4/15/2009

Periodistas pal café...




Julio Hernández López: Astillero
El día en que los helicópteros armados estadunidenses se aparecieron por los rumbos de Chapultepec (más precisamente, por los hoteles de Polanco), los políticos mexicanos ni tiempo tuvieron de envolverse en alguna bandera hipotética de, cuando menos, cierto pudor declarativo. En realidad, varios de ellos, senadores, para más señas, habían aprobado en esa misma fecha las insólitas acciones conjuntas de marinos mexicanos con gringos, lo que los altos mandos de la nación regente ya habían anunciado mucho antes de que se diera por enterado el soberano” Poder Legislativo del país, también conocido como Texican Whopper. Otros se enfrascaban en fieras batallas por las trincheras plurinominales, y el resto se entretenía en hacer cálculos de pérdidas y ganancias en los comicios por venir, los intermedios inmediatos y los presidenciales de 2012, desde ahora tan acariciados por los priístas salinizados. Escenario perfecto, de división interna, desánimo popular y voracidad de la elite política, para la visita del jefe de la potencia vecina, que está por nombrar un “zar” de la frontera y que estará esta semana en México para imponer nuevas reglas de trabajo en un patio trasero en riesgo de explosiones, con las zanahorias por delante de las posibilidades de leyes migratorias para mojados mexicanos y de la instalación de filtros en Estados Unidos para que allá no se compren las armas, cuya anulación de uso criminal en México debería ser obligación y logro de los nativos, y no del imperio temporal y simuladamente condescendiente.Viajando por Aguascalientes, el principal promotor de la venta de México como paquete turístico para extranjeros convocó a los gobiernos estatales y sus policías a no dejarle sólo a las fuerzas federales el choque con los narcotraficantes. Usuario de lenguaje académico preciso, el PFP Mayor elogió a la policía federal pues, dijo, ésta, al igual que el Ejército, han “tenido una actuación valiente enfrentando a los delincuentes” y “no le han dado la vuelta ni le han sacado al parche a la delincuencia”. Y, como si diera una información novedosa, como si diariamente no hubiera un baño de sangre en todo el país, comentó, casi en confidencia: “Es más, ha habido ya varios enfrentamientos”. En Sonora, mientras tanto, aparecía un arsenal bajo el cuidado de una mujer, Anahí Beltrán, con capacidad de fuego como para perforar blindajes fuertes y para alcanzar naves en vuelo. Y en Guerrero era aprehendido El Nene, un presunto comisionado de los Beltrán Leyva. Platillos menores, pero magnificados, en bandeja mediática para halagar al emperador por llegar.Tula fue designada sede para la construcción de la refinería calderónica. Siempre se había hablado de esa población hidalguense como necesaria triunfadora, por razones técnicas y económicas, de un concurso que el animador Felipe prolongó mediante foros inservibles y desangelados. El tufo politiquero asomó todavía a última hora, cuando se condicionó a la entidad gobernada por priístas para que en cien días cumpla requisitos inmobiliarios o el premio del sexenio pasaría a la Salamanca del Guanajuato panista, que está en lista de espera, no sólo de un eventual tropiezo hidalguense, sino de algún premio electoral de consolación.El Atlante de San Cristóbal, Guanajuato, Chente Fucks, estaba en vías de ser llevado por los priístas a un presunto paredón político, a causa de las grandes pillerías que cometió junto con su esposa, y con familiares y amigos de ambos integrantes de la ridículamente llamada “pareja presidencial”, y por haber despilfarrado la riqueza nacional, en especial los excedentes derivados de los altos precios del petróleo, sin producir el vicentino desgobierno sino más miseria y desigualdad en el país. Los altos capos del priísmo quieren cobrarle a Germán Trespatines y a su evidente titiritero (el antedicho lic. f.c.) las sopas de letras, crucigramas, videos y discursos con que han pretendido frenar el supuesto ascenso electoral del tricolor, vinculándolo con el narcotráfico y la corrupción (la olla panista acusando al comal priísta). Con datos provenientes de la auditoría institucional de su última cuenta pública, los sicarios políticos pertenecientes al cártel de los líos (Man-lío y Emi-lío) tratarán de exhibir al Grandote del Cerro Blanco y Azul. Lo malo para los libretistas del PRI es que con esas acciones podrían dar pie a que el Bocón esposo de la señora Marta se sienta autorizado a irrumpir en las campañas electorales.Aunque, en realidad, Chente ni siquiera debería darse por aludido ni emprender acciones de defensa. Allí está, para ilustrar el amplísimo archivo de las impunidades consentidas, el caso del itamita Miguel Ángel Jiménez (miembro del mismo grupo político del que formó parte el también inolvidable Luis Carlos Uh Fraude), quien ayer se asomó a la Cámara de Diputados armado de una concha blindada de tortuga para repeler preguntas indeseables y un mecanismo de zorrillo político para expeler respuestas lamentables. Sí, se reunió con los representantes del Diario de Yucatán en la oficina de Carlos Mouriño Terrazo, en el Campeche de los Mouriño Sucesores, en campaña electoral abierta para imponer a un administrador que se hará llamar gobernador, pero solamente... porque en esa ciudad no hay oficinas de la Lotería Nacional y el bondadoso y desinteresado hermano heredero ofreció sus instalaciones ajenas a temas políticos, partidistas o electorales. Y que todo el argüende desatado se debe a una confusión de los vendedores de publicidad que creyeron haber oído “campaña panista” cuando se hablaba de otros premios gordos sin reintegro. Eso sí, muy pulcro, Jiménez renunció a su militancia en el Panal, para dejar a salvo el buen nombre del negocio partidista de la profesora de los premios gordillos, la que, según eso, desde cuándo lo tenía en la lista negra y no lo quería ya ni tantito. Pero... ¡Oh!, en lo alto, ¿qué es: un avión, Supermán, un anuncio de Burger King? ¡No, son los helicópteros de Barack, que anuncian su advenimiento! ¡Hasta mañana!Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mxEnrique Galván Ochoa: Dinero
uando Vicente Fox propuso el año 2006 instalar una refinería en Centroamérica calculó su precio en cinco mil millones de dólares, los conocedores dijeron que era una barbaridad, alguna mañosada tenía en mente. En abril de 2007 la secretaria de Energía, Georgina Kessel, lo recalculó entre 7 y 8 mil millones. Cuando se discutía la reforma energética Calderón lo estimó en 7,500. Ayer Reyes Heroles dio a conocer el presupuesto oficial: 10 mil millones de dólares. Obviamente, no están hablando exactamente de la misma refinería, su precio varía en relación a su capacidad, pero sería aconsejable que explicaran cómo en sólo tres años el precio se disparó al doble. Por otro lado, el valor de las importaciones de gasolina el año anterior sumó 15 mil millones de dólares. Se necesitan 4 refinerías para remplazar el combustible extranjero. El gobierno calderonista se decidió por Tula, Hidalgo, para instalar el nuevo centro de refinación, con un propósito técnico pero también político: agradar al cártel del PRI. Necesitará su apoyo –¿o silencio cómplice?– para justificar el préstamo del FMI que vino a doblar la deuda externa del país.AforesEn semanas anteriores estuve publicando las airadas protestas de los trabajadores afiliados a las afores porque les llegó un estado de cuenta simplificado que ocultaba maliciosamente el dinero que perdieron los administradores por sus malos manejos en mercados bursátiles. Hubo un silencio cómplice de diputados y senadores, al igual que de los líderes de los sindicatos charros. Las afores están agrupadas en la Amafore, que actúa como cabildera de sus intereses. La Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro a cargo de Moisés Schwartz –autorizó el ocultamiento de la información– anuncia que expedirá nuevos formatos de estados de cuenta, que obligan a reportar el saldo anterior y actual de la cuenta individual, los rendimientos o minusvalías, y las comisiones que cobran. Después de niño ahogado…TemblorinaMientras fueron mexicanos –mafiosos y personas inocentes– las víctimas de la narcoviolencia, las autoridades se refugiaron en cumbres de seguridad y declaraciones optimistas para disimular su ineficacia, o algo peor. Posiblemente las cosas seguirían igual pero el negocio se extendió al sector de la exportación y la violencia comenzó a desbordarse al lado americano. Se molestaron las autoridades del poderoso vecino que estrena gobierno y quiere demostrar a sus ciudadanos que tiene el control. Y de repente resultó que nuestros funcionarios tenían un guardadito de varios centenares de millones de pesos para pagar recompensas por la captura de los mafiosos. Y ya han caído dos o tres importantes, no los más importantes, a tanto no se han atrevido. Ya sabemos cuál es la fórmula: olvidémonos de cumbres y discursos, y que sigan viniendo a México las señoras Clinton y Napolitano y el señor Obama.
Alfredo Jalife-Rahme: Bajo la Lupa
ntecedentes: frente al líder del Senado, Manlio Fabio Beltrones, el todavía secretario bushiano de Defensa, Bob Gates (quien repitió en su sensible puesto con Obama), durante una conferencia el año pasado en Washington prometió la incorporación de México al Comando de Defensa Aeroespacial de Norteamérica (NORAD, por sus siglas en inglés) siempre y cuando aprobase la Iniciativa Mérida. Deseamos que Calderón y Beltrones estén enterados que el NORAD fue durante la guerra fría el escudo defensivo nuclear de Estados Unidos y Canadá (dos miembros de la OTAN) frente a la entonces Unión Soviética.Más allá del notorio entreguismo de los embajadores de “México” en Washington –Jesús Reyes Heroles Jr., con su “consejero político”, Luis Carlos Ugalde Ramírez (de macabro recuerdo por la devastación del Instituto Federal Electoral), y el castañedista Arturo Sarukhán Casamitjana–, ya no se diga las variaciones coreográficas entre los partidos Republicano y Demócrata, ¿por qué razón resucita el Pentágono en la post guerra fría el NORAD, esta vez con la extraña inclusión de México? ¿Sabrán tales “gobernantes” que la adopción que haga México de los teoremas militares del Pentágono –desde la guerra contra las drogas, pasando por la que va contra el terror islámico, hasta el NORAD–, lo obliga a compartir los enemigos globales que se ha ganado a pulso en Eurasia, África, Europa y Latinoamérica?Hechos. “La ruta antigua de los hombres perversos” ya había sido trazada, como hubiese expresado el filósofo francés René Girard, a partir de la incrustación del “México salinista” al TLCAN de Daddy Bush (un fracaso rotundo, según los centros académicos de máxima jerarquía de Estados Unidos) que siguió con el ASPAN foxiano –Alianza para la Seguridad (¡súper sic!) y Prosperidad (¡súper sic!) de América del Norte que encubre la entrega de los hidrocarburos de México y que no aportó “seguridad” ni “prosperidad”, como es sencillo constatar en los alrededores– y luego se afianzó con el Plan México (clon del fallido Plan Colombia), rebautizado como Iniciativa Mérida.Los tres trayectos –TLCAN, ASPAN e Iniciativa Mérida– forman parte de la agenda unilateral de Estados Unidos, impuesta a un emasculado México valetudinario que la dupla Joseph Marie Cordoba-Zedillo (en ese orden), con sus aliados Guillermo Ortiz Martínez, Ángel Gurría y los hermanos Werner Wainfeld –Alejandro, Mariano y Martín, hoy uno de los jerarcas de Banca Mifel (Voces del Periodista, No. 207, 1/4/09) y empleado de Goldman Sachs)–, se encargó exitosamente de desmantelar el sistema financiero mexicano, controlado obscenamente por el eje Wall Street-la City.Aprobada la Iniciativa Mérida por el Congreso calderonista-beltronista, Bob Gates cumple su promesa bushiana y ha iniciado los preparativos, en la fase de Obama, para incrustar al “México neoliberal” al NORAD, como se desprende del análisis De Defensa, centro de pensamiento militar europeo (9/4/09).A su juicio, el Pentágono “integra a México y a la frontera sur de Estados Unidos en su feliz (sic) planificación de su guerra contra las drogas”, como expuso el general James E. Hoss Carwright durante la conferencia de prensa del 6 de abril en la que Bob Gates, secretario de Defensa, planteó sus propuestas de recorte presupuestal del año entrante.El general Cartwright, estratega de la globalización militar, pertenece a los marines y es adjunto del almirante Michael Mullen, presidente del Comando Conjunto del ejército. A una pregunta de un periodista sobre la “participación de México por primera vez en su historia en ejercicios militares conjuntos en Florida” bajo la égida del Comando Sur, el envalentonado general Cartwright respondió afirmativamente que la “cooperación” (¡súper sic!) se realizará “tanto a nivel de los servicios, para entrenamiento, como a nivel operativo, con el Comando Norte, para el apoyo en el combate a las drogas en curso, pero también con el apoyo general en su capacidad para defender su territorio (¡extra sic!)”.Además de las hollywoodenses amenazas de Al-Qaeda a Pemex, ¿qué país o coalición de cárteles trasnacionales cuenta invadir a México cuando Calderón y Carstens aseguran que todo va viento en popa con los “mejores financieros del mundo”? El doble “apoyo”, develado por el general Cartwright, redentor inesperado de México y sus hidrocarburos, a Dios gracias, “será mas robusto (sic) en cantidades significativas (sic) que en el pasado”. Vierte una grave acusación: “el Pentágono tomó la iniciativa de las decisiones de cooperación operativa y ha hecho presión (¡súper sic!) para que los militares mexicanos acepten”. Entonces, ¿no es iniciativa de Calderón, Beltrones y Sarukhán para que los comandos del Norte y del Sur defiendan la integridad territorial de México con sus hidrocarburos?El nuevo Pentágono con su presupuesto restringido, debido a la doble grave crisis financiera y económica de Estados Unidos, ya se instaló en la escenografía de la guerra irregular (ver Bajo la Lupa, 7/12/08), donde México sirve, para no variar, como su primer cobayo experimental a escala global.El bienaventurado general Cartwright no oculta la “transición” del nuevo Pentágono a la “guerra irregular”, de la que forma parte la guerra calderonista contra las drogas (y su agenda de entrega oculta de los hidrocarburos y la seguridad nacional por la vía militar), que requiere de específicos entrenamiento y equipamiento dotados, a Dios gracias, por la vecina superpotencia redentora.De Defensa se asombra de la “remarcable densidad” de la respuesta del general Cartwright y aporta un mordaz comentario: “el Ejército Mexicano implicado en un ejercicio con el ejército de Estados Unidos”. Adiós a la discreción y al disimulo, y bienvenida a la operación conjunta bajo el doble mando en pinzas del Comando Norte (para el combate a las drogas en la transfrontera con todo y su muro de la ignominia) y del Comando Sur (para la defensa del territorio mexicano).¿No será, más bien, que Estados Unidos teme, en su fase de decadencia, que algunos de sus pletóricos enemigos globales se infiltre por su frontera sur y/o el Caribe, sus dos puntos mas vulnerables? ¿Adelanta el Pentágono sus filas defensivas hasta el Canal de Panamá, que conectan, además, el Plan México al Plan Colombia, lo que de paso devora a México y a los pequeños países del Caribe y Centroamérica?Afirma que “el Ejército Mexicano deberá seguir sin discutir (sic) las nuevas doctrinas que Estados Unidos desarrollará” y plantea que la guerra en la transfrontera sirve de “conducto para la anexión (¡súper sic!) del Pentágono”, que representa, al mismo tiempo, “un ensayo de la grandiosa nueva doctrina” donde la implicación militar estadunidense será “estructuralmente masiva”. No es para menos: atrapa a México entre los dos comandos operativos de Estados Unidos para todo el hemisferio americano. ¿Constituye México la nueva placa tectónica de la geopolítica entre el decadente norte y el ascendente sur del hemisferio fracturado?
Carlos Fernández-Vega: México SA elizmente no convocó a otro foro” para decidir la ubicación de la primera refinería a construir en tres décadas, aunque deberán transcurrir cien días como máximo para saber si, en efecto, “todo en México es Tula”, la localidad hidalguense ayer seleccionada, con condiciones, como ganadora del “proceso de consulta” que a sus súbditos ordenó el inquilino de Los Pinos el pasado 18 de marzo.Que Tula es la ganadora de la intensa cuan profunda “consulta pública” para la ubicación de la nueva refinería, anunció el director general de Petróleos Mexicanos con bombo y platillo..., siempre y cuando el gobierno de Hidalgo cumpla con un requisito que (se supone) debió formar parte (también se supone) de los detalladísimos “criterios de selección” en cuyo armado y ejecución la paraestatal consumió más de un año (13 meses para ser exactos, desde el anuncio original del inquilino de Los Pinos el 18 de marzo de 2008, el cual fue reiterado, aunque disfrazado de novedad, el pasado 8 de octubre como parte del “plan anticíclico”). Entonces ya se tomó la decisión... pero si Hidalgo no satisface tal condición, la primera refinería en 30 años se construiría en Salamanca, Guanajuato (ciudad que obtuvo medalla de plata en este atractivo concurso y que ayer, como premio de consolación, se llevó la promesa de reconfigurar la refinería existente en esa localidad).El director general de Petróleos Mexicanos detalló: la citada construcción “queda sujeta a que la paraestatal cuente con los terrenos (700 hectáreas, “cuyos títulos de propiedad deberán ser donados, con carácter de irrevocable” a la empresa petrolera) para el nuevo tren de refinación en Tula; la seguridad jurídica en la tenencia de la tierra es fundamental para el proyecto. Además, la propiedad de los terrenos por parte de Pemex debe realizarse en el menor tiempo posible. En otras palabras, la construcción del paquete mencionado se materializará siempre y cuando se concluya la donación a Pemex de los terrenos necesarios durante los 100 días naturales subsecuentes a este anuncio (a partir de hoy); si al término de esos 100 días naturales el gobierno de Hidalgo no pone a disposición de Pemex dichos terrenos y en caso de que el gobierno del estado de Guanajuato sí pudiese cumplir con dicha condición durante los 10 días naturales inmediatos posteriores, entonces la ampliación de capacidad de refinación se realizaría en Salamanca y la reconfiguración en la refinería Miguel Hidalgo, en Tula”.Qué lástima, porque “el análisis pormenorizado realizado por Petróleos Mexicanos” (Reyes Heroles G.G. dixit) no incluyó el pequeño detalle de los terrenos en los que se construirá (eso esperamos) la nueva refinería. Todo se revisó, analizó, sopesó, ponderó, masticó, etcétera, menos ese insignificante fragmento de tan elaborado proyecto, es decir, en dónde se colocaría la primera piedra. Aún así, qué bueno que los funcionarios sean tan cuidadosos y detallistas (salvo la minucia de los terrenos), porque el país requiere urgentemente ampliar su capacidad de refinación.Y habrá que aprovechar este saludable cuan esmerado ambiente de análisis y precaución, porque sería deseable que se trasladara a proyectos que, como mala telenovela, nunca acaban, cuestan mucho más de lo estimado y en los que los funcionarios de la paraestatal no fueron lo suficientemente cuidadosos, como en el caso de la reconfiguración de la refinería Lázaro Cárdenas en Minatitlán, Veracruz, cuya obra no sólo acumula cuatro años de retraso, sino que su costo se ha multiplicado por 2.5, amén de las pérdidas por la reducción de su capacidad refinadora.Jesús Reyes Heroles, director general de Petróleos Mexicanos, ayer, al hacer el anuncio formal de la construcción de la nueva refinería en Tula, Hidalgo">Foto José Antonio López La Auditoría Superior de la Federación lo condensa así: “el proyecto (plazo ampliado) para la reconfiguración de la Refinería Lázaro Cárdenas debió terminarse el 29 de abril de 2008 (el plazo original fue mayo de 2005, en el sexenio del “cambio”, que se amplió a octubre de 2006). Por el retraso de la puesta en operación, sólo por concepto de las gasolinas no vendidas, se han dejado de producir 59 mil barriles diarios, que equivalen a 53 mil 492 millones de pesos (aproximadamente 5 mil 450 millones de dólares, equivalente a cerca de 40 por ciento de lo que en 2008 se pagó por importar gasolina), además de la significativa salida de divisas por concepto de importación de combustible. En este proyecto de reconfiguración (otorgado a la trasnacional española Dragados) Pemex-Refinación autorizó un contrato a precios unitarios por 84 millones 866 mil 700 pesos (se presume daño al erario), para realizar trabajos de mejoramientos de sueldos y pagar volúmenes adicionales por concepto de cimentación correspondientes al proyecto de reconfiguración de la Refinería de Minatitlán, paquete III; sin embargo, esos trabajos estuvieron incluidos en el alcance de otro contrato a precio alzado, el que carece de la documentación para soportar la integración de los precios unitarios y el pago de estimaciones”.Algo “falló” en el caso de la refinería Lázaro Cárdenas, y no es precisamente una cuestión de detalles. La propia paraestatal informó que (13 de mayo 2003) que tal reconfiguración “será concluida en un periodo estimado de 48 meses, a través de recursos tipo Pidiregas y gasto programable”, y que la capacidad de refinación pasaría de 186 a 350 mil barriles diarios. Tendría que haber concluido el 13 de mayo de 2005. Cuatro años después del citado plazo, aún no terminan.Pemex hizo el anuncio un día después del show que para el efecto armó (¡quién más!) Vicente Fox, entonces inquilino de Los Pinos, el mismo que aseguró que la reconfiguración de la refinería Lázaro Cárdenas “reactivará la economía, los empleos y el mercado interno del sur-sureste mexicano... (con esta obra) estamos cerrando la brecha de desarrollo entre el sur-sureste mexicano y el resto del país”. Sin embargo, “la brecha” sigue abierta. También aseguró que “las dependencias públicas tienen la instrucción de orientar las licitaciones prioritariamente a las empresas nacionales y particularmente a las pequeñas y medianas”. En los hechos, una trasnacional española se quedó con el contrato.Venció el plazo (mayo de 2005), y ocho meses después, el 19 de enero de 2006, Fox anunció con bombo y platillo que la reconfiguración “quedará terminada en abril de 2008”, y en abril de 2009 aún no concluye la obra.Las rebanadas del pastelNo vaya a ser que el gobernador de Hidalgo, con tal de obtener los terrenos en los 100 días exigidos por Pemex, recurra a la “técnica Fox” utilizada en Atenco.cfvmexico_sa@hotmail.commexicosa@infinitum.com.mx
Luis Linares Zapata: Señales para la inmovilidad
a búsqueda de señales que introduzcan tranquilidad o restituyan confianza a los mercados se vuelve una materia tan vaporosa como angustiante para el oficialismo y sus auxiliares. A medida que se acerca la cita con las urnas de julio la presión aumenta para difundir algo positivo que apunte hacia la luz al final del túnel. Poco importa que sea mediante un precipitado anuncio sobre el intercambio de monedas con el Tesoro estadunidense (Swap) o un crédito multimillonario del Fondo Monetario Internacional que no se utilizará”. A veces puede auxiliar un menor ritmo de caída en el empleo, cierto repunte de la bolsa o el entrevisto funcionamiento del programa de rescate chino. Cualquier dato, revelación o simple accidente puede ayudar a serenar los descompuestos ánimos de los inversionistas o aplacar el coraje de los desesperados.El espantajo del narcotráfico como arma distractora que blandió Acción Nacional en contra del Revolucionario Institucional se ha desvanecido sin impactar de lleno a la masa electoral. La escaramuza quedó prendida en un círculo selecto de repetidores y encuestadores ah-doc.La crisis económica, en cambio, va quedando sola en el descarnado ámbito colectivo y apenas cubre esa otra crisis, más profunda y dañina, de naturaleza social, que crece con los días. Las penas, los dolores, la pérdida de oportunidades y hasta la desesperanza de un futuro asequible se tornan una densa realidad que agobia a los votantes. Las salidas que se diseñan en los cuartos de estrategia publicitaria para presentar algún panorama halagüeño que atraiga simpatías hacia los partidos, responsables de gran parte de la crisis, se achican o, de plano, desaparecen.Aun en estas extremas condiciones algo se ha de encontrar para salvar cara y alcanzar lo ansiado: una mayoría legislativa que permita mejores condiciones para la conducción política, para la gobernanza y reparar la contrahecha economía.El panismo se reúne, escoge conductora estrella (JVM) y anima a sus elegidos para disputar a los priístas las inclinaciones al voto que ya calculan las encuestadoras y repiten los comentaristas de cada uno de los bandos. Los demás partidos poco o nada cuentan. La disputa, alegan, será entre esas dos formaciones. Precisamente esas que son las responsables de la mayoría de los males que se padecen. Los mexicanos, en tropel, no dudan en pronosticar los difusores orgánicos, volverán a votar por sus conocidos, que son, qué duda cabe, sus efectivos verdugos. Así todo volverá a los cauces de antes.Mientras tal expectativa se coagule para deleite de la plutocracia gobernante, hay urgencia de entronizar, aplacar, en la conciencia colectiva, dos asuntos que siguen bullendo y sin respuesta.El primero, y básico, es determinar la falla, las ausencias, el erróneo pensamiento de base que causó la debacle, las formas de conducción que nos han metido en problemas durante el último cuarto de siglo. Hay urgencia de plantearse, con toda seriedad, la inoperancia de un modelo que ha sido depredador, injusto por concentrador y que se extendió por todo el mundo. Desentrañar cómo dicho modelo capturó conciencias y sometió dirigentes y elites. Cómo fue que las masas quedaron enredadas en fórmulas que no fueron extraídas de la propia historia, necesidades e invención.El segundo apunta hacia la búsqueda de los remplazos, las nuevas rutas a ensayar, el cambio a diseñar y que ya germina en varios lugares identificables del planeta o, para mayor cercanía y precisión, en este subcontinente latinoamericano. Dar cabida a formas y senderos inéditos, modos alternos de enfrentar la emergencia y rencauzar las estructuras (social, cultural y productiva) que ya no funcionan, pero que no son visualizadas por las elites locales. Rutas que son motivo de una impaciente y hasta iracunda oposición en la cúspide decisoria del país. La compulsiva tendencia del poder a la inmovilidad.Poco a poco, pero sin pausas, se empieza, en la crítica, por identificar esos mecanismos instalados dentro del sistema en operación que hacen nugatorios los esfuerzos productivos o los trastocan por otros concentradores de la riqueza. Se habla y recala en el ya bien avanzado diagnóstico que explica el lento crecimiento económico padecido. No para aceptarlo como destino inevitable, sino como un mal a desterrar. Se solicita, entonces, penetrar y desarmar esas deformaciones que se han aposentado, durante años, como dispositivos informales, pero vigentes, y que imposibilitan repartir los frutos con equidad. O, peor aún, se conocen ya esas trabas que impelen a depositar los grandes remanentes (utilidades) entre los privilegiados de siempre o entregarlos al extranjero.Se habla aquí de esas seudo empresas, gabinetes, consultorías u organismos asesores, enquistados en el cuerpo productivo, del poder central, en los legislativos o con gobiernos de alcance regional, para representar los intereses individuales, los corporativos o de sólo unos cuantos, sean éstos foráneos o locales. Cabilderos que se llaman a sí mismos agentes de relaciones públicas, representantes exclusivos y que son, en realidad, simples personeros o traficantes de influencias. Una verdadera plaga de coyotes que llevan el agua a los molinos de sus patrones y deforman el entramado y la orientación debida de los procesos decisorios.Para asombro de aquellos que esperan un cambio de rumbo, la introducción de mecanismos correctivos que aseguren una mejor marcha de la economía, un crecimiento más rápido y un mejor reparto de las oportunidades, nada puede vislumbrarse en el gobierno que apunte hacia ese deseable estadio. Al contrario, todos, en la cúspide, trabajan aceleradamente para reponer lo conocido, lo trillado durante años y que ha llevado a México a ser un ejemplo mundial de lo que no debe hacerse.El alumno obediente, obcecado en seguir las reglas impuestas por los centros de poder hegemónico, se somete de nueva cuenta a los organismos internacionales reciclados. El señor Calderón y su liviano secretario Carstens se afanan en regresar a la normalidad sin reparar en que eso será casi una imposibilidad metafísica.
Arnoldo Kraus: Vacunas y VPH
l virus del papiloma humano (VPH) está de moda. Las compañías farmacéuticas han diseñado dos vacunas para prevenir el contagio, algunos médicos inopinados han actuado como vectores y algunos servicios de salud en el mundo, entre ellos el del Distrito Federal, se han sometido a los dictados de las farmacéuticas. Al lado cabalga la madre publicidad que sabe cuáles son los caminos y quiénes las víctimas. Las campañas publicitarias actuales, por medio de sus vastas patrañas, me regresan a uno de los episodios más bellos en la historia de la medicina.Cuando se descubrió la primera vacuna contra la poliomielitis, el periodista Edward R. Murrow preguntó, en 1955, a Jonas Salk: “¿A quién le pertenece la patente de la vacuna?”, a lo cual el científico respondió: “Yo diría que a los seres humanos. No hay patente. ¿Podría usted patentar el sol?” La respuesta es, por supuesto, todo un tratado de ética. En contraposición a esa historia, destaco la ética de algunas compañías farmacéuticas.En marzo de 2009 fue retirada de México la publicidad de la empresa GlaxoSmithKline, que promovía las bondades de su vacuna Cervarix contra el VPH. Decían los dueños de la farmacéutica: “Hija, si estás viendo este video es que no sobreviví al cáncer cérvico uterino”, sentencia una voz herrumbrosa, triste; el rostro, aunque compungido, no se llena de lágrimas. “Para ti y para otras mujeres ya hay esperanza”, susurra mientras otra voz en off exalta las bondades de la vacuna para prevenir el cáncer de cuello del útero.Aunque el anuncio fue retirado por engañoso, la Secretaría de Salud debería levantar un juicio que cuestione las verdades del mensaje; asimismo, confieso que me encantaría saber si esta publicidad también se llevó a cabo en los países desarrollados.El quid del asunto es simple: no se conoce con certeza cuáles serán los alcances de la vacunación. Se sabe que previene la aparición de lesiones precancerosas, pero se ignora si evitarán, como reza la propaganda, el desarrollo de carcinomas; de acuerdo con los estudios disponibles habrá que aguardar entre 25 y 30 años para saber si disminuyen el riesgo de cáncer.Las razones de las farmacéuticas son groseramente simples: las vacunas producen ganancias exuberantes. Existen dos vacunas en el mercado, la mencionada Cervarix, de GSK, y Gardasil, del laboratorio Merck. Aunque no cuento con datos suficientes, Merck ganó, en 2007, gracias a Gardasil, mil 500 millones de dólares. Las ganancias no corren en el mismo camino que algunas de las dudas expresadas por expertos ajenos a las compañías.La infección por VPH cohabita con nuestra especie “desde siempre”; es una infección muy frecuente, pues hasta 80 por ciento de la población mundial la padece en algún momento y es la infección de transmisión sexual más común. Existen más de 100 cepas (subtipos) de las cuales la 16 y 18 producen o permiten el desarrollo de 70 por ciento de los casos de cáncer cérvico uterino. Las dos vacunas mencionadas actúan contra esas cepas, es decir, al menos desde el punto de vista teórico podrían prevenir la aparición de esa malignidad. En la mayoría de los casos –las cifras varían entre 70 y 85 por ciento– el sistema inmunológico controla y elimina la infección por VPH, es decir, es una infección autolimitada (“la cura el propio cuerpo”). Y lo ya dicho: habrá que aguardar 25 años para saber si evitarán el cáncer cérvico uterino; agrego otro dato: por lo menos 30 por ciento de los casos de cáncer no guardan relación con las cepas contra las que actúan las vacunas.Crucial en este contexto es la prevención. El cáncer de marras es propio de los países pobres. En México representa el mayor porcentaje (14) de las muertes por cáncer en mujeres, mientras que en Europa y Estados Unidos la frecuencia ha disminuido considerablemente. Es decir, es una enfermedad de la pobreza. Países pobres (lo siento por el dislate: y corruptos) deben invertir más en la prevención (prueba de Papanicolau) que en la compra de esas vacunas. En ese tamiz, educar es mejor que gastar el dinero en la vacuna más cara de la historia de la medicina. Recuerdo un grafiti en una isla caribeña golpeada por el sida: “If you think education is expensive try ignorance”. Las farmacéuticas hacedoras de las vacunas contra el VPH deben ceñirse a la ética. No pueden vender ni lucrar a costa de la ignorancia. La población merece otro trato y los médicos otra información. Los primeros no son clientes; los segundos no son esbirros. La lealtad a la ética debería ser el motto de las farmacéuticas. Muchas de las preguntas no resueltas en relación con sus vacunas deben llegar a la opinión pública y a los médicos.
José Steinsleger: Trinidad-Tobago: ¿fin de las “cumbres”?
l día en que los astronautas Neil Armstrong y Edwin Aldrin caminaron sobre la superficie lunar recibieron 73 mensajes enviados por distintas personalidades del mundo. Eric Williams (1911-81) escribió: La mayor y más cara esperanza para la humanidad es no perder el mundo mientras ganamos la luna (21 de julio de 1969).Williams era el primer ministro de Trinidad-Tobago, líder de la independencia nacional (1962) y autor de Capitalismo y esclavitud (1944), estudio pionero acerca de un tema que la modernidad occidental subestima, sistemáticamente: el papel jugado por Gran Bretaña y Europa en la esclavitud y la trata de esclavos negros en el Caribe, motores de la revolución industrial.Capitalismo y esclavitud. En vísperas de la cumbre de presidentes en Trinidad-Tobago, no estaría mal que los anfitriones distribuyesen el libro de Williams entre los invitados. Difícil: la versión en inglés y la única en español están agotadas (Ed. Ciencias Sociales, La Habana, 1975).Aunque pensándolo bien, no es descabellada la posición de Washington en estos aquelarres quinquenales que le permiten auscultar el nivel de zalamería y de servilismo político sin más de los gobiernos latinoamericanos. Es claro que soplan nuevos vientos. Pero si Cuba estuviese allí, el imperio se vería obligado a oír que, para nuestros pueblos, la esclavitud es inherente al capitalismo.Enajenadas con el fin de la historia, el libre comercio, la globalización y otros cuentos, las cumbres tuvieron su génesis a finales del decenio de 1980, con el llamado Consenso de Washington y el clímax neoliberal de las democracias viables dependientes del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.La primera reunión tuvo lugar en Miami, capital de la corrupción, el terrorismo y el crimen organizado (1994). Entonces, el presidente William Clinton impulsó el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA). Y la segunda, sesionó en un país de políticos agradecidos con Pinochet y adalides de la democracia moderna que forjó la sociedad más desigual del continente (Santiago, 1998).El triunfalismo del gran capital empezó a cambiar de semblante en el lustro final del siglo pasado, cuando un par de acontecimientos rayaron la cancha de las tiranías financieras, cimbrando el escenario internacional: la irrupción del zapatismo insurgente el día en que México ingresó al Tratado de Libre Comercio por la puerta de la cocina (Chiapas, 1994) y el triunfo de Hugo Chávez en Venezuela (1998).El criollaje blanquito y maquillado de blanco lanzó gritos de histeria: ¡ahí vienen los indios!, ¡ahí el populismo radical! Reacios a entender la realidad, los ingenieros del consenso persistieron en su autismo social. Y en tanto, pobladas enardecidas daban cuenta de un florido ramillete de gobernantes entreguistas, serviles y corruptos.Los tecnócratas se sacaron de la manga desafíos que debían sonar bien a fin de que los negocios marchasen mejor: preservación y fortalecimiento de la democracia, justicia y derechos humanos, erradicación de la pobreza y la discriminación, desarrollo incluyente y sostenible, igualdad de género, seguridad, crecimiento con equidad, trabajo decente para entender la pobreza, alianza para la educación… ¡que no imaginaron!Y en comedida sintonía con la época impulsaron cumbres de los pueblos indígenas “… para abordar los desafíos