7/31/2012

Reivindican derecho a una vida sin acoso

“Ni fea, ni hermosa, la mujer no es una cosa”, la consigna


Por Anayeli García Martínez

México, DF, 30 jul 12 (CIMAC).- Con antifaces en el rostro y silbatos en la mano, un grupo de mujeres se unió en el grito “Mujer, despierta, la calle también es nuestra”, para reclamar su derecho a transitar libremente por la ciudad sin temor a ser víctimas de agresiones sexuales.

La tarde del pasado viernes un contingente de mujeres que participó en el “Encuentro Internacional de Ciudades Seguras para las Mujeres” –que se realizó el 26 y 27 de julio– organizó una caminata simbólica por el Centro Histórico de esta capital.

Las mujeres salieron del Club de Periodistas en Filomeno Mata y recorrieron Francisco I. Madero, calle que desemboca en el Zócalo capitalino y una de las principales vías por donde transitan los movimientos sociales cada vez que hay una marcha en esta ciudad.

La frase “Ni fea, ni hermosa, la mujer es una rosa” se escuchó en medio del sonido de los silbatos que portaban las mujeres, quienes se encontraron con turistas, transeúntes y jóvenes con pancartas con la leyenda “Se regalan abrazos” que se unieron a la consigna.

Las manifestantes repudiaron de manera festiva un contexto cotidiano en el que la mayoría de las capitalinas caminan por calles oscuras e inseguras, e incluso se topan con hombres que las insultan por su forma de vestir, las acosan, les roban sus pertenencias, las violan o las secuestran.

De acuerdo con el Programa Viajemos Seguras del Distrito Federal –que abarca el Metrobús, la Red de Transporte de Pasajeros y el Sistema de Transporte Colectivo Metro–, del 3 de enero al 30 de noviembre de 2011 los módulos de atención de quejas recibieron 270 casos de agresiones contra mujeres: 217 por abuso sexual, 34 por violencia sexual, 7 por acoso sexual y 12 por violación sexual.

“Ni fea, ni hermosa, la mujer no es una cosa”, gritaron las activistas para evidenciar que a las mujeres se les trata como objetos cuando son víctimas de tocamientos en el cuerpo, miradas, palabras, o expresiones corporales ofensivas con fines sexuales.

Las mujeres caminaron por esta calle peatonal para atraer la atención de la gente y hacer ver que todas y todos deben participar para construir “una ciudad segura para las mujeres”, pues no sólo se trata de la autoridad sino también de la ciudadanía.

Sin pena, las activistas invitaron a las y los paseantes a unirse a su caminata y una vez en el templete instalado antes de llegar al Zócalo, bailando y cantando se apropiaron del espacio público para hacer de la defensa de sus derechos una verbena.

Esta vez la consigna fue un alto a los casos de abuso sexual porque como dijo una de las mujeres: “Tenemos derecho a salir con escote o falda sin ser acosadas”.

DF Y EDOMEX: LUGARES DE CUIDADO

El 15 de enero de 2011, una mujer de 60 años fue golpeada y violada por tres hombres en calles cercanas a la delegación Gustavo A. Madero.

El 19 de enero del mismo año, una joven de 20 años salió de su domicilio en Ecatepec, Estado de México, con rumbo a su trabajo, y fue amagada por un hombre con un arma y violada en un terreno baldío.

Ambos casos forman parte de las estadísticas reportadas en los módulos de atención del Programa Viajemos Seguras, donde hay personal que da acompañamiento y asesoría jurídica a las víctimas de estos delitos.

En su recorrido, las activistas se encontraron con personas que fueron indiferentes a su manifestación, pero también mujeres y hombres que las escucharon y uno que otro joven que alzó el puño en señal de solidaridad.

Al final de la protesta, el Instituto de las Mujeres del DF y la Colectiva Ciudad y Género –quienes organizaron la caminata– pidieron ciudades con perspectiva de género, donde las habitantes no vivan con el temor de ser agredidas cada vez que salen de sus casas.

“A las dos de la mañana… que bonito es volar… a las dos de la mañana”, cantó Rocío Jaramillo, la mujer que hizo callar al organillero para deleitar a un público femenino que se dijo harto de la discriminación y la violencia de género.

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