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La postura de Trump parece definitiva, aunque en su fraseo se regaló
algunos términos que podrían permitirle alguna salida o distensión de
última hora. Dejó también pendiente si el petróleo mexicano sería
materia de esas imposiciones arancelarias. Pero, incluso después de
tales declaraciones firmes del ocupante de la Casa Blanca, The Wall Street Journal publicó una nota titulada: Los asesores de Trump buscan un acuerdo de último momento para reducir los aranceles entre Canadá y México
.
Agrega el WSJ: en medio de las negociaciones en curso con Canadá y
México, la administración parece indecisa sobre si imponer aranceles a
todas las importaciones de esos países, dijeron las personas
familiarizadas con el asunto, agregando que los funcionarios de la
administración se están preparando para optar por medidas más
específicas. Es probable que Trump anuncie algún tipo de medida
comercial el sábado, pero podría afectar sólo a ciertos sectores, como
el acero y el aluminio (...) con un periodo de gracia antes de
implementarlos, lo que permitiría continuar las negociaciones con los
vecinos continentales
. Además, agrega el diario citado, en la Casa
Blanca se aprecia la cooperación de la administración Sheinbaum a la de
Trump, en materia de contención migratoria, en especial la concesión significativa
de recibir a migrantes no mexicanos expulsados
.
Por lo pronto, la moneda mexicana acusó recibo anoche mismo, aunque los efectos más puntuales habrán de registrarse hoy. El gobierno de México, según han anunciado especialmente la presidenta Sheinbaum y el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, tiene un plan especial para enfrentar las determinaciones de la Oficina Oval, aunque, en contraste con la abundancia retórica de Trump, se han negado a dar los detalles.
La acometida del multimillonario que preside por segunda vez la nación que aún es la más poderosa del mundo puede estremecer las estructuras económicas, políticas y sociales de México y, en especial, de la llamada Cuarta Transformación. Trump y sus aliados prefieren gobiernos de derecha y ultraderecha, pero las dos administraciones mexicanas progresistas o populares no han significado modificaciones sustanciales al modelo económico y político deseado por la Casa Blanca, sea cual sea el signo partidista en turno o el apellido en jefe.
Todo lo contrario: la administración de López Obrador fue funcional para los intereses de Estados Unidos, sobre todo en materia de migración y de ganancias extraordinarias de los grandes capitales. Los jaloneos mexicanos con agencias de Estados Unidos en materia de narcotráfico llegaron al punto sinaloense Chapito- Mayo, con alto daño a la entidad federativa, pero sin consecuencias aún en las élites políticas.
Habrá de verse si, más allá de los escarceos declarativos y del
calado real de los multicitados aranceles, los preparativos mexicanos
para enfrentar al trumpismo no han generado ya retrocesos que
signifiquen ganancias para esos intereses extranjeros. Convertir a los
grandes empresarios mexicanos en muy celebrados aliados
para
defender a la patria, impulsar un neoliberal Plan México, abrir a la
iniciativa privada la posibilidad de invertir en el terreno energético,
mantener la mano represiva de Garduño ante los migrantes, recibir a
deportados no mexicanos porque así lo quiere Washington y mantener una
estructura política gobernante con personajes muy cargados a la derecha y
al oportunismo, con turbulencias internas inocultables, dejaría a
México menguado y maltrecho, con aranceles o sin ellos. ¡Hasta el
próximo lunes!
X: @julioastillero, Facebook: Julio Astillero, juliohdz@jornada.com.mx
órdenes ejecutivasmediante las cuales declara
emergencia nacionalen su frontera sur,
detenciones masivasde inmigrantes, violación de los derechos humanos, designar a los cárteles de la droga como
organizaciones terroristas(con fines de intervenir en terceras naciones),
retomarel Canal de Panamá,
comprarGroenlandia, utilizar la ilegal base naval de Guantánamo para encarcelar a migrantes,
renombrarel Golfo de México, negar el cambio climático, ir en contra de la diversidad de género (
sólo reconoceré dos sexos: masculino y femenino), negar el acceso al aborto, abandonar la Organización Mundial de la Salud, obligar a los países de la Unión Europea a incrementar sustancialmente sus presupuestos militares y, en fin, una sarta de estupideces más.
También ha provocado que algunos estadunidenses que por él votaron se
arrepientan de haberlo hecho (por ejemplo, integrantes del movimiento
LGBT+, que se sienten agredidos por el magnate, además de los
inmigrantes a quienes trata como delincuentes
), y de ello da
cuenta que en los pocos días que lleva en la Oficina Oval su índice a
aceptación ya cayó en alrededor de 7 puntos porcentuales, y empeorando.