políticos desde su propia perspectiva” (sic). La Organización de Estados Americanos (OEA), el Departamento de Estado y Felipe González (oidor del rey de todas las Españas) quedaron a cargo de las nuevas encomiendas.En la cumbre de Quebec (2001), los sabios pusieron las barbas en remojo. Washington les dictó un brulote llamado Carta democrática, que sirvió a la OEA para alentar la aventura golpista contra el gobierno de Chávez (2002), y luego justificar el derrocamiento de Jean Bertrand Aristide, presidente constitucional de Haití (2004).Toda cumbre tiene algo de desmesura. En la de Monterrey, dado su carácter de extraordinaria (2002), México invitó a Cuba. Pero un canciller diseñado a medida, so pretexto del inminente arribo de George W. Bush, consiguió que el presidente Vicente Fox aconsejase a Fidel Castro, vía telefónica: comes y te vas. Finalmente, en Mar del Plata (2005), las cumbres recibieron el tiro de gracia: no al ALCA.El único punto real, existente y soterrado de las cumbres (en favor, neutral o en contra) ha sido el bloqueo criminal de Cuba, país que desde 1959 defiende su soberanía, junto con la dignidad y capacidad de vergüenza de los pueblos americanos. Incluyendo, naturalmente, las del propio pueblo de Estados Unidos.
Sensibilidad ante la crisis
Editorial de la Jornada.
Al presentar a la Cámara de Diputados los criterios de política económica para 2010, el gobierno de Felipe Calderón, a instancias de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), anticipó que propondrá la aplicación de nuevos impuestos para el año entrante, con el objeto de compensar el previsible descenso en los ingresos por la caída del precio del petróleo –que ayer se ubicó en 46.64 dólares el barril, tras sufrir una reducción de casi dos dólares con respecto a su anterior cotización– y la disminución en la plataforma de exportación de crudo, y evitar de esa manera una reducción en el gasto público.
El anuncio ocurre con el insoslayable telón de fondo de una crisis económica que todavía no acaba de manifestarse en toda su magnitud y que, sin embargo, ha superado ya las proyecciones de las autoridades económicas en el país. Muestra de ello es que el propio gobierno federal ha tenido que aceptar que en este año la economía nacional sufrirá una contracción de 2.8 por ciento –cuando en enero pasado la propia SHCP anticipaba un crecimiento de cero por ciento– y que al día de hoy ni el más optimista de los funcionarios del calderonismo puede negar que el país asistirá, en los meses próximos, a un deterioro aún mayor de la economía y a una profundización del desempleo y las carencias básicas del común de la población.
Es innegable que la economía mexicana necesita, desde hace muchos años, de bases sólidas de estabilidad y crecimiento que le permitan reducir la dependencia que acusa con respecto a la economía estadunidense, dependencia que hoy constituye un factor de vulnerabilidad adicional, pues ata al país, de forma inexorable, a los procesos económicos que ocurren al norte del río Bravo. También es verdad que el Estado tiene, desde hace décadas, la tarea pendiente de diversificar sus fuentes de financiamiento, a efecto de que éste no recaiga en el petróleo, como hoy ocurre, y que una forma de lograrlo es ampliar la recaudación tributaria y obtener esos recursos mediante el cobro de impuestos, como ocurre en los países avanzados.
Esto último, sin embargo, no puede ni debe pasar por la aplicación de castigos adicionales para la población, como lo sería la implantación de nuevos tributos en un momento en que la economía popular se encuentra severamente lesionada. Por añadidura, el propósito oficial de establecer nuevos impuestos resulta moralmente impresentable cuando el propio gobierno se empeña en aplicar una suerte de subsidio tributario los dueños de los grandes capitales, y cuando la administración ha mostrado falta de capacidad en el manejo de las finanzas públicas, como lo muestran los niveles de endeudamiento público alcanzados durante el calderonismo, que le cuestan al país, tan sólo por concepto de pago de intereses, montos superiores a las inversiones realizadas por Pemex en un año.
Por otra parte, la lógica de evitar a toda costa la configuración de un escenario deficitario en las finanzas públicas tendría sustento en circunstancias de bonanza y normalidad económica que no son, ciertamente, las de la actualidad. La caída en las cotizaciones internacionales de crudo, así como la contracción de remesas e inversiones en el país, derivarán inevitablemente en un balance deficitario entre lo que ingresa y lo que sale de las arcas públicas, pero ello no tiene por qué servir como pretexto para que el gobierno federal reduzca el gasto público: antes bien, la presente administración debe ejercerlo de manera responsable, y en esa medida reducir el dispendio y las prerrogativas onerosas de que gozan sus funcionarios; debe orientarlo a la atención de las necesidades de los sectores más castigados por la crisis y ello implica, ante todo, actuar con sensibilidad y alejarse de las medidas que la ideología neoliberal ha preconizado durante décadas y que hoy se encuentran en franca bancarrota.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario