11/12/2016

Trump o ¿por qué aún necesito el feminismo?


LENGUANTES
Por: Lulú V. Barrera*


El miércoles nos despertamos a una nueva película de terror de Hollywood, Donald Trump será el próximo Presidente de los Estados Unidos. La realidad se nos estrella en la cara, ¿será el fin del mundo como lo conocemos o más bien su consecuencia más clara?

Millones respaldan un discurso abierto de odio, racista y machista y esto es apabullante, pero no pasó durante los cómputos del martes, el triunfo de Trump es el testimonio real del mundo en que vivimos.

Aunque alegó un complot mediático en su contra, es la maquinaria del espectáculo la que le preparó el camino. Su personaje y una infraestructura simbólica que entroniza al magnate, al hombre blanco y poderoso, al club de Toby, al pícaro que se sale con la suya, un macho.

¿Y todavía nos preguntamos por qué necesitamos al feminismo? Un hombre que cree que puede disponer del cuerpo de las mujeres ocupará la Casa Blanca, manda un mensaje de que el machismo no sólo tiene una extendida autorización social,  sino que no tiene consecuencias. La carrera electoral estuvo atravesada por el sexismo, comentarios grotescos que sexualizan a las mujeres y autorizan la violación sexual, mansplaining, manterrupting y la villlanización de las mujeres fuertes.

¿El machismo de closet? “Looker room talk”

Para Trump no tuvo ningún costo político que saliera a la luz un video  donde se jacta de poder atacar sexualmente a las mujeres sin su consentimiento abusando de su posición de poder:

“Solo empiezo a besarlas, como un imán, solo las beso, ni siquiera espero (…) y cuando eres ‘estrella’, ellas te permiten hacerlo (…) puedes hacer cualquier cosa (…) agarrarlas por la vagina, lo que quieras”.

Aunque Trump fue cuestionado abiertamente durante el segundo debate ¿cuál fue su respuesta? minimizar su gravedad y hacerlos pasar como una broma, un juego entre hombres, una plática de gimnasio, “looker room talk”.

Estas charlillas ocultas están detrás de los resultados electorales en los Estados Unidos, en los medios se preguntan por qué las encuestas no lo pronosticaron ¿ocultamos lo que verdaderamente creemos? La violencia sexual hacia las mujeres es cada vez más castigada en el discurso público, pero está vigente entre nuestras creencias más soterradas, moldean nuestro día a día y dan forma a una autorización del comportamiento sexual masculino abusivo.

¿Hillary no tiene lo que se necesita? “estamina” y carisma

Los debates me hicieron llegar a una conclusión clara: una mujer altamente preparada compitió contra un hombre de pocas ideas, simples y repletas de lugares comunes. Hillary tuvo que justificar una trayectoria de más de 30 años en dos minutos durante el primer debate, frente a un constante manterrupting, tan sólo en la primera media hora Trump la interrumpió 26 veces.

Trump le dijo además que “no tenía el look presidencial”, “no tiene la estamina”, una clave morse masculinista, estrechamente vinculada a la resistencia deportiva pero también a la performance sexual, una búsqueda simple en internet arroja múltiples referencias en revistas para hombres. En el lingo empresarial “tener estamina” o tener aguante, es lo que se necesita para ejercer una función de liderazgo.

A Hillary Clinton se le criticó por no sonreír lo suficiente. ¿Qué esperamos de la imagen pública de una mujer? ¿sonrisas alegres y complacientes? ¿figuras decorativas sin profundidad política? En el último debate Trump llamó a Hillary mujer retorcida, “Nasty woman”. Inmediatamente el hashtag se popularizó y empezó a ser utilizado reivindicativamente por miles de mujeres para apropiarse en positivo de la imagen de una mujer inteligente, fuerte, segura de sí misma y experimentada.

El poder y la toma de decisiones en el ámbito público ha sido históricamente masculino, y revertir esta figura tiene costos altos para las mujeres, se llama violencia política, se llama desigualdad salarial, se llama “techo de cristal”. Al centro del triunfo de Trump también está el machismo de todos los días, que levanta barreras invisibles que en su microscopía son obstáculos reales.

*Lulú V. Barrera es letróloga de formación, antropóloga por historia de vida y activista por decisión. Cree que debe reescribirse la historia, volver lo familiar extraño y extraño lo familiar, y sueña con otros mundos posibles. Admiradora de mujeres guerreras, creó y conduce “Luchadoras” en Rompeviento TV.

Foto: Dhyta Caturani, Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

La Prostitución ¿“trabajo sexual voluntario y autónomo”?

MUJERES CAUTIVAS
Por: Teresa C. Ulloa Ziáurriz*




En su artículo titulado “Las falacias del discurso en torno al derecho al “trabajo sexual voluntario y autónomo”, publicado en su blog el pasado 5 de noviembre, la académica del CIDE, Cath Andrews, nos ayuda a analizar los planteamientos sobre Derechos Humanos que se establecen en el proyecto de Constitución para la Ciudad de México.

El texto constitucional dice: “…hay derechos sociales, culturales, familiares y económicos; así como derechos para grupos marginalizados o minoritarios”. El artículo 8 señala que “la dignidad humana es inviolable. Todas las personas nacen libres e iguales en derechos, mientras que el artículo 9 B2  “destaca que los Derechos Humanos son inalienables, imprescriptibles, irrenunciables, irrevocables y exigibles.”

En el artículo 10 también se plantea que la Ciudad de México debe de ser un espacio de “libertades y derechos”. En particular, el proyecto propone que “toda persona tiene derecho a ser respetada en su integridad física y psicológica, así como a una vida libre de violencia.

En consecuencia, advierte que:

Se prohíben y sancionarán la trata de personas en todas sus formas, las ejecuciones, las desapariciones forzadas, los crímenes de odio, el feminicidio, la tortura, las penas y tratos crueles, inhumanos y degradantes. De acuerdo con las leyes de la materia, se adoptarán medidas para erradicarlas (art. 10 B3)…”

No obstante, estas proposiciones no se sostienen a lo largo de la carta. Al llegar al apartado F del artículo 15, es evidente que los autores del proyecto hacen excepciones para el ejercicio los Derechos Humanos “inalienables, imprescriptibles, irrenunciables, irrevocables y exigibles”… Se trata de las personas prostituidas.

En ese apartado se afirma que “las autoridades de la Ciudad, en el ámbito de sus competencias y de conformidad con lo previsto por la ley: Reconocen y protegen el trabajo sexual voluntario y autónomo como una actividad lícita…”

De suyo, el Artículo 15 inciso F, significa el reconocimiento legal a la precarización del trabajo informal, sin darle reconocimiento a otros oficios y servicios que también son no asalariados, como taxista, bolero, carpintero, herrero, plomero, vendedor de tamales o de hot-dogs, limpia parabrisas, entre otros.

La doctora Cath Andrews señala que quienes redactaron el Proyecto de Constitución piensan que hay prostitución forzada y prostitución voluntaria. Yo me pregunto ¿quién o bajo qué mecanismo van a certificar que se trata de trabajo libre y autónomo?

En los 20 años que tengo trabajando contra la trata de personas y la explotación de la prostitución y otras formas de explotación sexual, nunca he visto que a las personas “libres y autónomas” y a las que son forzadas, les pongan un distintivo o las dividan en líneas. Por eso digo que el reconocimiento de la prostitución como trabajo sexual enmascara la trata de mujeres y la explotación sexual infantil.

Pero además se establece que contarán con una identidad formal como personas trabajadoras no asalariadas de la Ciudad de México, con una cartilla de registro de los servicios que presta y la certificación de sus capacidades laborales. Yo quisiera saber quién va a certificar sus capacidades laborales ¿será la Secretaría del Trabajo y Previsión Social?

La doctora Andrews agrega que “traficadas o voluntarias”, las personas que venden sexo enfrentan riesgos aterradores a diario. En un estudio llevado a cabo por Melissa Farley acerca de la prostitución legal e ilegal en 9 países, incluido México, se reporta que 62 por ciento de las encuestadas habían sido violadas; 72 por ciento sufrieron violencia física; 88 por ciento de las entrevistadas en Canadá, México y Colombia enfrentaron violencia verbal y 68 por ciento tenía síntomas de estrés postraumático.

De acuerdo con su análisis, los problemas de salud física y mental que enfrentan las personas prostituidas son muy similares a los de las víctimas de tortura.

En México, el equipo de la investigadora Melissa Farley entrevistó a mujeres en varias situaciones de prostitución: a bailarinas, a trabajadoras de burdeles y a trabajadoras de la calle. Su investigación revela que no hay diferencia en los niveles de violencia verbal, sexual, o estrés postraumático en las entrevistadas, todas lo padecen igual. No hay razón para pensar, por lo tanto, que el trabajo sexual implica menos riesgos en alguna de sus presentaciones, ni siquiera “la voluntaria”.

Dicho de otro modo, la autonomía o la voluntad de la persona prostituida no determina el trato que recibe por parte de clientes.
Más bien, es el acto preciso de comprar el acceso sexual a una mujer, lo que lleva a los compradores a deshumanizarla.

¿En qué sentido puede interpretarse el artículo, si hablamos de una joven que empieza a ser prostituida a los 13 años? ¿puede tomar la decisión de seguir “voluntaria y autónomamente” cuando se convierte en adulta? o más bien ¿ya no tiene opciones? No son preguntas retóricas. En su investigación Farley muestra que 47 por ciento de las personas entrevistadas se involucró en la prostitución antes de los 18 años.

Y finalmente dice “hay que señalar que las personas prostituidas suelen pertenecer a los grupos étnicos y sociales más marginalizados. Son las personas más vulnerables de nuestra sociedad, la vasta mayoría son mujeres; pero también hay personas transgénero y homosexuales.

Es de notar que las mujeres y las personas transgénero, sufren tasas similares de violencia. Dadas estas circunstancias, no nos debe sorprender que 89 por ciento de las mujeres entrevistadas por Farley querían dejar la prostitución, pero para ello requieren ayuda para encontrar una vivienda y una fuente de sustento alterno, entre muchas otras necesidades básicas.

