Lo anterior se desprende de información a la que Apro, la agencia de información de la revista Proceso tuvo acceso a través de la plataforma Mexicoleaks.
Desde el pasado mes de agosto, estos funcionarios –muchos de ellos tienen títulos de doctores– incorporaron cientos de personas en padrones de programas sociales –a cambio de su credencial de elector–, entregaron tarjetas que supuestamente se activarán en el caso de un triunfo del PRI, e incluso llevaron a ciudadanos a recibir dinero en la Casa del Estado de México. Lo anterior, durante horas y días laborales.
Los doctores registraron cada entrega de tarjeta y cada “reclutamiento” de un nuevo operador en una plataforma electrónica, la cual no tiene nombre ni logotipo y es inaccesible mediante un motor de búsqueda. Dos estrictos filtros de identificación protegen su acceso.
En esta plataforma aparecen los nombres y datos personales de los operadores que se movilizarán el día de las elecciones en la zona 13 de Ecatepec –identificados como “profesores”–, así como de las personas que los acompañarían –sus “alumnos”–.
Bajo las instrucciones de José Luis Pérez Cortés, jefe de la jurisdicción de regulación sanitaria n°13 en Ecatepec, y la supervisión de la doctora Elizabeth Dávila Chávez, directora general del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), cada funcionario heredó una “comunidad” de la que se convirtió en “procurador regional social”.
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Documentos internos de este grupo, filtrados a Apro a través de Méxicoleaks, exhiben los métodos de una célula operativa del PRI, formada por funcionarios del sector salud y circunscrita a una zona de Ecatepec.
Sin embargo, esos mismos documentos arrojan indicios de que el PRI replicó este esquema en un territorio mucho más amplio e involucró a otros sectores del gobierno para la captación de votos del próximo 4 de junio: en la maquinaria electoral priista existen, por lo menos, mil 832 “procuradores regionales sociales” similares a los 30 funcionarios que operan en la “Zona 13” de Ecatepec –la cual incluye 17 colonias–.
Entre los servidores públicos destacan los doctores Rocío Rangel Gómez, subdirectora de Atención Médica en el ISEM; Víctor Manuel Guzmán Espinosa, director del Hospital Las Américas, en Ecatepec; o Nancy Teresa Jordán González, directora del Hospital General “Dr. Maximiliano Ruiz Castañeda”, de Naucalpan. Los demás tienen cargos de subdirectores, jefes de departamento, coordinadores y administradores en el sector de salud pública estatal.
Este domingo, “día de la fiesta”, los doctores tendrán que votar temprano y operar durante todo el día en Ecatepec, un municipio clave para el PRI en el Estado de México: cuenta con un millón y medio de votantes –el mayor padrón electoral de México– y sufre de los peores índices de inseguridad y pobreza del país.
Las encuestas de opinión consideran que Del Mazo, el primo de Enrique Peña Nieto, se encuentra en empate técnico con su rival Delfina Gómez, del partido Morena.
Por ello, cualquier falla en la ingeniería electoral del PRI durante el “Día D” podría costarle el control de la entidad –que ha gobernado de manera ininterrumpida durante más de ocho décadas–, y reducir de manera significativa sus probabilidades de ganar las elecciones presidenciales de 2018.
Ensayo general para el “día D”
La Alianza Méxicoleaks pudo acceder a la plataforma secreta del PRI gracias a una serie de nombres de usuarios y contraseñas que fueron proporcionados a los doctores en un archivo de Excel en septiembre pasado.
Anoche, la plataforma contaba con solo dos secciones, tituladas “Circuitos” y “Cables”. En la primera aparece el número de tarjetas entregadas por cada procurador general social en su “comunidad”, desglosadas en tres categorías según su color.
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Durante la campaña de Del Mazo, el PRI repartió tres tipos de tarjetas en el Estado de México: la roja corresponde a la tarjeta “Con Todo” y está destinada a los varones, la rosa se refiere a la “Salario Rosa”, exclusiva para las mujeres, y la verde es “La Fuerte”, que fue distribuida entre los militantes priistas.
La sección “Cables” contiene los datos personales –número de teléfono y, a veces, dirección– de los “profesores” y sus “alumnos”. Las tablas indican que cada profesor tiene 10 alumnos asociados, y la plataforma establece metas en el número de alumnos que conseguir para cada procurador social.
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Para medir la eficiencia de la maquinaria electoral, el PRI realizó un “simulacro” de las elecciones el sábado pasado, y allí destacó el papel de los “profesores” y “alumno” del sistema.
A las 9:30 de la mañana arrancó el sistema que los funcionarios del sector salud afinaron durante cerca de un año: cada uno de los “procuradores” llamó a sus “profesores” y les “invitó” a que no se olviden de su apoyo durante “el día del Congreso”, el nombre clave para las elecciones.
Registraron, en un archivo de Excel, las llamadas exitosas y las que fracasaron, e ingresaron en el documento los nombres de los “profesores y alumnos”. El ejercicio terminó a las 13:00.
Posteriormente, operadores priistas llamaron a los “profesores” para verificar que los “procuradores” cumplieron con su trabajo. “Les preguntan que si el procurador estuvo con ellos, y les están preguntando si están listos para el ‘día del congreso’, que cuántas personas traen”, informó la doctora Danniella Rodríguez Baeza en un mensaje de audio que subió al grupo de Whatsapp, minutos después de acabar el ensayo.
“Ecatepec 13”
El 20 de agosto de 2016, el doctor Miguel Ángel Muñoz Hernández, titular del área de Control de Gestión del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), creó un grupo de discusión en el servicio de mensajería Whatsapp, al que llamó “Ecatepec 13”.
Durante los siguientes meses, este grupo se convirtió en el canal de comunicación permanente entre Muñoz y los “procuradores sociales”, según el historial de los 10 meses que lleva la conversación –el último mensaje está fechado al día de ayer–, obtenido a través de la plataforma Méxicoleaks.
El doctor Muñoz empleó el servicio de mensajería electrónica para asignar tareas, citar a reuniones, recordar las metas por alcanzar, regañar a sus “procuradores” o quejarse de la mala coordinación con los operadores del municipio.
El día que Del Mazo lanzó su campaña –el 20 de enero– los “procuradores sociales” recibieron el formato único de registro del programa “Mujeres que Emprenden en Grande” –operado por la Secretaría de Desarrollo Social mexiquense–, con la instrucción de afiliar mujeres de entre 25 y 50 años, a cambio de la copia del INE –“al 200%”, insistió– y de la CURP.
Las mujeres quienes fueron incorporadas al programa recibieron posteriormente tarjetas de “Salario Rosa”. A inicios de febrero, Muñoz indicó que éstas podían acudir a la Casa Estado de México, donde recibirían dinero y tarjetas.
Los operadores llevaron decenas de ecatepenses a ese lugar, pero los funcionarios del Consejo Estatal de la Mujer –quiénes repartieron el dinero– se tardaron más de dos horas en llegar, y la gente se puso “muy molesta”.
El 24 de enero, Geovanny Adrián Garay Pichardo, quien funge como verificador sanitario en Ecatepec, preguntó a Muñoz: “Doctor, unas personas dicen q (sic) si quieren participar pero están identificadas de otro partido he (sic) insisten que son rojos y no! ¿Les doy la vuelta o q (sic) procede ?”.
La respuesta de Muñoz no tardó en llegar: “Dales el avión pero no los cortes de manera grocera (sic)”. Una semana más tarde, el mismo Muñoz recordó a los “procuradores” que “deben alcanzar su meta (del programa) 25-50 al 100% sin escusas”.
Voto color rosa
En las discusiones de Whatsapp aparecieron los contactos de mujeres que recibieron tarjetas “Salario Rosa”. Dos de ellas confirmaron, en entrevista telefónica, que recibieron el plástico.
“Lo que pasa es que yo estaba en unas despensas (sic) y ahí en las listas apareció mi nombre. Por eso aparecí para ser afiliada a la tarjeta rosa”, aseveró una de ellas, cuya identidad se reserva.
La señora, afiliada al PRI, explicó que una de sus vecinas –también priista– repartía las tarjetas, pero precisó que “a ella se las daban para que se las diera a la gente”.
Subrayó que si bien no le pidió su credencial de elector a cambio de la tarjeta rosa, para recibir la despensa “el gobierno nos pedía una copia del IFE, con nuestro número telefónico, cada mes nos daban la despensa, dábamos la copia del IFE”. Aseguró que, al ganar Del Mazo, la tarjeta se activará con dinero.
-¿Usted va a ser funcionaria de casilla o va a ser observadora?, se le preguntó.
-Sí, voy a ser movilizadora.
-¿Eso qué significa?
-Haga de cuenta que voy a invitar a la gente para que vaya a votar, sin mencionar a ningún partido. Yo simplemente voy a buscar a la gente.
La segunda, cuyo nombre también se reserva, recibió la tarjeta rosa hace aproximadamente dos semanas. Cuestionada si sabía cómo funcionaría “Salario Rosa”, declaró: “nada más me dijeron que luego me iban a hacer el cambio, que nada más era como para tenerla y después me avisaban cuándo sería el cambio”.
-¿Y de qué dependía que se la cambiaran?, se insistió.
-De eso ya no me dijeron nada.
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Documentos de Méxicoleaks. Foto: Especial
Contactados en la noche del jueves vía telefónica cinco “procuradores” –entre ellos Muñoz– negaron formar parte de un plan de acción política del PRI y colgaron tan pronto cuando se enteraron del motivo de la llamada.
El doctor Hugo David Luna Sandoval, jefe del Departamento del Adulto y del Anciano en el Instituto de Salud del Estado de México, no dejó al reportero el tiempo de terminar su pregunta, y aseveró: “No, a ver, a ver, antes de que sigas, no tengo nada que decirte, si quieres alguna situación (sic), habla al Instituto por favor”.
En uno de sus mensajes más recientes, enviado el martes pasado, Muñoz recordó que por instrucciones del “SS” –el Secretario de Salud en la entidad mexiquense, César Gómez Monge–, los doctores del grupo “Ecatepec 13” debían enviar un correo electrónico con el nombre de dos personas que acudirán a votar “por quien estamos apoyando” y que cada formato incluya el nombre del “procurador”, la sección y la clave de elector.
El aviso tenía un “carácter urgente”, advirtió.