SALUD
En 6 años, su práctica se reduce de 22.3 a 14.5 por ciento
Especial | lalechedemishijasblogspot.com
Por: Guadalupe Cruz Jaimes
Cimacnoticias | México, DF.- Por la falta de información sobre los beneficios de la lactancia materna en la salud de las mujeres y recién nacidos, su desconocimiento es una de las causas por las que ellas dejan de amamantar.
Por ello, la práctica de la lactancia pasó de 22.3 a 14.5 por ciento en los últimos seis años, de acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y la Secretaría de Salud (Ss).
El descenso se agravó todavía más en las zonas rurales, donde bajó de 36.9 a 18.5 por ciento, según el análisis “Deterioro de la lactancia materna: dejar las fórmulas y apegarse a lo básico”.
Con base en las encuestas nacionales de Salud y Nutrición (Ensanut) 2006 y 2012, las instituciones advierten que la situación es preocupante porque la lactancia materna es la mejor estrategia para prevenir la mortalidad infantil, y para disminuir el riesgo de que las mujeres padezcan cáncer de mama o de ovarios.
La investigación indica que las madres que no dieron pecho a sus hijas e hijos evitaron esta práctica por razones que “sugieren desconocimiento o poco apoyo antes y alrededor del parto, para iniciar y establecer la lactancia” por parte del personal de salud durante la atención prenatal.
Por ejemplo, algunas de ellas respondieron que no amamantaron porque “es demasiado inconveniente”, “la fórmula es mejor”, o dijeron que “la leche es delgada, no sirve”.
Lo anterior refleja que la promoción de la lactancia materna, una tarea que corresponde a la Ss, ha sido insuficiente, a pesar de que de 2006 a 2012, la dependencia llevó a cabo talleres de “Habilidades para la vida” en clínicas comunitarias de todo el país, mediante los cuales capacitaron a 14 mil 465 prestadores de servicios de salud.
El análisis señala la necesidad de concretar la política pública a favor de la lactancia materna, con el apoyo de los diferentes sectores (no sólo la Ss), y recomienda desarrollar un plan de acción con metas y objetivos definidos, calendarios de cumplimiento y distribución de responsabilidades, el cual debe supervisarse y evaluarse periódicamente, para aumentar esta práctica.
Y es que en México se registró un “franco deterioro” de la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de edad de las y los bebés, recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), al pasar de 22.3 a 14.5 por ciento en los últimos seis años.
En ese periodo la disminución en las zonas rurales fue “dramática”, ya que se redujo a la mitad: de 36.9 a 18.5 por ciento.
Lo anterior a pesar de que quienes son amamantados sufren de menor morbilidad, y también se enferman con menor frecuencia y gravedad por diarreas, infecciones respiratorias y padecimientos en la piel.
Además, la niñez que fue amamantada tiene mayor coeficiente intelectual, menos riesgo de diabetes, obesidad, asma y leucemia.
Por su parte, las mujeres que dan leche materna tienen menor riesgo de sufrir cáncer de mama o de ovarios, y diabetes. Y, según la OMS, ellas experimentan una mayor pérdida de peso en los primeros meses del posparto en comparación con quienes no amamantan.
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