2/08/2016

Los periodistas pal café . . .




El arzobispo de Oaxaca, José Luis Chávez Botello, cumple hoy 75 años de edad y, por tanto, pondrá su cargo a disposición del papa Francisco, conforme lo establecen las reglas de su iglesia. La salida, y el nombramiento de un sucesor, no son obligatoriamente inmediatos (múltiples casos hay en los que prelados en esa situación cronológica han sido sostenidos desde el Vaticano durante varios años. En Morelia, por ejemplo, Alberto Suárez Inda cumplió los 75 en enero de 2014, presentó su renuncia protocolaria, que no le fue aceptada, y en enero del año siguiente fue nombrado cardenal, con Francisco pidiéndole que aguantara).
Pero el expediente de Chávez Botello demanda del pontífice jesuita una acción rápida y ejemplar, frente a la larga y obcecada protección que dicho arzobispo ha dado a Gerardo Silvestre Hernández, un presbítero acusado de pederastia al que el jerarca oaxaqueño durante años sólo fue cambiando de parroquias en la entidad, hasta acumular cuando menos 45 casos de agresión sexual contra niños y adolescentes de comunidades indígenas (el tema fue dado a conocer el 4 de junio de 2012 como nota principal de La Jornada, bajo la firma de este tecleador http://goo.gl/v37KY3).
A diferencia de otros señalamientos abiertos contra sacerdotes que han abusado sexualmente de menores de edad, en los que han sido familiares o amigos de las víctimas, o estas mismas, quienes han exigido justicia, en Oaxaca las acusaciones más trascendentes provinieron de un grupo de curas que fueron escuchando de feligreses de zonas indígenas los relatos del andar sexualmente depredador de Silvestre Hernández. Los primeros hechos sucedieron en 2006, y el arzobispo Chávez Botello escuchó personalmente en 2009 la firme denuncia al respecto que le presentaron siete presbíteros (Manuel Arias Montes, Sergio Herrera Arias, Miguel Ángel Morelos García, Jorge Pérez García, Juan Antonio Jiménez, Guillermo Velázquez Gordillo y Juan Ruiz Carreño, a los que luego se agregaron David Elías Mendoza Maldonado, Leoncio Hernández Guzmán y Ángel Noguera), quienes demandaban a su superior que frenara a su protegido e iniciara un camino institucional de justicia.
El tema fue procesado silenciosamente en las estructuras eclesiásticas, llegando hasta la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, sin que se produjera respuesta positiva para denunciantes, familiares y víctimas (incluso, en 2010, Benedicto XVI nombró obispo de Tehuantepec a Óscar Campos Contreras, quien había conocido los hechos en Oaxaca, siendo obispo auxiliar, y se había mantenido alineado a la postura de protección al pederasta Silvestre Hernández). Hasta que en 2012 se presentaron las primeras denuncias públicas por familiares de quienes habían sufrido esos abusos.
Y así fue que en mayo de ese 2012, a seis años de las primeras quejas ciudadanas y a tres de la denuncia inequívoca hecha por sacerdotes ante el arzobispo Chávez Botello, fue suspendido de su ministerio religioso el mencionado Silvestre Hernández, quien fue aprehendido a finales de 2013 por policías estatales, bajo el cargo de corrupción de menores de edad, aunque el proceso se ha llevado con gran lentitud y bajo señalamientos de organizaciones civiles de que hay contubernio entre el gobierno de Gabino Cué y el arzobispado para sobrellevar el caso del cura pederasta y eventualmente tratar de exculparlo. Ya en el retiro, como arzobispo emérito, Chávez Botello debería enfrentar judicialmente las evidencias de encubrimiento, o de los delitos que pudieran configurarse, a partir de la abierta protección hacia quien le ha sido muy cercano, el mencionado Gerardo Silvestre Hernández, lo que permitió la continuidad de los ataques sexuales de éste contra casi medio centenar de niños y jóvenes indígenas oaxaqueños.
En San Luis Potosí, mientras tanto, el reportero Jaime Nava entrevistó a Alejandra (nombre ficticio), quien a los 15 años de edad fue violada por el sacerdote católico Noé Trujillo. La denunciante, acompañada de su madre, declaró a La Jornada San Luis (la nota, en lajornadasanluis.com.mx) que de ese abuso supieron otros dos presbíteros (Gilberto Alvarado y Ramón Gómez), quienes encubrieron al primero. La denuncia judicial presentada por Alejandra ha sido obstruida y algunas pruebas se han perdido, a decir de la quejosa. En esa entidad también siguen impunes los actos de pederastia cometidos por el cura Eduardo Córdova (contra unos 100 menores de edad), estrella de la diócesis potosina en cuanto a relaciones con los poderes político y económico de la entidad.
Por cierto, algunos ejecutivos de empresas privadas y empleados de confianza de oficinas públicas han reportado a esta columna que sus jefes les están obligando verbalmente a hacer vallas especiales en el Distrito Federal (que también así se le puede llamar a la CDMX) para prevenir que grupos de protesta puedan alterar aunque sea auditivamente el programa oficial del papa Francisco. Estos cuidadores deben llegar con muchas horas de anticipación, si es con familia propia, mejor.
Astillas
El pensamiento crítico de izquierda ha ido perdiendo a varios de sus mejores representantes en años recientes, en un proceso que a sus naturales tonos lamentables añade el hecho de que sea en estos tiempos cuando más se necesita del aporte de mentes lúcidas y respetables que den luz y rumbo a esa izquierda mexicana que vive una derrota histórica inocultable. Ayer cerró su ciclo Adolfo Sánchez Rebolledo, periodista, escritor, articulista de La Jornada y fundador de los partidos cuyas siglas son PCM, PSUM, PMS y PRD... Justo en el domingo en que, como a lo largo de 17 años, había conducido su programa La era del dinosaurio, en Reactor 105, estación de FM en el Distrito Federal (que DF sigue siendo), falleció César Alejandre, una voz distintiva de la radio mexicana, con reconocida especialización en el rocanrol. Alejandre fue locutor “en Radio Capital, en el periodo 1969-1988 y conductor de El dinosaurio de Radioactivo, a mediados de los 90s”... ¡Hasta mañana!
Twitter: @julioastillero, Facebook: Julio Astillero, Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx



No fue suficiente la disminución del presupuesto federal que está siendo ejercido este año –el famoso presupuesto base cero. Advierte el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, que es imperioso hacer ahora mismo un mayor ajuste, especialmente en Pemex. De otro modo, el proceso de ajuste sería mucho más largo y doloroso, donde nosotros tendríamos que aumentar más las tasas de interés. Tiene sustento una parte de su idea: la carga del gobierno es pesada, y hoy se siente más porque llega menos dinero del petróleo y el faltante lo quieren sacar de nuestros bolsillos. Lo difícil es ponerse de acuerdo en dónde meter tijera. Está prohibido por la Constitución hacer consultas públicas sobre los gastos del gobierno –típico de una democracia quintopatiera–, pero seguramente la ciudadanía estaría de acuerdo en hacer cambios drásticos como los siguientes:

El oro verde en el Super Bowl
El triunfador del Super Bowl 50 fue el aguacate mexicano. Volvió su espot de 5 millones de dólares con un sentido del humor muy gringo. Presentó al oro verde como una de las maravillas de la humanidad (¡y lo es!). La Asociación de Productores de Michoacán (Apeam) reporta que se movilizaron aproximadamente 95 mil toneladas, poco más de 24 por ciento que para el Super Bowl del año pasado, cuando fueron 76 mil 445 toneladas. Los grandes consumidores son Texas, California, Illinois, Arizona, New Jersey, Nueva York, Florida, Pensilvania, Massachusetts y Georgia. Hay toda historia detrás. Uno de sus capítulos recientes gira en torno a la presencia de las mafias que buscan parte del negocio.
Francisco no usará el nuevo avión
El Papa viajará a México en avión comercial de Alitalia y regresará a Roma por Aeroméxico. No utilizará el nuevo superavión de Peña Nieto, ni aparece en el programa que vaya a acudir al aeropuerto a bendecirlo. Acompañarán al jefe de la Iglesia católica alrededor de 200 periodistas, pero no gratuitamente, pagan los pasajes los medios que representan. Pugnan los funcionarios del gobierno mexicano por utilizar la imagen del Papa, pero les está resultando complicado. No empatan ni los estilos ni las personalidades.
No way, Mr. President
El presidente Obama inesperadamente propuso un impuesto especial de 10 dólares por barril de petróleo que se destinaría, entre otros fines, a la construcción de transporte urbano y automóviles robotizados. La industria trasladaría el gravamen al consumidor. La respuesta de personajes del Congreso y de la gente fue inmediata: no, señor Obama. El impuesto anularía el beneficio que están recibiendo los consumidores por el precio barato de la gasolina. ¡Sería tanto como seguir la vía mexicana! Aquí el diferencial que debería favorecer a las familias y las empresas lo expropia el gobierno vía impuestos.



Sinopsis: Pues que resulta que desde 2002, a instancias de unos jóvenes académicos egresados de la UNAM y la Universidad de Guerrero, y posgraduados en la Complutense de Madrid, da inicio una aventura a la que, los siete capítulos (y los dos que nos faltan) de la Guerra de las Galaxias quedan reducidos a una simplona excursión de boys scout.
La sola concepción de la idea ya resultaba, lo menos, desorbitada. La posibilidad de constituir en el huracán, fenómeno meteorológico de extrema violencia, un territorio, si no de amor y paz, sí de tolerancia, civilidad, diálogo y acuerdos esenciales, no dejaba de ser una de esas elucubraciones calificadas de guajiras, es decir, unos good wishes ilusos y tropicales. Sin embargo, las actuales investigaciones científicas, confirman la versión shakeaspearana, de que en el centro de la tempestad, siempre hay calma (Esta cita, por supuesto, es un invento de la columneta para ver si alguna reputada revista dedicada a la alta literatura le solicita profundizar al respecto). Pero lo que sí es más cierto e inatacable que un fallo del Tribunal Federal Electoral, es decir, es que El ojo del huracán, es siempre el lugar donde se registra la presión barométrica más baja de la tormenta. Así dice la enciclopedia consultada, en cuya oficina central un primo mío es el encargado de las fotocopias, aclaro, por si hay algún ácido comentario de los que nunca faltan, y que ponga en duda el acierto de haber creado en el centro de la tormenta –Acapulco– una ínsula tan exótica como el Instituto Internacional de Estudios Avanzados Manuel Altamirano. En la entrega pasada les mencioné a dos de sus ideadores, diseñadores y constructores: Rosa Icela Ojeda Rivera y Rogelio Ortega: su vida académica está ampliamente acreditada, pero lo que pienso le dio factibilidad al proyecto fue su probado enraizamiento con la realidad de su entorno. Ella fue secretaria general del PCM en Guerrero y becaria en la finada URSS.
Conocedores (no detractores) de las ideas de Genaro y Lucio supieron reflexio-nar y ayuntar los saberes académicos con las experiencias de la vida de a deveras la que, en el Guerrero de siempre, no puede implicar sino una actitud crítica y una postura protestataria. Su aportación fue, en un mundo de odio e irracionalidad, en un momento de condiciones objetivas adversas, haber encontrado una opción que no era la patología calderoniana de apagar el fuego con gasolina. No sé a qué políticos convencieron ni como superaron la burocracia universitaria que suele ser tan dura como las otras (y además doctoral), pero tan consiguieron su propósito que a finales de diciembre pasado realicé una hazaña de deporte extremo (escalada y rapel): me trasladé a la sede del multicitado instituto y disfruté un fin de semana largo platicando con la crema y nata del perredismo local. Este partido solicitó a esta institución, como pueden hacerlo todos los demás, un seminario de actualización de conocimientos sobre la normativa que rige los procesos electorales, y principalmente acerca de la emisión de propaganda política.



En un hecho inusitado en la historia de este país y que está provocando alarma en Wall Street, en los grandes medios, y por supuesto entre la cúpula política, un proclamado socialista goza del apoyo creciente de millones a lo largo y ancho de Estados Unidos.
¿Estados Unidos está listo para un presidente socialista? fue la cabeza de la nota principal de la edición estadunidense de The Guardian este fin de semana. Ataques y gritos de representantes y operativos del orden establecido –políticos nacionales de ambos partidos, comentaristas dizque muy sofisticados y de las páginas editoriales del Washington Post y otros medios– sólo han servido para comprobar que el socialista se está volviendo una amenaza real para ellos. Tal vez lo más revelador en ese sentido fue que uno de los generales más poderosos de Wall Street considera el surgimiento de este socialista un momento peligroso en la historia del país.
Aunque La Jornada ha reportado desde un principio sobre el precandidato presidencial demócrata Bernie Sanders, quien se identifica como socialista democrático, y su creciente impacto en el proceso electoral estadunidense, y hemos recordado que el socialismo no es un bicho extraño ni foráneo en la historia de este país (ver), aún es difícil digerir que algo así está ocurriendo en el país más poderoso y campeón histórico, hasta histérico, en la lucha contra el socialismo en el mundo.
No es menos difícil para los proclamados expertos institucionales de la realidad estadunidense aquí. Desde hace meses han insistido en que un aspirante presidencial socialista en Estados Unidos no tiene probabilidades de llegar ni cerca de la Casa Blanca. Pero cada día se siguen sorprendiendo, sobre todo la reina del Partido Demócrata Hillary Clinton, su equipo de profesionales y sus circuitos tan extensos dentro del poder. Nadie de éstos lo pronosticó y mucho menos se preparó para esta coyuntura, que sencillamente no cabía en su marco.
Cada día se asustan más. Operadores de la campaña de Clinton están intensificando sus esfuerzos para etiquetar de radical y por lo tanto inelegible a Sanders, y aliados ya empiezan a tener tintes macartistas, alimentando el debate de que el senador es algo más parecido a un comunista, y que sus ideas están fuera de lo aceptable para este país.
Sanders es lo que en cualquier otro país sería un social demócrata y no un socialista marxista, aunque disfruta convocar una revolución política para que el pueblo recupere la democracia que ahora está en manos de la clase millonaria y multimillonaria y de Wall Street que controla la vida económica y política de este país. Señala que comparte una ideología de tipo Franklin D. Roosevelt y su modelo son los países escandinavos y Canadá.
Pero los cada vez más asustados buscan atacarlo a la antigüita, como en tiempos de la guerra fría, al vincularlo, en la imaginación popular, con el antiguo bloque socialista. Y cada vez que lo hacen, sus simpatizantes se multiplican, sobre todo entre los jóvenes que como sector electoral están abrumadoramente a su favor (ganó 84 por ciento del voto joven en Iowa; en las encuestas antes de las primarias en Nueva Hampshire este martes, 87 por ciento de los jóvenes dicen que votarán por él, contra sólo 13 por ciento para Clinton).
Vale subrayar que este fenómeno no se puede reducir a un individuo como Sanders, sino que es la manifestación de una corriente política potencialmente poderosa dentro de este país, que primero se expresó en luchas recientes, desde Ocupa Wall Street a Black Lives Matter a los Dreamers, y antes en los movimientos altermundistas.
Lloyd



La Encuesta Intercensal del Instituto Nacional de Estadística y Geografía 2015 registra una población en ese año de 119.5 millones de personas, 7.2 millones más que en 2010, lo que indica una tasa media de crecimiento (TMCA) poblacional de 1.2% anual en el último quinquenio (Gráfico 1). El crecimiento demográfico, con otros elementos, fue de 1.4%
De la población total, 51.4% son mujeres y 48.6 hombres; el 21.5% se considera indígena y el 1.16% afrodescendiente.
Las cinco entidades más po-bladas son: el Estado de México con 16.2 millones (y TMCA de 1.3%), el Distrito Federal 8.9 (y 0.2%),Veracruz 8.1 (1.2%), Jalis-co 7.8 (1.3%), y Puebla 6.2 millo-nes de habitantes (y 1.3% de crecimiento anual).
La escolaridad general au-mentó de 8.6 años promedio en 2010 a 9.1 años en 2015; no obstante, de la población de 15 años o más el 5.8% carece de escolaridad, sólo el 53.5% tiene educación básica, el 21.7 media superior y el 18.6% educación superior (Gráfico 2).
Cuando el 100% de los infan-tes y jóvenes de 3 a 18 años deberían estar en un ciclo educativo universalizado y gratuito (y en su caso apoyado) de eduación- capacitación-desarrollo de habilidades- perfilamiento opcional a educación superior, sólo el 63.0% de 3 a 5 años asiste a preescolar; 97.7 a primaria, 93.3 a secundaria, y 44.0% a educación media superior y superior (Gráfico 3).



Año tras año, a punto de cumplirse el primer centenario de su promulgación, la Constitución Mexicana es conmemorada en pomposo acto en el Teatro de la República, en la capital queretana, y en cada uno de ellos el discurso oficial realza el altísimo contenido social y el objetivo de la Carta Magna, que no es otro que el desarrollo de nuestra nación, con justicia, libertad, equidad, progreso e irrestricto respeto a los derechos de todos los habitantes de este país.
Se oye bien, aunque en los hechos cotidianamente la clase gobernante se la pase por el arco del triunfo. Eso sí, por discursos no para, como el más reciente –el pasado viernes en el escenario referido– del inquilino de Los Pinos, quien aseguró que las reformas constitucionales aprobadas en los recientes años amplían el horizonte de desarrollo del país y dan dirección al esfuerzo nacional; se expresa la voluntad de la sociedad por avanzar y el compromiso colectivo de seguir transformando a México; proyectan además una nación donde los ciudadanos ejerzan a plenitud sus derechos y libertades y las autoridades actúen con apego a los más altos estándares internacionales en materia de respeto a los derechos humanos.
Qué bonito, pero, palabras más o menos, lo mismo dijeron sus antecesores en el puesto durante respectivos discursos de ocasión y siempre destacando que el objetivo de las reformas promovidas por cada uno de ellos no era otro que impulsar el desarrollo nacional y, obvio, el de los mexicanos. Pero, ¡sorpresa!: más de 30 años de discursos, de Miguel de la Madrid a Enrique Peña Nieto, y el desarrollo del país y de sus habitantes se mantiene prófugo y clase gobernante no tiene la intención de encontrarlo.
De lo anterior da cuenta el informe anual que sobre el desarrollo humano divulga (desde 1990) el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Y con base en sus resultados, las tan cacareadas reformas lejos de ampliar el horizonte de desarrollo (EPN dixit), paulatina pero sistemáticamente lo han reducido.
Veinticinco años atrás, cuando el PNUD divulgó su primer informe temático, México se ubicaba en el escalón número 45 entre la comunidad de naciones (160 países fueron incluidos en ese estudio), con un índice de desarrollo humano de 0.876 (mientras más cercano a uno, mayor desarrollo), con lo que en 1990 se colocaba entre el reportado en aquel entonces por Venezuela y la caribeña Antigua y Barbuda. Ese año las reformas salinistas salían del horno un día sí y el siguiente también, con la promesa, claro está, de que todo se hacía para impulsar el desarrollo.




El municipio de Tijuana perdió la organización de la Feria del Libro, el evento cultural más importante de esta frontera. Muchos de los participantes están realmente felices de que el Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC) se haya visto en la necesidad de dejar la parte medular de la organización en manos de Pedro Ochoa y su equipo. Resulta que los encargados de la cultura municipal se gastaron ya el presupuesto de todo el trienio.
Su viaje a Colombia con comitiva abultada –por no decir otra cosa– resultó muy caro, y aunque la administración termina el último día de noviembre de este año, ya sólo hay recursos para pagar la nómina (al menos eso esperan los trabajadores de base).
De acuerdo con información periodística, al director del IMAC, Jesús Flores Campbell, su propia junta de gobierno le desaprobó estados financieros de 2014 por opacidad y desorden en los gastos. Por ejemplo, presentó facturas de restaurantes por 24 mil y 14 mil pesos, con el argumento de que esos gastos se hicieron para la organización de la Feria del Libro.



La palabra es tan delicada como resbaladiza, al grado de convertirse en un arma que, si no se sabe usar, constituye una amenaza para los que anden cerca y para el propio usuario, que no por tenerla en mano puede garantizar que el tiro no le salga por la culata, dependiendo sobre todo de la intención y dirección de sus disparos. De ahí que a lo largo de la historia el número de profetas, mesías y redentores haya sido superado por la enorme cantidad de exégetas, intérpretes, analistas y traductores dedicados a aclarar y precisar lo que en realidad quiere decir aquello que han dicho y no lo que se entendió.
El papa Francisco, poseedor de una humanidad y una sencillez que hacen recordar las de Juan XXIII si no fuera por su formación jesuítica, desde su llegada al Vaticano se ha dedicado a reinterpretar y hacer más accesible a los sencillos –como nos llama la Biblia a los que no pertenecemos a algún círculo de poder espiritual o terrenal, o sea a la inmensa mayoría– lo que en realidad quieren decir los textos bíblicos, y de ninguna manera lo que se ha entendido y puesto en práctica en los últimos 2 mil años. Ya era hora, sólo que las consecuencias de la primera interpretación a punto están de acabar con el planeta. De la furia de Yahvé en tono de rabino malhumorado, a la versión amabilizada pero tardía de un Dios comprensivo, en apariencia preocupado por la acumulación de tantas torpezas.




El pasado fin de semana la policía salvadoreña capturó a cuatro de 16 ex militares acusados de la masacre perpetrada en la Universidad Centroamericana (UCA) de San Salvador el 16 de noviembre de 1989, en la que fueron asesinados el rector de esa institución, el sacerdote jesuita de origen español Ignacio Ellacuría, sus compañeros Ignacio Martín Baró, Segundo Montes, Amando López, Juan Ramón Moreno, Joaquín López y López, la empleada doméstica Elba Julia Ramos y la hija de ésta, Celina, menor de edad.

Rechaza una Constitución ajena a la ciudad sustentable
Si como señala René Drucker, es grave error dejar a la ciencia fuera de la Comisión Redactora de la Constitución de la CDMX lo es también ignorar el medio ambiente y los recursos naturales en una metrópoli contaminada, paralizada por la carencia de una efectiva política de movilidad. Con el agua como problema mayúsculo. Será una Constitución ajena a la ciudad sustentable que tanto pregonan las autoridades. Cordialmente:

La buena nueva en la economía de Estados Unidos, para ser más precisos en el mercado de trabajo, es que otra vez se redujo el desempleo, y actualmente es sólo de 4.9 por ciento, el nivel más bajo en varias décadas. Más aún, los salarios tuvieron un modesto aumento, de acuerdo con el reporte del Departamento de Trabajo estadunidense. No está de más agregar que esos signos positivos ocurrieron en el marco de una casi nula inflación, y en momentos en que la economía de varias naciones se ve afec­tada por la desaceleración de China.

Cuando menos, a través de los medios de comunicación más difundidos, la impresión del mundo y de la vida actual es la de un caos sin remedio. Entendiendo por caos no sólo el desorden extremo en muchos ámbitos de la vida individual y social, sino su pe­netración frecuente, mucho más de lo que pudiéramos pensar, también en la vida interior o espiritual de las personas, porque es allí lo más grave y pernicioso del asunto, del panorama.

Las actuales condiciones económicas del país son muy poco tranquilizadoras, aunque el gobierno se justifica diciendo que la culpa de todo viene de fuera y, hasta habría que alegrarse de la devaluación del peso (18.8 pesos por dólar) aunque los mexicanos hayan perdido 30 por ciento del valor de sus ahorros, pues ahora se exporta más. Se menciona el repunte de las exportaciones agropecuarias, pero en realidad sigue el déficit de la balanza comercial agroalimentaria y, si bien parecería estarse reduciendo, seguimos importando más productos agrícolas de los que vendemos. Y para colmo, ahora tenemos que pagarlas con dólares carísimos.

Cada año en México el mosquito Aedes aegypti ocasiona problemas de salud, especialmente en las regiones costeras. Es el transmisor del dengue clásico, que provoca fiebre alta, dolor intenso de músculos, articulaciones, cabeza, huesos y ojos; salpullidos en el tronco, brazos y piernas. También del hemorrágico, el más peligroso pues llega a causar la muerte. Se manifiesta con sangrado en varias partes del cuerpo, dificultad para respirar, vómito o diarrea y otras molestias.

La Ciudad de México no es un estado: pertenece a todos los estados, no es ni más ni menos que las demás partes integrantes de la unión: es diferente. Su estatuto jurídico ha sido siempre distinto al de las otras entidades que integran y han integrado en el pasado la federación mexicana; la Constitución de 1917, en su texto original aprobado en Querétaro, definió tres tipos de entes políticos reconocidos por ella; en primer lugar los estados libres y soberanos que se unen en un Estado que los abarca a todos en igualdad de circunstancias; con independencia de su tamaño o número de pobladores, en segundo lugar los territorios federales y en tercero el Distrito Federal, con su núcleo básico, la Ciudad de México, rodeada de las demás municipalidades tan autónomas como las del resto del país.

El banco central mantuvo el objetivo de las tasas interbancarias de interés en 3.25 por ciento, siguiendo así la misma decisión de la Reserva Federal de no mover sus propias tasas.

¿Quién puede conocer a Celia Cruz sin que lo bañe el mar? Escucharla hoy y hace 30 o 40 años es entrar de lleno a una vida de nostalgia. Yo conocí a Celia Cruz en casa de las Lara. Esas cuatro hermosas hermanas, morenas tropicales que cosían mejor que nadie, que se pasaban la tarde bordando al aire de las frescas mecedoras de su sala de piso ajedrezado y tenían la mejor huerta jardín del vecindario: plena de chaya, yuca, chayote, naranja agria, rosas y morada flor de rompeplato. Las Lara eran perfectas. Siempre esperando. Apagando el deseo que les llegaba por los ojos han curvado ya sus redondeces. Esperan hoy, ya sin remedio, sólo abrazarse entre ellas.

Al principio pareció divertido. Excitante. Estimulante. La globalidad, su simultaneidad hiperconectada, la sensación de ser ultramodernos nos convencieron de que vivíamos un progreso único en la escala humana. Tal vez fuera verdad, mas no para nosotros, la humanidad presente. Con perdón de Hegel, la Historia siempre termina. Cada vez estamos en el fin de la Historia; sólo a los ideólogos oportunistas proclaman la perogrullada de que hemos llegado (y venturosamente) a ese fin por primera y definitiva ocasión. ¿Para iniciar algo mejor, más humano que lo humano, por el incesante progreso de la especie? Sentimos nadar la felicidad de la facilidad. Abundan no obstante indicios de que ya alcanzamos ciertos límites. Como dice Rüdiger Safranski, nos movemos en un universo hecho por nosotros, donde el humano tiene que vérselas cada vez más y en todo momento consigo mismo. Un mundo artificial (donde el interés urbano y extractivo, por ejemplo, se antepone a cualquier otro) que a la larga, intuye Safranski, devendrá mortalmente aburrido. Y eso si se mantiene viable. El actual catastrofismo ambiental, económico, demográfico, y el inspirado en religiosidades delirantes, podrían dar al traste con todo antes que nos alcance el tedio.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario