6/15/2013

Las mujeres son las más afectadas por las medidas de austeridad

Thalif Deen entrevista JOHN HENDRA, subsecretario general de la ONU



NACIONES UNIDAS, 10 jun 2013 (IPS) - La propagada crisis financiera en Europa y su negativo impacto en el Sur en desarrollo dieron pie a una ola de severas medidas de austeridad. ¿Las principales víctimas? Las mujeres.
Al menos nueve países europeos, a saber, Bélgica, Eslovaquia, España, Grecia, Holanda, Irlanda, Italia, Portugal y Rumania, están reduciendo o eliminando subsidios.

"La crisis y las medidas de austeridad tuvieron un impacto negativo en la mano de obra femenina", dijo Hendra. Crédito: UN Photo/Paulo Filgueiras
“La crisis y las medidas de austeridad tuvieron un impacto negativo en la mano de obra femenina”, dijo Hendra. Crédito: UN Photo/Paulo Filgueiras

Las medidas incluyen también la reducción o limitación de los sueldos estatales, el aumento de los impuestos al consumo y las reformas de las pensiones, de la seguridad social, del sistema sanitario y del mercado laboral.

“No hay ninguna duda de que los más pobres y vulnerables, la mayoría de los cuales son mujeres, son los más afectados por la austeridad”, dijo a IPS el subsecretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), John Hendra.

Esto ocurre tanto en países en desarrollo como industrializados, subrayó el funcionario, también subdirector ejecutivo para Políticas y Programas de ONU Mujeres.

Los hogares más pobres y vulnerables ya se han venido ajustando a las sucesivas crisis desde hace muchos años, con incrementos en los precios de los alimentos y de los combustibles, y por tanto su capacidad de resistencia es hoy limitada, indicó en entrevista con IPS.

Hendra se desempeñó también como representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en varios países, entre ellos Letonia, Tanzania y Vietnam.

En agosto de 2012, según las últimas estadísticas, el desempleo entre las mujeres era mayor que entre los hombres en 10 países de la Unión Europea: Eslovaquia, Eslovenia, España, Francia, Grecia, Italia, Luxemburgo, Malta, Polonia y República Checa.

En España y en Grecia, más de una cuarta parte de la mano de obra femenina estaba desempleada el año pasado.
Además, la brecha salarial entre hombres y mujeres se amplió en varios países, particularmente en Bulgaria, Letonia y Rumania.

Según la Organización Internacional del Trabajo, la proporción de mujeres en empleos vulnerables es más alta que la de los hombres en todo el mundo, y en algunas regiones significativamente. En el norte de África, por ejemplo, 55 por ciento de las mujeres, contra 32 por ciento de los hombres, tienen empleos vulnerables.

En Medio Oriente, la proporción llega a 42 por ciento, contra 27 por ciento en los hombres, y en África subsahariana a 85 por ciento, contra 70 por ciento.

IPS: ¿Puede la crisis financiera, propagada tanto en el Norte industrializado como en el Sur en desarrollo, socavar algunos de los logros alcanzados por las mujeres en la última década?

JOHN HENDRA: Creo que sí. Por ejemplo, la crisis y las medidas de austeridad tuvieron un impacto negativo en la mano de obra femenina. En Europa, esta decayó.

La tasa de desempleo es más alta entre las mujeres que entre los hombres en muchos países, y la brecha salarial también se incrementó. En países en desarrollo, la crisis y las medidas de austeridad llevaron a muchas mujeres al trabajo informal y vulnerable.

Como las mujeres por lo general son empleadas con contratos frágiles y no permanentes, son más vulnerables a ser despedidas en tiempos de recesión.

Las mujeres sufrieron una pérdida desproporcionada de empleos durante la crisis financiera asiática (1997-1998) y en la crisis mundial de 2008-2009.

Las medidas de austeridad también socavaron el progreso hacia una distribución más equitativa de las tareas de cuidados. Los recortes en los servicios públicos de salud y cuidados derivaron en una nueva privatización y en un regreso a los roles de género tradicionales.

IPS: ¿Y cuán severo es este revés para alcanzar los Objetivos de Desarrollo de las ONU para el Milenio (ODM) referidos a empoderamiento de género, la salud materna y la mortalidad infantil?

JH: Hay un riesgo real de que la austeridad enlentezca el progreso hacia los ODM. Como señaló hace poco la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, las medidas probablemente frenarán el crecimiento y la reducción de la pobreza, exacerbando las desigualdades.

Según el Overseas Development Institute y Plan International, una caída de uno por ciento en el producto interno bruto incrementa la mortalidad infantil en 7,4 muertes por cada 1.000 niñas nacidas vivas, contra 1,5 muertes por cada 1.000 niños nacidos vivos.

Las tasas de conclusión de estudios primarios caen durante la época de recesión. Entre las niñas, se produce una caída de 29 por ciento, contra 22 por ciento entre los niños.

En las crisis económicas, más mujeres dan a luz en su hogar en el Sur en desarrollo, y su situación nutricional y el número de chequeos médicos pre y posnatales decae. Esto socava significativamente el logro de las Metas del Milenio.

La agenda de desarrollo de la ONU para después de 2015 puede ayudar a tratar la desigualdad, mejorar el respeto a los derechos humanos y asegurar que todos los países se comprometan a la sostenibilidad, la igualdad y la erradicación de la pobreza.

Lo más importante es asegurar que la igualdad de género sea central en una nueva agenda de desarrollo, y que incluya una meta específica sobre el tema y lo integre en todas las otras metas y objetivos.

También es clave seguir de cerca el actual modelo de crecimiento y las políticas de austeridad.

Creo que en las últimas semanas se alcanzó un punto de quiebre en el debate sobre las medidas austeridad, cuando el Fondo Monetario Internacional admitió que el impacto recesivo de estas fue más severo de lo que se anticipaba, y que se identificaron errores en la información y en los análisis sobre la deuda pública en los que se apoyaron esas medidas.