La investigadora concluye diciendo que “el artículo 15 inciso f, numeral 3 de la carta de derechos del proyecto de Constitución, legitima la explotación sexual como una actividad protegida por la ley y niega derechos a las personas explotadas”.

Al suscribir este artículo, los redactores de la Constitución avalan la idea de que el sexo es un servicio, y quien lo vende no es una persona con derechos, sino un producto comercializable. Este planteamiento no es progresista, igualitario ni incluyente. Al contrario, es retrógrado, injusto y excluyente. Al definir la explotación sexual como “trabajo” se exime a los clientes de la responsabilidad criminal de sus actos. Valida la violencia, el abuso y la tortura, y convierte al Estado en cómplice de la explotación de las personas más vulnerables de la sociedad.

Queremos recordarles que seguimos recabando firmas para la iniciativa de modificación constitucional “La prostitución no es un trabajo. Es un sistema de explotación y violencia patriarcal” en Change.org.mx, https://www.change.org/p/a-las-diputadas-y-diputados-de-la-asamblea-constitutuyente-de-la-ciudad-de-m%C3%A9xico-la-prostituci%C3%B3n-no-es-un-trabajo-es-un-sistema-de-explotaci%C3%B3n-patriarcal-y-violencia?recruiter=1909746&utm_source=share_petition&utm_medium=facebook&utm_campaign=fb_send_dialog

*Directora Regional de la Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en inglés).
Twitter: @CATWLACDIR
Facebook: Catwlac Directora



Imagen retomada del sitio catwlac.org
Cimacnoticias | Ciudad de México.-


Si fuera hombre me daría vergüenza


ZONA DE REFLEXIÓN
Por: Lucía Lagunes Huerta*

Esta vez no fue un error, ni pifia, no darse cuenta que el micrófono estaba abierto y dejaba al descubierto lo que realmente es un servidor público. No, en esta ocasión fue totalmente consciente y  hasta puedo asegurarles que, orgulloso, creyó que dio toda una cátedra. Y de alguna forma sí, mostró de manera genuina de qué está hecho el hombre que ocupa el cargo de Presidente de la Sala Regional Xalapa, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Juan Manuel Sánchez Macías.
 
Si yo fuera hombre, me daría vergüenza saber que tal personaje sea funcionario, que haya llegado al Tribunal Electoral y que su periodo concluya hasta 2019, que sea invitado a participar en un Diálogo sobre Paridad de Género, y sin el menor pudor hable sobre las mujeres de la manera más vulgar y soez como lo hizo en Villahermosa, Tabasco, el pasado lunes 7 de noviembre.
 
Cabe hacer notar que el foro “Diálogo sobre Paridad de Género”, en el que participó el Presidente de la Sala Regional, Sánchez Macías, fue organizado por el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco con el propósito de contribuir a generar los lineamientos en materia de paridad para las candidaturas de  alcaldías y diputaciones locales para el 2018.
 
Juan Manuel Sánchez Macías, egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México y catedrático en diversas universidades, nos pone el espejo del patriarcado machista cotidiano que se resiste a morir. Con frases denigrantes contra las mujeres se convirtió en noticia. ¿De ese tamaño son los hombres que ocupan el poder? tan pequeños para el encargo que se les encomienda.
 
Si yo fuera hombre después de escucharlo me daría vergüenza, pues sus palabras ponen en tela de juicio la idea de que todos los hombres que llegan al poder lo hacen por sus capacidades (lo machista y misógino no se les elimina con los grados académicos que logran).
 
¿Cuál es la capacidad de señor Presidente de la Sala Regional, Juan Manuel Sánchez Macías? ¿Ser un lenguaraz que llega a un foro sin una mínima preparación a decir lo que piensa, porque el tema Paridad de Género le merece poca relevancia y porque está convencido que sus creencias son fantásticas y brillantes?
 
Pero no sólo está convencido que sus ideas son brillantes, sino que es una autoridad en la materia, por lo que asegura que las mujeres llegan al poder no por sus capacidades intelectuales  y sí por su físico, cuando en el mismo foro se encontraban mujeres sobresalientes que han demostrado con un discurso argumentativo sólido la razón de la paridad de género.
 
Si yo fuera hombre, tras el discurso del magistrado Juan Manuel Sánchez -quien en 2012 obtuvo la medalla al Mérito Judicial Electoral- saldría con un letrero deslindándome de él y exigiría a las autoridades que revisen las formas en que son electos personajes como éste, que pone en vergüenza a la humanidad, por lo menos al 48 por ciento que está conformada por el sexo masculino.
 
Le exigiría su renuncia por demostrar que no tiene la capacidad para ocupar un cargo que exige solidez intelectual y moral. Claro, esto lo haría si fuera un hombre convencido en el respeto a la dignidad humana de las mujeres, en la urgente necesidad de una democracia completa para nuestro país porque ya varios personajes masculinos han hecho lo suyo para estar avergonzados.
 
Sino, dejaría pasar esto como un comentario de “mal gusto”, no le daría la importancia que tiene, porque en el fondo, en el mundo privado, ahí, donde bromeó con mis cuates, creemos lo mismo que Sánchez Macías y no sólo lo creemos, sino que actuamos en consecuencia. Exigimos favores sexuales a nuestras trabajadoras o colegas, denigramos la creatividad femenina y su talento asegurando que llegan a los encargos por sus atributos físicos, porque ese es el camino que les exigimos a las mujeres cuando los hombres tenemos el poder.
 
Claro, si yo fuera hombre podría decir lo que sea sobre las mujeres prácticamente sin consecuencias que pusieran en riesgo mi carrera política, y además, sería noticia.
 
*Periodista y feminista, Directora General de CIMAC
Twitter: @lagunes28
  Sala Regional Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación | Especial
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

Indígenas de Canadá todavía sufren nefasta herencia colonial


 

Bailarín tradicional en el Festival Manito Ahbee, que celebra la cultura y el patrimonio indígena para unificar, educar e inspirar. Crédito: Travel Manitoba/cc by 2.0
Bailarín tradicional en el Festival Manito Ahbee, que celebra la cultura y el patrimonio indígena
 para unificar,  educar e inspirar. Crédito: Travel Manitoba/cc by 2.0

LONDRES, 8 nov 2016 (IPS) - Las consecuencias del colonialismo y del despojo sufrido por los pueblos originarios de Canadá quedaron solapadas y no fueron reconocidas por la población de “colonos”, puntualizó la especialista en justicia indígena Lisa Monchalin.

Y en especial, subrayó el impacto del legado colonial sobre los indígenas de Canadá en la actualidad, en el marco de la presentación de su último libro “The Colonial Problem: An Indigenous Perspective on Crime and Injustice in Canada” (El problema colonial: Una perspectiva indígena sobre delitos e injusticia), en la Universidad Colegio de Londres este mes.
Durante la Colonia, la población autóctona se vio obligada a depender de un sistema extranjero que le prestaba poca atención a su propia cultura y costumbres. Los colonos europeos eliminaron los derechos de los indígenas, rápidamente mediante una estructura jerárquica que los consideraba como el “problema indígena”.
La solución colonial para el “problema” indígena no fue otra cosa que mortal. Como resultado directo de la colonización europea, la población autóctona se convirtió en un pueblo en extinción, literlamente con la muerte de entre 80 y 90 por ciento de sus integrantes por las enfermedades traídas de Europa. En el siglo XVIII, se distribuyeron mantas infectadas con viruela para erradicar a los indígenas.
Los que sobrevivieron a las enfermedades fueron desplazados a la fuerza. Muchos fueron confinados a terrenos más pequeños, asimilados culturalmente y obligados a abandonar sus tradiciones o dejados a su suerte en territorios con pocos recursos.
“También puede atribuirse a la colonización la prevalencia de la violencia contra las comunidades indígenas a lo largo de los siglos, incluso la violencia de género”, precisó Monchalin.
Antes de la colonización, las sociedades tradicionales nativas se enorgullecían de su organización matriarcal, honrando y valorando la naturaleza “sagrada” de las mujeres en su comunidad. Ellas tenían una gran importancia por ocupar posiciones de liderazgo y de poder, y había una división equitativa del trabajo.
“Los actos de violencia sexual eran raros antes del contacto europeo”, indicó.
El sistema europeo de gobernanza despojó a las indígenas de su agencia. Ya no podían ser valientes lideresas y, en cambio, los colonizadores quisieron instalar la idea de que eran simples subordinadas de los hombres de la comunidad. Bajo el régimen colonial, solo ellos podían hablar en nombre de sus comunidades.
Los colonos comenzaron a crear la imagen de la indígena como la “otra exótica”. Se referían a ellas como “squaws”, la versión femenina del salvaje, y la describían como “sin rostro humano, lujuriosas e inmorales”, explicó Monchalin.
Las perspectivas coloniales arraigadas no solo transformaron la identidad femenina indígena en una mercancía sexual, sino que llevaron a una generalizada objetivación sexual, que permitió justificar la violencia sexual pues esas mujeres solo “tenían forma humana”.
La subordinación y la opresión de las indígenas instaladas en la época colonial se mantiene hasta nuestros días. Construcciones sexualizadas y romantizadas de las “eróticas” indígenas habilitaron el acoso sexual y las violaciones en todo el país.
“En Canadá, 87 por ciento de las indígenas sufrirá algún tipo de violencia física en la vida, y una de cada tres mujeres será violada”, subrayó.
Las indígenas siguen victimizadas por las estructuras de un sistema colonial deshumanizante que existe hasta hoy y que les arrebató su agencia y las consideró “seres inferiores”.
El problema saltó a la luz pública en 2014, cuando se conocieron 1.181 casos de indígenas desaparecidas entre 1980 y 2012. La situación no concentró la atención debida y no fue hasta el año pasado que se lanzó una investigación para conocer la verdad. También se ha denunciado la violencia policial que sufren en todo el país.
Numerosos especialistas coinciden en que el legado histórico de la represión eurocéntrica contribuye a la actual injusticia y desigualdad que sufren las indígenas. En 1873, uno de los principales objetivos de la Real Policía Montada Canadiense era atender “el problema indígena”, con el fin de lograr la “rendición silenciosa” de los pueblos autóctonos.

