recomendación, sino una obligación; definió numéricamente que cada partido debía presentar por el principio relativo 120 candidaturas a diputaciones y 26 al Senado del mismo género; en el caso de las candidaturas de representación proporcional, mínimo 40 por ciento debían ser del mismo sexo.
Los partidos presentaron las listas de candidaturas sin cumplir los lineamientos de la sentencia, por lo que el Consejo General del IFE les dio 48 horas para que corrigieran las postulaciones. El resultado: la Legislatura 2012-2015 alcanzó la representación femenina más alta: 184 diputadas y 43 senadoras.

LA PARIDAD

El último paso a la paridad para estas elecciones fue la reforma del 5 de diciembre de 2014 cuando en el contexto del “Pacto por México” que contempló modificaciones en materia político-electoral la cámara baja aprobó la iniciativa presidencial que exigía la elaboración de una Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (sustitución al Cofipe) y una Ley General de Partidos Políticos, en las que se debían establecer las reglas para garantizar la paridad de género Constitucional, pues no sólo contempló al legislativo federal, sino su exigibilidad se amplió a los congresos locales.
Así, tras 25 años de exigencias del movimiento feminista, las legisladoras federales y locales gozarán de representación en igualdad con los hombres. El reto para ellas será ejercer el poder de la misma manera.

CIMACFoto: César Martínez López
Por: Hazel Zamora Mendieta
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

Pactan por la igualdad


Legisladoras salientes entregan agenda de género


Con 40 reformas aprobadas a favor de los derechos de las mujeres las 40 senadoras y 214 diputadas que conformaron la 63 Legislatura del Congreso de la Unión entregaron a las próximas legisladoras una agenda con los pendientes en materia de violencia, salud y acceso a la justicia que deberán resolver a partir del 1 de septiembre cuando tomarán posesión.
Algunas de las senadoras más activas en temas de género, la priista Diva Gastélum, la perredista Angélica de la Peña y la panista Marcela Torres Peimbert, pidieron a las nuevas legisladoras hacer un frente común, formar una bancada feminista, definir una agenda de género y en lugar de verse como adversarias sentirse compañeras para emprender una lucha común por la igualdad.

A menos de un mes de que las nuevas diputadas y senadoras rindan protesta, el día de ayer diversas instituciones organizaron el “pase de estafeta” para que las mujeres que obtuvieron una curul –en el primer Congreso conformado por igual número de varones y mujeres– hicieran un pacto para trabajar en conjunto.
En el acto, el presidente de la Mesa Directiva,  Ernesto Cordero, destacó de entre las reformas aprobadas por el Senado en estos seis años, la reforma para fortalecer el Instituto Nacional de las Mujeres y los Refugios para víctimas de violencia, la armonización del delito de feminicidio y la inclusión de la paridad como principio constitucional.
Si en 2012 el Senado se integró por 41.72 por ciento de mujeres; a partir de este año se conformará por 49.22 por ciento, es decir, menos de un punto porcentual para que ellas conformaran la mitad del Poder Legislativo; de la misma forma si en 2015 la Cámara de Diputados tuvo 42.8 por ciento de mujeres ahora tendrá 49 por ciento de mujeres por 48.6 por ciento.

PONER LA CASA EN ORDEN

En 2012, cuando las senadoras llegaron a sus cargos tuvieron la tarea de “poner la casa en orden”, dijo la senadora priista y presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, Diva Hadamira Gastélum. Lo primero que hicieron fue cambiar el nombre a la Comisión (que antes era de Equidad), crearon la figura de ombudsman y se pusieron a trabajar en reformas trascendentales.

Con el impulso de las legisladoras del PRI, PAN y PRD se logró la aprobación de la reforma político electoral aprobada en 2014 que elevó a rango constitucional la paridad de género en senadurías y diputaciones federales y locales. Tuvieron que cabildear para que el tema no quedara en un artículo transitorio como se planteó en un primer momento. 
Aunque las senadoras no lograron que se estableciera la paridad en la integración de los gobiernos, sólo en la postulación de candidaturas a cargos de elección, sí se consiguió impulsar la tipificación en todos los estados y sacar leyes federales como la de tortura; telecomunicación; derechos de niñas, niños y adolescentes o desaparición forzada, todas con un componente de género.

