7/13/2009

Periodistas pal café....




Julio Hernández López: Astillero
Copetito manda: lo electoral, convertido en mercantil; juegos de artificio comicial a cargo de brigadas dedicadas a construir triunfos para los aliados de la peña del erario que es abuela de su nieto (pre)candidato. ¿Milagro, sorpresa, triunfo de la democracia, ejemplo de modernidad (torre de David, arca de la alianza, estrella de la mañana), confirmación contundente de que los votos cuentan y la alternancia es posible (siempre y cuando no vaya por la izquierda)? Más bien, ríos de dinero de origen incomprobable que hicieron funcionar la maquinaria simplificada de adulteración que ya prescindió de estrategias e ingenierías más o menos esforzadas para aterrizar en el hecho crudo de la compra directa de votos y el pago en efectivo a funcionarios de casillas conforme a resultados”.
Además del explicable y justificado hartazgo ciudadano por las torpezas graves del calderonismo, la “resurrección” del PRI tiene como explicación definitoria el uso de recursos públicos (de tesorerías de estados) y privados (de origen y destino incomprobables jurídicamente, pero vistos y sabidos en muchas entidades) y la complicidad de medios informativos, sobre todo electrónicos, para deformar la realidad e imponer percepciones (un ejemplo de antología se dio en San Luis Potosí, cuando una reportera de Milenio colocó en el portal de Internet de este diario una noticia que hasta ahora no ha podido demostrar y que publicó sin fuente, como un hecho tajante, respecto a la aparición de un hijo del candidato panista a la gubernatura en un lugar de la Huasteca potosina con “millones de pesos” en un maletín para “compra de votos”. La “noticia” fue retomada en Televisa y dada por cierta, en un juego de intereses que tiene como eje la influencia del gran anunciante Peña Nieto, el padrino de la victoria priísta en SLP).
No pago pa’ que me sigan pegando: los financistas oscuros han ayudado a que haya una nueva conformación del poder que llevará al fracasado Calderón a replegar sus tropas y reformular sus planes de desquiciada “guerra” contra el narcotráfico. De triunfar la pretensión de que Los Pinos trianuales (de boliche: caídos, a punto de caer o solitaria e inecesariamente en pie) deje de jugar a los soldaditos por el país, y acepte que no pudo establecer nuevas reglas del mercado, que pretendían abrir el paso a una nueva generación de gerentes o comisionistas relacionados con la casa principal, se produciría un replanteamiento nacional de pactos entre grupos delincuenciales, tanto los explícitos, agrupados en lo que llaman cárteles, como los apenas encubiertos, conocidos en la jerga del ramo como autoridades. ¿Pa’ qué tanto brinco, estando el suelo tan mayoritariamente dominado ahora por el PRI? Abran paso a la nueva etapa de la convivencia de baja intensidad: menos ruido y más ganancias (compartidas), todo negocio del narco cabe en un jarrito, sabiéndolo acomodar. Baraja renovada: ejército de mapaches “mata” ejército antinarco. El chou, es decir, el bisnes, debe seguir (aunque en Michoacán continúen los desarreglos y lleguen a niveles de reto a ráfagas de las fuerzas armadas familiares).
Lo sucedido este domingo es un ensayo de lo que se planea para 2012. En el duelo al sol de mapaches pistoleros los priístas resultaron mejores que los blanquiazules. Entre otras cosas, porque los del PRI tuvieron mejor armamento: dinero, dinero y dinero, según recomienda la fórmula napoleónica (¿los inversionistas ocultos apostaron a dos cartas, o se cargaron a la opción tricolor que les ofrecía mejores réditos y garantía de pronta recuperación?). Además, los estrategas de tres colores tuvieron experiencia, cuadros capacitados y una estrategia relampagueante que les llevó en los días previos a los comicios a desplazarse por todo el país para cerrar los tratos mercantiles y vigilar el cumplimiento de los compromisos adquiridos. Las próximas elecciones presidenciales están predestinadas a ser un escenario magno de inequidad, ilegalidad y trampas. Atracomulco.
Nada ha de complacer tanto, sin embargo, al respetable público (que pasó de bicicletero a telenovelero) como los interesantes incidentes de la boda real tan largamente pospuesta, la del famoso Chente hoy levantado en armas declarativas contra su breve sucesor, y la persistente Martita, mamá de sus impunes hijitos Bribiescas. Oh, cuando la desgracia acometía a los blanquiazules y el apachurrado Felipín, cuando el país parecía caer en las garras renovadas del dinosaurismo salinizado, cuando era posible decaer porque nada salvó al país ni cambió la faz podrida del poder (ni los votos nulos que valieron para lo que ya se sabía), entonces ha de aparecer la pareja tan simpática y oportuna, para que los mexicanos se entretengan en los entretelones del amor después de Los Pinos, de las pasiones en el rancho egocéntrico de San Cristóbal y en las discusiones apasionantes acerca de la validez de la ceremonia religiosa realizada en los jardines reales y no en una iglesia de la plebe (ya el jefe católico del feudo hizo saber que expidió una presunta autorización exprés a los tórtolos forrados (de fortuna sexenal). ¡Feliz luna ¿de miel?!
Astillas
La elección de nuevo dirigente del PAN está encaminada a ser un nuevo fracaso del licenciado Calderín (las elecciones confirmaron el diminutivo). Hay un enojo concentrado contra el equipo inservible que el felipismo impuso en los comités nacional y estatales, regidas todas las decisiones imperiales por el capricho y el amiguismo, y una corriente importante cree necesario que el nuevo jefe político del partido blanquiazul sea ajeno a la corte real. Pobrecito señor presidente, había dicho el profeta Servitje... El gatopardismo azteca se confirma: la dirigencia del PRD está considerando la posibilidad de restituir el Frente Amplio Opositor, obviamente con el PT y Convergencia. Esta columna, obsesionada con lo nuevo, propone que el coordinador sea nuevamente Jesús Ortega, para ver si nuevamente coordina la campaña de López Obrador... Y, mientras las armas futboleras se cubren de gloria ganándole a... Guadalupe, ¡hasta mañana!
Fax: 5605-2099 •
juliohdz@jornada.com.mx

