CONTEXTO
“Intenta imponer su visión moral como política pública”
Por Guadalupe Cruz Jaimes
México, DF, 12 dic 11 (CIMAC).- Con el argumento de que la educación sexual desligada de principios morales abre camino “al vicio y a la perversión” de adolescentes y jóvenes, la jerarquía católica conservadora se ha convertido en el principal “adversario” del ejercicio de los derechos sexuales.
En la revista Conciencia Latinoamericana, publicada por la organización Católicas por el Derecho a Decidir (CDD), especialistas en el tema señalan que por tal motivo las y los jóvenes han tenido que arreglárselas sin contar con la información y los elementos de protección necesarios para garantizar el ejercicio pleno y responsable de su sexualidad.
Una de las formas de imponer a la sociedad su “agenda conservadora” es mediante el embate de grupos de derecha en contra de la impartición de educación sexual laica y científica en las aulas escolares.
La Iglesia se refiere al ejercicio de la sexualidad en las y los jóvenes como una “crisis de valores”. Sin embargo, CDD considera en la publicación que no es posible mantener una “moral sexual” que se antepone al respeto de los Derechos Humanos (DH).
Y es que las valoraciones religiosas de los comportamientos sexuales históricamente se han traducido en culpa y en discriminación. Por ello es fundamental el respeto al Estado laico.
María Consuelo Mejía, directora de CCD, mencionó durante el foro “Estado laico y derechos reproductivos”, que “el principal adversario de los Derechos Humanos de las mujeres y de los derechos sexuales y reproductivos es la jerarquía conservadora de la Iglesia católica” en México, y en cualquier país.
En el fondo se trata de una “batalla sobre el control de la autonomía de las mujeres, del cuerpo de las mujeres, la sexualidad de todas las personas”.
Este tema “siempre ha estado en la agenda de Iglesia”, pero se fortaleció con el “fracaso” de ésta en las conferencias de El Cairo y Beijing, donde intentaron “imponerle al mundo su concepción moral como política pública”.
En el foro, que se realizó en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, Mejía citó algunos ejemplos de la intromisión de la jerarquía en asuntos públicos que tienen que ver con los DH de las mujeres.
Entre ellos, que Alberto Suárez, arzobispo de Morelia, Michoacán, declaró que “a la Iglesia no le importa vulnerar el Estado laico, estamos para defender a los más indefensos y entre ellos están los que todavía no nacen, de manera que hay que obedecer a Dios, antes que a los hombres”.
Otro ejemplo es Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis, quien refirió: “Nosotros queremos construir una sociedad con valores y el PRD sólo destruye, por eso he dicho que ese partido ha hecho más daño que el narco, con 40 mil abortos; el narco lleva apenas 28 mil”.
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