QUEDAN PENDIENTES

Las mujeres que este año tomarán el poder deben trabajar, dijo la senadora del PRD, Angélica de la Peña, para fortalecer las órdenes de protección, cumplir con las recomendaciones del Comité para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, legislar el tema de cuotas de género en el sector empresarial o reformas para reconocer los derechos de las mujeres afrodescendientes.
Para la senadora del PAN, Marcela Torres Peimbert, en estos seis años se avanzó en uno de los grandes retos que es legislar para que conceptos como violencia política o violencia obstétrica queden en la ley, para vigilar el funcionamiento de los nuevos tribunales laborales, cambar la Ley Federal del Trabajo para que las mujeres tengan salarios iguales a los de los hombres cuando realizan las mismas tareas.

Sin embargo, el reto será estar en todas las comisiones y vigilar la asignación y el ejercicio del presupuesto.
La senadora Marcela Torres, dijo que la presencia de las mujeres no es por vanidad, ni una concesión graciosa sino una causa de justicia social por lo que quienes serán legisladoras deben lograr los cambios que reclama la sociedad: detener los embarazos adolescentes, revisar el tema de pensión alimenticia, condiciones laborales y seguridad social, justicia  para las mujeres y calidad en la educación.

Esto no sería posible sin las legisladoras, sin que hicieran un frente común o sin que dieran batalla al interior de los partidos, tampoco se logrará si no hacen una agenda y si no dejan de lado los intereses particulares, “no somos adversarias, somos compañeras”, dijo.
En representación de las legisladoras que llegarán a asumir los retos hablaron la próxima senadora por Morena, Martha Lucía Micher; las diputadas por el PT, Lilia Aguilar Gil; por el Partido Verde, Beatriz Manríquez; por el PRD, Guadalupe Almaguer; por  Movimiento Ciudadano, Martha Tagle; por el PES Ana Guadalupe Pera, así como el líder del Panal, Luis Castro.

A excepción del PES, las legisladoras electas se manifestaron en contra de la criminalización del aborto y Martha Lucía Micher se comprometió a no permitir ninguna reforma a favor de la protección de la vida desde la concepción; Lilia Aguilar a ir por la no criminalización por aborto al tiempo que le advirtió al presidente del Panal que los derechos no se deben consultar, en alusión a la posición de Morena sobre la interrupción legal del embarazo.

En este acto al que asistieron académicas, feministas, integrantes de organizaciones de la sociedad civil y mujeres como la ex gobernadora de Tlaxcala y ex dirigente del PRI, Beatriz Paredes y la ex comandanta de la Policía Comunitaria de Olinalá, Nestora Salgado García, quienes serán senadoras en la próxima legislatura, se dio inicio formal al cierre de actividades de la actual Legislatura.

CIMACFoto: Anayeli García Martínez
Por: Anayeli García Martínez
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

La Política Mexicana y sus “Promotoras”

 Soma

El Jefe de Gobierno sustituto de la CDMX, José Ramón Amieva, vino a mover las cosas. Entre todos los movimientos hay uno en particular que me resulta digno para explorar en esta columna dedicada al cuerpo viviente de la mujer.

Amieva promete a las y los capitalinos que ya no se utilizarán servicios de mujeres promotoras (también conocidas como edecanes) en los eventos protocolarios.
Es común que en muchos lugares del mundo el cuerpo de la mujer se usa para lograr metas políticas. En México, en particular, las edecanes se emplean durante las campañas electorales con la finalidad de llamar la atención de los potenciales electores.
Sin embargo, cuando las campañas terminan, los cuerpos de las mujeres se siguen usando por los nuevos gobernantes con fines de promoción y otras finalidades.
El mismísimo Instituto Nacional Electoral (INE) no dudó en contratar a una modelo en un vestido muy insinuante durante los debates presidenciales en 2012. Este acto provocó una polémica notable en el país acerca de la legitimidad y moralidad de tales prácticas.
Sin embargo la situación no ha cambiado. Durante la última campaña electoral la mayoría los candidatos (para no decir todos) salieron en fotos con mujeres semidesnudas apenas cubiertas por pedazos de tela con logos y colores de los partidos políticos.
Desgraciadamente hubo casos que fueron más allá: Nueva Alianza pintó su logotipo encima de los pechos desnudos de las mujeres y después expuso al público esta mediocre parodia de “body art”.
La práctica de usar edecanes para las campañas y eventos políticos se normalizó tanto que parece ser necesario proponer una breve explicación de por qué perjudica la lucha por la igualdad de los géneros.
Rápido y simple: si las mujeres ocuparan los mismos puestos, tendrían las mismas responsabilidades y ganarían lo mismo que los hombres, el asunto sería más equitativo.
Aparte, esto sería cierto si consideráramos sólo dos sexos en la balanza de la igualdad. Pero, como bien sabemos, hay mucho más por considerar y, por lo tanto, hay posibilidades infinitas.
Una opción: el trabajo de las mujeres edecanes en política puede darse por terminado (así en unas décadas nos sentiremos avergonzados de haber presenciado esta forma de objetivización tan humillante).
Otra opción es que los políticos se pongan creativos y contraten no sólo mujeres sino también hombres y mujeres heterosexuales, transexuales, homosexuales y otros integrantes de la comunidad LGBT+ para hacer el trabajo de promoción y entretenimiento.
No sé cómo resultaría la segunda propuesta, pero de verdad sería muy estimulante de ver.
Hay otro asunto por considerar: los pechos, nalgas y labios femeninos en colores de los partidos políticos se pagan con el dinero de las campañas. Sí, básicamente los pagamos nosotras, la ciudadanía.
Incluso después de saberlo algunos seguirán comentando que es un dinero “bien invertido” o, peor aún, que el acto tiene algo que ver con la libertad de expresión de las mujeres.
De una vez por todas, vale la pena dejarlo claro: tú, que te crees muy en tu derecho lo único que haces es pagar por diversión de otros. Sí. Te sacan tu dinero y te dejan babeando.
Gracias a que se hicieron públicas algunas investigaciones periodísticas, varios de los funcionarios fueron acusados de manejar redes de prostitución, como pasó por ejemplo en el famoso caso del priista Gutiérrez de la Torre.
Aunque pocos casos terminan en sentencias reales, no cabe duda que algunas de las edecanes son chantajeadas, forzadas y engañadas a ofrecer servicios sexuales para los políticos que nos gobiernan.
Por lo tanto, los cuerpos semidesnudos femeninos en tu pantalla no representan la libertad de expresión o tu derecho de promover esta libertad. Siempre han sido y siempre serán el símbolo de poder machista en su máxima expresión.
Es importante subrayar que no todas las mujeres que trabajan como edecanes están en las redes de prostitución, ni que el hecho de mostrar el cuerpo femenino en sí es malo. El problema, y lo que se tiene que cuestionar, es cómo se usa este cuerpo y en beneficio de quién.
Finalmente, aunque la lógica de utilizar los cuerpos de mujeres se entiende (nos proporcionan dichosos “pan y circo”), quisiera creer que la vieja fórmula dejará de funcionar ya con nuestra generación, y la política será importante por sí misma – porque define cómo vivimos y cómo pensamos – y no por su forma de esclavizar el cuerpo de la mujer.
* Periodista rusa residente en México.
CIMACFoto: César Martínez López
Por: Alena Pashnova*
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

OSC chilenas propondrán despenalizar aborto hasta las 14 semanas

  Presentarán proyecto la siguiente semana

La siguiente semana organizaciones chilenas defensoras de Derechos Humanos y con trabajo en derechos sexuales y reproductivos, presentarán ante el Congreso de la Nación, el proyecto para despenalizar el aborto hasta las 14 semanas de gestación por decisión de las mujeres.