Enrique Galván Ochoa: Dinero
¿E
ntonces qué sigue después de las elecciones? Una avalancha de millares, millones de promocionales gubernamentales tratando de convencernos de que la dura realidad que vivimos es transitoria y que vienen tiempos mejores. Sin embargo, cada día marean a menos gente, como se vio en el proceso electoral. Más de la mitad de los ciudadanos no fue a votar y de los 33 millones que sí sufragaron, en números redondos, 23 millones votaron contra el PAN y su presidente. Además, gran número votó nulo, muestra de repudio hacia la clase política en general. En otras palabras: sólo 9 millones de 77 millones de ciudadanos mayores de edad avala la conducción del país por el panismo. Un tache sin precedente en la historia. Lo que más nos preocupa es el empleo y la violencia. Es mejor que pongamos los pies en la tierra: no hay mejoría a la vista. Es un problema de consumo: en Estados Unidos no baja el gasto en drogas, entonces nuestro país continuará siendo el abastecedor, con su secuela de sangre y muerte. Por otro lado, también el país del norte es el principal consumidor de nuestras mercancías lícitas, pero el mercado está cerrado, su economía se recupera muy lentamente, puede tardar muchos meses, inclusive años. Así que no podemos pensar que en un futuro próximo, contra lo que afirma el optimismo oficial, comiencen a crearse empleos para llenar el millón de desesperados que han perdido recientemente la chamba. Conclusión: no pudo el licenciado FChamoy con el paquete. Lo mejor que podemos esperar es que no lo obnubile el síndrome de El Vasco y en su frustración comience a repartir pescozones a diestra y siniestra.
Trabajadores de Aviacsa
En una extensa carta dirigida a esta sección, los trabajadores de Aviacsa denuncian a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) por orquestar una campaña de acciones que tendrían como fin sacar del mercado a la compañía, a fin de favorecer a otra. Cuando era secretario Luis Téllez, en complicidad con el actual subsecretario Humberto Treviño Landois y con el entonces director de la DGAC Gilberto López Meyer, “fuimos objeto de constantes amenazas en los medios de comunicación de cerrar nuestra empresa e inclusive se manifestó públicamente invitando a los pasajeros a no comprar boletos por Aviacsa”, dicen los trabajadores, y agregan: ahora, “y viendo que con las acciones antes mencionadas no obtuvieron los resultados que esperaban, empezaron con una estrategia enfocada a atacarnos por la vía de múltiples inspecciones (cinco durante un año.) Como resultado de estas cinco inspecciones fuimos calificados por sus mismos inspectores como una empresa confiable, segura y con las condiciones aeronavegables necesarias”; sin embargo, no se detiene la campaña en su contra. Y hacen algunas preguntas que mueven al sospechosismo: ¿qué hacía el subsecretario Treviño Landois en el París Air Show con Miguel Alemán Velasco? ¿Quién pagó el viaje? Si pagó Alemán Velasco, ¿qué compromisos adquirió la SCT con él? ¿Por qué permitieron la entrada ilegal de Interjet al aeropuerto de la ciudad de Mexico? Se desprende de la carta que el secretario Molinar Horcasitas no trata igual a todos, al menos no maltrataba así a los subrogatarios picudos de las guarderías, cuando fue director del IMSS.
Impuesto a la riqueza
Aunque dicen que no hay de otra más que imponer el IVA a alimentos y medicinas, la verdad es que sí existen distintas salidas para mejorar la recaudación fiscal, sólo que no le convienen al dinosaurio. Legisladores del Partido Demócrata de Estados Unidos, que forman parte del Comité de Presupuesto de la Cámara de Representantes, están promoviendo la creación de un impuesto gradual sobre la riqueza, a fin de financiar la reforma del sistema de salud. Se aplicaría a personas que ganan mas de 280 mil dólares al año y matrimonios en los que trabaja la pareja y ganan más de 350 mil. Los del peldaño superior –individuos y parejas que perciben 400 mil y medio millón de dólares, respectivamente, serían gravados con un impuesto de uno por ciento sobre sus ingresos. Y todavía habría uno mayor para quienes ganan más de un millón de dólares al año. ¿Se imaginan una iniciativa así en México? De inmediato el autor sería llamado populista, comunista y todo lo que termine en ista.
e@Vox Populi