Eso llevó a la creación de “escuelas residenciales”, pensionados con fondos estatales para educar a niñas y niños indígenas. El gobierno canadiense creó una política de “asimilación agresiva”, pues creía que las escuelas gestionadas por la Iglesia eran la mejor forma de prepararlos para vivir en la sociedad y, en definitiva, abandonar sus tradiciones “salvajes”.
Los niños indígenas fueron víctimas de violencia y abusos, hasta sexuales, que alcanzaron un grado epidémico, e incluso algunos de ellos denunciaron que fueron empleados para “experimentos nutricionales”. Tras casi un siglo de “violencia estatal”, la última escuela residencial cerró en 1996.
La necesidad de eliminar, silenciar y condenar a un pueblo por su origen étnico habilitó la violencia estatal y los malos tratos de las autoridades hacia los indígenas. Cuestiones sistémicas de racismo y discriminación “legitiman” actos de brutalidad policial y detenciones injustas. De hecho, hay una clara y exagerada representación de indígenas en las cárceles canadienses, con 4,3 por ciento de su población privada de libertad.
La injusticia colonial heredada persiste hasta la actualidad y es responsable de que los pueblos autóctonos de Canadá sufran abusos, violencia y prejuicios a diario. Siete generaciones de víctimas de las escuelas residenciales, la arraigada explotación femenina, la violencia estatal, las detenciones ilegales, entre otras atrocidades, crearon un trauma intergeneracional en las comunidades indígenas de todo el país, analizó Monchalin.
En la actualidad, el gobierno federal de Canadá comenzó a atender la negligencia generalizada y las malas políticas sufridas por varias generaciones de indígenas.
El primer ministro Justin Trudeau declaró públicamente su intención de comenzar una nueva relación próspera entre Canadá y los pueblos originarios. “Ninguna relación es más importante para mí y para Canadá que la de las Primeras Naciones, la Nación Mestiza e Inuit”, aseguró en una asamblea de las Primeras Naciones en diciembre de 2015.
Canadá tiene previsto invertir 8.400 millones de dólares en los próximos cinco años, a partir de 2016-2017, para mejorar las condiciones socioeconómicas de los pueblos indígenas y sus comunidades y lograr un cambio transformador.
“Mediante la educación, la creación de conciencia y la voluntad de confrontar y cuestionar el pasado violento, la población de Canadá podrá finalmente celebrar la identidad indígena y, en definitiva, reconstruir sus ricas tradiciones, rotas a la fuerza por el colonialismo”, resumió Monchalin.
Traducido por Verónica Firme
            

Argentina: Juicio por trata sentará precedente


Norma Loto

Buenos Aires, 08 nov. 165. AmecoPress/SEMlac.- La historia de Alika Kinan es una radiografía de la trata y su convivencia con todos los poderes del Estado. Ella fue víctima de trata con fines de explotación sexual y actualmente es querellante en un proceso judicial que se realizará en Usuahia contra sus proxenetas y contra el estado.

El juicio Ha comenzado el lunes 7 de noviembre. Por primera vez, una víctima de trata y prostitución será denunciante, por lo que sentará precedente para otros casos similares. Alika tiene hoy 40 años y su paso de víctima a demandante es solo el nudo de una crónica mucho más extensa que aún no concluye.
Los derroteros de Alika la ubican en Ushuaia, la ciudad más austral del mundo. Allí, "donde ser prostituta era un orgullo, ya que las mujeres no venían a esta isla por propia convicción, acá se venía a que los gendarmes, militares y policías tengan mujeres a su disposición para saciar sus necesidades", refirió ella misma en una carta pública el año pasado.
Fue prostituida durante 20 años por distintos proxenetas, hasta que en octubre de 2012 se realizó un allanamiento en la whiskería Sheik, donde era explotada. Hasta entonces jamás se había pensado a ella misma como víctima. Más bien, se especuló que su destino estaba escrito desde mucho antes de recorrerlo, pues su madre, tías y abuelas también fueron explotadas sexualmente, a la vez que su padre era proxeneta y consumidor de prostitución
Marcela D’Angelo, integrante de Campaña Abolicionista "Ni una mujer más víctima de las redes de prostitución", sostuvo que "Alika nos clarifica la conexión de las complicidades del Estado o de estamentos del Estado con las redes de trata de personas. No es que muchas otras mujeres que pasaron por esa situación no lo hayan expresado, no es que no sepamos que ninguna mafia se gestiona sin el apoyo de estamentos estatales, es que Alika le realiza una demanda concreta al Estado por la complicidad que tuvo en las violaciones a sus derechos fundamentales.

"Con este juicio, Alika -siguió D´Angelo- abre una puerta a reclamos al Estado por los derechos violados y expone crudamente esta complicidad"
Alika contó su historia públicamente: "soy sobreviviente del delito de trata y sigo siendo víctima de muchas formas de violencia: violada a los 14 años; hija, nieta y sobrina de mujeres que fueron prostituidas por el sistema patriarcal, mis padres me abandonaron a la edad de 16 años dejando a mi cargo a mi hermana de 10, hecho por el cual el propio sistema me ’inserta’ en una red de trata, donde además de que me vulneran todos los derechos, se me explota sexualmente".

A los 18 años llegó a Ushuaia y cuenta que no tenía ni documento de identidad. Sin embargo, sus explotadores la llevaron a la policía provincial, donde le realizaron la apertura de un legajo en el que se dejaba garantizado que "sí, podía ser una buena ´prostituta´ porque no tenía antecedentes. Luego, la Municipalidad de esa ciudad le hizo una libreta sanitaria. Es decir, que diversos estamentos de Estado han sido cómplices de esa trama.
Fue en esa ciudad donde conoció a su exmarido, un consumidor de prostitución. Con ese hombre se fue a vivir a España, conformó una familia y, tras sufrir múltiples violencias -ella junto a sus hijas-, decidió "volver a Ushuaia con los tratantes, que por supuesto me recibieron con los brazos abiertos", recordó Alika.
Acerca del allanamiento realizado en Sheik, Alika recuerda que ingresaron "al local y al departamento, gendarmes, fiscales, secretarios, todos eran el enemigo que venía a dejarme sin la única opción de vida que tenía. ¿Cómo yo iba a ser víctima con lo leona y luchadora que era?"
Luego, con el paso del tiempo y ayuda profesional, se reconoció como víctima y se convirtió en demandante. En este juicio, Alika Kinan no es la única, sino que hay otras seis víctimas, pero solo ella es querellante. La imputación en la causa cae sobre Pedro Montoya e Ivana García, dueños del local, y la encargada Lucy Alberca Campos.
Durante la semana pasada y a pocos días de iniciarse el juicio, Alika recibió múltiples amenazas: "Tené cuidado con lo que vas a decir en el juicio", le gritaron en la calle. También su exmarido salió por los medios a manifestarse en contra. Todos estos intentos de callarla despertaron un amplio repudio social que se manifestó a través de un hashtag #AlikaNoEstáSola.
Marcela D´Angelo explicó SEMlac que Alika sufre amenazas y presiones, porque "toca intereses muy sensibles para el proxenetismo internacional. Todas estas denuncias que ha realizado molestan porque tocan personas involucradas en delitos gravísimos, en negocios muy redituables y que financian campañas políticas, cajas ilegales de las policías".
D´Angelo advierte que en Argentina hay intentos para que se reglamente la prostitución y "así el Estado se convertiría en aliado al proxenetismo y proxeneta. Muchas/os legisladores/as se deslumbran con esta perspectiva y de esa manera fomentarían la incorporación de mujeres/travestis y personas trans y reducirían índices de desocupación.
Pero, significaría una forma de ahorrar en políticas públicas para poder salir de esta explotación convertida en "trabajo".
En tanto, la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex), que está a cargo de Marcelo Colombo y Alejandra Mángano, elaboró un comunicado oficial a raíz del comienzo del juicio.
El documento difundido el viernes 4 de noviembre por Protex subraya que, con este juicio, se asiste "a las más variadas formas de coerción que los tratantes suelen usar durante la ejecución del delito: pero ahora somos todos testigos".
Luego enfatiza que Alika Kinan "ya no está sola. No vamos a permitir que callen su voz y no lo vamos a hacer solo por ella, lo vamos a hacer por las más de mil víctimas por cuya explotación silenciosa fueron condenadas más de 350 personas y no pudimos hacer oír en el reclamo acabado de sus derechos.
Desde Protex, destacan también que hay otras víctimas atravesando largos procesos penales y que es necesario que sean oídas y resarcidas, y que urge la necesidad de "demostrar que hay un Estado dispuesto a brindar protección, a garantizar derechos y a perseguir la extorsión y las amenazas que los tratantes siguen usando contra las víctimas durante el proceso penal".
Foto: SEMlac.
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Internacional – Legislación y género – Trata. 08 nov. 16. AmecoPress.

Legalizar la prostitución no cambiará la realidad: es violencia

   En países donde se legalizó no hay indicios de mejora en la vida de mujeres


 Los Países Bajos, Nueva Zelanda y Alemania son países que legalizaron la “prostitución”, reformas que para una parte del movimiento feminista son un avance porque promueven los Derechos Humanos de las mujeres mientras que parta la otra es un retroceso porque legaliza la explotación del cuerpo femenino. 

PAÍSES BAJOS


El 1 de Octubre de 2000 los Países Bajos (región mejor conocida como Holanda) abolieron una ley aprobada en 1911 que prohibía los burdeles y castigaba con cárcel o multas a quienes ejercieran o fomentaran la prostitución. Con la derogación de esta ley el “trabajo sexual” se volvió actividad común.

Desde entonces se fijaron controles administrativos para ejercer la “prostitución”, por ejemplo la edad mínima para realizar esta “labor” es de 21 años, las municipalidades dan licencias laborales, asistencia social y sanitaria a las mujeres, quienes pagan impuestos por ejercer su “oficio” y tienen derecho a un programa de orientación si quieren dejarlo.

Es así que uno de los atractivos turísticos en la ciudad de Ámsterdam es el Barrio Rojo, una zona donde las mujeres se exhiben en vitrinas como si fueran productos de tiendas comerciales, atracción que está permitida en 13 ciudades.

De acuerdo con un informe de 2014 del Ministerio de Seguridad y Justicia holandés, al entrevistar a 364 “prostitutas” se encontró que 21 por ciento eran europeas, 15 por ciento de América Central y del Sur y 11 por ciento de Asia; y que 1 por ciento de ellas tenían 18, 19 o 20 años de edad.

El informe indica que después de la legalización las “trabajadoras” recibían ingresos bajos y muy pocos clientes e incluso muchas de ellas tenía otro trabajo fuera de la industria; por otra parte las “prostitutas de vitrina”, que dedicaban aproximadamente 43 horas semanales a esta labor, estaban más satisfechas con sus ingresos.

Según este reporte, casi todas las encuestadas consideraron que con la ley mejoró la seguridad y la higiene de los lugares pero su estilo de vida era menos saludable que el promedio de las holandesas porque están más propensas a fumar, beber alcohol, usar drogas y sedantes y experimentar tensión y soledad.

NUEVA ZELANDA

En junio de 2003 entró en vigor en Nueva Zelanda la Ley de Reforma de la Prostitución que legalizó el “trabajo sexual” y estableció una serie de derechos como seguridad social, certificados para las “empresas de prostitución” y la prohibición de que las menores de 18 años ejercieran esta actividad.

De acuerdo el Colectivo de Prostitutas de Nueva Zelanda, con esta ley se promovió el bienestar, la salud y la seguridad de las “trabajadoras sexuales” y además se creó el Comité de Examen de la Ley sobre Prostitución para dar seguimiento a la norma durante los cinco años posteriores a su entrada en vigor.

En 2008 este Comité informó que la “prostitución” se cambió de un enfoque moralista a uno de salud y Derechos Humanos y encontró que después de la promulgación de ley más de 95 por ciento de las “trabajadoras sexuales” conocían sus derechos legales como que podían rechazar a un cliente y 57 por ciento consideraba que la actitud de la policía había mejorado.

El mismo Comité encontró que no existe un sistema de inspecciones regulares de los burdeles y que había niñas “trabajando” en esta industria. Por otra parte en 2009 Nueva Zelanda publicó su Plan de Acción para Impedir la Trata de Personas.

La organización internacional “Igualdad Ahora”, que lleva 22 años trabajando a favor de los derechos de las mujeres en diferentes partes del mundo, indica que el Consejo Nacional de Mujeres de Nueva Zelanda que apoyó la legalización, después mostró su preocupación porque niñas de 13 y 14 años estaban vendiendo sus cuerpos y los compradores de servicios de menores de edad recibían sanciones mínimas.

Al analizar el informe del Comité, la organización “Igualdad Ahora” encontró que una tercera parte de las personas que trabajaban en esos prostíbulos legales reconocían que tuvieron que mantener relaciones sexuales con un cliente al que rechazaron el año anterior, es decir, perdieron autonomía para elegir a sus clientes.

En ese mismo país, dice esta organización, la policía afirmó que como consecuencia de los cambios legislativos, ahora tenían menos contacto con la “industria del sexo” por lo que resultaba más difícil descubrir los malos tratos y la explotación sexual.

ALEMANIA

El 1 de enero de 2002 entró en vigor en Alemania la Ley de Prostitución y se derogó el artículo 138 del Código Civil que definía la “prostitución” como una actividad inmoral. Con esta nueva legislación se pretendía proteger a “las prostitutas” para que tuvieran acceso a seguridad social.

5 años después de que entrara en vigor la ley, en 2007, el Ministerio Federal alemán de Asuntos de Familia, Jubilados, Mujeres y Juventud, publicó un informe sobre el impacto de la ley donde señaló que no existían indicios de que se redujeran los delitos alrededor de esta actividad y que la ley apenas había contribuido a mejorar la transparencia del “oficio”.

A la par, más de una tercera parte de los fiscales señalaba que la legalización de la “prostitución” complicaba su labor de perseguir la trata de personas y el proxenetismo.

El gobierno alemán descubrió que por autonomía, anonimato y a fin de no pagar impuestos, la mayoría de las mujeres no tenían contratos de trabajo y tampoco los querían (sólo 1 por ciento de las mujeres lo tenían) algo que impedía salvaguardar algunos de sus derechos, además muy pocas trabajadoras se dieron de alta en el régimen de la seguridad social.

A las mujeres en situación de prostitución les parecía poco atractiva la posibilidad de firmar un contrato debido a las cuotas obligatorias que se descuentan de sus salarios, y además los empleadores tampoco ven ventajas en formalizar un contrato laboral, ya que asumirían obligaciones y responsabilidades teniendo sólo un derecho sumamente limitado a dar instrucciones.

Los dueños de burdeles prefieren ser vistos como arrendatarios de locales, evitando obligaciones como el pago de un salario durante vacaciones o la participación en las cuotas a la seguridad social para las “trabajadoras”.

En opinión de la profesora de la Universidad de Massachusetts y estudiosa del tema, Janice G. Raymond, de ese informe se concluye que “la prostitución no debería ser considerada un medio razonable para garantizar la sobrevivencia de una persona”.

En el Reino Unido la prostitución se permite si no es en lugares públicos; en Italia se prohíben los burdeles y que los hombres contraten servicios en la calle; en Bélgica se permite la “prostitución” en escaparates y clubes; en tanto que en Suecia se prohíbe y penaliza la compra de ''servicios sexuales''; y en Noruega y Francia se multa al cliente y no a las mujeres.

En este contexto internacional, la Coalición Contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe, dice que en los países donde los burdeles son legales la policía tiene poco acceso para proteger a las mujeres por lo que legalizar la prostitución no cambiará la realidad: es una forma de violencia.



Archivo CIMACFoto
Por: Anayeli García Martínez
Cimacnoticias | Ciudad de México.- 

Activista mexicana reclama la solidaridad de Canadá


Salgado reclama que Canadá sea algo más que un mero socio comercial de México.
Salgado reclama que Canadá sea algo más que un mero socio comercial de México.
Crédito de la foto: Henry Romero / Reuters

Escuche

Néstora Salgado es una militante mexicana con una vasta trayectoria en su país en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas y de la mujer.

Desde agosto de 2013  y hasta marzo de 2016, Salgado estuvo presa y fue sometida a tormentos físicos y psicológicos.

Se la acusó de haber secuestrado a 60 personas y haber asesinado a 2 ella sola, sin ningún tipo de colaboración.
Entre otros hechos, Salgado ha denunciado la desaparición de los estudiantes en Ayotzinapa.
Entre otros hechos, Salgado ha denunciado la desaparición de los estudiantes en Ayotzinapa.
© Radio-Canada/Ginette Lamarche

Según afirma nuestra entrevistada, y es la opinión de diversos organismos de derechos de la persona que defienden sus reclamos, la causa que la llevó a la cárcel fue “fabricada” por las autoridades de su país, con el único objetivo de acallar la lucha por el fin de la violencia generalizada en México, que ha hecho de la mujer y de los indígenas sus blancos privilegiados, al poner estos en riesgo los compromisos económicos y políticos adquiridos por el gobierno de Antonio Peña Nieto. También fue una represalia ante sus denuncias de la existencia de una red de tráfico de personas y de pornografía infantil en las que estaban involucrados políticos de primera línea.

Salgado, de pié, tercera desde la izquierda, en una de sus actividades en Canadá.
Salgado, de pié, tercera desde la izquierda, en una de sus actividades en Canadá.
© 
Gentileza de Noé Arteaga.
Además, Salgado integró una experiencia de singular trascendencia en México, al ser jefa de la policía comunitaria del estado de Guerrero, un organismo de seguridad que surgió para dar respuesta a los problemas de violencia allí, ante la inhercia de las autoridades centrales. La policía comunitaria, reconocida por el gobierno mexicano, se inscribió en el derecho de los pueblos autóctonos a la autonomía y la autodeterminación.

Por estos días se encuentra de visita en Canadá, donde busca la solidaridad de la comunidad latinoamericana y el apoyo de las autoridades nacionales, a las que reclama que presionen a su socio norteamericano, el gobierno mexicano, para poner fin a las persecuciones y para que reconozca la existencia de presos políticos en su territorio.

Néstora Salgado se expresa en ese sentido en diálogo con Luis Laborda.

Parlamentaria indígena del Mercosur cumple 300 días presa

Exigen al gobierno argentino su liberación


 La activista social indígena Milagro Sala cumple hoy 300 días en prisión mientras organismos internacionales como la ONU y el Parlamento del Mercosur (Parlasur) pidieron al gobierno argentino su inmediata liberación.

Líder de la organización Tupac Amaru, Sala fue aprehendida el 16 de enero por el cargo de “presunta incitación a la violencia y tumulto” por encabezar una protesta en la provincia de Jujuy contra los cambios impuestos por el gobernador Gerardo Morales en el sistema y programa de cooperativas.

A esa causa le añadieron durante esos meses otras como la supuesta irregularidad de administración de fondos destinados a construcción de viviendas. Se le imputa la autoría de los delitos de asociación ilícita, fraude a la administración pública y extorsión.

La también parlamentaria del Mercosur por el Frente para la Victoria, Milagro Sala, ha resistido desde la prisión huelgas de hambre mientras varias organizaciones sociales, sindicatos, líderes, periodistas y artistas protagonizan fuertes campañas por su excarcelación.

Hasta ahora no habido respuestas del gobierno, pese a que en octubre pasado el Grupo de Trabajo sobre la detención arbitraria de Naciones Unidas pidió liberar de inmediato a la activista social tras calificar su encarcelamiento como arbitrario.

En un comunicado, esa instancia determinó que hubo un entramado de acusaciones consecutivas e inicio de causas judiciales para sostener su privación de libertad de manera indefinida en el tiempo y esto constituye una vulnerabilidad de la independencia judicial.

Asimismo consideró que el Estado argentino impidió el ejercicio del derecho de defensa de Sala por la falta de precisión y claridad de los hechos que se le imputan y por no informarle adecuadamente los delitos por los que es acusada y que, además, contaba con fueros que obstaculizaban su detención por su condición de parlamentaria del Mercosur.

Hace sólo dos días la Mesa Directiva del Parlasur difundió un texto en el que acompaña la decisión adoptada por el grupo de la ONU pero Sala sigue aún encarcelada e incluso, desde la prisión de Alto Comedero, envió una carta al presidente del Parlamento del Mercosur, Jorge Taiana, en la que solicita tomar juramento para asumir su bancada en ese organismo regional.

En la misiva advierte sobre la arbitrariedad del Poder Judicial de su provincia y el ensañamiento, dijo, “contra mi persona y el resto de los compañeros detenidos por parte del gobernador que impone un brutal atropello interviniendo en otros poderes del Estado”.

En recientes declaraciones a la TV Pública la canciller argentina, Susana Malcorra, apuntó que su Ministerio haría una evaluación de las recomendaciones de la ONU y opinó que “se trata de un informe crítico de la detención y tiene una serie de recomendaciones”.

Por otra parte añadió que el texto fue trasladado a la Justicia jujeña porque deben tenerse en cuenta “tanto la independencia de poderes'' como la existencia de “diferentes códigos penales”.

Lo cierto es que Sala cumple 300 días en prisión mientras varias organizaciones sociales mantienen hoy, como lo han hecho desde que fue encarcelada, un nuevo acampe en la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada -sede del Ejecutivo- para pedir su libertad.

Foto: Romina Santarelli/ Ministerio de Cultura de la Nación
Por: la Redacción
Cimacnoticias/PL | Buenos Aires, Arg.-

Los incendiarios hijos del patriarcado


QUINTO PODER
Por: Argentina Casanova*

-¿Qué tienen en común un hombre de 20 años de edad en Alemania  y un joven de 22 años en un municipio de Zacatecas? Ambos cometieron feminicidio contra mujeres cercanas. En el primer caso su pareja, y en el segundo, una hermana. Debido a la crueldad y la saña, acapararon la atención de los medios de comunicación con coberturas que hicieron énfasis en la forma en que fueron cometidos ambos casos de feminicidio.

Cuando un concepto de la sociología, la antropología o la sicología se vuelve de uso común y necesario para entender un fenómeno social, también es indispensable incorporarlo para su comprensión, en el sistema judicial.

Los argumentos más reticentes por parte de quienes operan la justicia para incorporar el tipo penal de feminicidio y/o de mirar los contextos de la violencia contra las mujeres, se basa -la gran mayoría de las veces- en la dificultad para aceptar que las leyes tienen algo que ver con el “patriarcado” o “control y sometimiento”, “género”, “desigualdad y violencia estructural”, entre otros.

Pero el tema es mucho más complejo aún. Ahí están los medios de comunicación que construyen y difunden sus coberturas desde narrativas violentas que criminalizan y hacen apología a la violencia, y que también se convierten en una forma de extensión de la violencia contra las mujeres; o los discursos naturalizados a través de la publicidad y la mercadotecnia, que en un país feminicida como México, intentaron defender bajo los argumentos de la libertad de expresión, que un cantante presentara un video en el que un sujeto encajuelaba a su esposa para después prenderle fuego.

¿Cuántos casos de feminicidio se han cometido con esas características? Muchos más de los que quisiéramos, y aun así hubo quienes dijeron que “las locas feministas exageraban”.

Pero volviendo a la pregunta ¿qué tienen en común estos dos hombres, cuyos actos feminicidas conmocionaron a las sociedades donde se registraron? En el caso de Alemania, el joven engañó a su novia, quien tenía 8 meses de embarazo, y le dijo que irían a comprar ropa; en el segundo, no se conocen más detalles pero se supo que el hermano de la víctima “reaccionó de manera violenta” porque la joven de 25 años estaba embarazada.

En ambas situaciones, las mujeres eran jóvenes de menos de 30 años de edad y estaban en su octavo mes de embarazo. La joven alemana fue llevada a un bosque donde fue acuchillada y posteriormente le prendieron fuego. La mexicana, discutió con su hermano quien decidió rociarla con gasolina y prenderle fuego.

En ambos casos la característica es el vínculo de confianza que favoreció la cercanía entre el agresor y la víctima,

Del caso de Zacatecas, una de las notas señala: “El agresor es un hombre de su misma sangre, aún se desconocen los motivos que llevaron a la reacción que atentó contra la vida de la mujer de 27 años”, como si hubiera algún motivo que llevara a un hecho así.

Hace cosa de 22 años, en Campeche, un par de marinos concluyeron una jornada de trabajo y fueron a tomar alcohol y a consumir alguna droga, subieron a un microbús en el que por la hora -9 de la noche- sólo había una joven estudiante que se dirigía a su casa. Los tipos llevaban un bidón de gasolina y le prendieron fuego a la joven dentro del autobús.

Ella se llamaba Ivonne, falleció 7 días después por las quemaduras, su caso originó todo mi trabajo de documentación de homicidios contra mujeres cometidos en contextos particulares en los que prevalecía un desprecio por la vida de las mujeres y ejecutados con la peor de las sañas y brutalidades.

El tiempo, la distancia, las sociedades, parecen remitir a la quema de mujeres en la edad media, el castigo que se infringía alas “malvadas” que se atrevían a ser libres.

El desprecio manifiesto por la vida de las mujeres es lo que tienen en común estos incendiarios hijos del patriarcado. Conductas que nos hacen preguntarnos si es posible que haya “agravantes en un delito que ya es de por sí grave”.

* Integrante de la Red Nacional de Periodistas y del Observatorio de Feminicidio en Campeche.
 
CIMACFoto: César Martínez López
Cimacnoticias | Campeche.

Tener 12 años y estar casada


Reproducción de pobreza y falta de oportunidades





En el país 23 mil 605 niñas de 12 a 14 años están casadas, viven en unión libre o se encuentran separadas de su pareja, es decir, no son solteras, según un análisis de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim). 
A su corta edad son niñas que al vivir en pareja corren varios riesgos: embarazos y partos prematuros, muerte por gestación o complicaciones en el parto, deserción escolar y la reproducción de la pobreza en su descendencia.
Ante esta realidad el 5 de diciembre de 2014 entró en vigor la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, que establece los 18 años como edad mínima para contraer matrimonio.
Esta acción legislativa pretende favorecer el desarrollo y las oportunidades de tener un proyecto de vida de 19.4 millones de niñas y adolescentes de 12 a 17 años de edad (16.2 por ciento de la población mexicana) según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
Sin embargo, la ley no es suficiente porque las uniones libres van en incremento y las niñas y mujeres viven con sus parejas mucho antes de cumplir la mayoría de edad, sin contraer nupcias. La Redim indica que uno de cada 33 adolescentes, mujeres y hombres de entre 12 y 17 años no es soltero. 
NIÑAS ESPOSAS
Las causas del matrimonio infantil son variadas, explicó en entrevista el sociólogo Claudio Stern, ex director del Centro de Estudios Sociológicos de El Colegio de México, por ejemplo, una niña de una comunidad rural podría casarse por carencias económicas, pocas oportunidades de desarrollo o para convertirse en persona digna de respeto ya que casarse a temprana edad le da un estatus dentro de la comunidad; mientras que una que vive en entornos urbanos podría ser forzada a formar una familia.
El sociólogo abundó que la pobreza, la desigualdad y la prevalencia de valores conservadores son elementos que desencadenan situaciones como el matrimonio infantil.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) aproximadamente 40 por ciento de la población indígena o en áreas rurales es menor de 18 años, lo que sugiere que, en estas poblaciones, niñas, niños y adolescentes enfrentan mayores desventajas que el resto de las personas de 0 a 17 años.
Los estados donde hay más niñas casadas o unidas, según la información recopilada por la Redim con datos de Inegi, son Guerrero, Tabasco, Michoacán y Chiapas.
El estado sureño de Guerrero, una de las entidades con mayor pobreza, ocupa el primer lugar en matrimonio infantil. Existen 16 mil 909 niñas y adolescentes que no son solteras (18.3 por ciento), de las cuales casi 10 por ciento (mil 645) son niñas de 12 a 14 años.
En segundo lugar se encuentra Tabasco donde hay 10 mil 126 niñas y adolescentes casadas o unidas, de las cuales 869 tienen entre 12 y 14 años de edad. En tanto que en Michoacán hay mil 665 niñas de 12 a14 años en esta situación y en Chiapas suman mil 817 niñas.
MADRES ADOLESCENTES
Una de las consecuencias negativas del matrimonio y las uniones tempranas son los embarazos no deseados o no planeados. La Redim indica que si se compara una niña de 12 años casada o unida con una adolescente soltera de 17 años, la niña tiene más posibilidades de ser madre que la joven.
Los embarazos tempranos son un fenómeno creciente. Según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2014 (ENADID) del Inegi, en el 2009 ocurrieron en el país 70 nacimientos por cada mil adolescentes de 15 a 19 años de edad, 5 años después, se incrementó a 77 nacimientos; mientras, los nacimientos registrados en niñas menores de 15 años de 2009 a 2014, fueron 67 mil 379.