En un comunicado, las organizaciones “Mesa Acción por el Aborto” y “Corporación Humanas”, explicaron que el “Proyecto por la despenalización del aborto por decisión de las mujeres” plantea modificar los artículos 342, 344 y 345 del Código Penal chileno para que las mujeres puedan acceder a un aborto seguro hasta las 14 semanas de gestación, sin importar la causal y sin repercusiones legales.  
Cabe recordar que en Chile, el aborto es legal por 3 causales: riesgo de vida de la mujer; inviabilidad del feto; y por violación, en esta última causal cuando se trata de menores de 14 años, la interrupción puede realizarse hasta las 14 semanas. Logro que fue impulsado en 2015 y conocido como “Ley 21.030”, por la expresidenta de este país, Michelle Bachelet.
De acuerdo con las organizaciones, buscan que se despenalice el aborto al igual que en Argentina, para que las mujeres dejen de ser estigmatizadas y criminalizadas por interrumpir su embarazo, se eliminen los prejuicios que rodean esta práctica y disminuya el número de abortos en condiciones inseguras.
Las parlamentarias de diversas bancadas, Claudia Mix, Camila Vallejo, Karol Cariola, Cristina Guirardi, Daniela Cicardimi, Maite Orsini, Emilia Nuyado, Natalia Castillo y Camila Rojas, quienes apoyan el proyecto, señalaron en el comunicado que éste se presenta en un momento histórico y político a nivel latinoamericano, en el que se ha evidenciado la necesidad de generar debates que traten los Derechos Humanos (DH) y la salud pública de las mujeres y niñas.
Por su parte, las organizaciones comentaron que el Proyecto comenzó a desarrollarse a finales del año pasado por la organización “Mesa Acción por el Aborto”, pero fue concretado gracias a la inspiración y fuerza que dejó en ellas el movimiento feminista argentino con su “Marea Verde”.
Chile es uno de los países que más ha apoyado, desde marzo de este año, el movimiento y vigilias de las argentinas por la despenalización del aborto, proyecto presentado por séptima vez en el Congreso argentino donde se llevaron a cabo jornadas históricas de discusión a favor y en contra del proyecto, y de movilización en las calles argentinas.
En la última marcha realizada en Chile en concordancia con la “Marea Verde”, las chilenas fueron agredidas con bombas molotov por grupos delictivos que aún no han sido identificados y que dieron como resultado la hospitalización de tres mujeres por ser acuchilladas, dos de ellas madres de familia y una estudiante.
Ante estas acciones, las organización “Mesa Acción”, junto con otras organizaciones, realizaron una conferencia de prensa para evidenciar la vulnerabilidad en la que se encuentran las chilenas por agruparse y alzar la voz por sus derechos sexuales y reproductivos así como para denunciar la incidencia que aún tienen los grupos conservadores en la opinión pública.
No obstante, las integrantes de las organizaciones dijeron que estas agresiones que han sido sistemáticas en sus marchas no las detendrá, pues son conscientes de que la única forma de un cambio es a través de la protesta.
De acuerdo con datos del Ministerio de Salud de Chile, hasta julio de este año, se registraron 394 casos de mujeres que se acogieron en la “Ley 21.030”, de los cuales 90 por ciento terminaron en un aborto, mientras que casi 9 por ciento decidió continuar con el embarazo.
Imagen retomada de la campaña Aborto Chile
Por: la Redacción
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

Mexicanas tienen mayor riesgo de Muerte Materna en las mañanas


Estudio releva que mueren más cuando no hay especialistas en hospitales
   

En México, las muertes maternas ocurren con mayor frecuencia a las 6 de la mañana, cuando hay menos personal capacitado, y en los cambios de turno, así como los fines de semana y días festivos, por lo que es necesario que se mantenga la atención especializada de embarazadas las 24 horas del día, indica un estudio elaborado por investigadoras en salud.
El estudio “Hospitales de día, dispensarios nocturnos: fluctuaciones horarias de la mortalidad materna en la instituciones de salud mexicanas, 2010-2014” revela que si la atención médica obstétrica se hubiera mantenido con el personal calificado que atiende a las mujeres en días laborales, el valor mínimo de la Razón de Muerte Materna (RMM) en México de 2010 a 2014 hubiera sido en promedio de 34.1 decesos por cada 100 mil nacidos vivos; 22 por ciento menos de la RMM registrada, 44 muertes maternas.
La investigación de especialistas del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y el Institute Health Metrics and Evaluation de Estados Unidos, buscó determinar si las defunciones maternas en México están asociadas con la hora y el día de la semana en que se prestó el servicio, mediante un análisis de 3 mil 908 muertes maternas y 10 millones 589 mil 444 nacimientos ocurridos en el periodo de 2010 a 2014 según datos de la Secretaría de Salud.
De acuerdo con la información obtenida de estas defunciones, las investigadoras confirman que existe mayor riesgo de muerte materna (MM) en los horarios en los que hay escasez de personal: durante la mañana temprano (6:00 horas), periodo en se alcanzó una razón de 52.5 defunciones maternas por cada 100 mil nacidos vivos en el periodo estudiado.
Esto es casi el doble de riesgo que ocurre en el mediodía cuando hay basto personal en las instituciones médicas, en ese momento la RMM fue de 27.1 muertes por cada 100 mil nacidos vivos.
Estos resultados –indica el estudio- pueden ser reflejo de problemas de gestión institucional, que causa una calidad desigual de la atención obstétrica a lo largo del día.
También en los cambios de turnos en los hospitales se observan incrementos de muertes maternas (a las 7:00 horas y a las 14:00 horas), en ese tiempo la RMM es de 42.5 defunciones por 100 mil nacidos vivos. Asimismo las defunciones son significativamente mayores los fines de semana y días festivos, reveló el estudio publicado en mayo de 2018.
El factor de la fluctuación de horarios en el riesgo de muerte materna es raramente estudiado, resaltan las investigadoras, pero recientes estudios han aportado evidencia que la hora en que se da el servicio  influye en la calidad de atención obstétrica, fenómeno denominado colectivamente el “efecto del fin de semana”.
Ejemplifican que en 2015 en Reino Unido se estudiaron 1.3 millones de eventos obstétricos, encontraron que existe 7 por ciento de más probabilidades de muertes perinatales durante el fin de semana en comparación con los días laborales. En el estudio se denuncia que un servicio de calidad constate hubiera evitado 770 muertes perinatales en ese año en Reino Unido.
Las investigadoras mexicanas insisten que las pacientes necesitan atención obstétrica de calidad constante las 24 horas del día, pues es preocupante la brecha de RMM entre los turnos a diferentes horas del día en México; mientras la RMM más baja que se estimó en el estudio fue de 27.1 muertes al mediodía, una razón comparable con las que tienen países como Estados Unidos, la más alta es de 52.5 durante la mañana, que se equipara a la RMM que presentan países como Iraq o las Maldivas.
Las consecuencias de no mantener un personal médico son las que expone el estudio: mayores de tasas de mortalidad materna, complicaciones y más posibilidades de errores médicos, alertan. 

CIMACFoto: César Martínez López
Por: Hazel Zamora Mendieta
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

Exigen revisar política de combate a agresiones contra las mujeres

Mala actuación de la Conavim, afirman ONG

Señalan falta de interés del actual gobierno en esta problemática

Organizaciones peticionarias de alertas de violencia de género solicitaron a Olga Sánchez Cordero, futura secretaria de Gobernación, una reunión urgente para analizar y revisar el papel de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim).
El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas y Todos y el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria expresaron en una misiva que la saliente administración inició un proceso de debilitamiento de esta comisión.
En conferencia de prensa, representantes de dichas organizaciones selalaron que pedirán al próximo gobierno evitar continuar ensanchando los retrocesos en la política de combate a la violencia hacia las mujeres, e instaron al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, a que en breve fortalezca la Conavim.
Recordaron que desde hace tres meses enviaron una carta dirigida al secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, para expresar su preocupación por las omisiones, obstáculos y retrocesos de la comisión, sin que hasta el momento tengan respuesta.
Las organizaciones también denunciaron diversas anomalías que se han presentado en los meses recientes en la atención de las alertas de género: se ha hecho uso del reglamento a modo, en los grupos de trabajo hay ausencia de expertas en los problemas que se presentan y falta investigación exhaustiva, entre otras.
María de la Luz Estrada, coordinadora ejecutiva del OCNF, dijo que en el estado de México, en donde se decretó alerta de género en 2015, organizaciones han pedido la segunda declaratoria por desaparición. Señaló que la Conavim se ha negado a que se haga una evaluación de este mecanismo.
Por tal motivo, pidió al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México que en conjunto realicen un dictamen de la alerta de género en esa entidad.
Sobre la falta de atención a la desaparición de niñas y mujeres en Tlaxcala y Puebla, donde se han solicitado alertas de género, Patricia Bedolla, directora de Academia, Litigio Estratégico e Incidencia en Derechos Humanos, señaló que las autoridades prácticamente protegen o no consideran el tema de desaparición en estos dos estados.


Jessica Xantomila
Periódico La Jornada
Jueves 16 de agosto de 2018, p. 10

¿Saben los hombres hacer el amor?

Sexualidad & Posmachismo
www.publico.es

Sobre el desencuentro afectivo -sexual en la actual época Posmoderna entre hombres y mujeres por causas de un socialización desde la óptica patriarcal de la sexualidad masculina.

Mis amigas y confidentes jóvenes me confiesan otra preocupación que las tortura después de la de saberse engañadas por sus parejas. La torpeza que muestran, ya enamorados, en las lides de la sexualidad.
Torpes y egoístas, me dicen. No todos, añaden, pero sí la mayoría. Ellos son tan machotes, lo saben todo, y lo realizan todo rápida y bruscamente, sin tener con su pareja la delicadeza y el juego previo que toda mujer desea. Y eso después de presumir de conquistadores y expertos.
¿Se lo decís?, pregunto a mis interlocutoras, y, poniéndose encendidas me replican, oh no, no se puede decir, les ofendería. ¿Qué es, vergüenza, pudor? “Bueno sí, también, pero es que él ni te escucha ni se fija en ti. Como es muy hombre lo sabe todo”. Y mientras ellas no se atreven a manifestarles su desencanto por no molestarles ellos actúan con total prepotencia y seguridad, sin que  les inquiete la aceptación de su pareja.
Pienso en los años heroicos del feminismo, cuando salíamos de las tinieblas franquistas, y organizamos cursillos, encuentros y discusiones sobre sexualidad, ansiosas de aprender lo que la educación nacional-católica nos había hurtado. Eran los tiempos en que clandestinamente se conseguían los libros de Freud, de Melanie Klein, de Alejandra Kollöntai, de Simone de Beauvoir, de Marie Bonaparte, de Willhem Reich, que leíamos y absorbíamos como esponjas.
Las primeras lecciones fueron de anatomía, ya que la mayoría de las mujeres ni siquiera conocían su propio cuerpo. Y fue importante para aquellas generaciones lograr el acercamiento a las otras compañeras, compartir las nociones fundamentales de sexualidad femenina y exigir a sus compañeros de cama la cuota de placer que les pertenecía.
En los prematuros años 60, Eliseo Bayo y yo nos lanzamos a hacer una encuesta sobre el comportamiento sexual de los hombres españoles. Yo había comprado clandestinamente el Informe Kinsey. Aquel trabajo monumental que Kinsey, Pomeroy y Martin, los profesores de la Universidad de Indiana realizaron en los años 50 en Estados Unidos investigando la verdadera conducta de los estadounidenses en el arte de hacer el amor. No lo que dictaba la puritana e hipócrita moral oficial ni lo que presumían los textos pornográficos. Después los trabajos de Johnson y Johnson de investigación práctica con decenas de parejas que a ello se prestaron. Y publicamos unos reportajes que estremecieron a la asustada y pacata sociedad española.
No sé cuántos de mis compatriotas, que no sean profesionales de la investigación sexual, conocen hoy los trabajos de Kinsey y Johnson o la magna obra de Willhem Reich. Ciertamente no todas las participantes del Movimiento los leyeron, pero las que los divulgamos y trabajamos en su estudio y discusión llegamos a varias generaciones de jóvenes que realizaban sus primeras armas en el difícil arte de la sexualidad.
Hoy observo que de los cursillos, talleres, encuentros y debates feministas la sexualidad está excluida. Supongo que hasta el mundo feminista entiende que la liberalidad con que se expresan -tantas veces soez- los escritores, los medios de comunicación, los participantes en los programas televisivos, profesores y políticos, significa que no hay misterio ni secreto que las mujeres y los hombres ignoren sobre tal actividad humana.
Y veo,  triste y espantada, que la principal fuente de información sexual para los jóvenes, niños casi, es la pornografía. Difundida hasta la náusea por revistas y películas tiene sobre todo su soporte en Internet.
Ya en aquellos primerizos años, el Partido Feminista llevó adelante una oposición activa a la legalización de la pornografía, que comenzaba a inundar las salas de cine. No podíamos imaginar el vehículo digital. Pero sí sabíamos que la pornografía está basada en el desprecio hacia la mujer. En sus horribles productos, los hombres disfrutan impunemente de cuerpos femeninos para obtener orgasmos rápidos con prácticas agresivas y hasta crueles.
Mis discusiones con el pornógrafo más respetado de aquellos tiempos en los medios de comunicación Román Gubern, que pontificaba diariamente sobre la bondad de la pornografía, no evitaron que ya no se haga distinción entre el erotismo y la pornografía, y que los cultos, sabios, modernos y posmodernos especialistas del sexo, tacharan a las feministas de pacatas, ñoñas, reprimidas, dominadas por la moral católica, y otras lindezas semejantes. Alguno supongo que también afirmó que estábamos mal jodidas, como acusaban los estudiantes franceses del 68 a las feministas que comenzaban a plantear sus reivindicaciones. Hasta que éstas sacaron un enorme cartel que colgaron en los balcones de la Universidad de Nanterre que decía “Todas estamos mal jodidas”. Parece que indujo al silencio a más de uno.
Y esto es lo que deberíamos divulgar hoy, cincuenta años más tarde. Las nietas y bisnietas de las “soixante-huitards” siguen estando mal jodidas. Y pueden plantear las mismas quejas que sus antepasadas. Desapego, impaciencia, brusquedad y egoísmo que en tantas ocasiones rigen en los varones la relación de cortejo, seducción y consumación del acto sexual. Con una absoluta indiferencia hacia la sensibilidad, ignorancia o retardo de su compañera.
Los agresores de la Manada, los jovencitos de las últimas violaciones en Málaga, en Vitoria, en Cádiz, explican que la pornografía es su vademecum que les guía desde la absoluta ignorancia adolescente a la realización de las fantasías que abonan las imágenes que se transmiten a velocidad astronómica por las pantallas de ordenadores y de móviles. Imágenes de violaciones, maltrato, exhibición de los cuerpos y de los coitos. Humillación de las mujeres y triunfo machista de los varones.
El desprecio hacia la mujer en estos tiempos está siendo movido por las potentes empresas de pornografía, que tienen el mejor mercado: la rijosidad y la incultura de los jóvenes. Parece que la información sexual que se imparte en las diversas escuelas es incompleta, vergonzante, y destinada sobre todo a evitar embarazos y enfermedades de transmisión sexual. Y nada sobre el complejo proceso de realizar un amor placentero, sofisticado y respetuoso con su compañera.
Si ellas se atrevieran a plantear sus deseos y exigencias, ¿estarían hoy calificadas por sus compañeros de cama como reprimidas y ñoñas o los jóvenes aprenderían a aceptar verse en la imagen que ellas transmiten?
¿Aprenderían a moderar sus impaciencias, a controlar su testosterona y a disfrutar del más refinado placer de ir descubriendo los secretos de la capacidad más misteriosa y placentera del ser humano, que es la sexualidad?
¿A qué ha llevado esa proliferación de imágenes  destinadas únicamente a exhibir cuerpos hermosos de mujeres, que son utilizados groseramente por los hombres? A aumentar el consumo de prostitución y de agresiones sexuales. A creer que el placer sexual se puede comprar o alquilar como practican los prostituidores. A entender la sexualidad como violencia y no como sensibilidad, ingenio y habilidad.  Si la sexualidad masculina se satisface con cuatro prácticas elementales, ¿para qué detenerse en el cortejo, en las insinuaciones eróticas, en las caricias previas y en los diálogos excitantes? Como algunas especies animales, se va al coito rápidamente y tan contentos.
Pero no todas las especies animales son tan bruscas, en algunas el cortejo lleva muchas horas de exhibición de sus cualidades, de sus características especiales, de sus adornos y belleza. De cantos especiales que embelesan en el ruiseñor, de frotamientos repetitivos y extenuantes en el grillo, del zureo de las palomas, de la exhibición de las plumas del pavo real. Y los juegos de los homínidos, variados e ingeniosos: frotando hojas para hacer ruido y llamar la atención, jugando con ramas, practicando el sexo oral.
Y ahora son los hombres los que imitan a los más rudos y elementales de sus antepasados.