Carlos Fernández-Vega: México SA
A
los miles de millones de pesos que anual y obligadamente salen de sus agujereados bolsillos para cubrir todo tipo de pifias, excesos y atracos cometidos por el gobierno en turno, los mexicanos deben sumar jugosas cantidades para garantizar amplia cobertura y atención médica privada de lujo a su distinguidísima cuan eficiente clase política (y a sus respectivas familias), la cual se niega a ejercer su derecho de acudir al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) para sanar sus padecimientos.
Al inquilino de Los Pinos, los funcionarios de primer nivel de su gabinetazo, legisladores, magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), integrantes del Consejo de la Judicatura Federal y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación; a la jerarquía del Instituto Federal Electoral y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos; a la plana mayor de Petróleos Mexicanos, la Comisión Federal de Electricidad y Luz y Fuerza del Centro, y ya en el exceso a la del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del ISSSTE, los mexicanos deben pagar un jugoso seguro de gastos médicos mayores para que se atiendan en clínicas y hospitales de primer mundo.
Por ejemplo, “la protección médica durante los tres años de la 60 Legislatura de la Cámara de Diputados costó 155 millones 892 mil pesos. La seguridad médica de los 500 diputados federales y sus 2 mil 342 familiares se garantizó por medio de una póliza de seguro de gastos médicos mayores, con Met Life (...) Esta póliza cubre un padrón total de 2 mil 342 personas, de las cuales 500 son diputados; 408 son cónyuges, 870 hijos y 564 padres. Esta cobertura (...) se suma a otras como una bolsa de 51 mil pesos anuales (en años completos fue de 79 mil pesos) para la compra de medicamentos y pago de consultas no cubiertas por el seguro, o para los gastos derivados de atención dental”. (Nota publicada ayer por El Universal.)
Sirva el contexto para entender la siguiente denuncia, fechada en La Paz, Baja California Sur, y enviada a México SA: “(Crónica de una muerte anunciada en el ISSSTE) Personal docente, de investigación, no docente y estudiantes del Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas del Instituto Politécnico Nacional manifestamos nuestro repudio a la política de atención que recibimos los derechohabientes del ISSSTE (que a pesar de su ‘renovación’ mantiene los viejos vicios, e incluso está empeorando). Hacemos esta declaración debido al deceso de la compañera de trabajo, la doctora en ciencias Patricia Rodríguez, profesora-investigadora de 39 años de edad y con casi 10 en el servicio, que falleció el 26 de junio por negligencia médica del ISSSTE.
“La doctora Rodríguez fue hospitalizada en el ISSSTE de La Paz, BCS, el 17 de Mayo debido a un aneurisma, el cual requiere de una cirugía inmediata, la cual no se aplica en esta ciudad, por lo que después de tres días de burocracia médica fue remitida al ISSSTE de Culiacán el viernes 22 de mayo, donde, tras más estudios clínicos, le detectaron un segundo aneurisma. Considerando el alto riesgo de las intervenciones quirúrgicas, decidieron remitirla a otro hospital y después de 3 días de burocracia, el viernes 29 de mayo fue trasladada al hospital 20 de Noviembre, en el Distrito Federal. Para entonces ya habían transcurrido 12 días desde que ingresó al ISSSTE y 17 desde que se inició su padecimiento.
“Se supone que el hospital 20 de Noviembre es de primer nivel, pero tristemente y con enojo nos damos cuenta de que ni la administración, ni la infraestructura humana y de equipamiento están a ese nivel. Justificaciones del ISSSTE como ‘mantenimiento de área quirúrgica’, ‘fin de semana’, ‘horario del especialista’, son las razones que dan para no prestar el servicio de urgencia. Así, fue en la segunda semana en el hospital 20 de Noviembre (cuarta desde que comenzó su padecimiento) cuando a la doctora Rodríguez le realizaron una angiografía que le provocó fuertes dolores de cabeza (seguramente por derrame cerebral); no la operaron de inmediato, sino que la programaron para el viernes 19 de junio (es decir, para dos días después) y aún así le prometieron 95 por ciento de éxito. Su estado de salud empeoró, su cerebro se inflamó y el jueves 18 tuvo un paro respiratorio y le practicaron una traqueotomía; no la operaron el viernes 19, argumentando que la inflamación del cerebro no cedía. Para el viernes 26 de junio los médicos declararon que su cerebro había muerto, y unas horas después la doctora Rodríguez falleció después de seis semanas de ‘atención ISSSTE’. Nunca llegó a la mesa de operaciones, su vida se perdió en el papeleo y en un quirófano en mantenimiento. Esta es una clara negligencia médica que acabó con la vida de la doctora Rodríguez.
“Días antes de su fallecimiento, familiares y amigos quisimos retirar a la compañera y llevarla a un hospital particular. Solicitamos una segunda opinión a un médico que hace cuatro años operó con éxito a otra colega con el mismo cuadro clínico, pero el ISSSTE no le permitió la entrada, argumentando que el reglamento exige primero darla de alta y, además, que los familiares, bajo su responsabilidad, podrían sacar a la compañera; los médicos mencionaron que si moría en el traslado, los familiares serían responsables.
“Todos los que ahora sufrimos el fallecimiento de la compañera, sabemos que la mató la burocracia y la mala atención del ISSSTE. Sabemos quiénes son los responsables: el cuerpo médico, que nunca llegó a practicar la cirugía; la administración, que prolonga los trámites de traslado y atención al paciente; la dirección de la institución, que conoce estos problemas, no los resuelve y aún así nos promete un ISSSTE renovado; el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y sus líderes, que encubren en lugar de demandar un mejor servicio de la institución de seguridad social, y el gobierno federal, que vigila a la institución y no la provee, utilizando las cuotas que todos aportamos, de la infraestructura necesaria.
“Nuestra compañera no es la primera que muere en manos de la negligencia médica, y no será la última en tanto el ISSSTE siga siendo usado por los que actualmente lo dirigen para propósitos completamente diferentes a los de dar salud a sus derechohabientes. Esperamos que la presente demanda motive a otros derechohabientes a manifestar su inconformidad y repudio a los procedimientos del aparato burocrático y los vicios del ‘viejo’ o ‘renovado’ ISSSTE, que, como en este caso, han conducido a la muerte de nuestra compañera y a la de otros tantos derechohabientes. Descanse en paz. Sus compañeros y amigos.” (Más de cien firmas, debidamente acreditadas.)
Las rebanadas del pastel
Si de subrogaciones se trata, el ISSSTE tiene su propia historia. ¿Por qué los diputados no le piden nombres y montos, como al IMSS?… A 38 días de la tragedia, la SCJN decide hoy si investiga lo sucedido en la guardería ABC de Hermosillo, porque las otras instancias parecen no estar dispuestas.
cfvmexico_sa@hotmail.commexicosa@infinitum.com.mx

Antonio Malacara: Jazz
Conocí a Samuel Martínez hace cinco años en San Luis Potosí, su tierra, cuando revolucionaba los quehaceres de la fusión jazzística con un septeto llamado Huazzteco. Ahí convergían un cuarteto de jazz y un trío de son huasteco con inmejorables intenciones y mejorables resultados; Samuel se hacía cargo del piano, la dirección y los conceptos.
Poco después el joven maestro, hijo del gran pianista Jorge Martínez Zapata, se fue a estudiar al Conservatorio de Puerto Rico y le perdimos la pista. Actualmente radica en los dos países, va y viene todo el tiempo entre la isla y la nopalera, y este lunes 13 de julio echa a andar un seminario de interpretación jazzística en el Centro de las Artes de la capital potosina, donde ha montado un Laboratorio de Jazz.
Dirigido esencialmente a pianistas, contrabajistas y cantantes, el seminario concluirá el 28 de julio y se llevará a cabo lunes y martes, a razón de dos sesiones por día. Los encargados de impartir las clases son Enrique Nery, Aarón Cruz e Iraida Noriega, trío de celebridades que seguramente se darán tiempo para tocar juntos, como hicieron en el Festival Nacional de Jazz del año pasado. Mayores informes: (01444) 137 4100.
Más abajo, en el Golfo de Tehuantepec, otro personaje realiza incansable labor alrededor del jazz. Se trata de Eduardo Olivares, quien desde 2001 ha mantenido viva la llama del latin jazz en su natal Juchitán con su grupo Gozo & Paz. Nueve elementos surgidos de diferentes iglesias cristianas (ecumenismo local) que están por grabar su tercer álbum.
Recordemos a Koinonia, el grupo de jazz cristiano (así se autocalificaban, aunque más bien tocaban jazz-funk) de Abraham Laboriel, Justo Almario, Alex Acuña, Dean Parks et al, que pasó desapercibido en Estados Unidos, pero que en los años 80 fue ovacionado en países como Noruega, Dinamarca, Suecia y Finlandia.
Gozo & Paz se formó originalmente en Palenque, Chiapas. Sus miembros fundadores son Silvino González en los saxos, David Aguilar en el piano y el propio Eduardo Olivares en la guitarra. Después de algunos ejercicios de asentamiento regresaron a Juchitán, Oaxaca, y ahí grabaron su primer cedé, Gozo & Paz, en 2004.
El año pasado entregó su segunda producción: Latinjazzeando, en el que las atmósferas afroantillanas forman el centro del discurso, sin que ciertas líneas del son istmeño dejen de abordar el barco (no sabemos si de manera deliberada o no). Su poder rítmico es intenso, estimulante y, aunque la intención primordial de la banda no es hacer proselitismo religioso, creemos que ésta es una forma idónea de la alabanza y la gratitud.
Además de los tres miembros fundadores, Gozo y Paz está integrado por: Luis Augusto Rojas (vibráfono), Ludwig Zárate (piano) Saraín Aguilar (bajo eléctrico), Carlos Aguilar (batería), Iván Tovilla (percusiones) y José Hinojosa (guitarra acústica). Nueve instrumentistas alrededor del proyecto.
En estos momentos Gozo & Paz prepara su tercer álbum: Sentimiento cubano, el cual está programado para diciembre próximo. En él tienen como invitado a David Gálvez (de Cuba) en el piano eléctrico. Y seguramente, además del evidente son montuno que anuncian en el título, podremos apreciar nuevos escarceos por los diferentes sones que se cultivan y se maduran todos los días en la sierra y la costa oaxaqueñas.
amalacara@prodigy.net.mx




Honduras: profundizar la acción internacional
Las gestiones de la comunidad internacional por restituir el orden constitucional en Honduras –suspendido desde el pasado 28 de junio a consecuencia de un golpe de Estado– parecen haber entrado, en el fin de semana recién concluido, en un impasse que no favorece más que a las fuerzas participantes en la asonada oligárquico-militar.
Continuar

El Correo Ilustrado
Exigen la liberación de luchadores sociales
¡Ya basta de criminalizar las luchas sociales!

Patricia Galeana: La secularización del Estado y de la sociedad
En el siglo XVIII, Carlos III inició el proceso de secularización del imperio español. Consumada la Independencia de México, los liberales culminarían el proceso secularizador, al instaurar por vez primera en el continente americano la independencia del Estado en relación con la Iglesia; sólo Haití lo había hecho antes.
Continuar

Carlos Fazio: La guerra, el enemigo, los riesgos
Tras los comicios intermedios del 5 de julio comienza en México otra fase de signo incierto. La debacle electoral de Felipe Calderón y el Partido Acción Nacional puede entrañar el peligro de un desborde autoritario. Con 12.3 por ciento de los sufragios sobre un padrón de 77.4 millones de electores, la debilidad del administrador surgido de un fraude de Estado se acrecienta. En un país sumido en una violencia reguladora en ascenso, en recesión económica, con una crisis de legitimidad de los partidos políticos parlamentarios y en el contexto de un Estado de tipo delincuencial y mafioso, podría acentuarse el empaque autoritario de Calderón.
Continuar

Iván Restrepo: La nueva gran batalla de Vo Nguyen Giap
Ahora no es en el campo militar donde libra batallas el general Vo Nguyen Giap, el héroe vivo más respetado de Vietnam. Tras luchar durante 70 años contra las potencias que quisieron hacer de su país una colonia; después de propinar a las tropas francesas la derrota definitiva que las obligó a capitular en mayo de 1954, luego de la batalla de Dien Bien Phu, y de pelear contra la mayor potencia militar de los tiempos modernos (Estados Unidos), el estratega de la guerra de guerrillas encabeza ahora otra gran campaña. Esta vez contra un país que él bien conoce y que expande sus intereses por todo el mundo: China.
Continuar

John M. Ackerman: PRI: la insoportable levedad de la victoria
Dicen que lo que fácil llega, fácil se va. Cuando los ciudadanos que el pasado 5 de julio votaron por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se den cuenta de que el viejo partido de Estado no les ofrece nada nuevo, rápida y súbitamente le retirarán su apoyo. Así como Vicente Fox perdió el respaldo de la ciudadanía apenas unos cuantos meses después de tomar posesión, el tricolor verá que su poder se desmorona ante el agravamiento de la crisis económica, la profundización de la violencia del narcotráfico y el repunte del virus A/H1N1 durante los fríos meses invernales.
Continuar

Néstor Martínez Cristo: Los mormones y la ausencia de Estado
El Estado fallido es un término que incomoda a unos e irrita a otros. Es un concepto que provoca un debate inútil que deriva casi siempre en el terreno de lo ideológico. Por eso no abundaré al respecto. Pero lo que resulta innegable en México, pues se confirma en los hechos una y otra vez, en las más diversas situaciones, maneras y regiones, es la preocupante ausencia del Estado.
Continuar

León Bendesky: Tres pies al gato
La economía mexicana tendrá este año el peor desempeño económico entre las de América Latina. La caída del crecimiento del producto, sobre todo en el sector de las manufacturas, en el primer semestre ha sido brutal, lo que se asocia con la abrupta reducción de las exportaciones. (Véase, por ejemplo, Latin Watch 1er semestre 2009, Servicio de Estudios Económicos, BBVA, 30/06/2009).
Continuar

Hermann Bellinghausen: El rapto de los colores
Belarmino detuvo el paso. No pudo evitarlo. ¡Un muro blanco! En tiempos como aquellos, de verborrea y nauseabunda contaminación visual, significaba en blanco”. Una excepción fenomenal. Se llevó la mano a la mollera, la rascó con una uña, gesto simiesco que conserva la especie humana y lo usa, paradójicamente, cuando “trata” de pensar, algo que el chimpancé nomás no. En presencia de otras personas sería un movimiento histriónico, pero en el tramo baldío de calle que surcaban entonces los tenis erráticos de Belarmino no había nadie más que él.
Continuar

José Cueli: Tradición mortal
En el contexto esplendoroso de las ferias de San Fermín en la Pamplona de sombras y luz, impregnada de idealidad, encendida de ardientes imaginaciones, el discorde conjunto de mujeres que nos hablan de calles estrechas, frondosas, enredaderas, de olores toreros, bebiéndose las uva vueltas vino rojo, acompañadas del tradicional ajo arriero entre bugambilias de los balcones, encontró la muerte un mozo pamplonica en la corrida del encierro celebrado este viernes pasado.
Continuar

Ricardo Raphael
La advertencia de Ciudad Juárez
Si el combate a la criminalidad no comienza a conducirse en México junto con la construcción de un verdadero estado de derecho, desde el cual se vigilen rigurosamente los derechos humanos, el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa terminará añadiendo un peldaño más a la ya muy amplia historia del autoritarismo mexicano.
Faltan unos cuantos meses para que la guerra contra los cárteles de las drogas emprendida por la actual administración cumpla tres años. Hoy hay razones suficientes para someterla a una seria y sincera revisión. Por una parte, siendo esta política la que tanto el Presidente como su partido decidieron explícitamente someter a refrendo durante el pasado proceso comicial, y valorando los resultados que emergieron de las urnas, es posible concluir que la ciudadanía no otorga ya su voto pleno a la manera como se están conduciendo las cosas en este frente.
Cabe destacar también la impresionante crecida de quejas en contra de los efectivos del Ejército y las fuerzas policiales federales a propósito de las violaciones a los derechos humanos en México: allanamiento de morada, tortura, desaparición forzada y asesinato son acusaciones que tanto el gobierno de Estados Unidos como las organizaciones de derechos humanos han recibido abultadamente durante los últimos meses.
¿Deberán estos dos hechos —el desgaste que esta guerra ha propiciado entre la población y el abuso incremental sobre los derechos humanos— llevar a reconsiderar la política de seguridad del gobierno calderonista?
Tengo para mí que sería muy irresponsable desestimar las razones y los fundamentos que dieron origen a esta política. Sin embargo, no haría daño evaluar seriamente si las estrategias elegidas para su consecución deberían mantenerse como están o habrían de ser modificadas.
Apenas ayer en estas páginas, el procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, recordó con toda pertinencia: antes de que el gobierno de Felipe Calderón se decidiera a enfrentar al crimen organizado, “la vida de centenares de miles de mexicanos era ya una tragedia inaceptable. Muchos dormían, despertaban y pasaban sus días conviviendo con el miedo, el crimen, la violencia y la muerte”.
En efecto, la situación previa era intolerable. Los criminales más peligrosos habrían optado por salir de las coladeras para pasearse libremente sobre nuestras calles, al tiempo en que su actuación pública desató una espiral incontenible de violencia. Frente a este hecho, el Estado mexicano no podía haber actuado de otra forma. Era necesario hacer creíble que la autoridad legal del país estaba al mando y que las instituciones democráticas conservaban para sí el monopolio de la violencia.
Fue desde esta perspectiva que los mexicanos nos hicimos tolerantes frente al aparatoso despliegue militar sobre las regiones rurales de Michoacán, Durango o Sinaloa. Y también —aunque se tratara de un expediente mucho más delicado— que aceptáramos militarizar la vida en las zonas urbanas de Tijuana, Culiacán, Torreón o Ciudad Juárez
No cabe ahora llamarnos a sorpresa: sabíamos todos que ahí donde el Ejército se estaciona para hacerse cargo de la seguridad pública crece automáticamente la violación a los derechos humanos. Se trata de una consecuencia que en el mundo y a lo largo de la historia no conoce excepción. Empeora aún más las cosas que la insensibilidad frente a esta circunstancia crezca en las autoridades civiles, los medios de comunicación y la población en general.
Bajo la idea equivocada de que a los criminales hay que atraparlos, condenarlos o matarlos —sin considerar consecuencia ulteriores— se suele relajar la vigilancia demandada a cualquier régimen democrático, con respecto a los derechos humanos. El problema gordo comienza a notarse cuando —en su desempeño como implacables garantes de la seguridad— los militares y los agentes policiacos pasan igualmente a vulnerar los derechos de las personas inocentes.
Esto es precisamente lo que ha venido ocurriendo en nuestro país y hay pruebas convincentes para afirmarlo. Tal y como hoy se da noticia en estas páginas, en Ciudad Juárez muchas de las víctimas a quienes se les han violado sus derechos son jóvenes de clase obrera que, por rencillas o diferencias con integrantes de sus respectivas comunidades, han sido falsamente acusados de traficar con drogas o con armas.
Un antídoto real para evitar esta sistemática transgresión —utilizado en otros países democráticos que han enfrentado procesos similares— es que las autoridades encargadas de velar por la legalidad de los procesos penales y de proteger los derechos humanos acompañen —en la primera línea del frente— a los efectivos que combaten directamente a la criminalidad.
Más y no menos derechos humanos es el componente que aún le hace falta a esta campaña emprendida por el gobierno de Felipe Calderón. No se trata de una demanda ingenua. De esta condición dependerá probablemente el juicio que las futuras generaciones harán a este Presidente por su gestión.
Analista político



Lydia Cacho
Plan B
Las carcajadas de los narcos
El IMSS pagó más de 800 mil dólares en subsidios a la guardería de la familia del narcotraficante El Mayo Zambada. En Washington ahora se preguntan cómo diablos le harán para que los congresistas estadounidenses aprueben futuras partidas de Plan Mérida para México, que podrían terminar en los bolsillos de los cárteles.
No, no fue en la era del PRI, esa a la que culpa Calderón cada vez que cuestionamos la guerra y la corrupción. Fue Molinar Horcasitas cuando era director del IMSS; un panista que ha vivido de dar lecciones de ética y buen gobierno. Firmó el convenio para que la familia del narcotraficante maneje una guardería pública en Sinaloa.
No hay excusa ni pretexto; cualquier persona puede entrar en internet, teclear el nombre de la representante legal y encontrarse, desde antes de firmar el contrato, con el listado de los negocios para lavar dinero de El Mayo Zambada.
El aviso en la dirección electrónica http://www.treas.gov/offices/enforcement/ofac/actions/20070517.shtml está allí justamente en aras de la trasparencia y para que nadie, ni de México ni de Estados Unidos, cometa el error de vincularse con el narcotraficante.
Como si no fuera suficiente la falta de profesionalismo y pericia del director y Consejo Técnico del IMSS, también el gobierno de EU, que ya conocía esta asociación, hizo ojo de hormiga. Cuando la cooperación estadounidense entrega donativos a las asociaciones civiles, les hace firmar medio centenar de documentos de responsabilidad jurídica, revisa las facturas y gastos, exige transparencia total por 10 mil dólares; sin embargo, a sabiendas de que el gobierno federal no sólo es incapaz de dar seguimiento a uno de capos más buscados, sino que se asocia con su familia con recursos públicos, aprobó la entrega de 400 millones de dólares para la narcobatalla. Algo no cuadra; el Departamento de Estado ha dicho que esta es una guerra fallida. Si lo es, ¿para qué invierten en ella? ¿Qué estará cediendo Calderón a cambio de esa ayuda?
Las y los legisladores estadounidenses que aprobaron el Plan Mérida conocen las debilidades del gobierno calderonista. Conocen la corrupción de altos mandos policiacos, saben de la falta de equipo y recursos para trabajo de campo de inteligencia del Cisen.
Luego de un gasto multimillonario y de la estela de daños “colaterales” (como Calderón llama a las violaciones a los derechos humanos) que dejan 10 mil soldados en Chihuahua, sabemos que fue inútil ese despliegue militar y que lo que se necesitaba era invertir en servicios de inteligencia para aislar y detener a los narcotraficantes y sus redes sociales; justo lo que hace un año la Sedena y expertos independientes en inteligencia y seguridad le dijeron a Calderón.
Si no son capaces de darse cuenta de que el IMSS está subrogando guarderías al narco, algo que podrían descubrir con una búsqueda simple en Google, qué podemos esperar de esta ineficaz guerra si no más violencia, más muertes, menos derechos humanos para la sociedad inocente, y claro, las carcajadas de los narcotraficantes.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario