12/31/2009


Defrauda Cámara a Ley que busca paridad entre mujeres y hombres

Traiciona México compromisos para garantizar cuotas de género

De la redacción

México, DF 30 dic 09 (CIMAC).- Con la licencia concedida a siete diputadas federales para que su cargo sea ejercido por hombres, México traiciona los compromisos internacionales establecidos, a la democracia moderna y a su compromiso con las mujeres, sostuvo la diputada Leticia Quezada Conteras, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Ello, luego de que el pasado 22 de diciembre la Comisión Permanente de la Cámara de Diputados aceptó la licencia de siete diputadas para separarse del cargo a partir del 1 de enero de 2010, ellas son: Laura Elena Ledesma Romo, Mariana Ivette Ezeta Salcedo, Carolina García Cañón del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Ana María Rojas Ruiz, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Oralia López Hernández y María Elena Perla López Loyo del Partido Acción Nacional (PAN) y Anel Patricia Nava Pérez, del Partido del Trabajo.

Así la legisladora del sol azteca califico éste hecho como “un vergonzoso fraude a la ley”, además de que con el se están violentando más de siete normas internacionales que México ha firmado.

En comunicado de prensa Quezada Contreras, dijo que la petición de las diputadas, representa una discriminación política contra las mujeres a partir de una práctica, de una usanza en las instituciones políticas que han establecido ya este truco de violar las leyes, sin importar que México sea firmante de diversos tratados internacionales que le obligan a garantizar las cuotas de género.

“México se ha comprometido en más de siete ordenamientos internacionales, entre los que destacan los Acuerdos de Beijing y los Acuerdos de Quito, a buscar la paridad entre mujeres y hombres en las representaciones populares”, precisó.

En este sentido, agregó que nuestro país se ha comprometido a garantizar no sólo la cuota de género, sino también a que ésta sea implementada de jure y de facto (de hecho y por derecho).

“México denunció en estas convenciones internacionales que los partidos políticos y las instituciones habían encontrado cómo burlar la ley y que no bastaba que la legislación, el Código Federal Electoral, señalara este compromiso de las cuotas; sino que en sus congresos, en sus cámaras, tendrían que comprometerse a garantizar que esta medida fuera efectiva y a pesar de ello las licencias fueron concedidas”.

La perredista lamentó que el Congreso mexicano, aún a sabiendas de esas responsabilidades legales que a nivel internacional tiene, decidió hacerse cómplice.

De ello, informó que el Estado tendrá que rendir cuentas ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU). “Tendremos que elaborar un informe en el que se reconozca que traicionamos los compromisos internacionales establecidos, la democracia moderna, y nuestro compromiso con las mujeres”.

El próximo 5 de enero habrá que ver cómo esos señores, suplentes de las legisladoras, “que tendrán que entrar por la puerta de atrás”, jurarán bajo protesta de decir verdad, hacer cumplir una ley que están violando.

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