12/08/2011

Preocupación inexistente en 2006


Utopía


Eduardo Ibarra Aguirre


A Felipe Calderón no le preocupa quien gane la elección presidencial del primer domingo de julio, si nos atenemos a la respuesta que brindó a su entrevistador de cabecera:

“No, definitivamente no. Mientras la elección sea democrática, es bueno para el país, gane quien gane. Y no es tan importante quién gane o qué partido, sino cómo gana. Y con qué apoyo gana. Eso es lo que debe ser fundamental. La importancia de llegar a la Presidencia sin compromisos que puedan atar las decisiones soberanas que un presidente debe tomar es fundamental para cualquiera”.

Legítima es la tesis de quien siendo candidato al cargo de primer empleado de los mexicanos, que no otra cosa es, sencillamente la ignoró porque se alió a los dueños de México –incluido el duopolio de la televisión y el oligopolio de la radio–, pactó una subordinación mayor a los intereses de la Casa Blanca y La Moncloa, entre otros, y aún no concluye el pago de costosas facturas de toda índole porque llegó a Los Pinos, como él mismo reconoció con agradecible cinismo: “Haiga sido como haiga sido”.

Ahora le asalta otra preocupación al también general de cinco estrellas, expresada el domingo 4 en un acto para recibir aplausos de subordinados, socios y camaradas de partido, y es “la intervención evidente y palmaria del crimen organizado en los procesos electorales”. Cierto, aporta datos, todos relacionados con Michoacán y la derrota de Luisa María Calderón, su hermana, y ambos no acaban de digerirla, aunque ella está lista para arribar al Senado.

Discursea tanto el abogado, economista y administrador público que no se percata o no escucha a sus asesores --embriagado como está porque comenzó el último año de su gobierno y abundantes opositores le auguraron “sólo un día” con la banda presidencial--, que su reiterada denuncia es el reconocimiento, involuntario, del fracaso de la estrategia militar y policiaca en Michoacán, puesta en juego en diciembre de 2006.

Cinco años después resulta que el crimen organizado pagó espacios en diarios como AM, en los que se amenazó a los votantes de Acción Nacional en tierras tarascas. Una pregunta obligada: ¿La reacción del comandante supremo de las fuerzas armadas sería la misma si el favorecido fuese el PAN? Me temo que no. Y si me apuran tampoco del Partido de la Revolución Democrática o de cualquier otro.

“Porque nunca lo había visto tan evidente”, jura el preocupado titular del Ejecutivo y verdadero jefe del Ministerio Público federal, al que usa y abusa para fines políticos y electorales, como lo evidenció el llamado michoacanazo, próximo a reeditarse contra los priístas en otros estados, según prevé Francisco Labastida.

Las documentadas denuncias periodísticas sobre la intervención del narcotráfico en procesos electorales datan de los tiempos en que Tomás Yarrington gobernó Tamaulipas (1999-2004) y, antes, cuando Luis Donaldo Colosio fue asesinado en 1994. ¿Dónde estaba Calderón que a la luz de sus preocupaciones al parecer no se enteró?

No le falta razón a Andrés Manuel López Obrador, cuando advierte ante empresarios de Yucatán, con todo y su nuevo estilo cuidadoso y numerosos encuentros exitosos con representantes de la iniciativa privada, que es preciso “proceder si se tienen pruebas, si se tienen elementos. Ésa es la obligación de cualquier ciudadano, mucho más de una autoridad”.

Y si el guerrerista michoacano de Morelia no procede y se refugia en la reiteración discursiva, acaso es que algo trae entre las manos en contra de partidos y candidatos de las oposiciones, pues se resiste a entregar la banda tricolor a un candidato no panista, como todo apunta que sucederá.

Acuse de recibo

El fotógrafo Joel Merino informa que el día 7, “unos tipos armados ingresaron al local del portal LadoB (periódico digital editado en Puebla), donde laboramos y fuimos víctimas de la delincuencia creciente en este país; amagaron a tres de nuestros compañeros y los hicieron que se tiraran al piso. Iban con armas de fuego y blancas, afuera los esperaban no sabemos cuántos más. Se llevaron todas las computadoras, eran puras personales, nos dejaron sin herramientas de trabajo. Afortunadamente nadie salió herido, sólo crisis nerviosa. Llegaron los cuerpos policiacos minutos después y se fue a la PGJ a levantar la respectiva denuncia (...) seguiremos laborando con mas ahínco y denunciando estas atrocidades”... En Culiacán, informa Cepet, “El sitio de internet del semanario Ríodoce, que circula en los 18 municipios de Sinaloa, fue hackeado el 25 de noviembre en un acto que Ismael Bojórquez Perea interpreta como un ataque a la libertad de expresión”... Católicos que utilizan los servicios de la parroquia de Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús –Plan de San Luis 485, colonia Nueva Santa María, Azcapotzalco, DF– denuncian que el presbítero Arnulfo Oviedo Mercado y dos de sus hermanos que la administran, todavía no colocan los identificadores en los nichos que guardan las urnas con las cenizas de sus seres queridos, servicio pagado hace tres años.

forum@forumenlinea.com
www.forumenlinea.com

No hay comentarios.:

Publicar un comentario