11/28/2012

Los periodistas pal cafe...



De acuerdo con un imparcial, objetivo y hacendoso cronista tuitero de apellido Videgaray, muy bueno resultó el saludo de paso que con gran entusiasmo realizó ayer el mexicano Enrique Peña Nieto en Washington.
Quince minutos de presentación privada ante Barack Obama, quien hizo esfuerzos de cortesía para dar paso a temas ajenos a lo que realmente importa hoy al poder estadunidense respecto a México: la seguridad, en especial la fronteriza. Amable, el miembro del partido demócrata que va por su segundo periodo presidencial dijo saber que hay otros temas importantes en la agenda del mexiquense afamado por sus casi heroicos esfuerzos en pro de una condición bilingüe mínima. Una agenda muy ambiciosa, dijo el estadunidense entre asombro y admiración, al saber que el visitante no se interesaba solamente en asuntos de seguridad.
Recíproco, el visitante QuePeNi (seudotraductores de mala leche, absténganse de intentar falsos juegos de ingenio llevados al inglés) emitió una categórica y estremecedora declaración de apoyo al anfitrión que más bien parecía medio distraído en el manejo del mundo: él, Peña Nieto, está dispuesto a respaldar los esfuerzos que Obama realice en su país, conforme a sus leyes y procedimientos y en función de sus órganos decisorios, para regularizar el asunto de los migrantes indocumentados. Nada de ir a exigirle al presidente de Estados Unidos, sino ofrecerle apoyo y colaboreishion.
Fuentes confidenciales, que pidieron a este columnista guardar en el anonimato su inexistencia, revelaron que a partir de esta noche en la recámara principal de la Casa Blanca su ocupante varón podrá al fin dormir a pierna suelta, al saber que cuenta con el brazo fuerte de su vecino sureño. Otras fuentes de inclasificable nivel, caracterizadas por redactar impecables boletines de prensa individualizados que luego llegan a alcanzar la categoría cuasidivina de trascendidos, regalaron a esta columna la profunda observación de que en Washington hubo un breve pero extraordinario entendimiento frigorífico entre el mexicano que habitó tierras no cálidas y el Barack de Chicago, la ciudad de los helados vientos: si Chente y Bush compartían gustos vaqueros, Quique y Obama podrían estar hermanados y predestinados por el Espíritu Gélido. Empatía bajo cero. Te lo firmo y me congelo.
En México, mientras tanto, se atenuaba el escándalo del cerco a San Lázaro. De mañana fueron abiertas dos estaciones del Metro, se permitió la circulación en algunas calles y avenidas y se aflojó un poco la mano militar que había establecido un insensato círculo amplísimo de protección a una ceremonia sabatina de transmisión de poder que contra lo que cualquiera podría suponer no acarrea júbilo y despilfarro festivo, con un pueblo enloquecido de alegría por el cumplimiento de nuevos ciclos electorales, sino el atrincheramiento de los presuntos personajes festejables, el que se va y el que llega, obstinados en mantenerse lo más lejos que les sea posible de las muestras de sentimiento popular que podrían generar.
La marcha atrás en el experimento preatenquista se debió a la reacción indignada de una parte de la ciudad capital del país por ese despliegue retador de fuerzas y mecanismos de control y represión. Oportunamente, diputados perredistas encabezados por el súbitamente guerrillero Silvano Aureoles, miembro del Frente Amalista de Enriquecimiento Nacional, se lanzaron con desconocida intrepidez a derribar algunas de las vallas que horas atrás ya había ordenado desmontar el vicepresidente político y policiaco (VicePoPo), Miguel Ángel Osorio Chong, quien además se permitió augurar que no habrá excesos este sábado de doble protesta (la protocolaria, de EPN ante legisladores, y la del 132, Morena, sindicatos y organizaciones y sindicatos en San Lázaro, el Ángel de la Independencia y las inmediaciones del Zócalo).
A la distensión íntima contribuyeron panistas y perredistas que en la noche del lunes anunciaron, con aires de sacrificio patriótico que las generaciones venideras comprenderán (pero las cúpulas actuales cobrarán), que andan en tratos para firmar un dizque acuerdo nacional que en aras de superiores propósitos (¡Por Mexicoooooooo!) les permita a todos entenderse en el presente, apoyarse en el futuro inmediato y repartirse desde ahora rebanadas de pastel político sexenal.