Ayer volvió a abrir la boca: “Donald Trump dijo que los aranceles de 25 por ciento sobre los productos (importados) de Canadá y México entrarán en vigor el sábado, pero aún considera si incluir el petróleo de esos países como parte de sus gravámenes sobre las importaciones. ‘Podríamos hacerlo o no’; ‘anunciaremos los aranceles por varias razones. La primera es la gente que ha llegado a nuestro país de manera tan horrible y en grandes cantidades. La segunda es el fentanilo y todo lo demás que ha llegado al país. Y la tercera son los subsidios masivos que estamos dando a Canadá y México en forma de déficit; aplicaré el arancel de 25 por ciento a Canadá y, por separado, 25 por ciento a México. Realmente tendremos que hacerlo, porque tenemos déficits muy grandes con esos países. Esos aranceles pueden o no aumentar con el tiempo’”.
Obvio es que quienes pagarán esos aranceles no serán los consumidores de los países castigados
,
sino los estadunidenses, amén de que entre los más afectados se
contarán empresarios e industriales (muchos de ellos inyectaron grandes
sumas de dinero a la campaña presidencial de Trump), quienes de la noche
a la mañana verán cómo artificialmente se encarecen sus productos, se
desploman sus ventas y, por ende, caen sus ganancias.
Para Trump, siempre con mentalidad imperial, el plan
es sencillo: para salvar
a Estados Unidos de los errores y excesos internos cometidos a lo largo
de los años, pretende pasar la factura a terceros y llevarse entre las
patas al resto de las naciones, las cuales, desde luego, no pensarán dos
veces en responderle con la misma moneda, con lo que se desatará una
guerra comercial que sólo provocará caída en el consumo e inflación.
Por lo que toca a su amenaza de arancelar las importaciones de petróleo, Estados Unidos es un consumidor voraz, el mayor del planeta, que importa alrededor de la mitad de sus necesidades en esta materia. Canadá es uno de sus principales abastecedores y México paulatinamente ha reducido sus envíos, pero hay otras naciones que le venden este producto, incluida su odiada Venezuela. Y si lleva a la práctica su amenaza de arancelar el petróleo y sus derivados, los consumidores estadunidenses (sobre todo los que votaron por él) no estarán precisamente felices.
Pero, siempre en el contexto de Pedro y el Lobo, Trump dice que si ese par de países se portan bien
y ofrecen un precio adecuado
por el crudo, entonces México y Canadá podrían librar el arancel de 25
por ciento, aunque duda que ello suceda, porque dice que ellos, abriendo
su abanico, nunca han sido buenos con nosotros; nos han tratado de
manera muy injusta y podremos compensar eso muy rápidamente, porque no
necesitamos los productos que ellos tienen
. ¿No? Entonces, ¿de dónde sale el déficit que alega y que tanto escozor le provoca?
Las rebanadas del pastel
Ni la burla perdona: a partir del próximo primero de febrero, el impresentable Ricardo Anaya, otrora pollito en fuga acusado de corrupción, será el coordinador de la bancada panista en el Senado de la República. Vergüenza debería darle, pero carece de ella.
Twitter: @cafevega, cfvmexico_sa@hotmail.com
Debido al dominio de la política sobre la economía, el grupo dominante en las SEE es diferente en principio a una clase. Los miembros del aparato no están constreñidos a actuar de una manera definida por la oposición que ocupan en la estructura de la reproducción social, aunque tienen que seguir conscientemente las reglas y objetivos prefijados por el aparato si quieren mantenerse en el puesto. El contraste más esencial con el capitalismo es que la membresía en la organización es la precondición de cualquier posición de poder que el individuo pueda ocupar. Mientras una persona es un capitalista sin importar sus relaciones con otros capitalistas, en las SEE una persona puede ser miembro del aparato del poder si es capaz de interactuar con otros miembros de la burocracia de acuerdo con las reglas y objetivos de su puesto. Este tipo de agrupación social (a diferencia de una clase) se basa en la primacía de la corporación sobre el individuo y, por ello, el objetivo del análisis de clase se vuelve inútil. Por lo tanto, concluye GM, el grupo gobernante de las SEE no puede ser considerado como clase. Se asemeja más a ciertas agrupaciones de sociedades tradicionales, como las haciendas: fusión de economía y política, asignación autoritaria de posiciones en el orden jerárquico. Pero la analogía de casos históricos deja de funcionar porque la membresía burocrática no se basa en criterios adscriptivos, sino en el principio de logros personales. Las reglas y normas en cuestión no se basan en la tradición, sino que son establecidas conscientemente y dinámicas. No hay paralelismo convincente con otras agrupaciones históricas y no tenemos la terminología para designarlas. En las SEE, las relaciones entre el grupo corporativo dominante y el resto de la sociedad, son decisivas, por lo cual GM busca precisar los rasgos del grupo dominante. Reitera que no son sólo burocracia en sentido estricto. Al estar unificada la jerarquía como única se vuelve borrosa la diferencia entre las funciones de fijar objetivos y realizar las tareas para alcanzarlos. Por ello, forman parte del aparato no sólo los que toman y ejecutan las decisiones, sino también los que proveen las pericias e información técnicas. También son miembros del grupo corporativo los de la élite cultural que proveen la ideología del sistema aunque no tengan puesto alguno. GM rechaza la identificación que algunos hacen entre la intelligentsia y el grupo dominante: no sólo hay muchos miembros del aparato que no son intelectuales, sino que la mayoría de quienes constituyen la intelligentsia no pertenecen al aparato del poder. Si bien, dice, la educación superior se ha convertido en el canal más importante para llegar a posiciones de poder, no es el único, especialmente para puestos en el aparato propiamente político. La admisión al aparato (al menos en posiciones claves) no depende de la posesión de habilidades intelectuales específicas. Adquirir la educación superior no es condición suficiente para formar parte del grupo dominante.
Este año no sólo cumplí 30 años (la semana pasada) escribiendo semanalmente en La Jornada, la mayor parte bajo la insignia Economía Moral, sino también de haberme inscrito en el programa de doctorado conjunto UdeG (Universidad de Guadalajara)-CIESAS (Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social), plantel Guadalajara. En 2005, hace 20 años, me doctoré a los 61 años de edad.
En 1606, con apenas 15 años, se instaló en Roma, donde descubrió la obra de Caravaggio, quien lo influyó el resto de su vida. Diez años después se estableció definitivamente en Nápoles, entonces bajo dominio español. Su carrera fue fulgurante. Los virreyes, la aristocracia local y las órdenes religiosas le encargaron obras que hoy son clásicas.
En opinión de sus contemporáneos, Ribera era más sombrío y feroz
que Caravaggio. Para él, todo cuadro, ya se tratara de un mendigo,
filósofo o santo, provenía de la realidad, la cual traspuso en su
lenguaje. En su obra, la gestualidad es teatral; los tonos, negros o
brillantes; el realismo, crudo; el claroscuro, dramático.
Con igual viveza plasmó la dignidad de la vida cotidiana y la violencia de las escenas de tortura. Este tenebrismo radical
,
con la oscuridad de sus ambientes, la densidad de las penumbra y el
realismo sin límites, le otorgó inmensa notoriedad en el siglo XIX en
Francia, yendo su influencia de Baudelaire y Byron a Manet. Es
interminable la lista de grandes escritores y artistas que han sentido
absoluta fascinación por José de Ribera. Era tal la adoración que
sentían los franceses en el siglo XVIII por él, que se lanzaron a
comprar muchas de sus obras. Por eso hoy día hay obras maestras del Españoleto en
los museos de bellas artes de todas las grandes ciudades del país.
Pero, tras esa fiebre, Francia olvidó a Ribera, lo arrinconó mucho más
de lo que hicieron Italia o España. Ahora lo recuerda con esta magna
exposición compuesta por cerca de un centenar de pinturas, dibujos y
estampas procedentes del mundo entero. Abarca el conjunto de la
trayectoria de Ribera, sus años romanos (recientemente reconstruidos) y
el esplendor de su periodo napolitano.
Heredero terrible
de Caravaggio, se impone como uno de los
intérpretes más precoces, audaces y extremos de la revolución
caravaggiesca. Más aún, como uno de los mayores maestros del Siglo de
Oro.
un avance significativolas leyes secundarias del sector energético presentadas el miércoles pasado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. El organismo cupular reconoció que sus objeciones a la reforma constitucional en la materia fueron atendidas en la propuesta de leyes secundarias, cuya redacción permitirá un mejor equilibrio entre la inversión pública y la privada.
Entre otros aspectos, aplaudió el aumento de la capacidad de generación distribuida a 0.7 megavatios, el cual facilitará a más empresas invertir en energías limpias y reducir costos energéticos
;
el nuevo esquema de autoconsumo con proyectos de hasta 20 megavatios,
la posibilidad de colaborar con la Comisión Federal de Electricidad
(CFE) y la creación de la Comisión Nacional de Energía, calificada de
oportunidad para mejorar la regulación del sector.
En este sentido, la petición de que el nuevo marco regulatorio brinde certeza jurídica, además de establecer reglas claras y mecanismos para la participación del sector privado
,
parece un formulismo que los dueños del capital estiman imprescindible
en sus comunicaciones con los gobiernos más que un reclamo o
advertencia, pues resulta evidente que las cláusulas mencionadas
satisfacen todo lo solicitado: mecanismos fijados de antemano, claridad y
certeza.
Con su posicionamiento, la Coparmex confirma la disposición de las más relevantes personas de negocios del país para trabajar con la presidenta Sheinbaum y, de manera más amplia, con la Cuarta Transformación. Tal voluntad es ciertamente encomiable: si bien el partido en el poder nunca tuvo una ruptura con el empresariado, durante años algunas facciones del mismo se empeñaron en sabotear los esfuerzos de rescate del patrimonio nacional y en defender un marco legal inocultablemente orientado al enriquecimiento de unos cuantos a expensas del erario. La nueva actitud cobra una mayor dimensión por tener lugar en momentos en que la unidad nacional es decisiva a fin de afrontar con éxito los embates antimexicanos de Donald Trump, y sin duda la historia registrará la altura de miras de autoridades y empresarios.
Asimismo, debe señalarse que el beneplácito patronal con las leyes secundarias de la reforma energética no se produce en un vacío político, sino que refleja la existencia de un proyecto de nación que toma en cuenta a la iniciativa privada y le ofrece un papel en todos los sectores de actividad, incluido el energético, en un marco de defensa incoercible de la soberanía nacional y de la rectoría del Estado sobre los recursos naturales y los ámbitos estratégicos para el desarrollo. Tal apertura sólo puede sorprender a quienes han vivido con unas gruesas anteojeras ideológicas los últimos siete años, ya que la mandataria y su antecesor siempre remarcaron que éste es el camino a seguir.
La inseguridad alimentaria se ha convertido en un serio problema,
incluso el segundo de los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS), poner fin al hambre
,
contiene entre sus ocho metas: poner fin a todas las formas de
malnutrición; duplicar la productividad agrícola y los ingresos de los
productores de alimentos; aumentar las inversiones, incluso mediante
mayor cooperación internacional, entre otras, lo que deja patente la
preocupación mundial frente a una creciente población y una disminución
de la gente dedicada al campo y de los recursos destinados a este rubro.
A pesar de los esfuerzos, se debe reconocer que la guerra entre Rusia y Ucrania generó graves efectos en la producción de alimentos. De acuerdo con el Banco Mundial, el año pasado en febrero, 16 países habían establecido 23 prohibiciones a la exportación de alimentos, y ocho habían implementado 15 medidas de restricción de las exportaciones.
Por otro lado, el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales ha mencionado que la guerra entre Rusia y Ucrania causó la mayor perturbación de carácter militar en los mercados agrícolas mundiales en al menos un siglo; el análisis asegura que la agricultura y la seguridad alimentaria fueron fundamentales para la estrategia de guerra de Rusia y el sector agrícola de Ucrania ha sido un objetivo importante de los ataques desde febrero de 2022.
No podemos negar que la autosuficiencia alimentaria, la estabilidad en los cultivos y distribución equitativa de alimentos, entre otros puntos, como hemos visto en diversos conflictos, juegan un papel para la seguridad nacional de todos los países, lo que convierte al campo en un elemento esencial a tomar en cuenta dentro de los manuales, acciones y políticas a implementar.
El documento Estado de inseguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2024 informó que entre 713 y 757 millones de personas, que suponen respectivamente entre 8.9 por ciento y 9.4 por ciento de la población mundial, podrían haber padecido hambre en 2023. Si se considera el valor medio (733 millones), se trata de unos 152 millones de personas más que en 2019.
Ha quedado patente que el desarrollo agrícola constituye uno de los
medios más importantes para poner fin a la pobreza extrema, impulsar la
prosperidad compartida, impulsar la economía, mejorar la educación e
incluso promover la equidad, pero a pesar de que sabemos lo importante
del campo y la agricultura hay que reconocer que existen problemáticas
que deben ser consideradas; por ejemplo, el Banco Mundial sostiene que: Los
actuales sistemas alimentarios también amenazan la salud de las
personas y del planeta y generan niveles insostenibles de contaminación y
desechos
.
Por otro lado, hay que reconocer que otro de los problemas y quizá uno de los más significativos, es la poca inversión al campo, incluso el Foro Económico Mundial afirma que la agricultura a escala global acumula casi tres décadas de infrainversión al tiempo que tiene que hacer frente al reto mayúsculo de alimentar más y mejor a la creciente población mundial con la existencia de limitaciones notables.
Desafortunadamente, aunque la preocupación es evidente, el compromiso al parecer no lo es tanto, incluso de acuerdo con datos del Foro Económico Mundial durante la vigésimo novena Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2024 uno de los puntos a destacar fue que faltaron resoluciones en cuanto al fondo de pérdidas y daños dirigido a asistir a los países que sufren desastres asociados al cambio climático.
¿Cuáles son los retos de la agricultura para México? Entre los más significativos podríamos enlistar: 1) la escasez de agua para riego; 2) la degradación del suelo; 3) el cambio climático; 4) la falta de mano de obra; 5) el rezago en la creación y aplicación de tecnología; 6) la comercialización, y 7) la transformación de los sistemas alimentarios (cadenas de frío).
Claro que esos no son todos los problemas que enfrenta el país, con el incremento de la violencia y la presencia del crimen organizado, también el cobro de derecho de piso, las amenazas, las extorsiones y la muerte de agricultores se han vuelto temas sensibles que afectan a miles de familias, asunto que merece un análisis más pormenorizado y que abordaré en próximas entregas.
Hoy los cambios son cada vez más disruptivos, y hay que considerar que la agricultura se ha visto impactada por el abandono, ya que en ocasiones los jóvenes dejan el campo por la ciudad en búsqueda de trabajos mejor remunerados y así quedan menos agricultores para producir el creciente volumen de alimentos para la población mundial en aumento.
Mucho queda por analizar; sin embargo, sin apoyo para los agricultores quienes continúan luchando por hacer frente a los efectos del cambio climático, los cultivos seguirán disminuyendo; hoy se deben replantar no sólo los recursos destinados al campo, sino también los fondos o seguros catastróficos, ya que las pérdidas son cada vez mayores y, sin las medidas necesarias, nuestras oportunidades de desarrollo y crecimiento son cada vez menores.
* Consultor en seguridad, inteligencia, educación, religión, justicia y política
A lo largo de los tiempos el hombre ha buscado dónde desarrollarse en un estado digno para la vida humana. Sin embargo, la historia real nos enseña un cuadro bastante diferente: el de una sucesión de desequilibrios entre variables demográficas, sociales y físicas que conduce a la injusticia.
México conoce o debiera conocer bien el problema de las migraciones. Las ha habido desde siempre, su historia está marcada por ellas. Las ha habido legales hacia el norte, los braceros, mientras Estados Unidos las necesitó para sustituir a los trabajadores que, convertidos en soldados, dejaron puestos laborales. Lamentablemente después trabajadores siguientes, los mojados, han sido ilegales en la medida en que las restricciones oficiales estadunidenses se endurecieron.
Respetando los dedicados esfuerzos de tantos demógrafos mexicanos encargados de realizar los debates que condujeran a definir y perfeccionar nuestra política migratoria, es lamentable decir que el común de los mexicanos no percibimos efecto ninguno de tales esfuerzos en la vida nacional al grado de que, existiendo un Consejo Nacional de Población, con un mandato muy claro, nada se sabe.
Simplificando, de los grandes casos migratorios nacionales, en nuestro siglo pasado encontramos:
1) La primera experiencia, durante la Segunda Guerra Mundial, existió el único marco de referencia legal que permitió regir la planeación y ejecución del movimiento poblacional desde varias áreas del país hasta Estados Unidos y posteriormente su ordenado regreso.
2) Un segundo capítulo migratorio se dio con el ingreso y asentamiento ilegal de casi 40 mil guatemaltecos en México, alrededor de 1984, como resultado de las gravísimas represiones que las poblaciones indígenas mayas sufrían en su país. Estaban dispersos en más de 100 pequeños asentamientos a lo largo de la frontera México-Guatemala en condiciones gravísimas para su subsistencia.
Teniendo en cuenta el alto compromiso de nuestro gobierno con su seguridad y derechos humanos, organizó el traslado y asentamiento de ellos en los estados de Campeche y Quintana Roo.
En el difícil caso de recorrer cientos de kilómetros en selvas vírgenes y su posterior establecimiento siempre estuvo presente el principio de protección a la dignidad humana y vigente su derecho de en su momento regresar a sus tierras.
A los que nacieron en nuestro territorio, sin la menor duda se les reconoció su calidad de mexicanos y se procedió a su registro civil con esa calidad, dándoles así la identidad correspondiente a un ser con nombre propio como concierne al tratamiento de seres humanos y no simplemente números.
3) El capítulo de las migraciones internas es el menos considerado por la autoridad durante todos estos años. Se refiere a las migraciones que se han hecho y se seguirán haciendo en el país. Comunidades enteras se han movido y se seguirán moviendo dentro del territorio sin la menor atención por parte del gobierno. ¿Dónde están los miles que la violencia ha desplazado?
Hay estados claramente expulsores, como Zacatecas, Guanajuato, Michoacán. La principal motivación es la falta de oportunidades de obtención de mínimos satisfactores que se manifiestan principalmente por la inseguridad, falta de trabajo y una infraestructura ambiental satisfactoria.
En contrapartida, existen estados receptores que tienen condiciones para ofrecer trabajo y la infraestructura para una vida productiva, como Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Quintana Roo, Jalisco, Morelos, Querétaro y San Luis Potosí.
Estas migraciones internas sencillamente no tienen lugar visible en ninguna de las agendas de trabajo de las dependencias con responsabilidad en el mejoramiento de las condiciones en que dichas migraciones se dan. Es un problema que debiera preocupar principalmente a las secretarías de Gobernación, Salud, Educación, Trabajo y Seguridad que ni se enteran.
Ante esas situaciones de carácter histórico, hoy encontramos un fenómeno sin precedentes, como es la intención de Estados Unidos al expulsar a México de manera brutal individuos y familias en la frontera. Los efectos inmediatos pueden llamarse más que alarmantes por la carga de responsabilidades que recibe nuestro gobierno y en general el país.
En primer lugar, nuestras autoridades tienen el deber primario de entender que tratamos un problema cuyos titulares son seres humanos con clara identificación de su individualidad y, por tanto, merecen un trato correspondiente a tal calidad y no a la de simples números de masas humanas sin categoría de personas.
No es inútil repetir que los acontecimientos que vivimos marcarán históricamente al gobierno de Claudia Sheinbaum, tal como fueron marcados otros gobiernos. ¡Ojo, pues!
oligarcaseguida de la palabra
ruso. Pero los oligarcas no son sólo un fenómeno ruso o un concepto extranjero.
No. Estados Unidos tiene su propia oligarquía. Cuando comencé a hablar de esto, muchas personas no entendían lo que quería decir. Bueno, eso ha cambiado.
Cuando los tres hombres más ricos de Estados Unidos se sientan al lado de Donald Trump en su toma de posesión, todos entienden que esos multimillonarios controlan ahora nuestro gobierno. También entienden que una de las funciones principales de la política gubernamental será hacer que esas personas increíblemente ricas se vuelvan aún más ricas y poderosas.
Cuando esos mismos tres hombres controlan alguno de los principales medios y canales de distribución informativa en el país, todos entienden que la clase multimillonaria controla hoy nuestros medios. También entienden que una de las principales funciones de los medios propiedad de multimillonarios (piénsese en Musk y Twitter) será fabricar cantidades masivas de desinformación y mentiras descaradas.
Cuando uno de esos hombres gastó cientos de millones de dólares para elegir a Trump y otro usó su poder como dueño de periódicos para negar un respaldo a Kamala Harris, todos entienden que la clase multimillonaria también controla hoy de manera significativa nuestra política. También entienden que una de las principales funciones de nuestro sistema político es mantener la ficción de que somos una verdadera democracia cuando, de hecho, el ciudadano promedio tiene cada vez menos impacto en lo que sucede.
Pero no son sólo Elon Musk, Jeff Bezos y Mark Zuckerberg. Hoy en Estados Unidos tenemos más desigualdad de ingresos y riqueza que nunca. Tenemos mayor concentración de propiedad en el sector de servicios financieros, atención a la salud, agricultura, energía de transporte, alimentación y vivienda que en ningún otro momento. Tenemos mayor consolidación de los medios de comunicación que nunca. Y tenemos un sistema político cada vez más controlado por la clase multimillonaria.
Sumemos todo eso y veremos una nación y un mundo que tienden con fuerza hacia la oligarquía, en los que un pequeño número de multimillonarios ejerce enorme poder económico y político sobre todos los demás. Cada vez más, el gobierno es sólo una propiedad más de esas fuerzas de enorme poder.
Así, en mitad de esto, ¿adónde vamos desde aquí?
En primer lugar, no tenemos tiempo para gemidos y lamentos y para hundir la cabeza en la arena con desesperación. Sí: muchos estamos furiosos y frustrados con el establishment del Partido Demócrata, que continúa volviendo la espalda a las necesidades de los trabajadores. Pero nuestro trabajo no es mirar atrás, sino adelante.
Déjenme decirlo con claridad. Una de las funciones que los oligarcas usan para mantener su posición de poder es hacer parecer que el cambio verdadero es imposible, y que es inútil oponerse. Ellos tienen el poder, no hay nada que podamos hacer al respecto. Así ha sido y así será siempre. Dejen de tratar.
Por fortuna, esos amos del universo están equivocados. Muy equivocados.
Lo que la historia nos ha enseñado siempre es que el cambio verdadero nunca se produce de arriba abajo. Siempre ocurre desde abajo. Ocurre cuando las personas comunes y corrientes se hartan y asquean de la opresión y la injusticia… y luchan contra ellas. Esa es la historia de la fundación de nuestra nación, del movimiento abolicionista, del movimiento laboral, del movimiento de derechos civiles, del movimiento de las mujeres, del movimiento ambiental y el movimiento por los derechos de los gays. Así es como elegimos a docenas de progresistas al Congreso y convertimos a la Junta Progresista del Congreso en una de las entidades más importantes de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Esa es la historia de cada esfuerzo que ha producido una transformación en nuestra sociedad.
No será fácil, pero, juntos, educaremos, organizaremos y construiremos un movimiento imparable de bases en torno a una agenda progresista que se basa en los principios de justicia y compasión, no de avaricia y oligarquía. Juntos, encabezaremos la lucha para crear la nación y el mundo que sabemos que podemos construir.
Hermanas y hermanos, estamos ahora en mitad de una lucha entre un movimiento progresista que se moviliza en torno a una visión compartida de prosperidad, seguridad y dignidad para todas las personas, y uno que defiende la oligarquía y la masiva desigualdad global de ingreso y riqueza.
Es una lucha que, por nosotros y las generaciones futuras, no podemos perder. Avancemos juntos.
* Senador independiente por Vermont
Traducción: Jorge Anaya
sin papelesen 13 millones (https://shorturl.at/LKUlA), monto muy cercano a la de El Colegio de la Frontera Norte, 13.5 millones (https://shorturl.at/vhNJq), pero superior a la del Pew Center, 11 millones (https://shorturl.at/7JfJS).
Para un sujeto adicto a los arranques espectaculares, como él, en su primera semana se quedó corto: de acuerdo con lo informado por la presidenta Claudia Sheinbaum, en esos siete días el gobierno del país vecino deportó a 4 mil 94 ciudadanos mexicanos (https://goo.su/3aWjpry). A ese ritmo, proyectado a un año (es decir, multiplicándolo por 52), en sus primeros 12 meses Trump habrá echado de Estados Unidos a 212 mil 888 connacionales nuestros, y en el curso de su segunda y última presidencia habrá conseguido expulsar a 851 mil 552, lo que lo situaría por debajo de Bill Clinton (casi 7 millones y medio de deportaciones en dos periodos), George W. Bush (4 millones 653 mil en dos cuatrienios), Barack Obama (2 millones 849 mil en ocho años) y Joe Biden (891 mil 503 en un solo periodo).
No se trata, desde luego, de banalizar o minimizar el sufrimiento de los millones de mujeres, hombres, ancianos y menores que serán arrancados de su vida cotidiana, de su familia y de sus posesiones, maltratados, humillados, tratados como peligrosos criminales y colocados sin piedad y de golpe en un vacío existencial. Lo cierto es que ese enorme cúmulo de dolor humano deriva del que ha sido siempre uno de los instrumentos básicos para regular la oferta de trabajo en Estados Unidos y del que depende en buena medida lo que le queda de competitividad frente a las economías asiáticas y europeas.
Ahora, Trump amenaza con multiplicar ese sufrimiento en forma exponencial, pero sus posibilidades de lograrlo son más que inciertas, no sólo por las múltiples dificultades legales, burocráticas, administrativas y presupuestales (el asunto costaría 315 mil millones de dólares, calcula el AIC) y por la reacción política que podría generar en las comunidades de extranjeros, sino, sobre todo, porque un delirio semejante dejaría huérfanas de mano de obra a importantes ramas de la economía estadunidense, empezando por la agricultura (que depende en más de 40 por ciento de trabajadores sin papeles), la construcción (20 por ciento) y la industria restaurantera.
Más que en millones de expulsiones, los efectos del discurso trumpiano van a notarse en una acentuación de las fobias racistas y a los extranjeros de crecientes sectores de la sociedad estadunidense, en una consolidada asociación entre los conceptos de extranjero y delincuente, ataques al estilo del Ku Klux Klan contra minorías (no necesariamente extranjeras), una constante zozobra en las comunidades latinas (no ha habido una sola expulsión de indocumentados europeos o canadienses, que los hay por centenas de miles), angustia en los países de origen de la migración y fortalecimiento de las mafias dedicadas al tráfico de personas, las cuales tendrán en los desplantes del energúmeno una justificación para elevar sus tarifas; y es que, por pocos o muchos que Trump deporte, los trabajadores indocumentados seguirán llegando a Estados Unidos.
Capítulo aparte merecería el amago de los aranceles, que a decir del
gobernante gringo entrarán en vigor mañana sábado, a pesar de que un día
antes Howard Lutnick, nominado para la Secretaría de Comercio, presumió
que México y Canadá estaban actuando rápidamente
en frenar la
migración y los envíos de fentanilo a Estados Unidos, sugiriendo que lo
hacían en respuesta a las amenazas trumpianas y que si seguían así no habrá aranceles
.
Por lo que respecta a las autoridades mexicanas, ambos fenómenos se han enfrentado con determinación y por decisión propia en el sexenio anterior y en el actual: desde 2018 no se ha dejado de perseguir el trasiego de drogas sintéticas ni de frenar la migración mediante la activación económica regional y la creación de buenos empleos; ese fue uno de los objetivos centrales del programa Sembrando Vida –que se aplica también en países centroamericanos expulsores de población– y de las grandes obras de infraestructura emprendidas por AMLO, propósito en el que ha persistido el gobierno de Claudia Sheinbaum.
Ya deberíamos estar acostumbrados: Trump es de los que salen al jardín justo antes de que se oculte el sol, grita ¡ordeno que anochezca!
, y cuando se pone oscuro se pavonea ante sus impresionados fanáticos.
La Isla
,
que recuerda un lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme,
es el espacio, que no lugar, en el que se refugiaba Pablo Neruda para
meditar, escuchar y amar.
Isla tendida como reptil cerca de las claras márgenes del agua en cuyas arenas de oro se forjó el Chile heroico. Un jardín, una fuente de piedra dorada por el sol, donde el viento va deshilando el chorro fresco y alegre de un surtidor. Una alameda que abre camino lejano a nuestro eterno deseo de cambiar, un vivir en frondoso bosque en plena isla, a cuya sombra el verano es estación joven y fuerte… Este es el escenario que recrea el amor del cartero (il postino) por Amada, una bella italiana.
Interpretado por Charles Castronovo, Mario, además de enloquecer de
amor, logra la amistad de Pablo Neruda al entregarle a diario su
correspondencia (representado por Plácido Domingo), a quien le toma
prestadas partes de su poesía para enamorar a la espectacular italiana: Total, la poesía no es de su autor, sino de quien la necesita
.
Daniel Catán escribió esta ópera estrenada a escala mundial en el teatro de la ópera de Los Ángeles, California. Ópera que aparte del despliegue de ternura de Mario, el cartero, y Pablo el poeta, hicieron vibrar a los aficionados angelinos con el drama del exilio en una isla italiana.
Calca del exilio de españoles e hispanoamericanos y mexicanos ahogados
desde siempre y continuado por el actual presidente estadunidense,
Donald Trump. Lo que dio a la ópera el tono dramático de la romántica
historia. Polvo de tradición lleno de un dulce encanto misterioso.
Aromas penetrantes a mujer que palpitaban en el ambiente. Mágicos
jirones de leyenda bajo el alero de los tejados. Recreo de un mundo de
fantasía en la voz de Plácido Domingo, que se sentía invadido de la
nostalgia del exilio entre escenarios en movimiento que hacían vivir la
sensación de la expulsión de la propia tierra. Música grave y lenta que
acompañaba el fluir de todas las fantasías de la imaginación. En la que
brillaban las pupilas azabaches de esta italiana cautiva del amor.
Música seductora del que fuera mi amigo y compañero de los migrantes, Daniel Catán, integrada a un devenir incesante de imágenes en movimiento, sin fijeza, sin centralidad, que al desaparecer dejaban en la memoria una melodía que recuperaba todo un mundo de imágenes y sentimientos.
Catán vivió un continuo desdoblamiento capaz de integrar las alturas de la composición musical a los infiernos de la política hispanoamericana. Música que aportaba lo intransferible, el espíritu que se esconde tras las formas autobiográficas en busca del ser.
Música operística basada en nuestro pasado fatalista extraído lisa y llanamente de las propias fuentes de Daniel. Ópera que se vuelve sonido, decir desprejuiciado herido de fatalismo que se nos escapa. Eso que vivimos a diario: violencia, guerras al narco, inseguridad, zozobra, etcétera. Innovación sensitiva enlazada a lo intelectual que se va como las olas del mar.
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