El Desprestigio de Seguritech
Desde enero de este año, en la Comisión Permanente del Congreso, diputados federales como Vidal Llerenas, de Morena, así como otros legisladores del PAN están investigando 6 denuncias por presuntas irregularidades en los contratos de Seguritech.
Llerenas prometió que “si hay acuerdos entre los legisladores, en breve se enviarán oficios a la Auditoría Superior de la Federación y a la Procuraduría General de la República, para auditar e indagar el caso”.
Este mismo legislador advirtió en julio de 2017, en un artículo publicado en El Economista, que la “nueva partida secreta” en los gobiernos de Felipe Calderón y de Enrique Peña Nieto han sido la 33701 sobre “seguridad pública y nacional” y la nueva partida 33905, creada el 27 de junio del año pasado, y que incluyen los contratos en materia de seguridad. Más de 40 mil millones del presupuesto se han ejercido a través de estas partidas sin auditar.
Con estos antecedentes, el diputado de la Ciudad de México, José Alfonso Suárez del Real promovió un punto de acuerdo apoyado por todas las bancadas, incluyendo a los dos del PAN, 4 del PRD, 1 del PRI y 1 de MC, para que el gobierno de Mancera entregue “un informe pormenorizado del contrato suscrito por la empresa Seguritech, atingente a la adquisición y sustitución de equipo de videovigilancia para el centro de comando, control, cómputo, comunicaciones  y contacto ciudadano de la Ciudad de México (C5); y a que en el mismo se expongan las razones por las que los servicios correspondientes ya no son provistos por las empresas que gozaban de la concesión de manera previa”.
“No estamos hablando de un simple servicio sino de un derecho. La seguridad pública es un derecho omnigarante y por eso la ciudadanía debe ser informada”, subrayó Suárez del Real al ser consultado por Proceso.
El punto de acuerdo incorpora reportajes publicados por El Financiero, Nación 321 y en Proceso, el 25 de marzo de 2017, donde se documentan los vínculos de Seguritech con el ex comisionado nacional del agua, David Korenfeld, desde que éste fue titular de la Comisión de Aguas del Estado de México (CAEM), en el gobierno estatal de Peña Nieto.
Desde diciembre de 2010 Korenfeld benefició a Seguritech, que nunca antes había instalado ni vendido radares metereológicos, en una licitación cuya oferta fue más del doble de su competencia (58.7 millones de pesos frente a 24.1 millones de la empresa Rossbach de México).
Korenfeld también benefició a Seguritech para cambiar el radar metereológico en Guerrero, a raíz del paso del huracán Manuel. Se desconoce el monto de esta adjudicación directa, pero lo peor es que ese radar no funciona correctamente. En noviembre de 2015, Conagua benefició a Seguritech en la licitación de 299 estaciones metereológicas automáticas por un total de 289 millones de pesos. La Conagua tuvo que anular este procedimiento licitatorio porque el Banco Mundial no aceptó el fallo y retiró la línea de crédito por 100 millones de dólares que estaban destinados para la modernización del Servicio Metereológico Nacional.
Una ficha interna de la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México destaca otros puntos negativos relacionados con esta empresa que pretende hacerse cargo del proyecto “México, Ciudad Segura”:
“La reputación de Seguritech ha sido muy cuestionada por su falta de capacidad técnica, altos precios, así como poca transparencia en los procesos de adjudicación en los que ha participado. Sus principales referencias, Estados de México y Guanajuato, no han cumplido con las expectativas considerando las altas inversiones realizadas”, advierte la ficha técnica.
Reemplazar la plataforma tecnológica del C5 de la Ciudad de México para beneficiar a Seguritech “implicaría un retroceso a la madurez lograda a la fecha con la solución actual”, argumenta el documento. “Ninguno de los proyectos en los que Seguritech ha participado contempla el alto nivel de integración de sistemas, niveles de servicio, desempeño, estabilidad y resultados positivos con que cuenta el C5 actualmente”, abunda.
Además, “Seguritech no tiene una plataforma integral de seguridad urbana. En todos sus proyectos de C4, la empresa se ha limitado a adquirir productos informáticos fabricados en serie y no desarrollados para proyectos específicos como es el caso de la plataforma actual de Seguridad Segura. Esto impide una personalización de los requerimientos particulares del proyecto adecuados a la infraestructura existente, como es el caso de los enlaces de comunicación”.

La Bonanza Política
Seguritech y su filial Comunicación Segura S.A. de C.V. fueron creadas hace más de 20 años, en 1996, como pequeñas empresas que vendían alarmas vecinales y botones de pánico.  Su fundador original es el empresario  Ariel Zeev Picker Schatz, quien posee el 51 por ciento de las acciones y tenía otros socios como el general retirado Gonzalo Miguel Adalid Mier, quien falleció en 2013, y la notaria pública Alicia Rebolledo Terrazas.
En menos de veinte años esta empresa ya cuenta con recursos para ofrecer vehículos blindados, helicópteros, aviones, servicios de telecomunicaciones, arcos carreteros de seguridad, lectoras de rostros, lectoras de placas de vehículos, rayos x, drones, vigilancia satelital y hasta sistemas de metrología para la Conagua.
Su gran salto ocurrió de la mano de la guerra contra el narcotráfico, decretada durante el gobierno de Felipe Calderón. En 2007 Seguritech comenzó a tener contratos de mayor trascendencia, con el municipio de Guadalupe, en Nuevo León, con la delegación Iztacalco, en la Ciudad de México, y con el gobierno de Yucatán, al que le vendió equipo de radiocomunicación.
En 2011 obtuvo su primer contrato por más de mil millones de pesos con el gobierno de Sinaloa y después, en 2013, el gobierno de Eruviel Avila le adjudicó sin licitación alguna un contrato por 6 mil 376 millones de pesos, el más grande que ha tenido hasta ahora.
El periódico Noroeste publicó el pasado 29 de enero una amplia investigación sobre Seguritech en Sinaloa, donde Seguritech opera a través de su filial Comunicación Segura. La firma proporcionó distintos servicios en tres contratos diferentes que sumaron un total de 1 mil 307 millones 218 mil pesos, que se pagaron durante los 5 años del gobierno de Mario López Valdez, entre 2011 y 2016.
Con el crecimiento han surgido varias denuncias por las irregularidades en sus contratos, incumplimientos y fallas. Por ejemplo, el ex contralor del ayuntamiento de Acapulco, Antonio Sebastián Ortuño, promovió una sanción económica en su contra por 1 millón 750 mil pesos por cobrar 5 millones de pesos por un servicio que  no cubrió en la operación y mantenimiento de las cámaras y los botones de pánico.
A Seguritech le fue tan bien en el sexenio de Peña Nieto que su propietario original Ariel Zeev Picker licitó para una de las dos cadenas de televisión abierta y quedó entre los seis finalistas, junto con Olegario Vázquez Aldir y el magnate minero Germán Larrea, de Grupo México.
Su salto más importante fue incorporarse al negocio de las licitaciones del negocio del agua, durante el periodo de David Korenfeld, amigo de Peña Nieto y ex titular de la Comisión de Aguas del Estado de México (CAEM) y de la propia Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Actualmente tiene cinco divisiones: seguridad, defensa, telecomunicaciones, aeronáutica y construcción. Incluso, presume en su sitio web participar en el Teletón, de la fundación dirigida por Fernando Landeros, así como en el DIF, presidida por Angélica Rivera, esposa de Peña Nieto.