9/04/2008

SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACION ; VOTO SECRETO EN LOS RECUENTOS SINDICALES



DEBEN MINISTROS DE LA SUPREMA CORTE GARANTIZAR
EL VOTO LIBRE Y SECRETO EN LOS RECUENTOS SINDICALES \

Oportunidad histórica para avanzar en el combate a la injusticia y las mafias en el mundo laboral

No puede haber democracia en el país si se le niegan a los trabajadores derechos elementales para tomar decisiones

Si se quiere combatir en serio a la delincuencia, es indispensable acabar con las bandas de golpeadores que utilizan caciques y centrales obreras

México, D.F., 4 de septiembre de 2008

La decisión que están por tomar los Ministros de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en referencia a la obligatoriedad del voto secreto en los recuentos sindicales es fundamental no sólo para garantizar el derecho constitucional de los trabajadores a organizarse, sino para el país en general, porque no se puede hablar de democracia cuando ésta es inexistente en el mundo laboral.

Es indispensable que los Ministros de la Suprema Corte se manifiesten con independencia y apego a la Constitución, porque establecer el voto secreto en los recuentos sindicales es un paso fundamental para acabar con la corrupción y las mafias que dominan gran parte de los sindicatos, en detrimento de los derechos laborales, económicos, jurídicos y sociales de millones de mexicanos.

Mucho se ha hablado en los años recientes sobre la democracia en México, de la transición del país hacia la democracia, y aunque se ha avanzado en algunos temas como el respeto al voto y la transparencia en procesos electorales, esos mismos derechos no han llegado al mundo sindical, que sigue sumido en la ilegalidad, la corrupción y la opacidad.

Los avances democráticos que tanto presumen los gobiernos federal y locales; los medios de comunicación, analistas e intelectuales, no han llegado al mundo sindical, que se mantiene en la época del mayor autoritarismo.

La falta de garantías para que los trabajadores ejerzan el voto secreto y en lugar neutral para decidir quiénes los representan ha servido a los caciques y centrales obreras corruptas para imponer el terror contra los trabajadores, presionándolos y obligándolos a votar por ellos bajo la amenaza del despido y la agresión física, dado que con el voto abierto pueden saber en qué sentido se pronuncia cada quien.

Esa práctica ha generado a lo largo de los años historias de injusticia, de indefensión física y jurídica de los trabajadores, a quienes las bandas de golpeadores al servicio de los caciques y las centrales han llegado incluso a asesinar. Se podrían contar también por decenas de miles los despidos de quienes se atrevieron a desafiar a las mafias y las autoridades laborales cómplices con un voto libre e independiente.

Ahora que se habla de la inseguridad como una amenaza para la institucionalidad del país, es necesario reflexionar que esos mismos delincuentes a los que se quiere combatir son utilizados como golpeadores en los conflictos laborales. Si se quiere combatir la delincuencia hay que hacerlo también en el ámbito laboral.

El Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS), apela a la integridad, honestidad jurídica y, sobre todo, en el sentido de justicia que debe prevalecer en los integrantes del Máximo Tribunal, para que su voto sea en favor del voto secreto en los recuentos sindicales. No habrá democracia ni justicia verdaderas en el país si se sigue negando a los trabajadores derechos elementales como el voto secreto. Los Ministros de la Suprema Corte tienen ante sí una decisión histórica y una oportunidad impostergable de contribuir a la democracia.

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