9/12/2017

Los periodistas pal café. . . .



En términos gráficos, discursivos y políticos, Enrique Peña Nieto pareciera no ser capaz de leer con precisión el pulso social mexicano (y, junto a él, en desafortunadas réplicas políticas, los gobernadores y los miembros del gabinete federal), en particular el relacionado con la más reciente de las tragedias, la derivada del sismo de la semana que acaba de pasar.
Padece de especial descrédito el formato de las reuniones de cúpulas administrativas que rinden parte de las muchas cosas buenas que dicen estar haciendo para resolver determinado problema, vacuo ceremonial al que se agregan largas intervenciones oratorias del ocupante de Los Pinos para dar por constatados los informes alegres de sus subordinados o para encontrar detalles y omisiones que le llevan a encargar, de buena o mala manera, que se subsanen los errores y los funcionarios del caso redoblen esfuerzos.
Los aparatosos recorridos de zonas en desgracia se han convertido en trampolines para la propaganda de los gobernantes, inmersos en la realidad popular durante asomos tan efímeros como insustanciales, a veces más caro el costo de los traslados y movilizaciones oficiales que el monto de lo que se llegara a distribuir como ayuda entre los damnificados (comprobadamente falsas muchas de las promesas de reconstrucciones, inversiones y rehabilitaciones). Ayer, Peña Nieto reincidió en esos formatos que terminan provocando más irritación que alivio: planteó objetivos, trazó rutas de trabajo e incluso encomendó a los ciudadanos que sean ellos quienes no permitan que haya lucro con la tragedia.
El Partido Acción Nacional se ha quedado con dos de los principales cargos directivos del Poder Legislativo federal. Pero, irónicamente, esa fuerza está repartida entre dos grupos crecientemente antagónicos: el calderonista, que con procedimientos altamente impugnados fue colocado por el PRI en la presidencia de la mesa directiva del Senado, en la persona de Ernesto Cordero (a quien sus propios compañeros de partido acusaron de traidor), y el anayista (por Ricardo Anaya) que, luego de una escaramuza que retrasó la designación de la correspondiente mesa directiva (por el tema del pase automático del #FiscalCarnal), ha instalado a Marko Antonio Cortés Mendoza en la presidencia de la Junta de Coordinación Política de San Lázaro.
El avance panista en el organigrama legislativo obedece a las negociaciones entre partidos, conforme a reglas no escritas y acuerdos cumplideros a la palabra. Con las dos designaciones (Cordero y Cortés) se fortalece la ilusión óptica de que los dos principales partidos en el escenario político son el PRI y el PAN (relegando a Morena, cuya fuerza en ascenso podría tener la adecuada proporcionalidad en la integración de las cámaras a partir de la elección del año próximo).
Además, el PRI progresa en su proyecto de dividir las filas de sus opositores, dando posiciones a representantes de dos corrientes panistas en guerra. Recuérdese que, consciente de su condición desventajosa ante el electorado, el Revolucionario Institucional alienta todas las opciones que signifiquen división entre sus adversarios, en busca de ganar la próxima presidencia a partir de ser la mayor de las minorías.
Pero, mientras sube de tono la temporada electoral, hoy, en la Cámara de Diputados, deberá cumplirse el mencionado pacto entre partidos que decidió tumbar el pase automático de Raúl Cervantes Andrade a la Fiscalía General de la Nación. El triunfo de Ricardo Anaya, quien aportó la mayor masa no votante de diputados (a la que contribuyeron PRD y MC con sus legisladores) para impedir la instalación rutinaria de la directiva de esa cámara, le está resultando especialmente costoso, pues exacerbó el ánimo de los calderonistas en su contra (ánimo ya de por sí bastante envenenado). Margarita Zavala y sus familiares políticos han entrado en una fase de desesperación ante el desplazamiento que van sufriendo, conforme avanzan maniobras anayistas como la sucedida en la Cámara de Diputados y, además, con la aparente vía libre para el Frente Ciudadano por México, que en el último lugar de sus preferencias conciliadoras tendría a la esposa del controversial (por decir lo menos) Calderón.
En el flanco del partido Morena va llegando a su fin el episodio de discordia que ha tenido como personajes en el foro a Claudia Sheinbaum y a Ricardo Monreal pero, fuera de escena y al mismo tiempo en primer plano en términos políticos, la figura de Andrés Manuel López Obrador y su proyecto de llegar a la Presidencia de México.
Este lunes, el zacatecano Monreal salió a los medios de comunicación para dejar constancia de que está por dejar las filas del partido lopezobradorista, convencido de que no hubo voluntad política eficaz para atender su señalamiento de que fue sumamente irregular, inaceptable, la presunta encuesta de opinión pública que dio como ganadora a Sheinbaum en la fase partidista previa a su postulación a la candidatura a gobernar el gobierno capitalino.
La muy prevista salida de Monreal ha desatado ácidas críticas de parte de militantes de Morena, que le acusan de traición política y le auguran pésimos resultados electorales si decide ser candidato a jefe del gobierno capitalino por otros partidos. Está por verse la respuesta que llegue a organizar el experto en peregrinar entre siglas partidistas. Pero, más allá de las pasiones de lo inmediato, lo cierto es que López Obrador pierde a un aliado y Morena se enfrenta por primera vez a una escisión trascendente, en un momento político en que pareciera imprescindible mantener la unidad, de cara al difícil proceso electoral de 2018, sembrado de minas a las que ahora habrá de sumarse el factor Monreal.
Y, mientras el compadre Luis Miranda, secretario de Desarrollo Social, contra la lógica y la ética, sigue acumulando puntos negativos, esta vez al saberse que en una gasolinera, propiedad de una hermana y un cuñado, se expende combustible robado, ¡hasta mañana!
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El secuestro y asesinato del empresario restaurantero y abogado Rafael Arámburu Hernández encendió la indignación de los morelenses. Era dueño del conocido restaurante Cuernavaca Jardín, ubicado a un costado del zócalo de la ciudad. Arámburu fue reportado por su familia como desaparecido el miércoles 6 de septiembre y hallado sin vida el sábado 9 en Guerrero. La Fiscalía de Morelos informó que ‘‘de acuerdo con información preliminar de las autoridades del estado de Guerrero, lamentablemente fue encontrado sin vida en el municipio de Taxco de Alarcón’’. La declaración fue interpretada como un intento del gobernador Graco Ramírez de lavarse las manos, porque el asesinato del secuestrado ocurrió fuera de Morelos. Amigos de la familia Arámburu aseguran que la víctima fue privada ilegalmente de la libertad en territorio morelense. Jaime Serna Pérez, director general del Consejo Estatal de Abogados, dijo que en lo que va del sexenio del gobernador perredista han sido privados de la vida 27 colegas suyos. ‘‘No es posible seguir viviendo en un clima de inseguridad… la ciudadanía está en manos de la delincuencia’’, expresó Serna. Amigos, colegas y familiares de la víctima realizaron una protesta pública ayer. La fiscalía dijo lo de siempre: que el crimen (insistió) en el vecino estado de Guerrero no quedará impune, ‘‘habrá justicia’’. Entonces va a invadir la soberanía de la entidad vecina para hacer la investigación, ¿o cómo? Cada día son más fuertes las voces que exigen la salida del gobernador perredista.
Otro inocente
‘‘Es mi hermana, pero cómo voy a saber lo que tiene mi hermana y mi cuñado, no sé de sus negocios ni me interesa. No les ando revisando su patrimonio ni cómo lo hicieron’’, asegura el titular de Sedesol, Luis Miranda Nava. Sin embargo, no convence a muchos. Beatriz Mojica, secretaria general del PRD, demandó a la PGR investigar al funcionario y a Carmen Miranda Nava y Ricardo Mercado Galán, hermana y cuñado del funcionario, que aparecen como propietarios de una gasolinera huachicolera. Por su lado, la fracción panista solicita la comparecencia de Miranda. La Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana (CES) de Edomex reportó que el pasado 25 de agosto elementos de la Gendarmería de las policías Federal y estatal detuvieron a siete personas cuando descargaban combustible ilegal en la estación E 07181, en el kilómetro 2.4 de la carretera Mexicaltzingo-Santiago Tianguistenco. La sorpresa –ni tanta– es que resultó propiedad de la familia Miranda Nava.
Los otros damnificados
No han dado a conocer si sus casas o condominios sufrieron daños por el huracán Irma, que azotó a Miami, pero la lista de mexicanos con propiedades en aquella ciudad es extensa. Políticos y personajes del espectáculo han realizado importantes inversiones inmobiliarias. Encabezan la lista dos mujeres: Angélica Rivera, primera dama de México, y la presidenta del PRD, Alejandra Barrales. Asimismo, Ricardo Pierdant, el vecino que, según trascendió, pagaba los impuestos de la propiedad de la señora Rivera. Seguiría un nutrido grupo de funcionarios de Televisa y artistas como Thalía, actriz y cantante muy querida por el público, quien fijó ahí su residencia hace mucho tiempo; está casada con el empresario Tommy Mottola. El clan Azcárraga posee allá parte de sus dominios merced a su sociedad con Univision. Hasta tiempo reciente tuvo una residencia el hijo del presidente Ernesto Zedillo, también de nombre Ernesto. Hay de todo, como en farmacia. Se atribuyen propiedades al hoy caído en desgracia Javier Duarte, ex gobernador de Veracruz, y su némesis, Miguel Ángel Yunes Linares. Asimismo, a Fabián Granier Calles, hijo del ex gobernador de Tabasco, y el que fuera su secretario de Finanzas, José Manuel Sáiz Pineda. Otras personalidades de la lista son Bernardo Quezada Salas, ex presidente de la Comisión Ejecutiva del SNTE y diputado de Nueva Alianza; Rafael Olvera Amezcua, accionista mayoritario de Ficrea y acusado de fraude en México, y Sebastián Rodríguez Robles, quien se desempeñó en la Secretaría de Hacienda en Chiapas. Con suerte reciben ayuda de Trump; ya declaró catástrofe natural lo ocurrido en Florida y movilizará fondos federales.



Obreros, campesinos, trabajadores y profesionales de los sectores público y privado de México casi no aparecen en las renegociaciones del TLCAN. Mientras en el cuarto de junto están representados empresarios y políticos, la participación de los empleados organizados prácticamente es nula.
Sin embargo, aun con esa limitación las presiones en las renegociaciones para que se incrementen los salarios tienen más fuerza que las que realizan las grandes centrales obreras y campesinas en nuestro país.
¿Quién lo iba a pensar? La presión más fuerte para que se eleven los ingresos de los empleados en México proviene del extranjero. Los gobiernos y las centrales de trabajadores de Estados Unidos y Canadá, entre las que destaca la AFL-CIO y la Unifor, jugarán un papel determinante en el aumento de los sueldos en nuestro país.
La razón de lo anterior es que México tiene ventaja en la producción frente a Estados Unidos y Canadá, debido a los bajos salarios. Mientras en Estados Unidos los trabajadores reciben 20.8 dólares por hora, en México apenas 2.2.




Resulta pavoroso el creciente inventario de muerte y destrucción del terremoto del jueves 7 de septiembre por la noche. Desde entonces, las autoridades (estatales y federal) prometen ayuda de todo tipo: alimentos, agua, medicinas, comida, reconstrucción (viviendas, escuelas y hospitales) y mucho más, pues los damnificados no están solos, de acuerdo con el eslogan oficial. Bien, pero el problema es que la urgencia es real, igual que el abandono en el que, de siempre, se encuentra el grueso de las comunidades afectadas, sin olvidar el descarado lucro político con estas calamidades y los sucios negocios vinculados con la ayuda humanitaria (léase delitos de lesa madre), como en el caso del gobernador veracruzano, Miguel Ángel Yunes, para no ir más lejos.
Entonces, ¿con qué cumplirán las autoridades que todo el día prometen y comprometen? ¿De dónde saldrá tanto recurso?, porque independientemente de las irreparables pérdidas humanas y el creciente número de damnificados, los daños materiales son multimillonarios, y el recuento no concluye. Se supone que el dinero para toda la ayuda inmediata y la reconstrucción de las zonas devastadas por el terremoto en Oaxaca y Chiapas (más las víctimas de Katia en los 40 municipios veracruzanos afectados) saldrá del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), pero los recursos de tal mecanismo –manejado por la Secretaría de Gobernación– ni lejanamente resultan suficientes para atender la magnitud del desastre.
De hecho, para 2018 el proyecto de Presupuesto de egresos de la Federación apenas contempla algo así como 6 mil 650 millones de pesos para el Fonden, que deberá atender todo tipo de desastres, sin considerar que catástrofes registradas en años anteriores aún no terminan de fondearse ni de construirse las obras respectivas. En síntesis, el citado mecanismo carece de una bolsa lo suficientemente abundante como para hacer frente al desafío.
En lo que va del sexenio peñanietista oficialmente el Fonden ha ejercido poco más de 93 mil millones de pesos (hasta junio de 2017), y para el próximo año la Secretaría de Hacienda propone la cantidad que se anota líneas arriba. Por cierto, dicho sea de paso, este monto acumulado en cinco años y medio de gobierno apenas representa una séptima parte de lo que en 2018 el gobierno federal pagará solo por intereses de la deuda pública (México SA, 11 de septiembre).
En el interminable recuento de los daños, en Oaxaca y Chiapas hay un par de millones de damnificados por el sismo, y en esas mismas entidades miles de viviendas, hospitales, escuelas y mucho más resultaron dañadas o de plano colapsaron. ¿Cuánto cuesta y de dónde saldrán los recursos para reconstruir o reponer? ¿El gobierno federal dejará de pagar los intereses de la deuda pública para canalizar esos recursos a la reconstrucción o cuando menos reducirá sus gastos faraónicos para contar con dinero socialmente útil?
Desde luego que no. Súmese el nocivo efecto del huracán Katia, que golpeó 40 municipios veracruzanos, de por sí paupérrimos. Y la promesa gubernamental de ayudar a los dreamers (nunca especificaron de dónde y cómo financiarían esa ayuda) que el salvaje de la Casa Blanca se apresta a expulsar de Estados Unidos. La pregunta es la misma: ¿con qué y de dónde? Si el gobierno peñanietista informó que ya no puede ayudar a los damnificados texanos por el huracán Harvey –que representaba un gasto infinitamente menor a las urgencias nacionales– imaginen de dónde saldrá el recurso para Oaxaca, Chiapas, Veracruz y lo demás.
Del Fonden, según dicen, pero este fondo acumula un retraso espeluznante. Por ejemplo, en su informe de 2013 (cuando oficialmente erogó 21 mil 734 millones de pesos) reconoce que ese año aún no concluía las acciones de reconstrucción de la infraestructura en los sectores de salud y vivienda estatal, así como en el educativo federal, por los sismos ocurridos en diciembre de 2011 y en marzo y noviembre de 2012, así como por lluvias severas en agosto de 2012, y en los sectores carretero, forestal, hidráulico, pesquero y acuícola federal, y los mismos del sector estatal, por las réplicas de sismo en agosto y de lluvia severa en septiembre de 2013. Para tal fin ese año erogó 3 mil 600 millones de pesos. Y lo mismo sucedió en otros 24 estados de la República.




Según un documento dado a conocer ayer por Oxfam, la desigualdad de ingresos entre el 10 por ciento de los más pobres y el 10 por ciento de los más ricos del país es de 154 mil pesos, proporción que se ha mantenido constante en los dos años anteriores. Con base en lo declarado por Diego Vázquez, investigador de la organización referida, en la presentacion del reporte, el aumento de ingresos en el periodo 2014-2016 afecta de manera distinta a esos deciles de la población, pues mientras el más bajo no consigue comprar ni un kilo de tortillas con 10 pesos, el más alto adquiere dos boletos de cine con cien pesos.

México, entre dreamers y soñadores
La disolución del DACA por parte de Donald Trump tiene la finalidad de abrir cancha para su posible relección. El gobierno de México ha empezado a ofrecer soluciones: empleos, continuidad en la educación y seguridad social; pero los otros dreamers, los soñadores que no migraron y están aquí, que viven sus cancelaciones de manera constante, tras intentar cada año ingresar a una universidad pública. Pero no todos quieren continuar con sus estudios, sino incorporarse a la vida laboral y con justa razón, pues entran en la edad productiva. Sin embargo, los números son trágicos, pues se estima que del número total de desempleados del país, 50 por ciento son jóvenes y los pocos que laboran son explotados y sin seguridad social, estabilidad económica y laboral (contratos temporales), etcétera.
La historia entendida como esa fracción del devenir en que los seres humanos quedamos atrapados por una realidad magnetizada, en la que los individuos nos volvemos especie, humanidad conectada por flujos potentes de energías telúricas y especialmente por la fuerza magnífica de la solidaridad. Todavía con la libertad condicionada, el doctor José Manuel Mireles, líder indiscutible del movimiento de autodefensas en Michoacán, ofreció una conferencia la semana pasada en el campus de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en Morelia*, ante más de mil estudiantes y decenas de profesores e investigadores y que, transmitido por las redes sociales, fue visto y escuchado por otros 45 mil mexicanos en tiempo real. Su alocución fue un viaje mágico por la historia presente, por la historia viva. La historia de una región michoacana, la Tierra Caliente, convertida en infierno. Durante dos horas, porque tras la conferencia hubo un diálogo transparente, la historia nos rebasó, nos sacudió, nos envolvió, nos inundó. Dotado de una extraordinaria habilidad narrativa, el doctor Mireles fue describiendo con emoción pasajes de la guerra que los autodefensas libraron y que lo situaron en repetidas ocasiones al filo de la muerte. Al escucharlo no sabíamos si estábamos leyendo un libro o mirando una película sobre la historia de México.

Gran devastación y profundo dolor es la trágica consecuencia que han dejado el terremoto y las intensas lluvias de los últimos días, en la vida de los pueblos indígenas del sureste mexicano. Aunque el epicentro del terremoto ha sido en Pijijiapan, Chiapas, sus efectos más destructivos se han dejado sentir en el Istmo de Tehuantepec y la Sierra Mixe de Oaxaca, regiones donde habitan los pueblos zapoteco, huave, zoque, chontal y mixe.

De un plumazo Barrales Magdaleno construyó ese amor de conveniencia que la dirigente del PRD firmó con el PAN. Lo que hoy pasa en el mundo, no sólo en el país, deja claro que el tema de derechas e izquierdas está rebasado. Eso le dijo a la reportera de La Jornada Gabriela Romero Sánchez, el pasado viernes. ¿Es necesario decir algo más para explicar la formación del Frente Ciudadano por México, integrado por unos perredistas, unos panistas y el MC?

Solidaridad cívica contra rapiña. Autorganización popular contra clientelismo político. Cooperación ciudadana contra especulación comercial. Vigilancia y cuidado mutuo contra vandalismo y pillaje. Generosidad fraterna contra agandalle de vivales. Mesura y serenidad informativa contra siembra de pánico y charlatanismo. En la lucha por enfrentar la devastación y sufrimiento que trajo consigo el sismo del pasado 7 de septiembre en el Istmo de Tehuantepec coexisten y se enfrentan lo mejor y lo peor de la vida política y social del país.

Empresarios, publicistas y caricaturistas, entre otros voceros extraoficiales del régimen y la derecha, divulgaron el domingo 10 un texto que dice (transcripción literal) esto: “¿Y donde están los valientes y heroicos maestros de la CNTE sección 22? ¿Levantando escombros? ¿Alimentando a los damnificados? ¿Reconstruyendo la ciudad? Ah, no! Eso lo están haciendo los asesinos y represores soldados del maldito ejército Mexicano…”

El Proyecto de Presupuesto de Egresos para 2018, que forma parte del paquete económico entregado el viernes por el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, a la Cámara de Diputados, tiene aspectos que son desconcertantes. El gasto del gobierno federal constituye una guía, la dirección que, a juicio del Poder Ejecutivo, deben seguir las diferentes áreas del quehacer nacional. Visto en términos del sexenio, para el caso de la ciencia, la tecnología y la innovación (CTI), no parece que hubiera una idea clara de qué es lo que se quiere, o bien, que esta idea puede sacrificarse.

Toronto. Parece coincidir con el Brexit que algunas películas recientes evocan las glorias de la Pérfida Albión sin ningún tipo de pudor. Hace poco ocurrió el estreno de Dunkerque, de Christopher Nolan –que tuvo una función especial en el festival– y ahora se ha visto Darkest Hour (Hora más oscura), del británico Joe Wright, que también transcurre en mayo de 1940, durante la crisis de la posible invasión nazi al Reino Unido, sólo que vista desde la cúpula misma del poder. La película es una apología de Winston Churchill (Gary Oldman), desde el momento en que hereda el cargo de primer ministro de Neville Chamberlain (Ronald Pickup), hasta que pronuncia en el Parlamento su célebre discurso, llamando a la guerra contra el fascismo.

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