Un embarazo en la niñez o adolescencia, de acuerdo con las instituciones de salud pública, con frecuencia es no planeado y no deseado, y aunque lo sea, no existen suficientes alternativas para cubrir de la mejor manera todas las necesidades que la niña o adolescente requerirá durante la gestación y el parto.
La Secretaría de Salud indica que ser madre o padre adolescente refuerza condiciones de vulnerabilidad, marca roles de género tradicionales, pero sobre todo, implica perder vivencias y conocimientos propios de la adolescencia.
La maternidad y paternidad temprana, suele tener efectos negativos graves en las hijas e hijos de las niñas y adolescentes, exponiéndolos a condiciones adversas que obstaculizan su desarrollo.
El embarazo infantil también trunca la educación de las niñas y adolescentes, de acuerdo con cifras del 2010, 17.7 por ciento de las mujeres menores de 18 años y 30.7 por ciento de las menores de 15 años que se embarazaron, dejaron de ir a la escuela.
Otro efecto negativo son las oportunidades laborales y los ingresos de las adolescentes. La mayor parte de las madres jóvenes no tiene empleo ni ingreso independiente al momento de tener a sus hijos e hijas y las niñas de 10 a 14 años que son madres tienen mayor probabilidad de trabajar en una etapa en la que deberían estar en la escuela.
ESTRATEGIAS
Organismos internacionales de Naciones Unidas como  la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW), el Comité de la Convención para la Eliminación de Todas las formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y el Comité de los Derechos del Niño, han llamado a los Estados a eliminar el matrimonio infantil.
Ante estos llamados y considerando que esta práctica pone en riesgo la salud sexual y reproductiva de las niñas –porque por sus características (biológicas, psicológicas y sociales) se exponen a consecuencias negativas– el Gobierno Federal también lanzó una estrategia para disminuir el embarazo en adolescentes.
En 2015 se implementó la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA), que tiene como objetivos reducir en 50 por ciento la tasa de fecundidad de las adolescentes entre 15 a 19 años y erradicar embarazos en niñas de 14 años o menos, para el año 2030.
La estrategia que incluye acciones como reformas para que el matrimonio sea hasta los 18 años de edad, promover educación integral en sexualidad en escuelas; servicios y clínicas amigas de los y las adolescentes; y campañas en medios de comunicación, entre otras.
Foto: GAELX
Por: Anayeli García Martínez

Cimacnoticias | Ciudad de México.-

La guatemalteca Angélica Choc denunció en la ONU el atropellos de empresas canadienses


Es la representante del Equipo de Estudios Comunitarios y Acción Psicosocial (ECAP), denunció ante el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW)

Ginebra, 02 nov. 16. AmecoPress/Cerigua.- Angélica Choc, representante del Equipo de Estudios Comunitarios y Acción Psicosocial (ECAP), denunció ante el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) que las mujeres indígenas guatemaltecas han sido “víctimas de graves crímenes por parte de actores no estatales, específicamente guardias de empresas de seguridad privada que prestan servicios a subsidiarias de empresas transnacionales canadienses”.

La denuncia tuvo lugar en Ginebra en el marco del examen de Canadá ante dicho Comité, integrado por 23 expertos internacionales, que velan por la aplicación de las disposiciones de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer.
En su intervención ante los expertos, durante la reunión del Comité con organizaciones de la sociedad civil, Choc aseguró que “el caso del Proyecto Minero Fénix en el Estor, departamento de Izabal en Guatemala, tiene una larga historia relacionada con el conflicto armado que vivió el país: en el año 1965, el gobierno guatemalteco otorgó a Exmibal (Exploraciones y explotaciones Mineras Izabal S.A.) una concesión de 40 años para operar una mina de níquel”.
La líder indígena declaró ante el Comité que, históricamente, esos territorios habían sido habitados por comunidades mayas q’eqchi’: “Desde entonces nuestro pueblo ha sufrido graves violaciones de derechos humanos por defender el territorio que sustenta nuestra vida material y espiritual”, precisó.
Choc comentó que en 2004 “el Gobierno de Guatemala concedió a la empresa guatemalteca Exmibal una segunda licencia de explotación” en un territorio que la población Maya Q’eqchi’ ha declarado como tierra ancestral; así mismo, indicó que “ese mismo año, la empresa fue adquirida por la canadiense Skye Resource Inc.” y que “en 2008 Hudbay Mineral compró Skye Resource, cuya sede está en Toronto, Canadá”.
“En medio de este contexto y a raíz de la implementación del proyecto minero, continuó Choc, hemos vivido una fuerte conflictividad social; El Estor ha sido escenario de varias masacres, desapariciones forzadas, abusos y violaciones a los derechos humanos por parte del Estado ya sea por acción directa o por omisión de su deber de protegernos”.
“Han sido recurrentes los actos de violencia contra las comunidades indígenas y la violencia física y sexual contra mujeres, perpetradas por guardias de seguridad privada al servicio de las empresas mineras”, declaró antes de resaltar los hechos ocurridos “durante los desalojos forzados llevados a cabo por guardias de seguridad privada de la empresa, miembros de la Policía Nacional Civil y del Ejército entre el 8 y 9 de enero de 2007”, cuando fueron agredidas sexualmente 11 mujeres mayas Q’eqchi’ pertenecientes a la comunidad Lote Ocho.
Como consecuencia de estos actos, denunció Choc, la población de Lote Ocho fue víctima de desplazamiento forzado y muchas de las mujeres sobrevivientes de los abusos sexuales “han sufrido hemorragias continuas, embarazos y abortos forzosos y partos prematuros”.
Sin embargo, dijo la líder al Comité, “la comunidad continúa con energía su camino hacia la justicia”; actualmente, “las mujeres sobrevivientes del caso de Lote Ocho están llevando un proceso penal en Guatemala contra el jefe de seguridad de la empresa y otro por negligencia, descuido, así como daño físico y psicológico contra Hundbay Mineral Inc. en la jurisdicción de Ontario, Canadá”, concluyó.
La intervención de la guatemalteca estuvo respaldada por la presentación del informe alternativo “Creando una agenda internacional de género y paz”, elaborado en conjunto por la Plataforma Internacional contra la Impunidad y la organización Women’s International League for Peace and Freedom.
El próximo 18 de noviembre concluye la sesión actual del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer; ese día se publicarán las recomendaciones que formulará a los Estados examinados y se sabrá si hay un pronunciamiento acerca de las violaciones denunciadas hoy por la guatemalteca Angélica Choc.
Foto: The Talon. Angélica Choc.

Derechos sexuales y reproductivos. Un ensayo de Christa Wichterich


Placeres y Saberes

Habitualmente -y hasta la fecha- los cuerpos de las mujeres han sido el blanco central de la ideología y la praxis conservadoras y fundamentalistas. Pese a que el derecho individual a la autodeterminación siempre ha sido moldeado por normas sociales y culturales y marcos legales, actualmente este derecho está siendo determinado, más que nunca, por las tecnologías reproductivas y temas médicos.

Este ensayo brinda información analítica de antecedentes para debates críticos y controvertidos, sigue politizando temas aparentemente personales, busca abrir espacio para clarificar posturas y ofrece motivaciones para explorar intervención política en este campo. Por ende, aquí se plantean preguntas más que simplemente ofrecer respuestas.

Christa Wichterich es socióloga e imparte clases en el Centro de Estudios de Género de la Universidad de Basel en Suiza. Es especialista en globalización y género, política internacional de las mujeres, movimientos de mujeres y ecología feminista. Es integrante activa del Consejo Científico Asesor de Attac Alemania y de la red europea Women in Development Europe-WIDE+ (Mujeres en el Desarrollo Europa).

Derechos sexuales y reproductivos.
Un ensayo de Christa Wichterich.
Instituto Gunda Werner
Elaborado para el programa de Feminismo y Democracia de Género de la Fundación Heinrich Böll. Berlín.
Edición 2015.
Traducción al español:
Fundación Heinrich Böll Stiftung, Oficina México, Centroamérica y El Caribe.

El ensayo se puede consultar en:
https://mx.boell.org/sites/default/files/web_derechos_resproductivos.pdf
Especial
Por: la Redacción
Cimacnoticias | Ciudad de México.-

La lagarta más hermosa del mundo


María Teresa Priego 

 Papillona la memoriosa en toda su belleza.La última y más humillante derrota de la legendaria lagarta Papillona: la disecaron. A ella, un símbolo del anhelo de libertad, la mantienen en cautiverio aún después de su muerte. Encerrada en un ataúd de cristal, encerrado a su vez en una habitación sin ventanas en el Parque- Museo La Venta en Villahermosa. A ella, la altiva, la memoriosa, la fugitiva, la libertaria, la amiga más cercana (y vecina)  de la cabeza Olmeca, la que cavó varias veces túneles para escapar hacia la Laguna de las Ilusiones y lo logró, antes de ser capturada: ¡La disecaron!
Éramos niños, las voces alarmadas (y atónitas) anunciaban a través del radio: el inmenso cocodrilo que habitaba el estanque más grande del Parque- Museo La Venta, había desaparecido de su plácido hábitat en el que convivía con su corte de tortuguitas. Villahermosa era entonces una ciudad muy pequeña. Por semanas no se habló de otra cosa. Las versiones variaban: sus guardias llegaron a alimentarlo y no lo encontraron. No, fue el veterinario quien la buscaba con una jeringa de dos metros porque el animalote andaba gripiento, pero oh, sorpresa, su cuerpo desmesurado no apareció por ningún lado. Esta narración se refiere en buena parte a ella en masculino, porque por años y años se supuso que era un macho.
Los niños corrimos al parque Juárez para intercambiar impresiones: unos buzos revisaron el estanque de orilla a orilla y era un hecho rotundo: ni las luces de nuestro animal mitológico. ¿Se lo robaron? ¿En un tráiler? Pepo, que era una especie de líder de los boleros y adoraba las historias sanguinolientas, nos juró que había escuchado (en las escaleras del Palacio Municipal), a dos señores “importantes” que narraban el hallazgo (junto al estanque) de miembros humanos “diseminados”. Antes de ser subido al tráiler, el cocodrilo habría dado cuenta de algunos de sus captores. “Se lo merecían”, comentaron las Manzanitas, unas gemelitas de caritas redondas y chapeadas que ocuparon sus infancias en repartir limosnas y “merecimientos”.
“Ahora lo van a convertir en bolsas y zapatos”, insistían las Manzanitas, mirándose sus piecitos e imaginándose - quizá - ya calzadas con la piel de nuestra bestia mítica. Nunca me gustaron esas niñas. Por cantidad de personas como ellas, una sentía que la ciudad se convertía por momentos en un estanque bardeado. Minúsculo. Como un espacio de cautiverio. Sobre todo para las niñas con los cabellos restirados con dipitidoo en una cola perfecta. Y los zapatitos de charol. Las que ya conocíamos nuestro futuro completito y con detalle. Las niñas buenas. Las niñas decentes. Inscritas en un “deber ser de la femineidad” que entonces, no dejaba mucho hacia donde moverse. Yo soñaba con tomar un barco en el Puerto de Veracruz para fugarme a Francia. A París, para más detalle, y unirme a la corte de la gitana Esmeralda y de su cabra. Libre. Eso soñaba. Aunque en algún lugar sabía muy bien que “El jorobado de nuestra señora” era una novela. “Nada de eso existe en la realidad”, decía la madre superiora. “París sí existe, hermana”. “Pero queda muy lejos”. Pues más lejos nos quedaba el cielo, y era laboriosísimo intentar llegar. Y sin embargo, todos los días nos aplicábamos.
Nadie, (ni extraterrestre, ni humano) secuestró a nuestro cocodrilo. La versión del OVNI que sobrevoló la laguna también fue ampliamente comentada, su acuatizaje tuvo testigos, los marcianos habrían llegado a recuperar algunas piezas olmecas a las que se ha relacionado con ellos de manera insistente, pero como pesaban mucho, desistieron. Para no irse con los tentáculos vacíos, se llevaron al cocodrilo que cohabitaba con ellas en el Parque-Museo. “Quizá pensaron que era un espécimen humano”, dijo don Amador, que era un hombre culto y el principal propagador de la línea de investigación de la visita extraterrestre.
Durante décadas, la más cercana confidente de la Papillona
La historia resultó infinitamente más increíble y más bonita. El cocodrilo se liberó a sí mismo. El animal magnífico cavó un túnel que lo condujo derechito hacia la Laguna de las Ilusiones. Las voces en el radio alcanzaron decibeles nunca escuchados: “El lagarto se dio a la fuga”. Comenzó la caza. Lo llamaron “Papillon”, (en francés: mariposa), en memoria del personaje de la novela de Henri Charrière (¿recuerdan la película?), quien después de varios intentos logró fugarse de un penal de alta seguridad en la Guayana francesa. “¿Un túnel?” Mis rezos incluyeron esa vez a todo el santoral, a las cortes celestiales en pleno: “que no lo atrapen, por favor, que no lo atrapen. Que logre llegar hasta el Puerto de Veracruz de los lagartos”. Cavó el túnel con sus patitas. ¿Quizá también a mordiscos? El anhelo de libertad. Las familias enteras nos volcamos hacia las orillas de la laguna.
Una guardiana de la selva.Todos creíamos verlo. Todos corríamos y señalábamos de un lado hacia el otro. “Allí está. Es él”. Podría jurar que una sola vez, de las tantísimas veces que fui a visitarlo cuando vivía en Villa y después, lo vi libre: su inmensa cabeza sobresaliendo del agua, su cola agitándose feliz como un rehilete. Inmenso, sorprendente. Descocado. Podría jurarlo, pero es mentira. Por el radio nos enteramos que lo habían atrapado. Y no sólo, que por primera vez después de todos esos años de cautiverio, un lagartólogo experto lo había analizado con minucia y había hecho una descubierta inaudita: Papillon, en realidad era una hembra. Mi corazón infantil estuvo al borde de la taquicardia por admiración intensa: Ella lo había logrado. La primera feminista tabasqueña del mundo animal.
Papillona se convirtió en un ícono del anhelo de libertad. La atraparon, es cierto. Volvió a su estanque y a su diálogo apenas interrumpido con la cabezota olmeca. Humillada y magnífica. Sometida y más glamorosa que nunca. Cuando me fui de Villahermosa le regalé un libro de poemas de Pellicer, y otro de José Carlos Becerra, para que los leyera al atardecer (son muy hermosas las caídas de la tarde sobre la laguna) con su corte de tortuguitas encimosas. Es un espacio tan bello El Museo La Venta, con su naturaleza desbordada. Sus lianas. Sus ceibas. Le presenté a mis hijos, la visité con ellos. Como tantísimas/os tabasqueñas/os – sin duda- mantuve con ella nuestro lenguaje secreto. Era eterna. Allí estuvo y allí estaría siempre. ¿Cómo podría ser de otra manera? Era la guardiana de las piezas olmecas, de la Laguna de las Ilusiones, de la ciudad. La guardiana del cielo tan azul de Tabasco. Inmóvil y memoriosa. La guardiana de la selva y de nuestros orígenes.
El 22 de enero de 2014 Papillona murió, se calcula que alrededor de los ochenta años, pero podría haber vivido cien. Dejó de comer. Dicen que la afectaron los cambios climáticos. Quizá también ese deseo imperioso de libertad la atacó de nuevo, a ella, quien logró escaparse tres veces. Quien se quedó casi ciega en una de esas fugas, cuando los anzuelos de unos pescadores dañaron sus ojos. El impostergable deseo de libertad. Como dos meses antes, durante nuestra visita a Villa y a su estanque, mi hijo Jerónimo me dijo: “¿Y cómo sabes que es la misma Papillona de tu infancia?” “¿Cómo?” “¿Y si se murió y colocaron allí a una idéntica?” ¿Morirse la Papillona? ¿A quién se le podría ocurrir una cosa semejante? La sola idea me dejó como catatónica. “Ninguna jamás podría ser ni siquiera parecida. La reconozco. La heroína de nuestra infancia, es Ella”.
El cuerpo cautivo.
Ayer regresé al museo al aire libre de La Venta. Entrando a la derecha hay una habitación desangelada y sin una sola ventana. No lo podía creer: allí está su cuerpo. A la Papillona libertaria le arrebataron su cuerpo. La convirtieron en un objeto inanimado de exhibición, prisionera en un ataúd de cristal, con las mandíbulas abiertas. ¿Murió así Papillona en el momento de su paro respiratorio, o alguien tuvo a bien forzar la pose? Su piel ahora como de plastiquito. Horrible. Estereotipada. Como si hubiera sido una lagarta cualquiera. Ella, la que cavó tres túneles. ¿Cómo pudieron hacerle esto?
“Por su importancia histórica dentro de la cultura tabasqueña, se buscó su conservación por medio del arte de la taxidermia, y así continuar admirando a este gran ejemplar, simbólico personaje de Tabasco”. ¿Lo pueden creer? ¿Quién que conozca su “importancia histórica” quiere “admirar” ese despojo que la denigra? Podrían haber incinerado su cuerpo y esparcido sus cenizas sobre la Laguna de las Ilusiones, para que la alcanzara por fin, para que se quedara en ella por siempre. Podrían haberla enterrado junto a la cabeza olmeca en una ceremonia fúnebre con marimba y tamborileros.
Pienso en “Muerte sin fin” del poeta tabasqueño José Gorostiza y su “lleno de mí, sitiado en mi epidermis”. Allí está el cuerpo de la Papillona, retenido a fuerzas en el mundo tangible, sitiada en ese cascarón artificial en el que convirtieron lo que alguna vez fue su piel. Allí está con esos colores raros que nunca fueron los suyos, humillada, prisionera, mirando hacia el infinito con sus ojos de canica. Además, para hablar de ella, volvieron a su nombre en masculino. No visiten nunca esa sala en el museo. Acérquense a la orilla de la laguna e imagínenla: libre, feliz, con su cabeza que avanza apenas asomada a la superficie. Su cuerpo kilométrico. Su cola que da vueltas como un rehilete. Imagínense una nube que dice: “Aquí yace (¿qué hacen las lagartas sino nadar, mirar, reflexionar, recordar y sobre todo: “yacer”?)… la lagarta más hermosa del mundo”.

María Martín: “La impunidad perpetúa la violencia contra las defensoras de derechos humanos”


María Martín es experta en protección a las personas que defienden los derechos humanos y presentó un análisis que hizo la Iniciativa Mesoamericana de Defensoras sobre las políticas de protección en México y Honduras, que incluyó entrevistas de varias defensoras de ambos países


Madrid, 27 oct. 16. AmecoPress. ¿Cómo proteger y sostener el trabajo de las mujeres defensoras de derechos humanos en zonas de conflicto? ¿Y cómo proteger a las mujeres en los conflictos armados o en situaciones post-bélicas? A estas y otras importantes preguntas respondieron varias defensoras de derechos humanos latinoamericanas que estuvieron la semana pasada de gira por España, invitadas por Calala, Brigadas Internacionales de Paz, Front Line Defenders y la Iniciativa Mesoamericana de Defensoras de Derechos Humanos.
La gira tuvo como actividad principal el ‘Seminario Tejiendo redes para la protección de mujeres defensoras de derechos humanos en zonas de conflicto. El marco “mujer, paz y seguridad’ y otros instrumentos de protección, que se celebró en Madrid y Barcelona. Además, las defensoras pudieron reunirse con representantes de distintas administraciones y organizaciones de la sociedad civil.

María Martín es abogada. Dejó Torrelavega, en Cantabria, para convertirse en defensora de derechos humanos. Lleva más de 10 años trabajando en Latinoamérica, principalmente en asuntos relacionados con la protección de los defensores y las defensoras de los derechos humanos y desde hace cinco, desde un enfoque de género, tratando de construir opciones para mejorar la situación de las mujeres.
Durante el ‘Seminario Tejiendo redes para la protección de mujeres defensoras de derechos humanos en zonas de conflicto. El marco “mujer, paz y seguridad’, María presentó un análisis que hizo la Iniciativa Mesoamericana de Defensoras sobre las políticas de protección en México y Honduras, que incluyó entrevistas de varias defensoras de ambos países. También forma parte del mecanismo ciudadano de seguimiento a la Ley de Protección a defensores, defensoras y periodistas en México. “Defender los derechos humanos es una vocación”, asegura en la entrevista con AmecoPress, “no puedo imaginarme haciendo ninguna otra cosa”.

Según el informe de IM de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos, durante los años 2012-2014 se produjo un incremento del 45,7 por ciento en agresiones a defensoras de derechos humanos en Centroamérica. Además, ninguno de los casos que terminaron en asesinato se ha investigado. ¿Cómo es posible este grado de indiferencia e impunidad?
El único caso que yo sé que está habiendo algo parecido a una investigación es el de Berta Cáceres en Honduras, por la magnitud mediática que ha tenido este caso. Pero Berta es una y Bertas hay muchas.
En Europa, en España, a pesar de las deficiencias y de que en este periodo se esté viviendo una gran crisis, se parte de un cierto Estado de derecho, que no tiene que ver nada con lo que se vive en Latinoamérica. Uno de los espacios donde más se evidencia es la impunidad. Un asesinato está penalmente sancionado en todas partes del mundo, sin embargo, la realidad de cómo operan los sistemas de justicia en América Latina, cómo interceden los poderes fácticos en esa falta de respuesta, determina que la violencia contra las defensoras y defensores de derechos humanos se siga dando.
Cuando hablamos de que en algunos países de Latinoamérica se están dando mecanismos para defender a las defensoras y defensores de derechos humanos y periodistas, lo que no nos cuentan es que desde el Estado, se ponen camaritas, escoltas, pero en ningún momento se garantiza que las agresiones sean sancionadas. En el caso de las mujeres es especialmente grave porque hay un prejuicio sobre las defensoras, también desde los operadores de justicia. Con lo cual, si podemos identificar una cifra altísima de impunidad en las agresiones a defensores, en el caso de las defensoras es mucho peor porque siempre operan los prejuicios que sostienen por ejemplo, que le sucedió tal cosa porque estaba haciendo lo que no debía. El operador de justicia, bajo la influencia de estos prejuicios, revictimiza e impide el acceso a la justicia de estas mujeres. Esto es muy grave, porque perpetúa la violencia contra las defensoras.

Violencias machistas

¿A qué se enfrenta una mujer que en México o en Honduras decide defender los derechos humanos?
Por un lado te enfrentas a los grandes poderes que nos enfrentamos todos aquellos que trabajamos en la defensa de los derechos humanos. Las estructuras estatales, con todo el poder que tienen. Las estructuras económicas, que se manifiestan con mucha violencia. Enfrentarte a los intereses de los Estados y del poder económico es enfrentarte a algo muy heavy. Son estructuras con mucho peso y con pocos escrúpulos para hacer uso de una violencia muy fuerte y que en el caso de las mujeres se manifiesta con un componente de género muy evidente: violencia sexual, amenazas a las familias, a los hijos e hijas…
Pero además, en el caso de las defensoras nos enfrentamos a las familias también, a los compañeros de trabajo. En los informes de IM Defensoras se evidencia que en muchos casos los agresores son los propios compañeros de trabajo. Hay casos de discriminación, de acoso sexual, e incluso de violación.
Se desarrollan en el marco de los propios movimientos sociales que no siempre somos capaces de denunciar y actuar con la fuerza que merecería, porque muchas veces pensamos que estamos debilitando al movimiento social si sacamos los trapos sucios fuera de casa.
Esta doble sanción que hablaba antes en el caso de los operadores de justicia, por hacer lo que hacemos, pero además por hacerlo siendo mujer, en nuestras familias es especialmente intensa. Muchas veces nuestros compañeros, por más que estén de acuerdo con lo que hacemos, cuando se dan determinados contextos, sufren una presión social tan fuerte que acaba repercutiendo en la defensora. Cuando agreden o el foco de las amenazas son los hijos, por ejemplo, toda la responsabilidad, la culpa, recae en la defensora. De este modo, las familias, en lugar de ser un espacio de protección y apoyo, se convierte en el caso de las defensoras en un espacio de reproche y paralización del trabajo. Algo absolutamente distinto al caso de los defensores.
Los espacios comunitarios, a través de los rumores, de la presión, del rechazo social sobre las mujeres por el trabajo que realizan, también son ámbitos que dificultan la labor de las defensoras. Si eres una defensora, y no te digo si luchas por los derechos sexuales y reproductivos o con afrontar la violencia en el espacio doméstico, las mujeres en muchos de estos espacios sociales acabamos siendo las culpables de que las familias “se rompan”, de que las jóvenes tengan “actitudes poco decorosas”…
Y en América Latina y especialmente en Mesoamérica el peso de los sectores más conservadores de la Iglesia es muy duro, generan una sanción social muy fuerte que condiciona la labor de las defensoras.
¿Cómo es la relación con los compañeros de lucha por los derechos humanos? ¿Comprenden la lucha feminista y se comprometen con los derechos de las mujeres como parte de la lucha contra la opresión?
Creo que ha habido avances, cada vez hay más hombres sensibles y comprometidos realmente con las mujeres y la defensa de sus derechos. Pero también hay compañeros que son capaces de articular un discurso con enfoque de género, de escribir artículos el día de la mujer y a la hora de la verdad, cuando hay puestos remunerados, nunca van a las mujeres, los espacios de decisión están vetados a las mujeres, no se toman medidas dirigidas al empoderamiento de las mujeres, mientras nuestra posición sigue siendo secundaria, y no se tiene en cuenta esas formas de violencia específica que siguen afectando a las mujeres. No solamente hay una invisibilización de la realidad de las mujeres, ya sea como víctimas, ya sea como integrantes de los movimientos sociales, sino que hay un menosprecio al trabajo que hacemos, especialmente si es un trabajo relacionado con mujeres. Cualquier organización de derechos humanos tiene un espacio para trabajar temas de género, pero muchas veces es porque había fondo para ello, no porque se le de un valor político ni se considere necesario. Pero también hay que destacar que hay compañeros que están siendo aliados de la lucha feminista.
Y el tema de las violencias contra las mujeres dentro del movimiento social es algo que está costando mucho hablar. En Oaxaca hubo un caso de un compañero que violó a una compañera y la respuesta que hubo frente a las que denunciaron el hecho fue brutal, las acusaron de ser infiltradas, que estaban tratando de dañar el movimiento… No es el único caso. Los casos de acoso son muchos. Y con esta respuesta, quien lo sufre, va a quedar calladita.

Redes de mujeres

Eres experta en protección y estás trabajando en la generación de redes con este objetivo. Háblanos de ello por favor.
Por un lado están los mecanismos que provienen del Estado. Hay casos en los que existe una infraestructura, en otros casos no hay esa infraestructura sino que la respuesta del Estado está siendo un tanto desarticulada. Está muy centrada en protección policial, sobre todo cuando la demanda internacional ha sido fuerte. El funcionamiento es absolutamente deficiente y sin ningún interés en atajar de raíz el problema, que está relacionada con la impunidad. Es una medida reactiva a la presión, no busca atajar el problema, sino limpiar la cara del Estado frente a la presión internacional en materia de derechos humanos.
La sociedad civil y los movimientos feministas han querido reaccionar frente a las agresiones que venimos sufriendo. En muchos casos en los espacios mixtos, en otros casos como México o Nicaragua están muy ligadas al movimiento feminista. En cada país, se han ido dando experiencias y respuestas distintas. Cruzando esas experiencias y perfiles se han ido creando estrategias a nivel Mesoamericano. Distintas organizaciones han buscado la creación de espacios comunes de reflexión y de acción. Una primera parte de estas iniciativas son los informes sobre agresiones en la región de los que hablábamos antes, que es una parte diagnóstica y que tiene que ver con generar espacios de identificación, que se han ido puliendo y nos han dado pistas de por dónde actuar.
A partir de ahí se han empezado a establecer medidas de acción, preventivas y reactivas. Se han ido generando estrategias para ir identificando las violencias que sufrimos las defensoras, visibilizándolas sobre todo. Porque muchas veces, las mujeres sufrían violencia y la reconocían, pero no sabían identificar un tipo de violencia específica hacia las mujeres. Por ejemplo, en el allanamiento a la casa de una defensora se robaba o rompía la ropa interior, el hostigamiento y el estigma de ciertos insultos es distinto en el caso de las mujeres… Esto permite identificar que necesitamos un tipo de respuesta adecuada que se va construyendo colectivamente. Por ejemplo, un protocolo de actuación frente a una agresión sexual para las organizaciones sociales. Esto permite que estas realidades se incorporen a los espacios mixtos y que desde los espacios feministas también se articulen respuestas.
Es decir, todo este trabajo implica un diagnóstico y la articulación de respuestas desde mujeres y para las mujeres, desde una perspectiva integral. La mujer es el centro del sistema de protección, se parte de preguntar a la mujer qué necesita, qué puede conseguir por sus propios medios y en qué le podemos ayudar. Esto genera un proceso mucho más sostenible en el tiempo y además facilitas el empoderamiento de las mujeres. Sin generar un proceso maternalista, al contrario, se trata de generar un proceso de sororidad y solidaridad.

La raíz de los conflictos: poderes económicos y políticos

¿Qué papel cumplen los medios de comunicación en la visibilización de este trabajo?
Es fundamental, es una de las estrategias de protección, no en todas, para algunas compañeras es mejor seguir haciendo un trabajo por lo bajito. Ahora bien, no solo hablamos de visibilización, sino de la visibilización adecuada, de las problemáticas y del papel de las mujeres en ellas. Allá los medios participan en la estigmatización de los defensores y de las defensoras de los derechos humanos, especialmente. Entonces, sería fundamental que los medios valoraran el trabajo que realizan esas mujeres y la importancia de este trabajo en la sociedad que vivimos para construir democracia, sociedades más igualitarias, agendas de desarrollo, etc.
Pero también cuando una ve como se abordan desde los medios de comunicación de España los proyectos de desarrollo en América Latina y como se abordan de manera absolutamente sesgada los conflictos que estos proyectos imponen, sientes la necesidad de señalar que eso no ayuda. La mayoría de las agresiones a defensoras se dan a mujeres que trabajan en tierra y territorio. Son mujeres que están confrontando con proyectos impuestos desde sectores económicos y los poderes formales nacionales y locales, en muchos casos, como el de Berta, apoyados por el Banco Mundial, e incluso con proyectos de desarrollo. Si somos conscientes de cómo por los capitales internacionales están generando conflictos en las poblaciones a las que se les quieren imponer proyectos –energéticos, turísticos-, creo que entenderíamos mejor lo que está pasando.
Foto: AmecoPress;