Utopía
Enredados en su verborrea
Eduardo Ibarra Aguirre
A pesar de la experiencia acumulada en alcaldías importantes desde hace más de tres décadas y 60 años en el Legislativo federal, los panistas dieron muestras de amateurismo en una jornada penosa de declaraciones, en las que se enredaron por voluntad y torpeza propias, el martes 10.
Y no fue porque como a Vicente Fox Quesada y Martha María Sahagún Jiménez –los primeros blanquiazules que despacharon en Los Pinos--, les ganó la incontinencia verbal y la soberbia los llevó a ignorar los discursos que les escriben y que al país le cuestan millones de pesos, para terminar, como lo hizo el enriquecido dueto, convirtiendo a Jorge Francisco Isidoro Luis Borges en José Luis Borgés y a Rabindranat Tagore en la gran rabina Tagore.
Sería lo de menos. Aquellas confusiones revelaban ignorancia, de la que todos en mayor o menor medida somos portadores, pero la grotesca pareja presidencial gustaba de ostentarla en cadena nacional, sin que en el duopolio de la televisión y el oligopolio de la radio les enmendaran los lapsus, pese a que recibieron una fortuna en el sexenio del cambio (en reversa).
Mauricio Fernández Garza, por ejemplo, pretende lo imposible, convencer a la indignada opinión pública que “Fue mera coincidencia con lo que dije”, la localización el 31 de octubre de los cuerpos de cuatro presuntos secuestradores ejecutados y que operaban en San Pedro Garza García, Nuevo León. El dicho lo expresó ante la Procuraduría General de la República.
¿Qué dijo el descendiente directo de Margarita Garza Sada? El 6 de octubre lanzó un ultimátum al narcotráfico y al crimen organizado. O “se retiran” o “empezaré una limpia”, para lo que cuenta con “grupos de trabajo rudo que yo les llamo como de limpieza, que serán responsables de convencer, como sea necesario, a estos grupos criminales de que aquí no tienen cabida”. Y el día 31, en su toma de posesión, dio la primicia de la ejecución de los integrantes de la banda, cuatro horas antes de que los cuerpos fueran encontrados por agentes de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, sin mencionar al alcalde por su nombre, pintó su raya respecto de la peligrosísima aventura de la existencia de escuadrones de la muerte, a cargo de gobernantes que se hacen justicia por propia mano.
La escuela dejada por Jeffrey Max Jones con su apología al narcotráfico por la muy exitosa inserción de sus productos en el mercado, sigue produciendo desatinos.
Sergio Eguren Cornejo, por su parte, se adelantó al debate que se avecina en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal sobre la iniciativa de ley para reconocer, legalmente, el matrimonio entre personas del mismo sexo. Con una lacónica frase se pintó de cuerpo completo: “Queremos volver la jaula de las locas el Distrito Federal, ¿no?”
La coahuilense María Teresa Ortuño Gurza, presidenta de la Comisión de Educación del Senado, tuvo un exabrupto como respuesta al creciente reclamo para que la educación superior pública no sea víctima de las tijeras de Agustín Carstens Carstens. Dijo la senadora por Chihuahua que es hora “de que todos nos apretemos el cinturón y, por favor, no me vengan con esa demagogia de que nadie puede apretárselo”. Y el neopanista Alonso José Ricardo Lujambio Irazábal agradeció “su inteligencia, entusiasmo y pasión”. Y el primer panista del país gasta cientos de millones de pesos en transporte aéreo y 4 mil millones de pesos para lavar su imagen.
Mas existe guía y maestro para rato, por lo menos para los próximos tres años y 17 días. Cuando el centro de la República era escenario de movilizaciones multitudinarias y un paro nacional sellaba al país, el economista y abogado disertó sobre el patriotismo de extinguir Luz y Fuerza del Centro y premió a Alfredo Elías Ayub.
Por eso lo abuchearon en Torreón. Un paquidermo tiene más sensibilidad.
Acuse de recibo
Más muros que en 89 (11-XI-09) generó los siguientes comentarios. Del analista Ángel Solana Martino: “Te felicito por tu opinión sobre los muros, tu reflexión y análisis son perfectos”… Gustavo Cortés Campa, periodista: “Para reforzar tu molestia por las conmemoraciones del vigésimo aniversario
de la caída del muro de Berlín, te faltó insertar las fotos de las torres donde soldados gringos operan las grandes ametralladoras desde donde
acribillan a los mexicanos que intentan pasar el muro de la frontera norte,
y los campos minados donde los paisanos vuelan en pedazos al intentar el
cruce de este lado. También te faltó denunciar la fabricación de fotos y filmaciones de las filas de automóviles y peatones que diariamente cruzan la frontera con Estados Unidos, de ida y vuelta, porque es pura propaganda”… Del médico hidalguense Javier Andrade: “Un aspecto no mencionado sobre el Muro es que por ahí pasaron el puñado de jóvenes mexicanos que fueron a prepararse a Corea del norte con el objetivo de liberar a México de la tiranía del capital”... Y la periodista Teresa Gurza: “Me encantó tu artículo querido Ibarra. Un abrazo desde Chile”.
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