Para los panistas no es sorpresa este neodieguismo que, al igual que Fernández de Cevallos con Salinas de Gortari en 1988, hace redituables arreglos bajo la mesa para apoyar al que ahora se ha encaramado en la silla presidencial. Pero, para los perredistas... bueno, tampoco es sorpresa para el chuchoperredismo que hoy domina la estructura del sol azteca. Aun así, los adversarios de los jesuses de la Nueva Izquierda, con el bejaranismo al frente, aprovecharon para lanzarse contra el dirigente formal del PRD, Chucho Zambrano, que sin consultar a la comisión política de ese partido había anunciado con aires solemnes la decisión de firmar acuerdos con otras fuerzas políticas y con el equipo de transición gubernamental, todo lo cual había sido negociado sin informar a los correspondientes órganos de dirección. Luego de lo que según algunos de los asistentes fue un regaño a Zambrano, la mencionada comisión política condicionó la firma del acuerdo a que haya claridad y precisión en los posibles logros.
Apresurado porque ya al final de este viernes no tendrá tanta resonancia con sus ocurrencias, el comandante Calderón hizo una de sus postreras bromas desde el poder mal habido. Luego de ocupar Los Pinos durante un sexenio merced a una ínfima diferencia oficial de votos que siempre estuvo bajo acusación de provenir de un fraude electoral, el Señor del 0.56 por ciento envía una iniciativa de reformas legislativas (que obviamente no tiene tiempo ni sustento político para avanzar) para que haya segunda vuelta en las urnas cuando uno de los contendientes por la Presidencia de la República no obtenga 50 por ciento de los sufragios posibles. ¡Hasta mañana!
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Existe un cálculo de que el gobierno de Peña Nieto necesitará 800 mil millones de pesos anuales –además del presupuesto de 3.7 billones de pesos actual– para llevar a cabo todas las cosas que tiene en la agenda. ¿De dónde sacarlos? Hay varias vías: la privatización de Pemex, las líneas de crédito nacional e internacional, el alza de impuestos. Para todo necesitará la autorización del Congreso, pero por la vía exprés, sin jaloneos, lo más tersamente posible. ¿Qué mejor que inventar un pacto que firmen, para comenzar, los tres principales partidos políticos: PRI, PAN y PRD? Más adelante pueden sumarse inclusive los representantes de algunas organizaciones del sector privado. El PRI no es problema ni el PAN, y ahora tampoco el PRD; está controlado por los chuchos, ya sin la molesta presencia de Andrés Manuel López Obrador. Así que jubilosamente anuncian que se disponen a firmar el pacto como una muestra de que las fuerzas políticas anteponen sus diferencias por el bien supremo de la patria (¡gulp!). Será El buen fin de los chuchos a meses con intereses.
El breve espacio
Fueron contados los minutos que duró la reunión del presidente Obama con Peña Nieto en el salón Oval de la Casa Blanca. Tenía el compromiso de reunirse con pequeños empresarios. Está en plena campaña para demostrar las bondades de su propuesta fiscal: bajar los impuestos a las clases medias y subirlos a los millonarios. Los mensajes que tuiteó ayer se refirieron a ese tema, no a la visita del político mexicano. Haciendo a un lado este pequeño detalle, la reunión fue cordial, dice su equipo de campaña.
Señuelos
Como nadie –o pocos– peló su propuesta de cambiarle el nombre a México, la cual, sin duda, tenía la intención de distraer a la opinión pública del estado lamentable en que entrega la administración del país, ayer tuvo otra ocurrencia: instaurar la segunda vuelta electoral. Le quedan dos días y horas en Los Pinos… le convendría más revisar si sus maletas están bien empacadas y también si está listo el vuelo privado en que saldrá del país.
Nuevo dueño de Afore Bancomer
La banca española continúa desprendiéndose de sus propiedades en México y otras partes del mundo. Actúa bajo la presión de la escasez de capital de sus oficinas centrales. BBVA Bancomer anunció ayer que vendió su afore a Afore XXI Banorte en mil 600 millones de dólares.



El saliente inquilino de Los Pinos asegura que a lo largo de su estancia en la residencia oficial he actuado al tope de mis capacidades, las cuales, dados los resultados ofrecidos, a todas luces no son muchas. Si la primera mitad de la docena trágica panista fue de vodevil, la segunda fue verdaderamente desastrosa, y esa es su negra herencia.
Como bien señala el Centro de Investigación en Economía y Negocios del Instituto Tecnológico de Monterrey, campus estado de México, que dirige José Luis de la Cruz Gallegos, el legado de pobreza, precarización laboral, bajo crecimiento económico, corrupción y violencia han marcado una administración que no logró definir y aplicar una estrategia exitosa en materia económica, política y social. A pesar de contar con recursos extraordinarios, principalmente por el elevado precio del petróleo, el sexenio que está por concluir ha debido remar a contracorriente tanto de eventos externos como de sus propios errores.
El primero de ellos fue dar prioridad a una lucha armada contra la delincuencia, con un balance igualmente desastroso, y dejar a un lado la preparación e implementación de una política económica y social que permitiera enfrentar la crisis de 2009. “Al minimizar la magnitud de la recesión (recuérdese el catarrito), y privilegiar el combate contra el crimen altamente organizado y enraizado en la propia estructura de la administración pública, Felipe Calderón selló su destino. La contracción económica debilitó, una vez más, a la sociedad mexicana, condenándola a una precarización no vista desde 1995. Si bien el país logró ‘crecer’ a partir de 2010, ello no necesariamente ha llegado al bolsillo de la población; los bajos salarios se han hecho parte de la lógica con la que se maneja la política monetaria y la propia empresa”.
Cualquier planteamiento que esboce al aumento de los salarios como mecanismo para impulsar el mercado interno inmediatamente choca con los argumentos de aquellos que temen a la inflación y no a la pobreza, señala el citado centro de análisis. Los estrategas de la política económica son insensibles ante la marginación en la que viven más de 57 millones de connacionales (hasta 2010). Al equivocarse en diagnosticar la crisis se condenó al gobierno saliente: el resto de su administración se avocó a la administración de los daños.
Al perder el rumbo económico y social también se limitó el manejo político. El sexenio comenzó con marcados signos de debilidad, producto de una elección fuertemente cuestionada por algunos segmentos de la sociedad. La crisis terminó de minar la gestión de Calderón, ya que lejos de poder consolidar una sólida base social, la elección de 2009 acabó por señalar que su gestión no era bien evaluada por la ciudadanía y que por el contrario el peso electoral comenzaba a respaldar a la oposición. Las elecciones estatales y municipales terminaron por consolidar dicha tendencia y al final del día le restaron poder de negociación al presidente.
Tomar el camino de la lucha contra el crimen organizado también tuvo un costo para la administración pública, personas inocentes fueron alcanzadas por la violencia y si bien se tiene claro que la delincuencia debe combatirse, no existe consenso sobre que el adoptado sea el mecanismo adecuado. La estabilidad del castillo de naipes depende de Estados Unidos, mientras su economía funciona, la actividad productiva mexicana también lo hace; el problema es que en los próximos meses la desaceleración volverá a exacerbar los desequilibrios nacionales antes mencionados, por lo que la herencia para el siguiente gobierno le obligará a realizar redefiniciones esenciales.
El crecimiento económico exhibido por México durante el sexenio demuestra la incapacidad del aparato productivo para generar elevadas tasas de crecimiento que se traduzcan en un mayor desarrollo social del país y, en consecuencia, en un incremento en el nivel de bienestar para la población. En este sentido, para todo el sexenio se aprecia una modesta tasa de crecimiento, cuyos resultados son heterogéneos: concentración de la riqueza en un sector privilegiado, en contrasentido con un deterioro del bienestar social de millones de mexicanos. En síntesis, como apunta el CIEN, la política calderonista fue cambiar de nombre cuando no se puede transformar la realidad.
La problemática del sector público mexicano no es la insuficiencia de recursos, sino la mala administración de los mismos y el crecimiento exponencial del gasto destinado a actividades que generan menor valor agregado: gasto corriente creciente y poco productivo. De tal forma, se logra apreciar un cierre de sexenio que deja como resultado una relativa estabilidad macroeconómica a costa del deterioro en la situación financiera y social del país. Los requerimientos financieros del sector público ascienden a 5 billones de pesos (89.5 por ciento más con respecto a 2006).
Además, como consecuencia de la crisis financiera de 2008, se aprecia una reducción en los ingresos federales, aspecto que no se ha visto compensado con una moderación en el gasto; de tal forma, desde dicho periodo el balance del sector público es negativo. Tal situación demanda el uso de deuda para cubrir los excesos de un costoso e ineficiente aparato burocrático, aspecto que se ve reflejado en el endeudamiento exhibido a nivel estatal.
En lo que respecta a la situación financiera del sector público, el CIEN indica que se observa un incremento de 55.8 por ciento en términos reales de los ingresos gubernamentales, en tanto que se aprecia un alza sostenida del gasto corriente real (83.3 por ciento). Si bien se aprecia un incremento considerable de la inversión física (185 por ciento), ésta continúa representando una mínima parte del gasto gubernamental. En materia fiscal se aprecia un buen desempeño del IVA al igual que el ISR, sin embargo, dicha situación no se extiende al caso del IETU, impuesto implementado en la presente administración y que lejos de generar ingresos superiores, ha impactado sobre la productividad de las empresas. Caso similar ocurre con el IDE.
Las rebanadas del pastel
Cercana ya la designación del nuevo director del Instituto Politécnico Nacional (todo apunta a que Yoloxóchitl Bustamante no repetirá en el cargo), las candidaturas más sólidas son las del académico Marco Antonio Flores Sánchez, ex oficial mayor de la SEP y de Conacyt, y la de Raúl González Apaolaza, ex funcionario del gobierno de Hidalgo ligado a los Migueles (Núñez y Osorio Chong). Ya como inquilino de Los Pinos, Enrique Peña Nieto develará el misterio el mero día de la Guadalupana.

Se incumplió con recuperación de espacios aledaños al Metro Chapultepec, dicen
La Jornada nos informa: Tras ocho meses de restauración, la Alameda Central fue reabierta al público por el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, quien aseguró que el gobierno de la ciudad deberá trabajar para mantener este espacio libre de vendedores informales. Esta administración que está por concluir, no atendió la solicitud que a través de El Correo Ilustrado expresamos ciudadanos y la escultora Leonora Carrington: recuperación de espacios invadidos por el comercio informal, eliminación de paraderos de camiones y microbuseros contaminantes, limpieza en áreas verdes y remodelación de la estación del metro Chapultepec, lugar histórico de cultura y recreación, patrimonio de la ciudad de México.

Prácticamente al otro día de consumada la Independencia nacional arreciaron los debates sobre el porvenir del país. Los conservadores buscaron afanosamente mantener inamovible la identidad religiosa católica de la nación. Para tal propósito edificaron un cuerpo legal que vedaba la práctica pública de cualquier otra religión distinta al catolicismo. Veían con temor la posibilidad de que el protestantismo incursionara en México.

La élite financiera apoltronada en las instituciones públicas ha sido, ¡oh lugar trillado! carnal, virulentamente neoliberal. Y de ello se siente orgullosa hasta la médula, exhibiendo, sin pudor, sus posturas, con frecuencia reaccionarias, siempre conservadoras y presumidamente estabilizadoras para decirlo con mayor precisión. Tal claque se ha formado en los silencios y resguardos del Banco de México, la Secretaría de Hacienda y en universidades del extranjero, en especial las de Estados Unidos. Antes, la mayoría de los que ahora ya son viejos, al menos egresaban de la UNAM. En el presente y desde hace ya varios años, el ITAM los ha ido substituyendo como matriz formadora. La influencia que esparcen sobre los grupos políticos no se pone en tela de juicio. Por el contrario y en no pocos casos, se han encaramado sobre el liderazgo político hasta obligarlo a seguir sus dictados. Cuentan, para tal menester, con el apoyo que les brindan los operadores y santones de los centros neurálgicos de las finanzas mundiales. Son, estos últimos personajes, sus guías, avales y los usufructuarios mayoritarios de casi todas sus decisiones.

Hace 15 días publiqué en este periódico un llamado a cambiar nuestra actitud hacia la mariguana que tuvo alguna resonancia (14 de noviembre, ¿Y si nos enorgullecemos de la mariguana?). Muchos de los comentarios que recibió el artículo fueron positivos y, claro, hubo también algunos críticos. Me importa discutir uno de los puntos que traen los críticos, y es la supuesta falta de seriedad de la propuesta.

Nuevos vocablos van y vienen. Algunos son ocurrencias banales que después de ponerse de moda, rápidamente caen en el olvido. Pero he aquí un término que será difícil olvidar: fracking. Desgraciadamente no es portador de buenas noticias.

Al fin lo exhumaron. Ironía de ironías. Toda su vida, Yasser Arafat temió ser asesinado y con justa razón. Los israelíes intentaron bombardearlo desde el aire en Beirut en 1982, pero alguien alertó al señor Palestina, y la bomba israelí mató, como ocurre con tanta frecuencia, a todos los civiles que estaban en el edificio impactado. Muchos de sus colaboradores más cercanos fueron asesinados, como Abu Jihad, por ejemplo, muerto a manos del Mossad. ¿Pero en verdad habrán querido matarlo los israelíes hace ocho años? ¿Con polonio 210?

Algo deben tener los versos que una generación y otra y otra más los leen con el mismo asombro. Con ese asombro antiguo que nos provoca el fuego y que fue muy similar al que percibieron los primeros hombres. Sólo así entiendo un poco, y solamente un poco, que algunos poemas nos sigan iluminando como la zarza ardiente, que hablen desde quién sabe y que sepamos que nos hablan a cada uno de nosotros.


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