"Hay una chica en nuestras sopas"


Argentina: Declaración de la Colectiva Feminista La Revuelta



Argentina, Neuquén-Patagonia, 12 jun. 13. AmecoPress/ANRed.- Romina García Hermelo, profesora de Lengua y Literatura, fue suspendida por tres meses en su cargo en una escuela pública de San Luis. Denunciada por promover en una clase de 4º año la lectura de la novela Hay una chica en mi sopa (Planeta, 2011), en la que se narra la historia de una estudiante adolescente que se enamora de su profesora.

La profesora fue sancionada por el Ministerio de Educación de la provincia de San Luis. En un primer momento la sanción incluyó no pagarle el salario, aspecto éste sobre el que luego dieron marcha atrás" denuncian desde la Colectiva Feminista La Revuelta, quienes en este comunicado de solidarizan con la docente de San Luis.

La circulación de la novela, también utilizada en el curso del año lectivo anterior, despertó -esta vez- al rebaño hetenormativo custodio de la moral sexofóbica. Activó una serie dispositivos para dejar en claro que las normas sexuales y de género van a ser defendidas.

Se desplegaron una serie de argumentos oscurantistas y autoritarios. Es una atrevida, enseña a respetar la diversidad sexual, enseña sobre el zapatismo, no cree en nada, pone en peligro el orden institucional… Es rara. No la toleramos. No la queremos en nuestros templos escolares dijeron algunas madres y padres del rebaño.
Autoridades del Ministerio de Educación de la provincia de San Luis, con una celeridad pocas veces vista, la sancionaron y suspendieron por 90 días. En penitencia, para que aprenda. Para que se discipline a los valores morales de un sector de pacatas y pacatos. Las leyes vigentes del sistema democrático parecen no importarles ni a ciertas familias ni a funcionarias y funcionarios públicos. En un primer momento la sanción incluyó no pagarle el salario, aspecto éste sobre el que luego dieron marcha atrás.

Una madre y profesora del colegio, también devota de la iglesia universal del reino de dios, presentó una denuncia penal. Prestos a proceder, la justicia desplegó retrógradas explicaciones para justificar su alianza discriminadora y hacer lugar a la denuncia. Una fiscal dice que el libro conduce a “depravar educandos”.

Mientras, grupos de estudiantes que leyeron la novela el año anterior reivindican el contenido del texto. Aluden que hablaron de temáticas que no se abordan en clase y que también les enseñó que hay que respetar a las mujeres. En voz de María Teresa Andruetto, “La lectura es un instrumento de intervención sobre el mundo que nos permite pensar, tomar distancia, reflexionar, una espléndida posibilidad para dar lugar a las preguntas, a la discusión, al intercambio de percepciones y a la construcción de un juicio propio”.
Nos preguntamos ¿qué poder tiene el mundo ficcional para la constitución de las subjetividades? La literatura no refleja la realidad, crea nuevos mundos, con nuevas palabras y nuevos significados, generando así la plurivocidad de sentidos. ¿Será que saben que el texto puede ser un lugar privilegiado para lo no dicho, para que estudiantes con pensamiento autónomo repongan allí espacios vacíos que se le presentan? ¿Será que temen lo que eso puede desatar/les? Vigilar, castigar, intimidar, disciplinar, aleccionar a Romina García Hermelo y a través de ella, a otrxs que osen exceder límites. Mensajes de una pedagogía de la sexualidad que desata pánicos morales y sexuales para controlar cuerpos, géneros, mentes, sexualidades y vidas.

Llamamos a solidarizarnos con Romina García Hermelo, difundiendo esta injusta situación en cada lugar de activismo y militancia, especialmente en las aulas de escuelas, institutos de formación docente, facultades, espacios de educación popular. Hagamos de esto un debate político-pedagógico que colabore en seguir desmantelando las lógicas del he-terror-sexismo y que presione para que se levante la sanción a la compañera docente.

Exigimos, en consonancia con las convenciones internacionales de derechos humanos y derechos de la niñez y adolescencia junto con las leyes nacionales vigentes: 26.150 (Programa de Educación Sexual Integral; 26.485 (Para prevenir, sancionar y erradicar las violencias contra las mujeres); 26.783 (De Identidad de Género) y 26.618 (Matrimonio Igualitario- Matrimonio Civil), que:

1) De manera inmediata se deje sin efecto la sanción y suspensión a la docente.

2) La Comisión Directiva de la CTERA exija la inmediata incorporación de la docente a su cargo.

3) Las autoridades del Ministerio Nacional de Educación y del Programa Nacional de Educación Sexual Integral intervengan haciendo valer los derechos de la docente y los derechos de todo el estudiantado a recibir educación sexual integral antidiscriminatoria y celebratoria de las disidencias.
Foto: ANRed.

El infierno no contado de las prisioneras de Auschwitz


Ya fuera como activistas, como prostitutas o como prisioneras regulares, miles de mujeres sufrieron las tremendas condiciones de vida del campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau durante el nazismo.



Reclusas en Auschwitz-Birkenau./ Cristina E. Lozano
Reclusas en Auschwitz-Birkenau./ Cristina E. Lozano

Los judíos, encabezados por el artículo determinado masculino plural que apunta a un colectivo muy concreto, con un género bien definido, son los protagonistas más mencionados de uno de los capítulos más negros de la historia del viejo continente, al ser castigados sistemáticamente por el régimen nazi. Pero también miles de mujeres, judías y no judías, niñas, madres, abuelas, militantes políticas, médicas, abogadas, solteras, casadas y lesbianas fueron víctimas de los horrores perpetrados en el mayor campo de concentración y exterminio de Polonia. Algunas de ellas se atrevieron incluso a combatirlos en el marco de los movimientos de resistencia organizados dentro del lager de Auschwitz-Birkenau, Oświęcim-Brzezinka en la lengua del lugar.

El 19 de marzo de 1942 tuvo lugar el primer asesinato colectivo de prisioneras. En total 144 jóvenes polacas
Estas mujeres casi anónimas, para muchos desconocidas, quizá no escribieron diarios de mocedad que muchos años después se convirtieron en best seller, pero se dejaron la piel por intentar salir de aquella infesta cárcel en la que fueron confinadas y, muy especialmente, por hacer llegar al exterior información sobre lo que allí dentro ocurría.

“Estábamos convencidas de que nunca saldríamos de aquel infierno, y queríamos que el mundo supiera todo algún día”, explica Vera Foltynova, una arquitecta checa judía arrestada por su militancia comunista que, durante su estancia en el campo, trabajó en la oficina central de construcción de las SS [cuerpo de combate de elite] desde dónde se las arregló para sacar planos de sus instalaciones y dibujos de los crematorios y cámaras de gas.
Foltynova, además de filtrar documentos, consiguió salvar la vida. Su testimonio fue recogido por Hermann Langbein en el libro People in Auschwitz y su retrato cuelga hoy en una de las paredes del barracón número 15 de Auschwitz I, un extremadamente ordenado complejo de barracones visitables que dejan constancia del horror que allí se vivió, entre otras cosas, y principalmente, para que en el futuro no vuelva a repetirse.

“Las trabajadoras del burdel estaban obligadas a mantener relaciones con unos seis hombres diferentes al día”, afirma Laureen Rees, periodista de la BBC

Pero la imagen de la arquitecta no está sola en esa pared. La acompañan otros rostros en blanco y negro, de compañeros y compañeras, como Ana Giuseva, Janina Kowalczyk, Krystyna Cyankiewicz, Wiktoria Klimaszeweka, Wanda Marossanyi y Antonina Platkowska. Todas ellas formaron parte la resistencia organizada dentro de Auschwitz-Birkenau; igual que Danielle Casanova, activísima comunista francesa de ascendencia rumana arrestada por ayudar al filósofo marxista de origen húngaro Georges Politzer, que tuvo que trabajar como dentista en la enfermería del lager; y que Stanislawa Rachwalowa, joven comunista polaca que, tras salvar la vida en el campo, fue condenada a muerte por su actividad política en la cárcel de Montelupich (sentencia que finalmente no se ejecutó). En la prisión de Cracovia fue prisionera junto con María Mandel, la terrible supervisora de la sección femenina de su campo quien, antes de morir, le pidió perdón por todas las vejaciones a las que la sometió durante su internamiento, según escribe Mónica González Álvares en Guardianas nazis: el lado femenino del mal.

En este inmenso campo de concentración y exterminio tampoco las mujeres se libraron de las ejecuciones en masa. El 19 de marzo de 1942 tuvo lugar el primer asesinato colectivo de prisioneras. En total, 144 jóvenes originarias de Silesia fueron asesinadas con un tiro en la nunca como castigo a su actividad dentro del movimiento de resistencia, como recuerda un escrito que puede leerse en el pabellón que repasa la historia del pueblo polaco durante la Segunda Guerra Mundial.

El prostíbulo de lager

Uno de los capítulos más desconocidos de la historia de Auschwitz-Birkenau es el que hace referencia al prostíbulo en él ubicado. Laurence Rees, historiador británico y editor de la BBC, ha encontrado varios testimonios que sostienen su existencia, de la que nada recuerdan los paneles explicativos del campo y que raramente se encuentra en los libros.

Cristina E. Lozano
Cristina E. Lozano
En Auschwitz: los nazis y la “solución final”, un extenso trabajo que la prestigiosa cadena de televisión hizo serie, Rees explica que la mayor parte de las trabajadoras del burdel eran internas de Birkenau y estaban obligadas a mantener relaciones con unos seis hombres diferentes al día. “La experiencia de las mujeres de este prostíbulo es una de las historias ocultas sobre el sufrimiento en el campos, y tiene ciertas semejanzas con el caso de las de las mujeres de solaz coreanas, sometidas abusos sexuales de los soldados del ejército japonés. Pese a ello, las mujeres que trabajaban en el prostíbulo no parecen haber despertado en su momento tanta compasión cuanto la envidia de los demás prisioneros”, defiende el historiador.

Ryszard Dacko fue uno de los prisioneros que utilizó los servicios de este barracón. Según él mismo ha relatado, mantuvo relaciones sexuales con Alinka, una “muchacha muy agradable, que no se avergonzaba de nada, le daba a uno lo que quería”. Él, que en 1943 era un bombero de 25 años, llevaba tres años y medio arrestado, “tres años y medio sin una mujer”. Dacko tiene una opinión muy personal de las condiciones a las que estas mujeres eran sometidas durante su estancia en el campo: “A las chicas se las trataba muy bien, tenían buena comida, se les permitía dar paseos. Sólo tenían que hacer su trabajo”.

Jozef Paczynski, que también pasó por una de las habitaciones del burdel, detalló su funcionamiento. Primeramente los reclusos obtenían un vale nazi para acceder al barracón y, una vez allí, pasaban un examen médico. Tras la revisión, “participaban en un sorteo para ver a cuál de las habitaciones de arriba (y por tanto a cuál de las prostitutas) debían dirigirse y en qué orden habrían de hacerlo. Cada 15 minutos se tocaba una campana como señal para que todas las prostitutas cambiaran de cliente”.

Durante su visita, a Paczynski le tocó ser el segundo de la habitación nueve que, como todas, tenía una gran mirilla en la puerta. Cuando la campana sonó entró rápidamente a la estancia, donde encontró al anterior preso aun subiéndose los pantalones. “Desgraciadamente fue ‘incapaz de funcionar’ después de ello, así que se sentó en la cama y estuvo charlando con una ‘elegante y bonita muchacha’ durante el tiempo disponible”, relata Rees.

“Las lesbianas no fueron catalogadas como homosexuales dentro del campo. Eran vistas como asociales pero sólo unas pocas fueron hechas prisioneras por su condición sexual”

El historiador sabe que la cuestión del burdel de Auschwitz es muy delicada. En parte porque cuestiona la moral de los prisioneros que lo utilizaron, pero también porque quienes niegan el Holocausto pueden utilizar su existencia como argumento para reforzar la tesis de que Auschwitz-Birkenau es un lugar muy distinto del descrito por la historiografía tradicional.

Lesbianas en Auschwitz

Parece que la intención era que el prostíbulo contribuyera a la desaparición de las relaciones homosexuales por parte de los hombres, algo penado por la legislación nazi. La homosexualidad misma podía ser motivo de internamiento en el campo, y a los reclusos arrestados por esta causa se les obligaba a llevar cosido un triángulo rosa a sus harapientos uniformes. Las lesbianas sin embargo no fueron catalogadas como homosexuales dentro del lager. “Eran vistas como asociales –personas que no se comportaban de acuerdo a las normas y que, por tanto, eran susceptibles de detención e internamiento– pero sólo unas pocas fueron hechas prisioneras por su condición sexual”, señala el United States Holocaust Memorial Museum.

Según esta fuente, en comparación con los hombres, los casos en que las lesbianas fueron arrestadas por su condición sexual fueron raros, lo que no quita para que mostrar abiertamente su sexualidad en el campo resultara peligroso. “Las lesbianas sufrieron la misma discriminación que el común de las mujeres, a quienes los nazis adjudicaban el papel de esposas y madres”, señala la institución.

En este contexto, las lesbianas no fueron perseguidas sistemáticamente durante el Tercer Reich, pues su actividad sexual no estaba explícitamente penada por ley o, al menos, no tanto como en el caso de los hombres. No obstante, sí que sufrieron penurias económicas siendo obligadas a trabajar por salarios míseros durante la guerra, como cualquier otra mujer. En este caso, al no compartir su vida con un varón, no podían tener ese dinero de más que a las casadas les reportaban los ingresos de sus maridos quienes, por el mero hecho de ser hombres, recibían una retribución mayor.
Barracones de mujeres./ Cristina E. Lozano
Barracones de mujeres./ Cristina E. Lozano

Infierno cotidiano en el campo

El común de las mujeres confinadas en Birkenau, donde se establecieron una multiplicidad de barracones exclusivamente para reclusas, no era ni activista, ni prostituta, ni lesbiana. Allí la vida era dura, mucho más de lo que cualquier película puede recrear, y estaba marcada por el hambre, el frío y la muerte. Tan pronto sus moradoras llegaban allí su existencia se convertía en una pesadilla.

“Sin pelo, cubiertas de harapos, despojadas bruscamente de nuestra personalidad e identidad. Nuestro aspecto era increíble”, Violeta Friedman, superviviente

“Mi hermana y yo junto con todo el grupo fuimos conducidas hacia un lugar donde nos ordenaron desnudarnos y dejar nuestras cosas. Nos cortaron el pelo y nos afeitaron el vello de todo el cuerpo, nos hicieron pasar a una habitación con duchas de desinfección y después, mojadas y temblorosas, nos tiraron unos harapos y unos zuecos. Así nos hicieron salir al frío nocturno. Sin pelo, cubiertas de harapos, despojadas bruscamente de nuestra personalidad e identidad. Nuestro aspecto era tan increíble que a Eva y a mí nos costó mucho reconocernos”, cuenta Violeta Friedman en Mis memorias: [testimonio dramático, lúcido y combativo de una superviviente del holocausto nazi].

Esta superviviente del campo, cuyo amargo testimonio sirvió para condenar al dirigente nazi Leon Degrelle, recuerda las penosas condiciones de su día a día en el lager: “La mayor parte del tiempo lo pasábamos tiradas en nuestro jergones. Los barracones tenían dos hileras de literas a lo largo de las paredes. Cada litera tenía tres pisos pero el espacio entre ellos era tan pequeño que no se podía estar sentado. En cada uno dormíamos 12 mujeres, unas en un sentido y otras en otro. Sólo dos veces al día nos dejaban salir a las letrinas y al lavabo, pero incluso aquello suponía un sufrimiento pues teníamos que ir todas a la vez y había peleas por llegar antes. A veces me han preguntado cómo nos las arreglábamos durante los días de menstruación. Lo cierto es que ninguna de nosotras tuvo la menstruación mientras estuvimos allí”.

Friedman, una niña por aquellos días, habla de hambre, de que su único sustento era una ración de pan de menos de 200 gramos con “una pizca de queso podrido y viscoso”, y “una especie de agua caliente en la que flotaban algunas cáscaras sucias de patata” que bebían directamente de la olla, una por cada 12 personas. “Nos turnábamos para beber de la misma forma que lo harían los animales mientras la arena y la tierra rechinaban en nuestros dientes”, asegura. Con esta alimentación no tardó en convertirse en una musulmana [término utilizado de forma despectiva para denominar a las prisioneras que estaban en los huesos, a dos pasos de la muerte], “había llegado a ese estado esquelético en el que parece imposible que una persona pueda aún tener aliento. Tenía grandes descarnaduras, una en la boca y otra en un pie. Esa última etapa sobresale de una manera especial en mi memoria sobre el resto. Ya sólo quería morir”.

Peor suerte que ella corrieron los varios cientos de mujeres, mayormente judías, que fueron utilizadas como conejillos de indias durante los experimentos de esterilización del ginecólogo alemán Carl Clauberg, entre abril de 1943 y mayo de 1944, realizados en el bloque 10 de Auschwitz I. Algunas murieron tras recibir tratamiento, otras fueron directamente asesinadas para practicarles autopsias. Las pocas que sobrevivieron sufrieron daños irreversibles.

Maletas en Auschwitz./ Cristina E. Lozano
Cristina E. Lozano

Nuevas tecnologías: nuevas violencias y enormes opciones



Celulares, internet y las redes sociales en particular se han convertido en una herramienta fundamental para el movimiento de mujeres en la visibilización de sus problemáticas y el desarrollo de estrategias de empoderamiento. Pero al mismo tiempo, están siendo un terreno fértil para el desarrollo de nuevos tipos de violencias. Organizaciones sociales tomaron el tema para combatirlo e interpelar a los Estados.
Por Belén Spinetta
COMUNICAR IGUALDAD- Hace poco más de un año Facebook, la red social con mayor dest1ticsalcance del planeta, bloqueó una foto que yo había cargado y que mostraba el torso descubierto de una mujer. Era una expresión artística que fue mal interpretada como ofensiva por mostrar un desnudo. “El objetivo de estas políticas es garantizar que Facebook sea un entorno seguro y de confianza para todos los usuarios, incluidos los muchos menores de edad que lo usan”, señalaba la advertencia oficial que dejaron. Sin embargo, hasta el día de hoy sigo denunciando páginas que fomentan la violencia contra las mujeres y la pedofilia, y sin embargo muchas de ellas nunca fueron levantadas de la red. 
Días atrás, gracias a la presión ejercida por organizaciones de mujeres, las autoridades de la misma red social anunciaron que van a procesar más quejas para eliminar el contenido humorístico referido a la violencia sexual. La promesa incluye mayor capacitación a su personal de acuerdo a la orientación de los grupos de mujeres y expertos legales. El activismo de las organizaciones , potenciado por las redes sociales, logró un compromiso público fundamental.
La violencia ejercida contra mujeres y niñas a través de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICS) vuelve a aparecer en escena. Al mismo tiempo, en la Declaración final de la 57ª Sesión de la Comisión sobre la Condición de la Mujer de las Naciones Unidas (CSW) –realizada en marzo del 2013 en Nueva York-, que este año estuvo dedicada a abordar la violencia, se tomó a las TICS como uno de los ítems a trabajar para “enfrentar” las causas estructurales y subyacentes y los factores de riesgo de la misma.
dest2ticsUn marco para la acción
No se puede indagar en las TICS sin partir de la premisa de que el uso de las mismas acarrea riesgos y beneficios y que su análisis en torno a la desigualdad de género debe ubicarse en el marco general de las múltiples discriminaciones que sufrimos las mujeres. Las miradas unilaterales sobre uno u otro aspecto pueden fomentar conclusiones parciales y tornarse riesgosas.
En este sentido, la Declaración sobre Prevención de la Violencia en Mujeres y Niñas aprobada a mediados de marzo en la 57ª Sesión de la Comisión sobre la Condición de la Mujer de las Naciones Unidas (CSW), señaló los aspectos positivos  y negativos en torno al uso de las TICS. Por un lado instó a los Estados firmantes a apoyar el desarrollo y la utilización de la tecnología de la información y  las comunicaciones y de las redes sociales como recurso para el empoderamiento de  las mujeres y las niñas, incluido el acceso a la información sobre la prevención de la violencia contra ellas y la respuesta a esa violencia”. Mientras que por otro lado, remarcó la importancia de diseñar mecanismos destinados a combatir la utilización de ese tipo de tecnología y de redes para cometer actos violentos contra las mujeres y las niñas, en particular el uso delictivo de la tecnología de la información y las comunicaciones para el acoso sexual, la explotación sexual, la pornografía infantil y la trata de mujeres y niñas, y las nuevas formas de violencia, como la intimidación cibernética, el ciberacoso y las violaciones de la privacidad que ponen en peligro la seguridad de las mujeres y las niñas”.
En gran medida, los aspectos que toman las resoluciones de la comisión se vinculan a las acciones y el activismo en torno al tema que vienen realizando diferentes organizaciones de la sociedad civil.  Una de ellas, es la Campaña Dominemos la Tecnología (http://www.dominemoslatecnologia.net/) impulsada por la Asociación para el Progreso de las Comunicaciones (APC). Recientemente, en Argentina, la Fundación para el Estudio y la investigación de la Mujer (FEIM) lanzó también una campaña que promueve el uso de las TICS para la promoción de los derechos de mujeres y niñas, y alerta sobre los riesgos y formas de violencia en los entornos digitales.
Interpelar a las mujeresdest3tics
Hostigamiento, denigración, suplantación de la identidad, violación de la intimidad, ciberacoso, son algunas de las manifestaciones de la violencia que se ejerce a través de las TICS.
En Necochea, provincia de Buenos Aires, el Tribunal Oral en lo Criminal 1, acaba de condenar a diez años de prisión, por corrupción de menores, a un hombre que acosó sexualmente a una nena de 9 años a través de Facebook. El hombre la conoció a través de un perfil falso en el que él se presentaba también como una niña aproximadamente de la misma edad que sus acosadas. 
“A partir de los relatos de las mujeres que comienzan a hallar en sus teléfonos móviles, cuentas de correo y en redes sociales, mensajería instantánea, blogs o publicidades en formato online nuevas expresiones de la violencia que se traducen en violación a la intimidad, control por parte de sus parejas o agresiones a sus puntos de vista, es que surge la necesidad de visibilizar las acciones de esta campaña” explica a COMUNICAR IGUALDAD Florencia Goldsman, manager en Facebook de Dominemos la Tecnología. Por su parte, Mabel Bianco, de FEIM, comenta que su iniciativa está especialmente dirigida a las mujeres más jóvenes, con la intención de promover un uso responsable de las TICS y alertar sobre los riesgos con los que pueden encontrarse: “Planteamos que internet es un espacio público como cualquier otro, en el que hay que tomar algunos recaudos para proteger tu privacidad e integridad personal”.
Goldsman explica que el hostigamiento en línea (también conocido como ciberacoso) es el uso de las TICS para monitorear, rastrear y acosar a alguien, provocando angustia y temor por su seguridad personal. Esto puede incluir el envío de amenazas o acusaciones falsas vía blogs, en salas de chat, o vía teléfono móvil. También puede incluir el envío de comunicación no deseada y repetida, frecuentemente con insinuaciones sexuales; el robo de identidad o información personal; espiar, registrar o rastrear el uso de la computadora o internet sin permiso. “A veces estas amenazas escalan hasta salir del ámbito digital a la realidad física. El hostigamiento en línea puede limitar severamente la capacidad de participación y uso libre sin aprehensión o miedo de las TICS por parte de las mujeres, asevera.
Es necesario aclarar que ambas campañas utilizan las TICS para llegar con su mensaje. Partimos de una visión positiva, entendiendo a internet como un herramienta fundamental para la defensa de los derechos de las mujeres y niñas, un espacio donde se construye conocimiento, se intercambia información con personas de cualquier parte del mundo, pero siempre a partir de un uso adecuado y respetuosos con el resto de los/as usuarios/as de internet”, argumenta Bianco.
Desde Dominemos la Tecnología han generado un espacio que brinda información, promueve el intercambio de experiencias y la participación activa de las usuarias. Asimismo brinda una amplia serie de herramientas para usar y reflexionar acerca de la problemática. Sobre estos aspectos vinculados al ciberactivismo comenta Goldsman que han realizado videos y monólogos que tratan esta cuestión de manera creativa y no lineal: “Buscamos generar debates que sirvan para no demonizar las TICS pero sí que ayuden a una utilización consciente, empoderadora y creativa”. Además utilizan Twitter y Facebook para recibir ideas, adhesiones y también vincularse a otras campañas.
Un tema a tener en cuenta es que no existen datos sistematizados sobre la incidencia de estas violencias. En este sentido, Mabel Bianco apunta que es muy difícil que se realicen las denuncias y además, “si todavía no hay un registro unificado de la cantidad de víctimas de violencia física, establecido en la ley 26485, de 2009, menos aun esta que todavía no hay ley”. En tanto, la campaña Dominemos la Tecnología ha construido un mapa colaborativo en el que invitan a denunciar y mapear estos casos específicos. Explica Florencia Goldsman que intentan construir a partir de allí la mayor cantidad de antecedentes que sirvan para consolidar un histórico actualizado de casos y poder articular con posibles legislaciones que ayuden a tomar en cuenta estos tipos de violencias.
Lila Pagola, docente e Investigadora de la Universidad Nacional de Villa María, opina que estas campañas de prevención de la violencia en las TICS son valiosas pero advierte sobre la importancia de ahondar suficientemente en el tratamiento de las problemáticas, para evitar que se instalen temores de tipo genéricos que pudieran alejar aún más a chicas y adolescentes de los beneficios que les podrían aportar las TICS. “Los adultos pueden sentir temor de que algo les pase, y elegir negarles la experiencia antes que entender cómo prevenir los riesgos, en base a información que permita valorar más adecuadamente esos riesgos, con autonomía. Creo que en todas las iniciativas que piensan y actúan sobre los usos que las mujeres hacemos de las TICS el objetivo final es ganar autonomía para decidir, empoderarnos”, remarca.
En relación a este aspecto, la española Montserrat Boix, comunicadora social experta en ciberfeminismo, afirma que las TICS están cambiando nuestra vida, ofrecen nuevas posibilidades y se impone el aprendizaje sobre cómo usarlas.  Apunta que quizás el problema sea la falta de formación sobre la utilización adecuada: “Las y los jóvenes sobre todo experimentan pero no suelen reflexionar sobre el para qué usar las herramientas y el cómo. Quizás este es el déficit. Tenemos que aprender a gestionar la información que ofrecemos sobre nuestra intimidad, decidir aquellas cosas que queremos compartir y las que no”.
Boix reflexiona en torno a algunos debates actuales y apunta que “si bien un principio se pensó que la construcción del nuevo espacio digital, la incorporación de contenidos, podría darnos una oportunidad para eliminar o al menos disminuir la discriminación”, lo cierto es que el mundo virtual no es diferente al mundo presencial, la discriminación y el sexismo están en todas partes y está instalada en la red también.
dest4ticsActivando por la red
Es indudable el enorme potencial que estas herramientas tienen para aportar al cambio social, al debate de ideas y a la masificación de las reivindicaciones de las mujeres.
En los últimos años han surgido distintas iniciativas y grupos que se organizan desde Internet y que vienen teniendo incidencia real. El caso emblemático de nuestro país quizás sea RIMA web, un proyecto de comunicación feminista que nació en el 2001 y fue creciendo hasta convertirse en un gran espacio de debate, colaboración e intercambio de información a través fundamentalmente de una lista electrónica que nuclea a mujeres de todo el mundo emparentadas por su feminismo. Cómo explican en el sitio,  RIMA “se realiza a través de una lista de distribución por correo electrónico homónima, dedicada a la información y el intercambio entre mujeres feministas, periodistas, organizaciones del movimiento de mujeres, investigadoras, estudiantes, y activistas del país y también de países de Latinoamérica”.
En tanto, las redes sociales del momento (Facebook y Twitter) están siendo tomadas por el activismo en las temáticas para impulsar distintas acciones. En 2012, un grupo de amigas de una joven neuquina –Florencia Penachi- desaparecida en Buenos Aires en 2005, presuntamente en manos de una red de trata, lanzaron una iniciativa en Facebook para reclamar por su aparición, denunciar este flagelo y fomentar el compromiso de otras personas. El Muro Contra la Trata, consiste en una página en la que las personas se sacan una foto sosteniendo alguna consigna alusiva al tema. La respuesta que tuvieron fue masiva y el muro sigue funcionando.
Asimismo, fue también a través de estas redes sociales que comenzó una campaña para sacar del aire la publicidad de la cerveza Schneider “Perdón”.  Se armó en Facebook el grupo “Repudio la publicidad de las cerveza Schneider” y el Twitter se difundió a partir del hashtag #perdon.  El repudio fue tan masivo que finalmente la empresa decidió levantar la campaña..
Otros grupos, utilizan estas herramientas para el activismo en el espacio público. Es el caso de Martes Rojo, un movimiento barrial independiente de acción ciudadana que se organiza semanalmente  por las redes para arrancar los volantes de oferta sexual de la vía pública.
La creatividad de las mujeres da espacio también para el humor. “El cibermundo está dominado por el humor sexista, y muchos de los famosos memes son una prueba de ello. Nosotrxs lxs feministas también queremos reírnos mientras dinamitamos el heteropatriarcado”, así se presentan las autoras de la página Memes Feministas quienes vienen a romper con la estructura humorística predominante en Facebook.
Recientemente nació la Red Feminista Internacional,  un espacio creado por militantes francesas, canadienses, alemanas, tunecinas, marroquíes y españolas que buscan conectar a las activistas de todo el planeta. Se plantean desarrollar en la web un mapeo para hacer “visibles a las feministas (protegiendo aquellas que quieren mantenerse en el anonimato) y mostrar la fuerza que representan tanto en cada país como en el ámbito internacional, enmarcadas “en un contexto económico difícil en el que los derechos de las mujeres son cuestionados de manera cotidiana nos parece importante unir nuestras fuerzas para hacernos entender”.
Entre los riesgos y las potencialidades, avanza la batalla de las mujeres para poner fin a su opresión.  Las TICS ofrecen nuevos escenarios para la misoginia, pero también para el activismo. La lucha está en inclinar la balanza a favor de nosotras.
Notas relacionadas:

Por ser mujeres


Madrid, 11 jun. 13. AmecoPress. Dos nombres de mujeres han estado esta semana ocupando tiempos y espacios de las que somos militantes feministas. Esos dos nombres son, por supuesto, Beatriz y Mari Carmen.

La primera casi pierde la vida por un embarazo que no le permitieron interrumpir cuando había un alto riesgo para su vida e incluso el 29 de mayo tuvo que mediar la Corte Interamericana de Derechos Humanos, con sede en Costa Rica, que dictó medidas provisionales a favor de la joven y pidió al Estado salvadoreño que tomara medidas para proteger su salud y se le practicara un aborto terapéutico.

Al final se le practicó una cesárea y, al parecer, Beatriz podrá salvar su vida. Pero aún así y después de la movilización, el Gobierno de El Salvador sigue negando la posibilidad de interrumpir embarazos incluso existiendo riesgo para las propias vidas de las mujeres.
Y yo me pregunto: ¿Acaso la vida de una mujer vale menos que la de un feto? Y otra duda me asalta ¿Por qué este tipo de acciones no son consideradas como violencia de género estructural o institucional contra las mujeres, si se está atentando contra sus derechos humanos básicos como lo es su propia vida? Directamente no me cabe en la cabeza que alguien con quien nada tengo que ver como lo son los de faldas largas y negras tengan poder para incidir sobre mi propio cuerpo. No lo entiendo.

Y el segundo nombre de mujer que esta semana ha estado en boga ha sido el de Mari Carmen, una mujer maltratada por la vida a quien, como muy bien explica Mar Esquembre Cerdá en su artículo de hoy “¿Por qué Gallardón denegó el indulto a Mari Carmen?”, se le ha denegado el indulto que pidieron su marido y su hija.

Mari Carmen y su familia, después de la violación de su hija, tuvieron que abandonar su lugar de residencia por el cuestionamiento de los hechos que socialmente se hizo. Después al escuchar comentarios jocosos de la boca del violador de su hija le prendió fuego. Fue condenada y ya ha estado un año en la cárcel. Pero su condición de mujer seguramente habrá sido decisiva para que el misógino de Gallardón no la haya indultado.

Pero quienes creemos que debe ser indultada estamos recogiendo firmas para que Gallardón reaccione y la indulte. Las firmas se pueden recoger en este enlace: http://www.change.org/es/peticiones/al-excmo-sr-ministro-de-justicia-solicito-el-indulto-de-prisión-para-maria-del-carmen-garcia-espinosa-3

Seguramente si alguna persona neomachista lee estas palabras le saltarán todas las alarmas y pedirán a gritos que se pidan firmas también para indultar a los asesinos machistas o a los condenados por malos tratos. Como si lo viera.
Pero a esas cabezas pensantes les recomiendo que, antes de lanzar sus andanadas contra el presente artículo, contra quien lo escribe o contra quienes pensamos que se debe dar ese indulto a Mari Carmen, reflexionen sobre algunos asuntos y me explico.

No se trata de que no condenen a Mari Carmen por su actuación. La condena está puesta y ya ha cumplido una parte de la misma. Se trata simplemente de que la figura del indulto que, como sabemos es potestativa del Gobierno, sea justa y equitativa con toda la ciudadanía. Y por ejemplo que Gallardón nos explique por qué le concedió el indulto al Kamikaze que mató a otro conductor y no lo hace con Mari Carmen, por ejemplo.

No me sirve para nada el argumento esgrimido de que se pretende no crear agravios comparativos, puesto que con Mari Carmen ya se ha creado al no concederle el indulto. No soy jurista, pero alguna cosa entiendo de justicia social y sé que muy poco hombres podrán entender lo que, a muchos niveles significa una violación. Y cuando digo a muchos niveles, me refiero no sólo a la agresión sexual, física y psicológica que provoca el hecho de la violación en sí misma. No, me refiero a otro tipo de agresiones que se siguen produciendo después del a propia violación. Me refiero al cuestionamiento social de la voz de la propia víctima, a la justificación más o menos soterrada del violador con argumentos del todo peregrinos, a la soledad de la familia e incluso de la propia víctima ante todo el proceso judicial, a las dudas que les surgen a algunos de los frufrús incluso con informes periciales que avalan la agresión, la actitud de los de faldas largas y negras ante este tipo de crímenes y su puñetera influencia social, etc.

Todos esos factores influyen poderosamente no sólo en el ánimo de la víctima y su familia, sino en el de todas las mujeres que estamos convencidas de la desigualdad que todavía hoy vivimos las mujeres en muchos ámbitos. No es justo que las instituciones nos sigan maltratando por ser mujeres!!!.

Y eso es lo que se ha hecho con Beatriz y con Mari Carmen. Han sido agredidas por el propio sistema androcéntrico y patriarcal en el que seguimos viviendo a pesar de los avances. Y lo que es peor, con las agresiones que ellas han sufrido, las hemos sufrido todas, porque en la parte simbólica de estas agresiones subyace la pretensión de la dominación masculina a todos los niveles sobre las mujeres.

Y si de algo estoy segura, es que eso se va a acabar. Y se va a acabar porque también los hombres están reaccionando contra el patriarcado y renunciando e incluso denunciando algunos privilegios históricamente heteroasignados. Alguno de ellos incluso se atreve a autoasignarse feministas, con lo cual su compromiso con la desigualdad todavía existente da un importante paso hacia delante. Bienvenidos sean esos compromisos para desmantelar el sistema androcéntrico y patriarcal que permite este tipo de atropellos a las mujeres y que además suman voces para denunciar el terrorismo machista y los maltratos producidos por las instituciones de todo tipo.

Aún así, estoy completamente segura que a estas dos mujeres se las ha tratado así, precisamente por ser mujeres. Ningún hombre sabe lo que es quedarse embarazado y no desear ese embarazo y quedarse atrapado en esa situación de falta de libertad para decidir sobre tu propio cuerpo y tu propia vida pese a que pueda correr peligro. Y creo que muy poco hombres saben tampoco lo que es ser violado sexualmente y las secuelas que deja este tipo de agresión a todos los niveles. Digan ahora que lo ocurrido con Beatriz y Mari Carmen no es consecuencia de su condición de mujeres.
Foto: Archivo AmecoPress 

Para el Estado mexicano las mujeres “no valen nada”


NACIONAL
   Les niega el acceso a la justicia: ex integrante de CEDAW

Soledad Murillo, ex integrante del Comité de Expertas de la Convención sobre la 
Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW) | 
CIMACFoto: César Martínez López

Por: Anayeli García Martínez
Cimacnoticias | México, DF.- 


La española Soledad Murillo, ex integrante del Comité de Expertas de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés), sostiene que el Estado no ha garantizado que las mexicanas víctimas de violencia tengan un acceso efectivo a la justicia.
 
La ex relatora para México de la CEDAW y quien fuera secretaria de Políticas de Igualdad durante el gobierno del ex presidente español José Luis Rodríguez Zapatero, afirma que en cualquier país donde exista violencia contra las mujeres significa que el Estado fue derrotado en su tarea de prevención y castigo a este delito.
 
A propósito de la gira de trabajo que realiza en México del 8 al 16 de junio invitada por la Cátedra UNESCO de la UNAM, para recoger experiencias y difundir las recomendaciones de la ONU, la experta –en entrevista con Cimacnoticias– habla sobre el acceso a la justicia para las mujeres.
 
En 2012 Murillo participó en la 52 sesión del Comité de Expertas de la CEDAW que se reunió en Nueva York para evaluar el cumplimiento de la Convención. La entonces relatora para México aprovechó para cuestionar a los representantes del Estado por la dilación en el acceso a la justicia para las mujeres.
 
Ante las y los funcionarios mexicanos, Murillo manifestó su indignación por la impunidad en las violaciones sexuales contra 26 mujeres en San Salvador Atenco, en mayo de 2006, y además criticó que en nuestro país existiera una Fiscalía contra la trata de personas que en los hechos no tenía facultades para investigar.
 
En ese momento ella, junto con las otras 22 expertas, recibió 18 informes alternos elaborados por 113 organizaciones civiles, los cuales hicieron contrapeso al reporte oficial entregado por México, en el que se pretendía demostrar el cumplimiento de 20 recomendaciones emitidas por las expertas desde 2006.
 
A la distancia, y al hacer un balance sobre la información que obtuvo del Comité de Expertas de la CEDAW, Murillo dice que en México no se puede hablar de un acceso efectivo a la justicia porque hay serias fallas en la investigación de los delitos contra las mexicanas.
 
Esto lo dice luego de que visitó Ciudad Juárez, donde participó en un encuentro al que acudieron madres de mujeres desaparecidas, quienes le informaron que cuando acuden a denunciar los policías toman la denuncia, pero después no investigan, lo que para ella significa que no hay justicia.
 
Como parte de las 23 expertas del Comité de la CEDAW, Soledad Murillo recalca que los asesinatos o desapariciones de mujeres no son más o menos graves que la violencia en la familia, y detalla que en todo caso ambas problemáticas deben ser atendidas por instituciones y personal profesional y sensible.
 
Explica que si todos saben que en casa las mujeres son humilladas y golpeadas y nadie toma acciones para detener la violencia, el mensaje es que para el Estado las mujeres “no valen nada”.
 
“Si en casa los golpes suenan, los oye mi vecino, los oye mucha gente, si en casa me humillan, me golpean y todo mundo sabe, están diciendo que el valor de las mujeres es nulo. Y eso se transmite a las niñas”.
 
Además agrega que otra falla del sistema de justicia es que las autoridades piden a las mujeres víctimas de violencia que perdonen a su agresor y que permanezcan “allí para su rehabilitación”, lo que provoca que otras mujeres no denuncien porque el Estado no sanciona estos delitos.
 
A través de su experiencia, la también académica señala que las mujeres no son educadas para ser autónomas y la autoridad no garantiza que se sancione la violencia, es decir, sin acción del Estado ellas seguirán siendo agredidas y sintiéndose responsables de la violencia.
 
Murillo señala que para que las mujeres accedan a la justicia primero es necesario que ellas sepan que tienen derecho a defenderse cuando son agredidas, y que conozcan bien qué tipos de derechos les han sido vulnerados, porque de lo contrario seguirán con la idea de que la violencia es normal.
 
“Hay veces que las mujeres pueden sufrir violencia y piensan que es una forma de ser de él, que es excesivamente celoso o temperamental”, advierte.  
 
Por ello señala que es importante informar que las mujeres tienen derecho a ser tratadas con dignidad. “Me parece importantísimo que se cuente con abogadas y abogados que conozcan lo que implica denunciar a la persona con quien vives o denunciar el acoso sexual, y qué implica que ella salga de la empresa y el acosador se quede”.
 
Con la autoridad que le da haber impulsado la Ley contra la Violencia de Género y la Ley de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres en España, la especialista dice que el acceso a la justicia supone que en sus denuncias las mujeres se sientan con el derecho de defender su causa y sean acompañadas por juristas profesionales.

Para lograr este objetivo, cada país –en este caso México– debe ver las agresiones contra sus ciudadanas como algo absolutamente intolerable, como un delito.

“Cada vez que hay un asesinato, cada vez que hay un problema de violencia las autoridades tienen que salir, animar a las mujeres, recordarles que tienen derecho a defenderse y que el Estado las va acompañar en ese proceso”.

México cuenta con un amplio marco legislativo en contra de la violencia de género y a favor de la igualdad, pero a decir de la también profesora de la Universidad de Salamanca, el Estado mexicano tiene que aplicar las leyes y buscar mecanismos para detectar y afrontar las dificultades en su implementación.

Consciente de que en este país prevalece la discriminación por género, Murillo subraya que en un Estado democrático deben existir mecanismos legales que garanticen el respeto a los derechos de las mujeres porque sin estas garantías no puede haber gobernabilidad, y por ello pide que se ponga atención a estos temas.